Una vez que habíamos logrado regresar al mundo real nos habíamos llevado la sorpresa de que MagMell se había adelantado. En el cielo se encontraba una enorme luna de color púrpura obscuro, lo que llamo nuestras atención pero, después de que esté fenómeno apareciera una enorme oleada llegó en el lugar y con ello desapareciendo toda la vida humana.

— ¿Qué fue lo que sucedió?— preguntó Dan a mi lado— ¿Dónde está toda la gente?

— Parece como si todos hubieran desaparecido— expusó Marucho observado a sus alrededores.

— Digamos que tenía que limpiar el campo, para poder concentrarnos en nuestra última batalla final.

  En el cielo apareció la silueta de MagMell obsevandonos fijamente, su voz se lograba escuchar desde cualquier parte en el lugar. Sabía que algo había hecho para que todo esto estuviera así, definitivamente él estaba tan empeñado en querer destruirlo todo.

— No me gusta nada como suena eso— admitió Shun observando la silueta de MagMell el cielo.

  Mi respiración aumenta de manera desenfrenada, mis sospechas eran ciertas.

— No me digas que es lo que creo que es— formulé con temor, si era lo que estaba pensando teníamos que acabar con él de inmediato o todo empeoraría.

— No eres tan estúpida como lo creí— MagMell río ante sus palabras—. Así es, envié a toda la gente de este mundo a la dimensión inversa obscura de este mundo.

— Toda esa gente...— murmuró Marucho bajando la mirada al suelo— ¿Cómo puedes hacer esto?

— ¡Liberalos!— exclamó observando su silueta en el cielo— ¡Este problema es entre nosotros! ¡Los demás no tienen nada que ver!

— Acabas de convertir esto en problema de todos (T/N)— añadió el enmascarado con superioridad—. Todos ustedes tiene un alto precio que pagar, en especial tú.

  No podía ser cierto, todas las personas habían sido enviadas a una parte de dimensión inversa oscura donde quizás ya no los volveríamos a ver nuevamente, y no podía quedarme aquí sin hacer nada cuando sabía que mi familia, amigos y todos los demás estaban sufriendo las consecuencias de algo que ni siquiera sabían que existía.

— ¡Ven a luchar MagMell! ¡No te escondas como un maldito cobarde!— exclamó con cólera, cómo es posible que él sea capaz de algo así.

  La silueta del Gundaliano río.

— Ya fue mucha charla por ahora— a su lado se logró visualizar varios tipos de portales donde mostraban lugares de la Tierra—. Observen esto, he enviado a cinco de mis titanes Dreadeon más mortiferos a las cinco ciudades más importantes de tu planeta, les deseo mucha suerte al tratar de detenerlos a tiempo.

  Así mismo MagMell nos mostraba los lugares en los que había lanzado a sus titanes, por obvias razones ya tenía un conocimiento de que lugares eran.

— ¿Qué rayos están haciendo?— preguntó Paige.

— Creo que es una perforadora láser de super alta intensidad— explicó Rafe observando su BakuPod—. Si todos perforan hacia el centro de la tierra...

—... la perdida de presión haría estallar la tierra en un millón de pedazos— completo Marucho presionando sus dientes—. Tenemos que hacer algo lo más pronto posible, sino será el fin de la Tierra.

— La tierra solo es la clave de mi enorme plan para destruir el universo— expusó MagMell—. Es una pena que ustedes no podrán observar el final de esto.

— ¿Qué es lo que quieres decir?— sabía que había algo más en sus planes.

— Otros también sufrirán por el papel que jugaron en la traición de la que fui víctima— respondió MagMell con molestia—. La fuerza causada por la destrucción de la Tierra se extenderá a otras dimensiones destruyendo cada mundo por el que pase, no quedará nada.

— Seguiría Gundalia— pronunció Paige con temor.

— Después Neathia, Nueva Vestroia y Vestal— terminó Rafe presionando sus nudillos—. Tenemos que detenerlo antes de que eso suceda.

— Disfruten de sus últimos momentos peleadores.

— ¡No vas a confinar a mí gente a una dimensión obscura!— exclamó Paige por último, justo antes de que la silueta de MagMell desapareciera por completo.

— Primero tenemos que derrotar a los cinco titanes— formuló Ben frente a los demás.

— Pero están en cinco lugares diferentes— habló Soon.

— Entonces hay que separarnos— respondió rápidamente Paige— ¿Cuál es el problema con eso?

— Paige tiene razón— pronuncié observando a todos los presentes—. No podemos quedarnos aquí perdiendo el tiempo cuando hay cinco titanes intentando destruir el mundo, hay que ir a la batalla antes de que sea demasiado tarde.

— ¡Entonces hay que hacerlo!— exclamó Dan tomando a Drago entre sus dedos.

— Dren— observó a la Bakugan—. Tenemos que acabar con el de una vez por todas.

— Estoy de acuerdo— generó la Bakugan.