Félix

El viaje no se sintió pesado teniendo a mis amigos cerca, Minho y Jisung no dejaban de meterse mano mientras Sunno y yo jugábamos cartas como si eso fuera lo más interesante del mundo.

La parejita se quedó en habitación de hotel con la escusa que no había mucho espacio en mi dormitorio para ellos, mentira, solo quería irse a coger así que Sunno se va a quedar conmigo en mi dormitorio y así está como apoyo moral mientras yo hablaba con el director.

Este hombre canoso que es muy conservador solo me dijo que ya todo estaba aclarado que la universidad no tenía ningún inconveniente conmigo que solo debía tener más cuidado la próxima vez para no involucrar en situaciones así.

— ¿Qué te dijeron? — pregunto Sunno de inmediato al verme.

No me hizo caso me estaba esperando a fuera de la oficina del director.

— Nada realmente, todo está bien lo cual es raro porque ese hombre es muy anticuado — varias veces había soltado comentarios homofóbicos y machista pensé que me iba a sacar de la universidad o algo — Pero bueno mejor así, aprovechemos que la universidad está sola y te la muestro — dije con emoción.

Ya me sentía un poco mejor, pero aún mi pecho dolía, mucho. Arrastré a Sunno a las canchas de fútbol las cuales tenían a su alrededor las mejores vistas.

— Este lugar es más grande que mi universidad — exclamó Sunno sorprendido.

Sí que lo era, está universidad es muy prestigiosa gracias a qué familias de mucho dinero donan mucho dinero para la infraestructura.

— Ven aquí — dije mientras le pedía que se subiera a la famosa roca del campus.

Aquella extraña roca gigante en forma de cuadrado te permitía ver la universidad en una perspectiva inigualable.

— Nos vamos a caer — dijo Sunno entre risas a lo que yo negué y me agarre a su cintura — Si alguien nos ve así pensará que somos novios o algo así — la voz del pelirrojo temblaba.

Estaba nervioso y eso solo lo puede lograr muy pocas personas.

— Sería un halago mira que alguien feo como tú este conmigo que soy un monumento digno de admirar — dije con tono engreído.

Nuestros cuerpos estaban pegados, las manos de Sunno quitaron mis manos de su cintura y la colocaron en su cuello.

— Es al revés, sabes muchos se mueren por tenerme un centímetro cerca — me guiño el ojo.

Me acerqué a un más a su rostro tratando de intimidarlo y si lo logré porque sus mejillas estaban rojas.

— Acéptalo que te mueres por mí — susurré bromeando.

Sunno iba a decir algo, pero un sonido debajo de nosotros nos alertó.

— ¿Muy ocupado Sr. Lee? — conozco muy bien esa voz.

Me estremecí y sentí que mi cuerpo comenzaba a temblar, el pelirrojo a mi lado me miró preocupado, pero no dijo nada solo me ayudó a bajar de la roca para verle la cara a Hwang Hyunjin.

— Un poco Sr. Hwang, si me disculpa tengo que regresar a mi dormitorio vamos Sunno — dije tratando de no mirarlo.

Vamos Félix tú puede no te derrumbes.

— Tenemos que hablar — dijo en aquel tono exigente que acostumbra a utilizar.

Sunno me miró y luego miro al hombre con traje, agarró mi mano casi pareciendo que me estaba dando ánimo.

— Sunno espérame en el dormitorio — le pedí a lo que este estuvo a punto de negarse, pero se resignó al ver mi insistencia — Tranquilo solo es una charla de maestro a estudiante — aclare.

El pelirrojo asintió con duda y se retiró dejándome sola con aquel hombre que ha causado tanto caos.

— Hablé con el rector no te tienes que preocupar por eso — fue lo primero que dijo.

No me sorprende me imagino que resolviste todo con tu dinero, me siento enojado porque ahora tengo claro todo yo nunca signifique nada solo fue parte de plan ahora que ya tienes los he quieres y yo no importo.

— ¿Crees que con eso se resolvió todo? — me reí con falsedad — Mis padres no me quieren ver, no puedo ni pisar ni mi propia casa por esto, tú vuelves a tu vida perfecta mientras yo recibo toda la mierda — exclamé con enfado.

Yo soy el que la está pasando mal, de mí es quien se habla no de ti cuando los dos guiamos parte de esto.

— ¿Por qué te enojas conmigo Lee? Estoy tratando de ayudar... — lo interrumpí.

— Ahora eres el bueno de la historia no me hagas reír, solo quieres quitarte un poco de culpa por todo lo hiciste, ojalá nunca hubiese aceptado ese absurdo trato — tal vez una expulsión de esta universidad hubiese sido mejor.

Se intentó acerca a mí y de inmediato me aleje no quiero que me toque.

— Cálmate puede que alguien te vea así y malentienda la situación — dijo nervioso.

Pudrete Hwang Hyunjin.

— Eso es lo único que te importa a ti, la puta imagen ¿De qué tienes miedo? Que todos se enteren de que te acostaste conmigo — expuse con enfado — Tú resuelves todo con dinero así que dudo que puedas salir mal de esta situación, pero en cambio mírame a mí, me enamore de ti y tú solo me usaste — estaba enojado pero sobre todo decepcionado.

— Perdón — fue lo único que salió de sus labios.

Soy un imbécil siempre término enamorándome de las personas equivocadas, pero esta vez no voy a derrumbarme ya no más.

— Ahórrate eso, olvidaré lo que pasó así como tú lo hiciste, no le diré a nadie lo que pasó así que no te preocupes tu imagen no se dañara — dije muy decidido, acabaría esto ahora y no miraré atrás — En dos semanas nos veremos y volverá hacer los mismos de siempre, yo solo seré un estudiante más y tú un profesor más no me volveré a involucrar en tu vida ni a mendigar por amor porque tengo claro que el único desviado aquí soy yo — exclamé.

Este estaba sorprendido ante mi actitud, pero no lo deje decir más nada.

— No lo volveré a molestar Sr. Hwang — dije decido.

Me fui de ahí tratando de parecer seguro, pero apenas llegué a mi dormitorio me tiré en los brazos de Sunno a llorar porque a quien engaño aún me duele sentir amor por él.

4/5