Colette
- Es... ¿Bibi? ¡Ah! -grité emocionada por el video que me mostraba- es el programa que le recomendé hace unos días... Aww... Pensé que no lo miraría porque dijo que era un programa de chismes.. -él se sonrojó y ladeó la cabeza evitando mi mirada.

- ¡Eso no importa! Presta atención a lo que dice -seguí viendo el video y Bibi se la pasó diciendo que odiaba a Edgar porque nunca la tomó en cuenta y era cierto... ¿Pero debía hacerlo público?- habíamos quedado en que no íbamos a afectar nuestras carreras con el divorcio, ni la de ella como modelo ni la mía como intérprete... Esto es increíble.... ¿Cómo me pudo hacer esto? -los ojos de Edgar se llenaron de lágrimas, pero pasó su mano en ellos y se limpió.

- Sí... No entiendo por qué... -abrí mis ojos sorprendida- ¡¿Cómo?!

- ¿Ah? ¿Dijo algo más? -preguntó acercándose a ver el video conmigo.

- ¡Sí! ¡Qué está comprometida!

- ¡¿Ah?! Me imagino que debe ser el tipo que ella mencionó antes de pedirme el divorcio...

- ¡Y está ahí! -señalé- ¡maldito!

- Wow, no pensé que te preocupara tanto esto... -negué con mi cabeza.

- Ese imbécil es el padre de Selenna.

- ¡¿Qué?! ¡¿Me estás diciendo que tu exesposo está con mi exesposa?!

- Eso me temo, señor Thomas -gruñí mirándolo en esa pantalla- para tener noviecita si es bueno, pero para visitar a Selenna nunca tiene tiempo.

- Hablando de Selenna... ¿Vendrá hoy? -preguntó de pronto.

- Amm... Si me lo permite... -dije casi en susurro.

- Está bien, me agradó -asentí sonriendo- por ahora voy a tomar un trago... Mira el regalito que me dio uno de mis amigos -sacó del gabinete de su escritorio una botella de Whisky- si me disculpas... Voy a beber frente a ti, espero que no te moleste.

- S-señor... -dije con temor y me miró de reojo- sonará poco profesional de mi parte... Pero... ¿Lo puedo acompañar?

- Adelante, de todas formas la botella es grande -nos sentamos en el piso y él puso dos vasitos de plástico para servirnos- ¿tomas para olvidar a tu exesposo?

- No, a él ya lo superé... A quien no supero es a mi más reciente exnovio -su rostro reflejó sorpresa, aunque asintió al final.

- Bueno... Empezando... -me dio uno de los vasitos ya servido- brindemos porque la idiota de Bibi y el... Mm... ¿Cómo se llama el tipo ese?

- Se llama Sandy.

- Ah, entonces continúo -aclaró su garganta logrando que me ría- brindemos por la idiota de Bibi y el estúpido de Sandy tengan una próspera vida juntos... Claro, si es que duran -me guiñó el ojo y volví a reír.

- Salud -levanté el vasito.

- Salud -me imitó y chocamos los vasitos.

Esto no va a terminar bien... Lo presiento... No soy muy resistente al alcohol.

2 horitas más tarde

- Ahora... -dijo él riendo todo bobo- ¿sabes por qué Enrique Iglesias va a un campo de cereales?

- Amm.... -me hice la pensativa- no sé.... -también reí como boba y me mordí el labio para dejar de reír así.

- Porque quiere bailar con trigo, vivir con trigo... -era un chiste bastante malo, pero aún así nos reímos sin control alguno.

- A ver... A ver... -dije respirando mejor y ya más calmada- me toca... ¿sabe quién es la estúpida que le cree a todos los que le dicen que la quieren?

- ¿Quién? ¡Oh ya sé! ¡Yo!

- No Edgar, usted es hombre -empezamos a reír otra vez.

- Ah, es ciertoooooo.... -diablos los dos estamos demasiado ebrios y no solo bebimos el whisky, porque lo acabamos bastante rápido y bebimos todavía más cosas que ya no me acuerdo de sus nombres- ¿entonces quién es?

- ¡Yo! -volvimos a reír- sabe... Uf.... ¿No tiene calor? ¡Yo sí! -decía mientras me daba aire a mí misma.

- ¿Sabes qué? Yo igual... -se empezó a quitar la camisa.

- ¡Espere! -grité y se detuvo- ¡yo voy primero! -y ahí está nuestra risa boba de nuevo. Me quité la blusa dejándome solo con mi sostén. Edgar se me quedó viendo pervetidamente y eso me molestó- oiga, que sus ojos miren hacia otro lado -le ordené, pero no me hacía caso. Lo tomé de la cara elevándola- mírame el rostro Edgar... Estoy aquí... -murmuré y un sonrojo apareció en su rostro.

Se veía lindo.

- Es mi turno... -se quitó la camisa dejando ver su torso y su pecho desnudo.

La verdad no me imaginaba... Que estuviera tan bueno...

Me mordí el labio ante mis pensamientos y Edgar seguía bebiendo.

- Creo que mejor voy a llamar a mi vecina para ver si puede cuidar a Selenna... -dije pensativa.

- ¿Cómo? Pero yo la quería ver... -contestó Edgar con un puchero y sus brazos cruzados.

- La verá mañana, no quiero que me vea en este estado... -marqué el número y de inmediato me contestaron:

- Hola... ¿quién habla?

- ¡Pam! -exclamé- fíjate que estoy muyyyyy ocupada en el trabajo y me preguntaba siiiii....

- Está bien, cuidaré a Selenna, sé lo difícil que puede ser tener una hija y tú sin nadie a tu lado....

- Gracias Pam... -murmuré desanimada.

- Adiós, Colette.

- Bye... -colgó y lancé el teléfono molesta.

- ¿Ahora qué te pasa? -me preguntó Edgar notando mi acción.

- Pam dijo algo cierto... Es difícil no tener a nadie a tu lado y más si hay una hija de por medio... -me hice bolita abrazándome a mí misma- doy asco...

- Hey, no te pongas así bonita -él puso su brazo alrededor mío- mira, tienes una hija... ¿Y qué? De seguro la chica por la que te dejó no es tan linda como tú...

- Da igual que sea así... -empecé a sollozar- lo primero que hice al entrar a la universidad fue embarazarme... ¿Para qué? Para que nuestra relación no durará más de dos años...

- Por lo menos la tuya duró dos años, la mía ni siquiera un año entero... Por lo menos casados... -lo miré de reojo y estaba con una cara de melancolía.

- Estoy segura que algún día encontrará a la mujer de sus sueños... -me limpié las lágrimas y levanté mi rostro.

- Bibi era la mía...

- Una que sí le corresponda.

- Ah... Espero que sí, y yo estoy seguro que también hallarás al hombre de tus sueños.

- Eso espero... Y espero tanto que ese hombre acepte a Selenna...

- Si no lo hace se las verá conmigo -concluyó con su ceño fruncido. 

Me sorprende lo bien que se llevó con Selenna.