Narra Luke:

Era el día, el día en el que todo un sueño se haría realidad, además de eso, ¡One Direction

viven allí! Aunque supongo que será casi imposible verles.

Me vestí, cogí las maletas y me fui al aeropuerto con mis padres y mi hermana.

Mis amigas y Emma nos estarían esperando allí.

Al llegar empezamos a hablar todos, sobre el tema del hotel, del apartamento etc

El avión era un transatlántico enorme, yo me senté con Emma, Lorraine y Lucy en uno de los

laterales.

En el medio la fila era de cinco asientos, y en los laterales de cuatro. Viajábamos mucha gente

en ese avión.

Lucy abrió su portátil y estuvimos viendo videos de One Direction, cuando se me ocurrió una cosa.

-¡Chicas! Exclamé

-¿Que pasa? Me preguntó Lorraine algo asustada.

-No, nada no te preocupes, ¡simplemente que he decido decorar el apartamento de Emma y el

mío de One Direction! ¿No es genial?

-Amor, es genial. Emma dándome un pequeño beso en el cabello.

-¿De verdad te gusta? Pregunto

-¿Hay alguna cosa que no me guste de ti? Me dice, lo que provoca que me sonroje.

El viaje se me hizo largo, tenía muchas ganas de llegar allí, de ir a nuestro hotel y descansar.

Salimos a las nueve de Nueva York, así que más o menos llegamos a las cinco o seis de la tarde.

Al ver Londrés no me lo podía creer, era todo tan bonito, estaba un poco nublado pero no

hacía frió. 

Mis padres tomaron un taxi diferente, ya que ellos se iban a su nueva casa, nosotros al hotel

de cinco estrellas.

El coche nos dejo en la puerta, Por las paredes del hotel caiga agua que cambiaba de color

gracias a un proyector de luces, el agua caía en un deposito para que el motor hiciera que el

agua que caía en el deposito volviera a caer por las paredes.

Era un hotel genial, por lo menos el exterior.

Entramos sin pensarlo.

La chica de la recepción nos dijo donde estaban nuestras habitaciones, dejamos las maletas ya

que nos dijo que nos la subirían mas tarde.

Introducí la tarjeta que nos dieron para entran en nuestra habitación, la puerta se abrió

automáticamente.

Emma y yo entramos en la habitación, Lucy y Lorraine miraban desde fuera.

-Bueno, dejadnos solos, adiós. Dije riendome

-Vale, vale. Contestó Lorraine

-Haber que hacéis esta noche. Dijo Lucy mirándome.

-Nada. Comenté riéndome

-Si, nada. Me contestó riéndose.

Cerré la puerta, y miré a Emma

Había una cama de matrimonio, no eran dos individuales.

-¿Y esto? Le pregunté

-No se, tu sabrás. Me contestó riéndose

La abracé muy fuerte ella comenzó a darme pequeños besos en el cuello y luego en los labios.

Nos tumbamos en la cama y seguimos con el dulce beso.

-Es perfecto todo esto. Comentó sonriéndome y besando uno de mis hoyuelos.

-Me alegro, cielo. Le dije sonriéndole

Sentí que llamaron a la puerta, nos cortaron todo.

Abrí, eran dos hombres para traer las maletas.

-¿Donde las dejamos?

-Oh, simplemente démelas, ahora yo las coloco, gracias. Sonreí

-Anda será mejor que bajemos a cenar, nos preparemos y salimos luego con Lorraine y Lucy.

Dijo Emma levantándose de la cama.

-Sí. Contesté

Mientras Emma fue a avisara a Lorraine y Lucy para decirles que íbamos a salir, yo me metí en

la ducha, en baño era enorme, dos lavabos, un gran espejo...

Me vestí algo elegante.

Emma se duchó y también se vistió después de avisar a Lucy y Lorraine.

Los cuatro bajamos al comedor era enorme.