Unos hombres me tomaron de los hombros y me hicieron retroceder, trato de voltear para ver sus rostros pero no puedo. Atan mis brazos fuertemente y luego mis piernas, colocan una venda en mis ojos y reacciono. 

  — Nicolai  — Grite

Comencé a moverme tratando de zafarme del agarre de estos hombres, pero mientras más lo intentaba, más me dolía, el amarre me hacia daño. 

  — Nicolai, Alessandro  — Grite

Una y otra vez, gritaba sus hombres... Trataron de poner una venda en mi boca pero no lo permití, cerré mi boca con todas mis fuerzas, pero me hacían daño.

  — Abre la boca  — Grito un hombre

  — Auxilio — Solloce

Al abrir mi boca consiguieron atar la venda, no podía hablar, solo balbuceaba. Me subieron a una camioneta blindada, en el asiento trasero y me acostaron para que no viera el camino, pero era imposible que lo viera... tengo una venda.

Trataba de sentarme pero no podía. Escuche risas... ¿Qué se les hace tan gracioso? 

Papá me matará... si es que estos tipos no lo hacen primero. 

Al parecer el auto se ha detenido. Segundos después escuche las puertas abrirse y cerrarse. Minutos después me senté y pase mis brazos por debajo de mis piernas, ahora tenía mis manos al frente y no en mi espalda. Subí mis manos esta la venda de mis manos y la quite, al igual que la de mis ojos. ¿qué es este lugar? Me parece conocido.

Trate de abrir la puerta y una alarma se reprodujo ¿Es en serio? 

Unos tipos se acercaron al auto y abrieron la puerta, uno de ellos me subió sobre su hombro y comencé a golpearlo, lo cual, es bastante difícil.

  — ¿Quienes son ustedes?  — Grite

Pero me ignoraron.

Me tiro al piso, ¿Qué es esto? Parece... tierra y piedras.

  —  Yo no soy a quien quieren — Solloce

  —  ¿Ah si? — Pregunto un hombre a mis espaldas—  Porque estoy más que seguro que quiero a mi hija, tú eres mi hija — Admitió 

Di vuelta como pude y me encontré con Papá.  

¡PAPÁ! es él, de verdad es él. No estoy en peligro... NO ESTOY EN PELIGRO ¿Qué fue todo esto?

  — Papá, ¿Qué es esto?  — Solloce

  — Es una demostración  — Admitió— Así sería constantemente tu vida si alguien más se entera de que eres mi hija. 

¿Tan mal es? 

  — ¿Quieres darte a conocer como mi hija?  — pregunto y negué con la cabeza

  — Sí... no estás lista  — Sonrió

  — ¿Hiciste todo esto para que... me diera cuenta del riesgo que sufriría?  — Pregunte

  — Sí, y... lo siento, debía hacerlo, eres bastante testaruda y... algo estúpida ahora que lo veo  — Sonrió 

  — ¿Y si un día me secuestran de verdad? ¿Qué debo pensar? ¿Como sabre si es real o si eres tu gastándome una broma? — Pregunte

  — No volveré a hacerlo. Así que si vuelve a pasarte se más inteligente y corre porque aún no sabemos si estamos a salvo. 

  — ¿Quienes son estos tipos? ¿Dónde están los chicos?  —Pregunte

  — Ellos trabajan para mi y no tengo idea de donde estén tus hermanos, en el club tal vez  — Respondió

No puedo creer que mi Padre haya planeado todo esto solo para ¡esto! es estúpido.

  — Los chicos deben estar preocupados  — Susurre

  — Y ebrios  — Opino — Los llamaré y les diré que volviste a casa.

1:53 am

No pude dormir.

Baje a la cocina por agua y mis padres estaban ahí.

 — ¿Qué hacen aquí? — Pregunte

  — Llame a Loretta hace unas horas para preguntarle si los chicos se habían quedado a dormir allá, pero dijo que solo Alexai había llegado.

Los chicos deben seguir en el club... no me preocupo por ellos.

— Deben seguir en el club — Opine

— Ese club cierra a la una de la madrugada, ya casi son las dos —Dijo Papá

— Bueno, debe haber una explicación — Opine— ¿No me estarán gastando una broma o si? — Pregunte

— ¿Como puedes pensar eso? — Pregunto mamá

— Púes Papá me secuestro a mi hace unas horas — Admití— ¿qué esperas que crea? — Pregunte

— ¿Como tu padre te secuestraría? — Pregunto Mamá

Volteo a ver a Papá y el solo bajo la vista algo nervioso. Mamá no lo sabía.

