Narra Luke:

Estaba pensando en mis cosas... Me daba igual que nos persiguieran vampiros sedientos no solo de nuestra sangre, si no de nuestra muerte.

Pensaba en como estarían nuestros otros amigos, los que deje en Nueva York hace años, como Jack.

Los echaba de menos, ellos habían sido mis amigos desde siempre, y aunque intentábamos quedar todo lo que podíamos, aveces nos era muy difícil... y más en la situación en la que estoy.

Por otro lado aveces hablaba con Hannah, que estaba de gira tras arrasar con su linea de moda.

Recordaba los viejos tiempos, hasta llegar a mi infancia cuando jugaba a ser un valiente guerrero al empuñar mi espada de juguete.

-¡PARAD! Grité al recordar algo.

Todos me miraron asombrados y preocupados, no sabían lo que pasaba.

-Tranquilos, no es nada malo. Dije. Es solo que he pensado que ya que estos vampiros quieren guerra, no me voy a quedar de brazos cruzados, dándoles a Louis y Niall toda la la responsabilidad solo por que son vampiros.

Me miraban confundidos, seguí hablando:

-¿Recordáis mi última película de batallas que grabe hace un año? Pregunté.

-Como para no hacerlo... ¡Fue una pasada! Me dijo Lorraine emocionada.

-Vale, pues como director y actor que era, guarde algunas espadas y equipamiento en el garaje de mi casa porque iba a crear una sala con cosas de todas mis películas.

-¿Estás insinuando de coger una espada y creernos guerreros? Preguntó Zayn de forma irónica.

-Sí. Me molesté un poco. -Si llevamos la ropa que tengo seremos más vulnerables a golpes que recibamos y ya sabéis que la única forma de destruir a un vampiro es clavándole una estaca o bien cortándoles la cabeza, pues ya están muertos.

Emma le tapó los oidos a Niall (niño) al escuchar la última frase que dije.

-¡Pero yo no se manejar una espada! Exclamó Lorraine.

-Tranquila, yo os enseñaré algunas técnicas que aprendí en el entrenamiento del rodaje. Dije.

-Esta bien... Dijo Lorraine. -Pero tu casa esta totalmente destruida Luke...

-Lo sé pero el garaje que esta mucho más atrás no. Le contesté.

-¿Y como nos llevamos unas espadas en las maletas  después a un aeropuerto? Preguntó Emma.

-Tranquila, también he pensado en eso. Le contesté. Si nos la sacamos y las llevamos en su maleta dentro de una maleta grande no creo que haya problemas.

-¿Y cómo pensamos quitarnos a estos tipos de encima? Preguntó Zayn mirando a los vampiros que seguían detrás nuestra.

-Lorraine, tengo una idea un poco loca... Comenté.

-¿Más que la de las espada? Me preguntó Zayn en tono burlón.

-Pues sí. Le dije. -Lorraine, ahora cuando llegues a una calle más amplia, quiero que hagas un giro cuando los vampiros no se lo esperen y los atropelles.

-Luke, ¡no estamos en una película de acción! Contestó ella.

-¡Si no lo intentamos no conseguiremos nada! Exclamé.

-Esta bien...

Estuvimos impacientes para que llegara el momento, era un poco peligroso para todos, pero no había otra opción.

Me encargué de distraer a Niall (niño) para que no prestará atención.

-Venga Lorraine, ¡ya! Grité.

-Vale. Vamos. Nos dijo Lorraine decidida, mientras daba una brusca vuelta que hizo que todos nos agarrásemos a los asientos y comenzaba a acelerar más llevándose a todos los vampiros por delante.

-¡BIEN! Gritamos todos, aplaudiendo.

-Lo sé, soy la mejor. Se rió Lorraine.

-Vale, ahora, sigue con esta velocidad y en cuanto puedas desemboca en una calle que llevé al centro de la ciudad para camuflarnos con los demás coches. Le expliqué mientras miraba hacia atrás por si alguno de los vampiros se levantaba.

Narrador:

Consiguieron llegar a la casa de Luke y en cuanto llegaron, se bajaron del coche para ir corriendo al garaje que estaba en la parte trasera del jardín.

Luke se sacó las llaves y abrió nervioso la puerta, no tenían mucho tiempo ya que tendrían que estar en el aeropuerto dentro de una hora.

Emma encendió la luz del garaje mientras Luke se iba directamente a coger las espadas y el equipo.

Había seis espadas, así que cogieron cinco, una para Mark.

En ese momento el teléfono de Luke sonó.

-Dime Mark. Dijo Luke y recordó que lo dejaron atrás hace bastante tiempo.

-¡¿Dónde mierda estáis?! Preguntó malhumorado.

-En mi casa, concretamente en el garaje. ¿Estás bien?

-Si de maravilla, he tendido suerte de sobrevivir a un ataque de vampiros. Ya veo como os preocupáis aquí por los amigos. 

-Lo siento Mark, hemos estado toda la noche huyendo y no hemos tenido tiempo de localizarte...

-Es igual... ¿Qué plan tenéis ahora? Preguntó.

-Ya te contaremos en el avión, nos vamos a Alemania.

-¿Tenéis billete para mi?

-Sí y una espada.

-Vaya al menos en ese aspecto si os acordáis de mí. ¿Una espada?

-Ya te contaremos Mark. Le dijo Luke saliendo del garaje tras haber metido todas las cosas en la maleta con la ayuda de los demás.

Emma le hizo un gesto para que se diera prisa.

-Tengo que dejarte, te recogemos en Central Park dentro de un cuarto de hora, no te preocupes por el equipaje, llevamos ropa de sobra para dejarte y si no allí compraremos algo.

Luke se despidió de Mark y rápidamente todos se montaron en el coche.

Estaba vez conducía Luke.

Solo querían recoger ya a Mark para irse deprisa a el aeropuerto.