Para Augusta Longbottom, en su casa siempre deben cumplirse tres reglas y eso es indiscutible, da igual cómo te pongas.

En primer lugar, está prohibido comer con la boca abierta. O hacer ruido con los cubiertos. O al arrastrar la silla para levantarse. O cuchichear. O hacer sonidos que, en realidad, no son molestos en absoluto, pero para ella suponen la diferencia entre un buen y un mal día.

En segundo lugar, está prohibido quedarse sentado sin hacer nada. Nada de holgazanear en su casa, por supuesto que no. Diez minutos sentada en el sofá son diez minutos perdidos para ella, así de sencillo. No puedes estar ahí perdiendo el tiempo, con lo valioso que es, cuando hay polvo acumulándose en las estanterías o magia por aprender.

En tercer lugar, está prohibido lamentarse. Puedes llorar, sí, pero un rato. Augusta dice que las desgracias se terminan cuando tú decides que lo hagan, y si las lloras para siempre, entonces no terminarán nunca. Así que, si tienes un problema, tienes unos pocos minutos para quejarte antes de empezar a resolverlo. Así es como ve ella las cosas, y así es como quiere que vean las cosas sus nietos, Nyx y Neville.

Tiene esas normas estrictas porque no quiere que pase de nuevo lo mismo que ocurrió aquella fatídica noche. No quiere que el ruido innecesario alerte a los mortífagos de que hay alguien más en la casa. No quiere quedarse quieta, sin hacer nada, cuando los mortífagos sacan a rastras a la niña del armario. No quiere quedarse llorando y lamentándose toda la noche sobre los cuerpos ensangrentados de su hijo y su nuera en lugar de marcharse de inmediato a San Mungo para ver si pueden hacer algo por hacer que abran los ojos.

No quiere que pase eso otra vez, claro que no.

Así que nada de hacer ruido de más, nada de quedarse de brazos cruzados y nada de sollozar y sorberse los mocos. Esas son las normas en casa de Augusta Longbottom, y si no te gustan...

Si no te gustan, te fastidias. Eso piensa Augusta Longbottom.

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¡Bienvenidas a una nueva historia!
Hoy no os presento a los dos protagonistas principales. De hecho, creo que faltan un par de meses para que me anime a publicar el primer capítulo de Díada, pero me sentía con ganas de publicar este adelanto y de mostrároslo para que os animéis a guardar la historia en la Biblioteca, lista para cuando suba algo por fin.

¿Sobre qué pensáis que irá esta historia?

Nos vemos pronto. Gracias por estar aquí y dejar vuestras estrellitas 🌠