42 - No le perteneces a nadie ni siquiera a tus padres

Momo

Desde pequeña mi madre siempre trato de enseñarme como ser una buena mujer para que mi futuro esposo no tuviera quejas de mí, aunque tuviera hermanos que podía ayudar yo era la que única mujer y por lo tanto tenía que limpiar y atender a los hombres de la casa.

No importa los empleados, yo tengo que ser "una buena mujer" porque mi padre no duda en golpearme si no estoy de acuerdo con sus creencias, al principio no me molestaba hacer lo que ellos querían, pero cuando conocí a Yuna, ella fue la primera niña que me hizo ver las cosas de otra manera porque su familia nunca fue como la de Hyunjin y la mía, ella no tenía el futuro escrito y mucho menos sus padres la controlaban.

Se vestía como quisiera, no tenía que atender a nadie solo vivir de la forma que ella quería porque sus padres la apoyaban en todas sus decisiones, al principio envidie su libertad porque quería tener su vida, pero luego nos convertimos en las mejores amigas.

"No le perteneces a nadie ni siguiera a tus padres" me decía Yuna siempre, ella siempre me dio fuerza me decía que algún día ella me iba a sacar de esta casa para qué se acabará mi sufrimiento.

Éramos los tres contra al mundo hasta que los padres de Hyunjin descubrieron que él tenía un noviazgo con Yuna, ellos nunca apoyaron nuestra amistad porque decían ella no era como nosotros, para ellos Yuna era una "desviada" al igual que sus padres ¿Por qué odiaban tanto la idea de que Yuna fuera la hija adoptiva de dos hombres? Esa era lo que siempre me preguntaba, me aprecia absurdo todo eso porque ellos no eran malas personas y mucho menos eran unos pecadores solo eran dos personas que luchaban en un mundo tan homofóbico.

Hice cosas de las que me arrepiento, Hyunjin y yo nos dejamos llevar por nuestros padres por temor a los que nos podía pasar porque después de todo solo éramos niños que dependían del dinero de los demás, comenzamos a tratar mal a Yuna para evitar un golpe en casa o un castigo, fue difícil realmente difícil.

Destruimos a Yuna hasta el punto que se deprimió, las drogas fue el primer paso y luego una sobredosis acabo con ella, Hyunjin y yo somos los culpables.

Connor siempre tuvo la razón, nos convertimos en nuestros padres, fuimos crueles con ella porque solo pensábamos en nosotros.

— Lo siento Yuna, nunca me perdonaré lo que te hicimos por eso quiero alejarme de mis padres porque tengo miedo que un día me levanté y me vuelva como ellos — susurré antes de dejar las flores en la tumba de la única chica que he amado en mi vida.

No solo fuiste el primer amor de Hyunjin, también fuiste el mío.

Félix

Me siento mal por lo que le dije a Jisung, dije cosas que no debía cuando él siempre me ha apoyado en todas mis decisiones, quiero llamarlo y pedirle perdón, pero ¿Por qué soy yo él que tiene que hacerlo? El también se equivocó.

— Perdón — se disculpó Eunchae.

La miré sin entender, está se colocó enfrente de mí y tomo aire antes de hablar.

— Ayer actué raro cuando tú no me hiciste nada malo — dijo avergonzada.

Es una niña y es injusto que alguien tan inocente tenga que pasar por todo esto.

— No tienes que disculparte Eunchae, no actuaste rara ni nada parecido solo necesitas tiempo para confiar en los demás — le expliqué.

Cuando viví aquel insistente horrible era difícil no temblar y llorar hasta bañarme me daba ansiedad, si no fuera por Sunno no sé que hubiese sido de mí, él tuvo paciencia conmigo e hizo tantas cosas que sin darme cuenta ya no tenía miedo. Aunque a veces todos podemos derrumbarnos con facilidad, no somos indestructibles.

— Es verdad lo que dice Giselle eres buena persona, me alegra que mi príncipe se junte con personas como Momo y como tú — me confesó.

Esta niña es una ternura, hasta ganas de tener una hermanita me dieron, con sus hoyuelos en las mejillas logra que te sientas tranquilo.

— Gracias por el cumplido — agradecí.

La niña se quedó pensativa por unos minutos antes de decir algo.

— Quiero pintar ¿Me ayudas? — pregunto.

Asentí de inmediato me estaba aburriendo y estresando yo solo estando sin hacer nada.

Cuando me preguntó si la podía ayudar nunca pensé que iba a ser modelo de su pintura, no pude evitar reírme cuando vi que Eunchae se colocaba un gorro que lograba darle un look relativamente retro.

— Espero que sepas hacer magia ¿Podrías hacerme más bonito? Tengo los ojos muy pequeños y mis labios muy delgados — pedí.

La niña comenzó a reírse ante mi comentario, me alegraba que aún podía sonreír.

— Recuerda que tiene 11 años si quieres un milagro ve a dónde un cirujano — se burló
Hyunjin.

Lo mire mal, pero no de inmediato cambie mi expresión cuando Eunchae me regaño por moverme.

— Solo sé que no iré al que te hizo tus arreglos porque sigues igual de feo — lo provoque.

Está claro que este tipo no tiene nada de feo, pero no puedo aceptarlo.

— Mi príncipe es perfecto no necesita de esas cosas — Eunchae defendió a Hyunjin.

Primos tenían que ser.

— Déjalo Eunchae, él solo está celoso porque no es tan bello — dijo aquel hombre de ojos azules mientras me sacaba la lengua.

No solo te atreves a dejarme con las ganas, ahora te atreves a avergonzarme delante de una niña.

— No peleen los dos pueden ser príncipes — exclamó Eunchae antes de agarrar a Hyunjin del
brazo para qué se sentará a mi lado.

Un rey mejor, esto de príncipe me hace recordar a los cuentos de hadas cliché.

— ¿Y tú eres nuestra princesa? — pregunté.

La niña negó de inmediato y saco una corona de quién sabe dónde y me la entregó.

— No todos los príncipes buscan a una princesa, así que los dos pueden ser los protagonistas de la historia y yo seré la malvada reina, pero sobre toda hermosa — exclamó está con orgullo.

Parece que esta niña entiende más que su propio primo y eso que tan solo tiene 11 años.

— Deberías ser como Eunchae — golpe el hombro de Hyunjin.

Él sonrió y me quitó la corona de la mano para colocármela.

— ¿Quieres ser mi príncipe? — me preguntó mientras se arrodillaba.

En ese preciso momento Eunchae grito con emoción lo cual nos asustó a ambos.

— Es que se ven muy lindos, lo siento — se disculpó la niña.

Ya quisiera yo que esto no fuera un siempre juego, quiero ser tu príncipe Hwang Hyunjin y no importa tener que ir en contra de todos para defenderte.

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