Detroit, 12 de noviembre de 2038, 12:45 de la mañana

Ya habían pasado dos días desde que los divergentes miembros de Jericho consiguieron empezar una nueva etapa para Detroit y el mundo entero en general: una sociedad entre humanos y androides, ahora más conocidos como divergentes. Una nueva sociedad para poder convivir en paz y armonía, confiando los unos en los otros.

Markus, mundialmente conocido como "el líder de Jericho", había firmado hace apenas unas horas un documento con la presidenta para hacer ese acuerdo de forma oficial junto con los demás androides que formaban parte de su equipo, todo esto delante de las cámaras y periodistas que se encargaban de grabar este importante momento que, definitivamente, pasaría a la historia.

Por desgracia, no todo estaba saliendo bien.

Aún había casos de personas que odian a los androides, haciendo revueltas y manifestaciones para que los androides volvieran a ser lo que eran, simples máquinas encargadas de obedecer a los humanos.

Y si aún había gente con este pensamiento, también había casos de homicidios de humanos a androides y viceversa.

El teniente Anderson, junto con su ayudante Connor, eran el nuevo equipo de homicidios más destacado en el departamento de policía, consiguiendo así ganarse, en tan pocos días, una gran popularidad y nombre en todo Detroit.

Todo esto era nuevo para Connor. Nunca se habría imaginado (si hubiese podido) llegar a ser un divergente, tener un trabajo en el cuál le tratasen como una persona, y mucho menos el llegar a tener un puesto de trabajo permanente junto con Hank, aquel policía alcohólico que odiaba a los androides.

Qué ironía.

Hank, con el paso de los días había ganado afecto por el androide, llegando a ser alguien importante para él, preocupándose por él y el querer ayudarlo.

Las cosas en casa de Hank también eran diferentes. Hasta que Connor tuviera suficiente dinero para comprarse una casa propia, viviría con el teniente Anderson a cambio de un trato: Hank limpiaba y Connor cuidaba a Sumo y hacia la comida.

Eso sí, Connor dormía en el sofá.

Las cosas marchaban bien, incluyendo el día de hoy.

-"Hoy, hace apenas unas horas, se ha llevado a cabo un importante hecho que pasará a la historia en la casa presidencial de la ciudad de Detroit: la firma del documento que dice cómo los androides ahora serán reconocidos como una nueva raza de vida inteligente, con todos sus derechos, tanto civiles como políticos, presentes en todos lo estados del país. La presidenta de Detroit y el representante de los androides, Markus, se reunieron en el mismo sitio ya mencionado para debatir los acuerdos que"- la televisión del salón se apagó, dejando en duda por las noticias a cierto androide.

-Teniente, ¿por qué ha apagado el televisor?- preguntó Connor mirando al recién mencionado, el cuál se encontraba sentado en la mesa al igual que él, pero este, a diferencia de Connor, estaba desayunando.

-Paso de ver como un imbécil dice el mismo puto párrafo seis veces- dijo quejándose Hank, bebiendo un sorbo de su cuenco de cereales. El androide había conseguido hacer que Hank comiera más sano por las mañanas, y no un trozo de pizza del día anterior-, ya tengo suficiente contigo diciéndome todo lo que pasa en el mundo.

-Es bueno estar informado.- contestó Connor sonriendo.

-Si si, lo que digas.

Cuando Hank terminó de desayunar, ambos se subieron al coche para ir a la comisaría, ya que al parecer tenían un nuevo caso de homicidios relacionado con divergentes. Hoy, extrañamente, se les hizo corto el camino, posiblemente por que este caso era diferente a lo que habían visto en los últimos días.

Esta vez, el divergente era la víctima.

-"Posiblemente, hoy sea el acontecimiento más importante de Detroit en los últimos años, el día del firmamento del tratado de igualdad entre humanos y androides. Ahora pasemos a la siguiente noticia. Un androide ha sido atacado hoy a las seis de la madrugada en la calle Elmore Street, donde hace apenas una semana se cometió un homicidio de una persona por parte de un androide, en esta ocasión con un arma de fuego. Los investigadores de la policía, el teniente Anderson y el androide Connor, van a ir hoy a la tarde a investigar la escena del crimen y a informar lo máximo posible todo este asunto. También se cree que un hombre ha"-

-Mira Markus, hoy has hecho un acontecimiento histórico.

-Bueno Carl, creo que ya lo hice con la manifestación de los androides.- sonrió Markus mirando al mayor.

Markus, después de hacer todo eso por los androides, decidió ir a visitar otra vez a Carl, más que nada para ver cómo estaba.

Fue allí buscando cobre, y encontró oro.

El viejo anciano recibió con los brazos abiertos a Markus, alegrándose de saber que este se encontraba bien, ofreciéndole inmediatamente quedarse en casa, como hacían antes. Este aceptó, y también se llevó la sorpresa de que sus amigos, Nort, Simon y Josh, también podían quedarse en la mansión a vivir.

Los cuatro androides tenían un hogar, una vida nueva llena de oportunidades. Pero, ¿que pasa con todos aquellos que no la tenían? Era una pregunta difícil de olvidar, por lo que el equipo androide decidió hacer una nueva cosa a su lista.

Una organización para reparar y mejorar el viejo Jericho para hacerlo un buen hospedaje para los androides que no tenían casa ni a un sitio a donde ir. Carl fue uno de los principales donadores, donando más de medio millón de dólares para dar un pequeño empujón a la organización, cosa que funcionó. En un solo día ya habían recaudado 700.500 dólares.

¿Cómo es que las cosas le salían tan bien?

Por desgracia, cuando pensó que por fin iba a tener un tiempo de descanso, una nueva aventura apareció delante suya, y no solo a él, sino a los otros dos androides protagonistas de esta historia, Connor y Kara.

Una aventura que, sin duda, les haría probar su valentía y valores, además de poner en peligro sus vidas.

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

Este capítulo es como un pequeño resumen de una historia que tengo en la cabeza. Siento si quedó algo raro, soy malísima haciendo resúmenes xD

Si veo que os gusta, haré un libro aparte con la historia y dejaré este exclusivamente para los pedidos.

Si veo que hasta el capítulo tres o por ahí tiene apoyo, pensaré en hacerlo, ya veré.

Bueno, esto es todo.

Bye~