Lo que sucedió después de la batalla que habíamos fue que lamentablemente no podíamos regresar a la Tierra, por lo que nos quedaríamos en el Interespacio Bakugan hasta que encontremos una manera de regresar junto con los demás peleadores. Esto era difícil ya que cualquier alteración en el lugar nos pondría en peligro junto con los demás.

  Esto había sucedido debido al último ataque que había tenido Shun, lo que provocó que se destruyera el último recurso para salir del Interespacio.

— ¿Qué podemos hacer ahora?— le pregunté al rubio de menor tamaño, quién estaba en el computador en forma de mesa.

— El plan ahora es concentrarnos en mantener a los Bakugan caos ocupados, mientras averiguo si puedo reparar el punto de acceso— explicó brevemente mientras continuaba observando la pantalla—. Solo necesito que sean una interferencia.

  Dan se levantó de su asiento con decisión.

— Nosotros nos encargamos de cuidar tu espalda— afirmó Dan con una sonrisa llena de confianza.

— ¿Seguro que no necesitas ayuda?— le pregunto aún tomando asiento frente a el.

— A decir verdad sí— afirmó el rubio algo apenado—. Se que tú también sabes acerca del Interespacio, así que eso me serviría mucho al momento de intentar repararlo.

— Entonces andando— afirmé observando a Dren.

  De pronto el reloj de Marucho comenzó a timbrar a lo que después aparecieron las imágenes de Rafe y Paige, quienes a simple vista parecían no tener un rostro nada alegre.

— Tenemos un problema— explicó Rafe.

— ¿Hay más Bakugan caos?— preguntó Dan acercándose.

— Pues...— Rafe no consiguió responder debido a que Paige lo interrumpió.

— ¡Es mucho peor!— respondió la fémina de cabellos cortos—. ¡Solo vengan aquí, ahora!

  Ellos se encontraban fuera del lugar donde nos estábamos, pero por sus rostros entendía que podría ser algo malo.

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  Una vez que habíamos salido de la guarida de los peleadores, nos habíamos acercado hacia donde se encontraban los demás peleadores y una vez que había apartado la mirada de ellos, mi sorpresa había aumentado debido a la presencia de una fémina que un día anterior quería llevarse la llave que tengo en mis manos.

  Dos de sus ex compañeras estaban sosteniendola para que ella no cayera al suelo, Sellon estaba en su forma humana y en muy malas condiciones como si le faltará energía para continuar.

— Sellon— murmuré en voz baja, la mencionada estaba junto a sus ex secuaces.

— Oigan ¿Por qué la trajeron hasta aquí?— cuestionó Marucho para colocarse frente a nosotros—. Saben que ella no es bienvenida por lo que ha hecho.

— Ustedes son los que no comprenden la situación— expusó Greten, quien se mantuvo frente a Sellon.

— La señorita Sellon ahora está de nuestro lado— resumió la de cabellos castaños, Chris.

— ¿Acaso es una broma?— cuestionó Dan de mala manera—. No se si ustedes recuerdan que ella nos intento aniquilar con sus Bakugan caos.

  Con una mirada le había pedido a Dan que estuviera sus palabras, en parte sabía que era cierto lo que Dan decía al respecto acerca de Sellon. Ella es una mala persona que intento atentar contra la vida de los demás a costa de la llave y puerta que Dren y yo teníamos a nuestros poder.

— ¿Cómo es que sabes eso Chris?— le pregunté a la fémina.

— Porque ella ha sido expulsada— respondió observando de reojo a su maestra—. Mag Mell estaba furioso con ella por haber perdido la batalla contra nosotros.

— La despojo de todos sus Bakugan y Mectogan— prosigue Soon—. Cuando estaba apunto de desecharla, la maestra Sellon utilizo todo lo que le quedaba de energía para liberarse y escapar de sus malignas garras.

— Solo que el tonto de Mag Mell no la dejaría ir tan fácilmente— terminó Greten—. Envío a Spyron a cazarla y destruirla, de no haber sido por nosotras se que el hubiera cumplido con su misión.

— Por favor peleadores, no les pediríamos su ayuda si no la necesitaríamos— pidió Chris, esperando un poco de empatía por parte de los demás.

