¿Dónde estamos?

-¡¿Matarnos?!- gritaba Ryuko ,muy enojada. -¿Crees que dejaríamos que alguien nos maté? ¡¿Eh?!- Ryuko tomó a Monokuma del cuello, haciendo que un sonido de engranes se escuchará en todo el lugar.

-¿Qué es ese sonido?- preguntó Jenny.

Monokuma se agitaba frenéticamente mientras seguía siendo sostenido por Ryuko. -¡Auxilio! ¡Sálvame, lanza Gungnir!-

Ryuko no entendía a qué se refería Monokuma, eso también le impidió ver qué a su espalda se abrían unas trampillas del suelo y un brillo metálico salía de ellas.

-¡Ryuko, cuidado!- grito Tanjiro, pero solo hizo que se volteara a ver a todos.

Algo salió disparado desde el suelo en dirección a ella. En eso, un borrón verde con relámpagos apareció frente a todos y empujó de la trayectoria a la chica con traje de marinero.

Un par de estacas se clavaron en la pierna derecha y parte del estómago de Izuku, quién se pudo notar quién era cuando las lanzas se clavaron en él.

Las lanzas atravesaron su cuerpo y sangre salía de sus heridas y boca. Izuku cayó al suelo con ambas lanzas y las trampillas aún abiertas.

-¡Oh no!- dijo Monokuma con sorpresa -Crei que aún funcionaría pero la lanza Gugnir está oxidada. Ya no es lo mismo que hace años-

Mientras que unos se acercaban a ayudar a Izuku, otros vieron las trampillas para darse cuenta que había muchas más ahí. Algunas solo habían saltado unos cuantos metros para volver a caer y otras no podían dispararse por el óxido y los daños en los engranes.

De no ser por esos detalles, Ryuko o Izuku pudieron haber muerto al instante.

-¡Esto es malo! Es muy malo- dijo Akko totalmente asustada. Mucha sangre empezaba a salir del cuerpo del peliverde -¡¿Qué hacemos?!-

-No se preocupen, su querido director no dejará que sus estudiantes terminen muertos por un accidente- en eso unos robots salieron de las paredes e hicieron un camino en cierta dirección.

-Solo sigan el camino que indican nuestros staff bots de seguridad y llegarán a la enfermería muy pronto-

No tenían tiempo de dudar. Ren, Seven y Jolyne cargaban a Izuku mientras que el resto los seguía.

Marinette y Tanjiro se quedaron atrás porque Ryuko aún estaba en shock por lo que pasó.

-Vamos Ryuko, tenemos que ayudar a Izuku ahora-

-Yo casi....... Él........ El oso........- era todo lo que se podía entender que salía de la boca de la chica.

Tanjiro y Marinette tuvieron que ayudarla a levantarse. Pero mientras se alejaba, Tanjiro detectó con su olfato un olor desagradable, un olor putrefacto que solo pudo pensar que salía de las trampillas.

En la enfermería

Senku estaba gritándoles a todos mientras Izuku se retorcía de dolor.

-¡Sosténganlo fuerte o no podremos ayudarlo!-

-¡¿Acaso escuchas lo que dices?! ¡No podemos sacar las lanzas de su cuerpo! ¡Se desangrará!-

-¡Si no se las sacamos morirá de todos modos!-

En eso, Tanjiro y Marinette llegan y toman de las piernas al peliverde. Todos se fijaron en ellos y como si tuvieran una mente colmena, en silencio, tomaron al peliverde para que no se moviera.

Akko tuvo que taparle la boca para que no gritara pero evitaba ver lo que iba a pasar.

-Ok, tengo alcohol, hilo y aguja pero no es suficiente- Senku comenzó a buscar entre las cosas que había en la enfermería.

En eso, uno de los robots llegó con una bandeja y vario equipo médico que estaba en buena condición, de como podían estar todas las cosas de ese lugar.

-Esto sirve pero necesitamos algo para tapar los agujeros y no sé si haya algo útil-

-¿Sirve esto?- dijo Ren quitándose si chamarra y rompiéndola en dos.

-No es lo ideal pero sirve. Ok, Jolyne necesito que saques las lanzas de su cuerpo lo más rápido posible- está solo asintió.

Senku le entregó un tubo de plástico a Akko.

-¿Y esto para qué?-

-Cuando Jolyne saque las lanzas, Izuku va a gritar y morder asi que ponselo en su boca-

Izuku empezaba a calmarse un poco y fue ahí cuando todos se dieron cuenta que empezaba a dejar de moverse.

-¡Senku!- grito Jenny notando que sus signos vitales bajaban.

