Mis ojos habían observado un escenario completamente horrible, en el Interespacio Bakugan se encontraban demasiados Bakugan Caos de los cuales se encontraban destruyendo cada parte del Inter espacio, en definitiva pensaba que era un buen momento para regresar junto a los demás.

  Una vez que habíamos atravesado aquel portal que Dren fue capaz de crear, le había pedido que atacará hacia un lugar en especial donde había logrado observar a algunos de nuestros compañeros.

— Es bueno estar de vuelta— murmuro con una sonrisa.

  Sabía que había sido una mala idea regresar así como si nada, se que las cosas fueron demasiado difíciles una vez que abandone a los peleadores. Simplemente fue un instinto por querer dejarlos fuera del peligro que en esos momentos estaba experimentando, quizás fue cobarde pero me alegra saber que ellos están bien.

— Dren, estoy segura de que esos son los Bakugan que nos habían atacado en nueva Vestroia— comento bajando de la Bakugan.

— Eso es verdad— afirmó la Bakugan.

  Di media vuelta observando de reojo a las personas que estaban a unos metros de distancia, entre ellos se encontraban personas que pensé nunca ver cómo Spectra y a decir verdad ahora me da muchísimo gusto de que más personas estén aquí para la batalla. Los peleadores estaba de igual forma pero, por alguna razón no me sentía demasiado bienvenida de estar allí.

— Chicos, nos encargaremos de esto— pronuncio con una gran sonrisa, la alegría de volver a estar nuevamente en el Interespacio Bakugan y ayudar a mis compañeros fue más grande que su indiferencia hacia mi.

  Sabía que en ese momento era nuestro turno de atacar así que eso fue lo que le había pedido a Dren, realizar un ataque directo hacia los Bakugan que estaban frente a nosotros de esta manera Dren logró acabar con varios Bakugan que estaban allí. Estaba alegre porque todos los días en los que habíamos entrenador habían dado frutos, finalmente estaba segura de que no tendríamos ningún problema más con la transformación que Dren tenía por sus poderes.

— ¡Tenemos que acabar con ellos lo más rápido posible!— exclamo con total seguridad.

— ¿Quieres decir que...?

— Así es tenemos que llamarlo— continúo—. Proelium es capaz de ayudarnos para que todo esto terminé de una vez.

— Estoy de acuerdo— Dren había apoyado la idea, se que esto es demasiado rápido pero en el Interespacio Bakugan estaba  demasiado Bakugan Caos y se que mis compañeros tendrían grandes problemas sino tomaban medidas drásticas.

  Los Bakugan que anteriormente había atacado Dren comenzaron a colocarse de pie como si el ataque que ella les había lanzado no hubiese sido nada, es por esa razón que le había pedido a Dren llamar a Proelium, el Mectogan es capaz de ayudarnos y mucho mejor ahora que sabemos que no es ningún peligro.

  Dren se hacia colocado frente a mi comenzando a irradiar una gran cantidad de energía para crear un cielo artificial donde las nubes en color negro destacaban con varios relámpagos de diversos colores, de esta manera comenzó por llamar la presencia de un tercero consiguiendo que aquel Mectogan cayera al suelo con una presencia llamativa.

— Seamos tres corazones en uno— formuló Proelium colocándose alado de Dren—. Estoy listo para tener una batalla junto a ustedes.

  A decir verdad era difícil de creer que un Mectogan también tuviera la facilidad de comunicación con nosotros, esto me recordaba a la primera vez que había tenido una verdadera batalla y esa vez que los Bakugan comenzaron a hablar con nosotros.

— Comencemos de una vez— alzó mi mano para iniciar un ataque—. ¡Poder activado: Disparo Pirómano!

  Una gran cantidad de energía Pyrus había sido expulsada del cuerpo de Dren, dirigiéndose hacia los Bakugan que estaban sobre ella apunto de atacar. Del mismo modo Proelium había comenzado a atacar a los enemigos una vez que Dren comenzó a atacar, de verdad ahora mismo quería ser de ayuda.

— Eso es— murmuro con orgullo tras observar a la Bakugan, se que últimamente hemos tenido muchas caídas por todo lo que ha pasado pero quiero que salgamos adelante.

« ¿En serio creíste que te olvidarías tan fácilmente de mi? »

  Una enorme punzada había provocado que tomara mi cabeza con fuerza, mi vista comenzaba a tornarse borrosa por lo que presioné mis ojos para intentar no caer. No puedo creer que nuevamente MagMell esté en mi cabeza, pensaba de verdad que nunca más volvería a escucharlo en mi cabeza.

— ¡Mierda no!

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  Marucho había tomado la decisión de que todos regresaremos nuevamente a la sala de junta de los peleadores, lamentablemente no podía hacer nada por aquel lugar donde se encontraban los Mectogan así que tuvo que borrar aquella parte del interespacio Bakugan.

  Me siento sumamente culpable por todo lo que había sucedido, por alguna razón había perdió el control de Proelium y todo lo que sucedió después se convirtió en un caos. Esto no es nada de lo que yo quería que sucediera, pensaba que podíamos hacer algo Dren y yo pero, creo que como siempre estoy equivocada.

