¿Qué es la decepción?

Es el esperar algo, tener en mente una idea desde hace tiempo, uno cree fielmente que lo conseguirá o que dicha cosa se hará realidad tal cómo lo ha estado organizando y preparando con cierto tiempo de antelación. Cómo lo ha sospechado. Sin embargo, no sale como tú lo esperabas, se siente como una pequeña traición que tú mismo idealisaste, te terminas decepcionando. Ya sea de ti mismo o de un ajeno a ti. 

A Yoichi Isagi le pasó un par de veces en el pasado durante la secundaria y parte de la preparatoria, en la cancha de fútbol. Siempre teniendo que ver con el balón y sus compañeros de equipo. Terminó dando pases a otros jugadores pensando en aquella idea que le vendían de que el fútbol siempre debe ser trabajo en equipo y confiar en tus compañeros, para que éstos al final lo fallaran epicamente.

El beso entre Isagi e Itoshi no duró ni diez segundos, fue sencillo, suave y primerizo. Cómo un beso torpe y lindo. Cómo en el que uno apenas roza sus labios con el otro, se sintió incluso fugaz. Quizás Isagi sintió que el beso fue largo porque fue como si todo el tiempo a su alrededor se alentará, nada más, pero eso mismo le permitió apreciarlo más.

Debe admitir que no se lo esperó, el gesto lo cautivó pero también lo hizo sentirse extrañamente confundido con respecto a sus sentimientos hacía el Alpha de orbes verdes y personalidad tan reservada como callada. Tampoco le desagrado, lo que quizás en realidad lo decepcionó un poco, es que él esperó que durará más. Un poco más.

Que el beso llegará a ser más largo y apasionado, que sus lenguas se juntaran y le diera besos más húmedos e intensos hasta el punto de estremecerlo por completo. Aquellos pensamientos es lo que le hacían dudar sobre sus propios sentimientos hacía Rin Itoshi. Pero al final solo fue un beso fugaz y suave, sencillo.

No lo mal entiendan, no es que lo odie, solo que quería más.

Se quedó con ganas de más, por ello es que terminó decepcionando se un poco y apenas se ruborizo notoriamente durante tan solo algunos instantes.

Cuando se separaron, cuando el beso dio por terminado Yoichi se quedó varios segundos en silencio porque siente un cúmulo de emociones y pensamientos.

Antes le hubiera emocionado aquel beso por parte del Alpha por más simple y corto que hubiera sido, habría sentido tantas cosquillas y mariposas en su estómago de la manera más cursi que un joven pudiese soñar. Pero ahora es algo diferente, no sabe cómo explicarlo. No lo entiende tampoco.

—Mañana nos veremos, Isagi Yoichi. — se despidió Itoshi. El nombrado apenas dijo un débil "si" que sonó como un balbuceó, se escuchó torpe y ridículo.

Rin se dió media vuelta, se alejó un poco para después entrar a su coche para así avanzar y doblar la siguiente esquina. Desapareciendo de la visión de Isagi quién aún sigue procesando lo ocurrido, quedándose casi sin aliento.

Itoshi se dirigió usando su nombre completo y no solo su apellido, eso es algo considerablemente íntimo por parte del Alpha. Sin embargo, aún no cree que su relación se haya formalizado todavía, presiente que está más cerca por el beso, pero todavía no es así.

Tardó algunos cuantos minutos en mantener su compostura, en reaccionar y recordar el porque no se terminó yendo con Rin.

Él ya tiene a alguien con quién salir y a menos que esté llegué tarde, lo ha de estar esperando en el parque y todavía tiene mucho que caminar hasta llegar a él, tiene que apresurarse.

Recuperando el aliento, aclarando su mente para no pensar demasiado en aquel beso y apresura el paso para dirigirse a su punto de encuentro con Kaiser.

Si a él le gusta mucho Rin, ¿Por qué se pone ansioso y un poco emocionado por ver al alemán?

¿Debería guardar su distancia con Kaiser para que esté no mal intérprete las cosas?¿Pero que va a mal interpretar? Isagi lo invitó a salir como amigos, nada más. Técnicamente no hay nada de malo con que ellos dos salgan juntos, a él le sigue gustando Rin y eso no cambiará.