  Después de todo lo que hacía hecho Sellon no era nuestra culpa el desconfiar plenamente en ella, las cosas son así.

— Están muy equivocadas si creen que nos vamos a creer ese cuento— Paige se cruzó de brazos con indiferencia—. Después de todo lo que ha hecho, no merece nuestra ayuda.

— Eso es completamente cierto chicas— agregó Dan—. No podemos confiar en alguien que nos ha hecho mucho daño.

— En especial si es está bruja— finalizó Paige.

— ¿Qué estás diciendo?— Soon se levantó con rapidez tras escuchar aquellas palabras.

— Ya me escuchaste niña— se mantuvo Paige—. No hace falta que lo repita.

— Hay que tranquilizarnos— me había acercado hasta quedar en medio de ambas, lo que menos podíamos hacer ahora era tener una discusión por ello.

— No queremos pelear con ustedes, pero no sabemos que más hacer— explicó Chris observando a Sellon de reojo—. La maestra Sellon, no tiene a dónde ir ¿Nos ayudarían? Por favor.

  Debía de admitir que ellas estaban sumamente preocupadas por su maestra, pero no podíamos aceptarlas por lo que había sucedido. Sellon no había hecho otra cosa más que intentar acabar con la vida de sus compañeras, e intentar tomar la llave que tenía en mis manos.

— No— respondió alguien más llegando al lugar—. Ella es el enemigo.

— Pero Shun...

— Sin peros— él antes mencionado había interrumpido a Marucho, colocándose frente a nosotros—. Ella es una malvada.

— ¡Por favor!— exclamó Chris—. Ella ya dejó de ser quien era antes, les prometo que ella ya cambió.

— ¡No pueden dejarla atrás!— exclamó Greten acercándose a él—. ¿Por qué eres tan malo?

— Ustedes no lo entienden, ella es nuestra luz— murmuró Chris bajando la mirada—. Tomo a unas peleadoras de segunda clase y nos hizo campeonas, le debemos todo.

— ¿Acaso no pueden encontrar en sus corazones el perdón?— cuestionó Soon, tratando de convencernos.

— Deshaganse de ella, o ustedes también estarán por su cuenta— Shun mantenía el ceño fruncido, sus nudillos estaban presionados.

— Espera— formulé llamando su atención.

  Cuando estaba a punto de pronunciar algo al respecto Sellon se había levantado rápidamente, cambiando su forma humana por su forma de Neathia artificial y atacando un edificio el cual estaba tras nosotros, de esa manera ella había encontrado a un Bakugan caos escondido en aquel edificio.

  Una vez que me había preparado para lanzar a Dren, Shun ya había lanzado a su Bakugan Taylean, activando varias cartas de poder para terminar de una vez por todas con aquel Bakugan caos. Aunque para su lamentable suerte esto no había pasado ya que parecia no afectarle al Bakugan caos, hasta que Sellon le había dicho donde atacar. Cuando descubrieron la debilidad del Bakugan caos, finalmente Shun había logrado terminar con el.

— Fui de esa manera porque soy una forma artificial de vida creada por el maestro MagMell— murmuró Sellon, recuperando su forma humana—. En el momento en que mi vida ya no le fuera útil, se acabaría, pero cuando llegó el momento no quería permitir que me alejará.

— ¿Qué podemos hacer?— preguntó Marucho, cuando estaba apunto de opinar el reloj de Marucho comenzó a sonar—. Se avecinan muchos Bakugan caos.

— Es hora de un contraataque— anunció Dan observando de reojo a Rafe y a Paige—. Andando chicos.

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— Los Bakugan caos se intentan acercar a la base donde los demás peleadores se esconden— expusó Marucho con gran preocupación.

  Se que con Shun y Marucho la base estaría protegida, así que me había levantado para dirigirme hacia aquel punto. Debíamos de evitar a toda costa que esos Bakugan se acercaran allí, después de todo esos peleadores no tenían a ningún Bakugan para protegerse de los enemigos.

— Yo iré— afirmó Shun.

— Espera yo iba a...— el de cabellos negros me interrumpió.