— Todos han cambiado— comentó Spectra, lo más llamativo de el era su nuevo traje el cual hacia referencia a qué había cambiado de atributo al Darkus—. Y los peleadores ahora parecen estar fracturados, eso es muy triste.

— Spectra espera— pidió Dan intentando acercarse al peleador Darkus, quién no le había prestado atención.

  Spectra había terminado por salir de la habitación, lo más seguro es que él ya están pensando en que esto simplemente no funcionaría como esperaba.

— Joder— mi cabeza nuevamente comenzaba a doler demasiado, por lo que mis manos se acercaron a ella en un intento por calmar el dolor.

— ¿(T/N) estás bien?— Marucho se acercó a mi con preocupación.

  Sentí como es que dos manos estaban sobre cada uno de mis brazos colocándome sobre un sillón cercano, una vez que aquellas pulsaciones di un enorme suspiró. Estaba demasiado cansada por todo, la verdad es que la situación me tenía estresada y tenía un miedo constante en qué MagMell se apoderará de mi cuando estuviera dormida.

— Lo lamento, el plan era mucho mejor en mi cabeza— me disculpo con los presentes, se que las decisiones que había tomado no habían sido nada buenas—. Dren y yo hemos estado entrenando durante varios días, pensamos que habíamos conseguido tener el control sobre Proelium.

— Eso es algo patético ya que nos demostraron todo lo contrario— alegó una fémina de cabellos cortos y en un tono rosa pálido, ella tenía unos enormes brazos sumamente fornidos y un semblante serio que parecía estar enojada todo el tiempo.

— Está claro que no tienes el control sobre el Mectogan ¿Por qué no lo admites?— cuestionó un joven de cabellos azules quién se encontraba cruzado de brazos, el tenía el cuerpo algo delgado y una vestimenta holgada.

— ¿Los conozco?— cuestiono hacia ambos.

  En parte tenían la razón por lo que sucedió pero no me agrado la forma en la que me lo hicieron saber, es decir ni siquiera los conocía.

— Ellos son Rafe y Paige son parte de los peleadores y nuestros amigos— anunció Shun, por el rostro que él tenía sabía que estaba molesto.

— Ellos nos ayudaron con nuestras batallas, justo cuando tú desapareciste— explicó Dan—. Nos han ayudado demasiado.

— No puedo creer que esta chica sea su poderosa líder— declaró Paige con gran burla.

— Querrás decir ex líder— corrigió Rafe.

— ¿En serio quiénes se creen ustedes para decir eso? Ni siquiera estaban presentes cuando todo esto sucedió— cuestiono con molestia—. Tener días de ser peleadores no demuestra nada, solo los hace ver como unos pequeños malcriados.

— ¡¿Cómo me llamaste?!— Paige se acercó de forma molesta hacia mi persona, Dan tomó el hombro de ella deteniendo sus acciones.

— Ellos nos han ayudado más de lo que tú crees— formuló Marucho—. ¿Mientras que tú donde has estado tú todo esté tiempo?

  Marucho es uno de mis mejores amigos de la infancia, se podría decir que la mayoría de las veces siempre estábamos juntos debido a que siempre teníamos temas de que hablar y escuchar cómo es que defendía a unas personas que conocía por días, que a alguien que conoció de años me provocaba un malestar.

— No hablaré de eso— bajo la mirada frunciendo las cejas.

— Exacto, ese es el problema— añadió Dan con cólera—. No tienes la suficiente confianza como para hablar con nosotros de lo que está sucediendo en realidad.

— Tenemos que decirles lo que está pasando (T/N)— Dren se colocó en mi hombro, sus palabras provocaron pánico en mi ser.

— ¿De esta hablando?— preguntó Shun.

— Estaba pensando seriamente en hacerlo pero, no lo haré— me negue—. Todo lo que ha pasado ya es cosa mía, no suya. Si me sacaron del equipo, está bien yo no lo voy a discutir y por lo tanto, no les debo ninguna explicación.

— No hagas las cosas más difíciles (T/N)— pidió Marucho.

— ¿Yo hacer las cosas más difíciles?— di una sonrisa llena de amargura—. ¿Quiénes están aquí acorralandome y exigiendo una respuesta que ustedes mismos quieren escuchar? Ni siquiera saben por todo lo que he pasado durante estos días, no les debo nada y ustedes a mi tampoco.

— Simplemente queremos ayudarte— murmuró Dan.

— Y esta es la peor forma de hacerlo— recalco al momento de bajar la mirada—. Pensaba en venir a ayudar, se que me equivoqué, lo admito pero estar aquí y acorralarme de esta manera con personas que ni siquiera conozco, los cuales por escuchar cosas acerca de mi piensan saber todo lo que soy. No soy una criminal, asumo mis errores pero, ese ahora es el problema ustedes quieren que asuma más responsabilidad de lo que es.

— ¡Pero...!

— Marucho, tengo responsabilidades aquí— interrumpí—. Sabes que tengo el mismo derecho que tu de estar aquí.

  Si tengo problemas, tendré que resolverlos por mi misma.