Tal vez le está dando demasiadas vueltas al asunto, probablemente Kaiser ni siquiera lo ve de esa manera, solo está exagerando y dando por hecho cosas que no le corresponden.

—Joder... Sobre pienso demasiado las cosas.— murmuró para si mismo entre su caminata que parece trote.

Por lo menos Itoshi no le pidió explicaciones de con quién va a salir. Pero en el fondo si le hubiese gustado verlo un poco celoso y preguntando más sobre su salida. Verse más interesado en él.

"Estoy siendo alguien obsesivo, cuando aún no es oficial lo nuestro..." Es lo que pensó.

No había tenido una relación romántica antes, por ello se siente ansioso y quiere apresurar las cosas entre él y Rin, es normal. Es normal querer más atención e intimidad con él, con alguien que te gusta mucho ¿Verdad?

Tal vez será mejor guardarse ese tipo de pensamientos nada sanos para si mismo, o podrían tacharlo como un obsesivo o peor...

Un tóxico.

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Al llegar al punto de encuentro, no se le complicó encontrar a Kaiser a pesar de que el parque es enorme. Desde donde entró, estaba justamente sentado en una banqueta con su celular en la mano, esperando. Isagi mira su reloj de muñeca y se da cuenta que llegó tan sólo diez minutos tarde, debido a su repentino encuentro con Rin.

—Disculpa la demora, ¿Esperaste mucho?— preguntó mientras se inclinaba hacia él.

—No realmente. — contestó encogido de hombros, guardando su celular.

La expresión en el rostro del Alpha es diferente, Isagi puede notarlo. Quizás está muy serio considerando que por la mañana actuaba diferente.

Al ver qué este seguía sentando decidió tomar asiento a su lado, un poco preocupado le pregunto:

—¿Paso algo?

—¿Cómo qué?

—De repente no traes tu sonrisa burlona y te ves muy serio, cuando hoy por la mañana tenías otro humor. — explicó brevemente intrigado.

Kaiser lo miró en silencio, pensativo.

—No me gusta. — confesó apenas audible, desviando su mirada hacia otro lado por algunos segundos.

—¿Qué no te gusta?— repitió curioso y confundido. No recibió respuesta inmediata del rubio por lo que se puso a pensar.¿Tal vez por como viene vestido? Apenas Rin se fue, se puso su cubre bocas y un gorro gris poco llamativo.—Si es por qué estoy usando cubrebocas y el gorro es para que la gente no me reconozca.— habló nuevamente.

—No hablo de eso.

Yoichi pensó que se estaba comportando como un niño.

—Kaiser, deja de actuar tan insoportable y mejor ve directo al grano.¿Qué te ocurre?— se dirigió directamente a él. No le gustan los dramas de esos que pasan en la televisión.

El alemán lo volvió a ver con el ceño fruncido. Isagi pensó que lo molestó por ser tan directo, pero así es él. El Alpha suspiró pesado, para después decirle:

—No me gusta ese olor. — bufo.

—¿Olor?— repitió asombrado, Kaiser asintió. Isagi se olió así mismo, pero no olía mal. Quizás no se hecho perfume pero si desodorante en aerosol moderadamente apenas terminó su entrenamiento. Además se bañó y se jabono bien.— Juro que me bañe. — aclaró preocupado de que quizás una paloma le cagó encima o aplastó popo de perro y no se dio cuenta por andar distraído en sus propios pensamientos.

La cara de Yoichi es todo un poema, Kaiser quería reírse pero también recuerda porque está enojado y se controla.

—Me refiero a ese olor a menta y pino. — señaló calmando a Isagi pero igual confundiendo lo.—Hostiga mucho y no combina. — crítico sin cambiar su semblante.

Isagi se detuvo a pensar por un minuto. Aunque al principio quedó algo desorientado, no paso mucho para captar a que se refiere. ¿Cómo se le pudo olvidar? Hace menos de media hora estuvo muy cerca con Rin,  aparte que esté lo besó. Es un Alpha imponente, era algo obvio que pudo haber dejado sin querer —o tal vez sí — un poco de sus feromonas, de su distintivo aroma a menta y pino.