— No hay tiempo— aseguró dirigiéndose hacia la salida de la guarida.

  Desde la última vez de lo que había ocurrido entre nosotros no había tenido otra oportunidad para hablar a solas con Shun, se que ambos lo necesitamos después de todo lo que habíamos tenido que pasar. Después de todo ya habíamos tenido mucho tiempo juntos, yo aún seguía guardando mis sentimientos hacia él y no se si él también.

— ¿Esta todo bien (T/N)?— la pregunta de Marucho me había sacado de mis pensamientos.

— Si— respondí algo desconcertada—. No hay nada de que preocuparse.

— Está bien— Marucho comenzó a teclear en la pantalla hasta encontrar una pequeña transmisión—. ¿Qué es esto?

  El rubio abrió la transmisión encontrando la imagen de las féminas que estaban en la misma habitación que Sellon, Shun las había puesto a las cuatro en una habitación resguardada para que ellas no hicieran nada sospechoso.

— ¡Necesitamos que (T/N) vengan aquí!— exclamó Soon acercándose a la cámara frente.

  Observo a Marucho con gran confusión, esto tenía que ser una broma.

— Es urgente— formuló Greten.

— La señorita Sellon quiere hablar contigo acerca de MagMell— explicó Chris.

— ¿Acerca de MagMell?— pregunte con confusión—. ¿Están seguras?

— Por favor— pidió Greten—. Es urgente, no le queda mucho tiempo.

   Las jóvenes habían terminado la transmisión luego de ello, un mal sabor de boca fue lo único que habían conseguido de mi.

— ¿Irás?— preguntó Marucho.

  No sabía si lo que estaban diciendo era del todo cierto ya que Sellon no era una persona confiable, pero de igual forma si ella tenía información de MagMell me serviría de mucha ayuda.

— Si— me dirigí hacia la salida—. No tardaré.

  Comencé a caminar a paso lento en dirección hacia donde se encontraba Sellon, bajé la mirada observando como es que mis pies avanzaban un paso más, tenía que intentar saber mas.

— ¿Estás segura de esto?— preguntó Dren sobre mi hombro—. Podemos regresar.

— Ahora mismo si quisiera saber mas de MagMell, entiendo que pueda ser una trampa pero me arriesgaré— formulé una vez que estaba frente a la puerta de la habitación donde estaba ella—. Si sucede algo malo, quiero que vayas a pedir ayuda.

  Lamentablemente en la última batalla que habíamos tenido contra MagMell, Dren había perdido la puerta y ahora solo nos quedaba la llave. Una vez que presione el botón para entrar a la habitación, lo primero que había observado era el cuerpo de Sellon en el suelo, cosa que me había alertado.

— ¡Sellon! ¿Estás bien?— me acerqué al cuerpo de la fémina.

— ¿(T/N)?— cuestionó con la voz débil—. De verdad que eres una idiota.

  Aquellas palabras me sorprendieron y antes de que me diera cuenta había logrado retroceder, Sellon había cambiado de apariencia a la de un Neathiano artificial.

— ¡Ahora dame la llave!— exclamó alzando su mano, en el cual comenzaban a aparecer ciertas chispas.

— Sobre mi cadáver— presioné mis dientes ante cada palabra.

— Entonces será sencillo— admitió con una sonrisa.

  Estaba por darle una patada en las costillas, solo que ella comenzó por atacarme con sus rayos que aparecieron de sus manos. Aquello provocó que perdiera el equilibrio y cayera al suelo con ella sobre mi.

— ¡Dame la maldita llave!— exclamó cambiando su rostro a uno más tétrico.

— ¡Jamás!

  Estaba sosteniendo sus manos alejando los rayos que estaban cerca de mi, pero sabía que en cualquier momento ella podía lanzar un rayo a mi rostro lo cual sería aún más peligroso.

— ¡(T/N)!— la voz de Dren me había desconcentrado.

— ¡Vete Dren!— giré la mirada hacia la Bakugan, lamentablemente para mí eso había sido muy descuidado.

  Lo que sentí después fue una carga de energía en mi cadera, lo que provocó que cerrará por completo mis ojos.