-¿Listos?- todos afirmaron. -¡Ahora!- tras eso, Jolyne sacó ambas estacas y el peliverde volvió a volverse loco.

Senku intentaba cerrar sus heridas pero se movía demasiado. -No puedo hacer esto con tanto movimiento, necesitaría a alguien bueno en manualidades-

Marinette no pudo evitarlo y movió de lugar a Senku, se puso alcohol y con firmeza agarró la pierna de Izuku para comenzar a coser.

-¿Dónde?- pregunto la peliazul para que Senku le respondiera.

5 horas después

Izuku estaba recibiendo una transfusión de sangre de lo que parecía un paquete de sangre nuevo. Era lo único que veían en buen estado.

El peliverde respiraba de forma cortada y parecía tener fiebre pero su piel no estaba pálida y su vida ya no estaba en riesgo.

-Creo que se pondrá bien- dijo Senku cansado.

-Esto segura que lo estará- dijo Jenny viendo sus signos vitales estables.

-Eso estuvo cerca- Tanjiro se agitó el cabello para que un pequeño mechón se levantara sobre su cabeza.

-Eso fue impresionante, estudiantes. A pesar de que ninguno era el doctor definitivo ni el enfermero definitivo, fueron capaces de salvarle la vida a su compañero. Todos se merecen un premio-

En eso, Monokuma lanzó una especie de teléfonos a todos junto a una bolsa de tela con lo que parecían ser monedas.

-¡¿Teléfonos?!- dijo Jolyne algo enojada.

-No, no. Son sus ID's escolares. Con el pueden ver el mapa de la escuela, noticias escolares y ver el reglamento, pero no son teléfonos.-

-¿Y las monedas para que?-

-Para lo que quieran comprar en la tienda, por supuesto-

-Seras un...- Jolyne iba a atacar pero Ryuko la detuvo y solo le dijo que no con la cabeza, ella ya había vuelto en si durante la operación.

-Bueno, veo que están muy estresados para su primer día. Así que tómense el resto del día para descansar y exploren las instalaciones, mañana tendremos un día muy ocupado. Upupupupu- dijo desapareciendo de la vista de todos.

-Maldito peluche- maldijo Freddy golpeando una pared de la enfermería.

-Pero tiene razón Monokuma. Necesitamos explorar el lugar- dijo Senku sorprendiendo a todos.

-Senku tiene razón- respaldó Tanjiro -Si queremos escapar, necesitamos ver si hay algún punto débil. El lugar está muy viejo y dañado, debe haber algo que nos sea útil-

Así todos salieron, excepto Izuku,Akko Senku y Tanjiro.

-Gracias por apoyarme ahí- dijo Senku -Me han dicho que soy malo para convencer y agradar a la gente.-

-No te preocupes, es lo poco que puedo hacer por lo que hiciste por él- dijo viendo que Midoriya ya estaba mejor y durmiendo tranquilamente.

-¿No vas a explorar tu también, Akko?- dijo Tanjiro confundido pero detectando un olor proveniente de ella.

-Alguien necesita vigilarlo, la verdad no creo poder ser de ayuda después de lo de hace unas horas-

Ambos entendieron y salieron de ahí a explorar el lugar. El lugar era muy grande, incluso había varias habitaciones personalizadas para los que parecían ser viejos alumnos.

Tanjiro entre en una de las habitaciones y notó varias cosas, una peluca, un cuchillo oxidado y unos accesorios para el cabello.

En eso, su ID empezó a sonar como un teléfono y pensó que era ayuda, resultó ser Jenny que había descubierto que los ID's servían como comunicadores de corto alcance.

Jenny había informado a Tanjiro de que se encontraba en la cocina de la escuela y que toda la comida ahí estaba podrida. También hablo de que en el mapa podía ver la ubicación de los otros ID's.

Tanjiro quiso comprobar esto y vio que era cierto. El ID de Izuku y de Akko estaban en la enfermería, el suyo en una de las habitaciones, Jenny y Freddy en la cocina, Ash y Kazuma en la biblioteca, Ryuko, Michiru y Jolyne en la piscina, Emma en el jardín botánico, Senku en el laboratorio de química, Ren, Yumeko y Seven estaban en la que parecía una sala de presentaciones.

Todos estaban buscando una forma de salir o algún punto débil que pudieran aprovechar, pero no había nada. Las ventanas estaban cubiertas por placas de metal gigantes que se habían quedado atoradas por la corrosión.

Lo único que parecía en buen estado era la puerta principal, pero sería imposible abrirla.