Aunque en lo personal a Isagi no le molesta y hasta puede decir que le gusta, puede entender que a Kaiser no le agrade el aroma e incluso le parezca tosco. Sabe que a los Alphas a veces no les agrada el aroma de otro de ellos, especialmente sobre una persona en especial.

Aunque sea ello, sigue pensando que es algo exagerado que Kaiser se haya puesto así solo porque cargue el aroma de otro Alpha que puede que en unos minutos más desaparezca por completo. Presiente que puede ser que también exista otro motivo para que Kaiser esté enojado, pero no quiere insistir ya que puede ser algo muy personal y no debe meterse.

Isagi respira hondo, entonces lo detecta. Es leve, puede que Kaiser haya intentando ocultarlo todo este tiempo y lleve mucho un poco más tiempo así antes que el llegará, pero lo puede oler. El aroma del Alpha de licor y canela tan agradable, ha cambiado y está como ese tipo de sensación que pica, le hace arrugar la nariz al Omega. Lo cuál le hace sospechar que efectivamente Kaiser está o estuvo hace nada, muy molesto.

Por lo que sus sospechas se confirma, algo más le molesta a Kaiser desde hace más tiempo. Lo del aroma que trae cree que es una excusa aparte que si bien también le irrita, no es su motivo principal de enojo.

—Oh... A ese olor te refieres. Disculpa si te—, quiso disculparse relajando sus hombros, siendo interrumpido.

—No te disculpes. Cambiemos de tema,— aclara su voz para no escucharse ronca. Realmente por dentro debe estar muy molesto pero sigue tratando de ocultarlo.—¿Dónde iremos?

—¿Has comido algo?— pregunto intentando tomarse las cosas con calma. Si Kaiser no le cuenta nada al respecto tampoco puede hacer mucho por él.

—Almorce como a las dos y media. Pero ahora ya tengo mucha hambre.

—Perfecto, porque primero iremos a comer a un buen lugar que conozco.— soltó más animado, apunto de ponerse de pie hasta que el Alpha lo abraza poniendo su brazo alrededor de sus hombros y acercándolo a él.— ¿Qué estás haciendo?— pregunta extrañado por la repentina muestra de afecto.

La sensación es extraña, pero no desagradable. Cómo un perrito frotándose para demostrar su ¿Cariño?

Nota que el aroma del rubio cambia poco a poco, volviéndose menos picosa e insoportable. Es esa clase de picor que se puede comparar con pimienta y chile fuerte, wasabi.

Por culpa de Kaiser se le antojó wasabi, tal vez debería hacerle una broma y que esté lo pruebe. Sería muy chistoso ver a un extranjero probarlo.

—Haciendo que ese aroma espantoso se alejé de ti. — recalca abrazándolo más fuerte.

—¿Y lo haces poniéndome tu aroma? Si sigues así cualquiera pensara que, por traer tu aroma tan apegado soy tu pareja.

Aunque le gusta mucho el aroma de canela y vino, con un ligero toque de pasto recién cortado, sigue siendo demasiado atractivo para él.

—Que lo piensen. — contesta sin dudarlo.

—Que directo eres, no creo que te agrade.

—¿Por qué no me agradaría que los demás piensen que eres mi pareja?— cuestionó de inmediato, volviendo a fruncir el ceño.

—Esta noche estás muy a la defensiva, ¿O será mi idea?,— hace una breve pausa. Kaiser no le dijo nada, así que continuo.— Lo digo porque a lo mejor sea incómodo para ti. Quizás quieras ligar con alguien y no puedes si piensan que somos pareja.

—No ando por la vida queriendo ligarme a cualquier belleza que se me cruce en el camino. ¿Eso piensas de mi?— soltó aparentemente ofendido. Cómo se escucha enojado y serio, Isagi realmente parece creerle.

—Ya que lo dices—,

—No me respondas mejor.— le detuvo.—Ya te dije que vine hasta aquí por ti.

Aquellas últimas palabras le provocaron escalofríos a Yoichi. A veces no sabe cuándo Kaiser está bromeando y cuando dice la verdad, le comienza a ser difícil distinguirlo. Tampoco ayuda que esté no le suelte, no es incómodo, solo extraño.