— Era para darle una lección, invente el secuestro — Admitió

— ¿Una lección? — Pregunto Mamá— Hay muchas maneras de dar una lección — Grito

— Púes sí, pero ya esta hecho. Ahora en lo que estábamos — Opino Papá

— Esto nunca había pasado Rafe, siempre volvían al rededor de las once —Opino mamá

Rhett, uno de los hombres de papá apareció de la nada. Algo asustado a decir verdad.

— Señor, alguien quiere verlo — Informo

— Sí, y tú y yo hablaremos luego — Le dijo Mamá a Rhett

Oh Dios, ¿Será porque les ha estado ocultando mis faltas a clase? Lo que menos quiero es que quien salga mal de todo esto sea él... todo es mi culpa.

— Claro señora — Dijo y sin más, se retiro

— ¿Quien podrá ser a estas horas? — Pregunto Papá saliendo de la cocina

Así que lo seguí.

— No, tú te quedas aquí — Ordeno

— Ve con Rhett, que te oculte hasta que sepamos quien es y que estas a salvo — Ordeno Mamá

Bufe y salí de la cocina hacía las escaleras, subí por el lado izquierdo mientras mis padres seguían su camino al living para encontrarse con ese ''Alguien''

Ellos no vendrían hacía las escaleras, así que me senté en uno de los escalones de arriba para que no me pudieran ver y así escuchar la conversación.

¿Qué conveniente no? Mis hermanos ''desaparecidos'' y yo aquí escuchando la conversación de mis padres con ese extraño. ¡Ayudaré mucho entonces!

— ¿Como conseguiste mi ubicación? — Pregunto papá

— Vengo por venganza — Respondió

Se escucharon pasos fuertes que provenían de abajo, se escucharon varios sonido que no pude distinguir, pero se como se escucha un arma siendo cargada y esas, fueron varias.

— No querrás que tus hombres sigan apuntándome, a menos de que quieras que se desate la próxima guerra mundial — Opino burlesco

Más pasos, muchos más que los anteriores, y muchísimas armas siendo cargadas de nuevo.

— ¿Qué esta pasando aquí? — Susurre

Claro, nadie puede oírme.

— ¿Qué es lo que quieres Santos? — Pregunto Papá

— Verte sufrir un rato — Admitió

— ¿Y como harás eso? — Pregunto papá con un tono burlesco— Nada me afecta. 

— Rafe, Rafe... no pude con tu bella esposa ,pero tus hijos son bastante idiotas, no parecen hijos suyos.  

Él tiene a los chicos.

— ¿De qué hablas? — Pregunto Papá— Tatianna y yo no tuvimos hijos — Mintió

— Se que solo uno murió, pero los otros dos sobrevivieron — Grito

Un par de pasos se escucharon venir hacía las escaleras desde el living, subí con cuidado un par de escalones más para que no me vieran.

Por el barandal pude ver a Mamá y a Papá con ese hombre. Mamá parece asustada pero Papá se mantiene firme.

— A quien no tengo es a tú hija — admitió

— Todos murieron Matt, y no tuvimos una hija  — Grito Papá

— ¿Entonces quien es la chica en las escaleras? — Pregunto señalando hacía mi

No, no, no...

Papá dirigió su mirada hacía las escaleras y me diviso. Me fulmino con la mirada y volvió a dirigirse a... Matt.

— No es mía — Mintió

— ¿Entonces por qué tiene tu apellido? ¿Por qué se parece tanto a ti y a Tatianna? — Pregunto Matt

— Mira imbécil, regresáme a mis hijos ahora mismo o de aquí no sales vivo — Amenazo Papá

— Debo estar seguro de que son tuyos primero — Sonrió

Unos hombres se acercaron con un chico ,al que traen agarrado de los hombros. Lo arrodillaron y quitaron la venda en su rostro.

Nicolai. Esta bien, él esta bien. Matt arreglo la manga de su traje y se situó frente a Nicolai

¿Qué le va a hacer?

— ¿Es tuyo? —Pregunto

Pero Papá no contesto. Es obvio, si le dice que si podría atarlo, y si le dice que no también.

Matt golpeo a Nico en la mandíbula y él jadeo. Mamá soltó un sollozo pero rápidamente recupero la compostura.

Lo golpeo una y otra vez, pero nunca salto ni una gota de sangre, estaba... como si no le hubiesen hecho nada.

— Es idéntico a ti — opino Matt

Lo tiraron a las pies de Mamá y ella se arrodillo para abrazarlo.