Ryuko se separó de Jolyne y terminó en una habitación extraña donde se encontraba una esfera de metal con una motocicleta vieja dentro, ella se encontró en una mesa cercana a la esfera un ID roto y se lo informó a los demás.

Todos empezaron a buscar más ID's, sabían que era raro y los hacía temer si eran lo que creían. Pero todos tenían la esperanza de que solo fuera un truco de Monokuma.

Tanjiro entro a una nueva habitación que se veía completamente destrozada. Ahí, pudo oler de nuevo ese olor asqueroso.

-¿Que es esa peste?- dijo tapando su nariz. Comenzó a buscar por todos lados hasta que entró al baño.

La puerta están destrozada y el lugar estaba a oscuras total. En el suelo pudo ver un ID dentro de la bañera. Cuando lo tomó sintió algo viscoso en sus dedos.

-Está sensación es tan..... Familiar...... pero solo la recuerde de.................. De...................- Tanjiro levanto la mirada y sus ojos empezaron a acostumbrarse a la oscuridad.

Sus ojos empezaron a moverse como locos y no pudo evitar dar un grito de miedo.

El grito fue tan fuerte que fue escuchado por todos los demás. Tambien, unas viejas bocinas empezaban a encenderse y a reproducir un mensaje cortado y en tonos distintos pero que se entendía perfectamente.

Un cuerpo ha sido encontrado

Al oír eso, todos temieron por lo peor y corrieron de dónde provenían los gritos. La puerta de la habitación estaba cerrada y atascada.

Todos podían seguir escuchando a Tanjiro gritar desde dentro, desesperado por salir.

-¡No puedo abrir la puerta la puerta!- grito Kazuma casi sacando la perilla de su lugar.

-¡A un lado!- gritó Ryuko empujando a Kazuma y embistiendo la puerta.

La puerta fue destruida y al entrar vieron a Tanjiro sosteniendo del mango su espada y la vaina a de está para desenvainarla.

Sus manos temblaban mientras veía la puerta del baño y su respiración se agitaba.

-Tanjiro ¿Que pasa? ¿Que es eso de un cuerpo?- pregunto Emma al chico en shock. Este solo apunto al baño y todos desde afuera vieron como sus ojos se ajustaban hasta ver a lo que se refería.

Todos pudieron ver el cuerpo putrefacto de una persona con un cuchillo clavado en el pecho. Por su ropa, cabello y otra información, Senku informó que se trataba de una chica de casi sus edades.

Emma corroboró y tomó el ID que estaba a sus pies. El ID tenía la pantalla algo rota pero aún se podía leer.

-Saya...... zono........ Idol........... De......nit- decía algo cortada por el miedo la pelinaranja.

Marinette tomó el ID de sus manos ya que parecía que iba a llorar y lo leyó en voz alta.

-Sayaka Maizono...... La idol definitiva-

Era todo lo que podía leerse del ID pero fue suficiente para hacer que el miedo fuera por sus cuerpos.

Ellos no fueron las víctimas del primer juego, y ahora no sabían si iban a lograrlo.

-No puedo con esto- Kazuma empezaba a hiperventilarse hasta que vomitó un poco -Tengo que salir de aquí- comenzó a correr en dirección a la entrada.

El resto lo persiguieron para detenerlo y no hiciera una locura. Al llegar a la entrada, ape as y pudieron detenerlo.

-¡Sueltenme, no quiero morir aquí! ¡No quiero!- gritaba asustado el castaño mientras Ren y Freddy intentaban calmarlo.

-¡Así se habla, mi querido estudiante!-

Monokuma apareció detrás de todos, dándoles un susto

-¡Tú!- gritó Marinette -¡¿Ahora que quieres de nosotros?!-

-Bueno, debido a que la escuela no ha estado en operación por unos cuantos años hemos tenido que tomar una decisión de último minuto.- paso a través de los estudiantes hasta estar frente a la puerta.

-Por eso lo primero que haremos será................ Una excursión- dijo Monokuma para que la puerta comenzará a abrirse.

La luz del sol empezaba a entrar en los oscuros pasillos de la escuela. Un rayo de esperanza le llegó a todos, hasta que vieron el exterior.

-¿Qué........ que rayos?- dijo Michiru.

-¿Dónde estamos?- preguntó al aire Yumeko.

Afuera de la escuela no había edificios, ni calles o algo que demostrará civilización. La escuela estaba rodeada de un bosque espeso y profundo, a lo lejos podían ver el océano.

Tanjiro estaba seguro que la escuela no estaba ni cerca de un lago. Y ahora, volvieron a temer por lo que los esperaba.

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