—Sinceramente pensé que lo decías de broma. No que hablabas enserio, es difícil viniendo de ti.— comenzó a sincerarse juntando sus manos pensativo.— Cuando nos conocimos me dijiste muchas cosas raras y me decías cariño, pensé que era una forma de burlarte de mí en aquel entonces ya que en ese momento tu eras por mucho superior a mi.

—Lo decía para molestarte y provocarte un poco.— confesó recordando como lo provocaba en aquellos momentos.—Desde que te vi en aquel partido contra la liga nacional de tu país, me habías llamado mucho la atención.

De fondo solo se escuchaba las hojas de los arbustos y árboles moviéndose por el viento, a lo lejos muy en el exterior el sonido de coches y motocicletas andando. Quizás en el otro extremo del parque había gente ya que hay que recordar que el lugar es gigantesco, pero donde están ellos ni un alma respiraba más que los dos futbolistas. Cómo no había gente cerca Yoichi se bajó el cubre bocas.

—Recuerdo que me habías dicho qué querías que yo fuera un obstáculo en tu vida. — menciono curioso.—¿A qué te referías exactamente con eso?

—Estaba coqueteando te. — le sonrió socorron. 

—Estabas, ¿¡Qué!?— abrió más los ojos sin poder creerlo.—¿Eso era un coqueteo?— pregunto sorprendido, el contrario asintió.— Eres pésimo haciéndolo. — añadió para soltar unas carcajadas al final.

Isagi no sabe coquetear pero si ha visto a sus amigos o en series modernas hacerlo, y definitivamente Kaiser es pésimo haciéndolo. Al menos esa vez si que lo fue.

—¡No te rías!— expresó irritado como en el fondo, avergonzado. Pero debe admitir que escuchar las risas de Yoichi y sus mejillas ruborizadas es bonito de ver. Suspira y lo deja de abrazar para jalar sus mejillas, pellizcando un poco.—¿Por qué tus mejillas son tan suaves?¿Que clase de cremas usas? Eres futbolista no modelo. — cuestiona curioso y sin soltarlas.

Yoichi había dejado de reírse y quejarse un poco del leve dolor. Las manos de Kaiser son grandes y para su sorpresa se sienten calientes, considerando que hace frío y no trae guantes, le asombra.

—No uso ninguna, es mi piel natural, bastardo. — se queja hasta que por fin las manos del rubio lo dejan en paz.

Kaiser se pone de pie sin apartar la mirada del más pequeño.

—Yoichi.

—¿Qué?— lo miró confundido como pensativo. Kaiser le habló por su primer nombre, solo por éste y ya sintió su estómago revolver.

Hubo una breve silencio insólito. No incómodo, solo natural y próspero. Hasta que el estómago del Omega ruge de hambre y esté se avergüenza hasta las orejas, pero manteniendo la compostura y dignidad serias para que Kaiser no se burle tanto.

Quizás arruinó un poco el ambiente o lo que Kaiser tenía planeado decirle, porque sintió que definitivamente cambió de tema.

—Vayamos a comer, tengo mucha hambre, pero seguramente tú más.

—No te rías.

—¿Ahora tú me mandas?— cuestionó arqueando una ceja. Isagi se puso de pie y comenzaron a caminar.

—Eres un idiota.

Yoichi para sus adentros quería venganza. Pero por supuesto que le iba a dar de probar wasabi, y no se sentiría ni una pizca de arrepentimiento.

Mientras que Yoichi seguía sumido en sus pensamientos, Kaiser quién no dejaba de mirarlo y seguirlo, sonreía con cierta arrogancia cómo diversión. Después de todo, puede estar más tranquilo ahora.

Yoichi Isagi ahora tiene su aroma impregnado y no la de ese otro Alpha molesto. 

@gian_flippy_

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Palabras: 2,609
Escritor: JaquiiAleWorld
Fecha de publicación: Martes 20 de diciembre del 2022
Fandom: BlueLock
Au: Omegaverse
Nota del escritor:
El siguiente capítulo será cortito.
Esto del wasabi se me ocurrió porque me salió un meme de cars y me acordé la película 2 dónde a mate le dan wasabi y no sabía que era XD.
Según yo está historia no tendrá tantos capítulos, no la quiero extender mucho porque luego jamás la termino.
Nos vemos la próxima!