¡Cuidado! ¡Episodio atroz!

Candies : ☠Mikey☠

-Mmh, mmh, mmh, mmh.

Parecía que Mikey había perdido la capacidad del habla y, posado en el suelo tembloroso, lo único que hacía era balancearse hacia delante y hacia atrás. Ya no estaba bajo control de April.
El ente volvía a pensar la forma en la que acabaría, esta vez, con esta tortuga. Pero la consciencia de April ya no podía aflorar como antes, y cada vez era más arrinconada. Puede que con cada muerte conseguida, el ente obtenga más poder. Tal que así, que April ya era solo una carcasa.

-Gominolas...pizza...

El huésped estaba leyendo en la memoria y conocimiento de April la información de Mikey y se le ocurrió por fin qué hacer con él.
Lo hizo tumbar en el suelo boca arriba en forma de estrella, entre el gran charco de sangre de su hermano después de que le fueran extirpadas todas las extremidades. Y aunque no estuviera controlado, el joven mutante no habría puesto resistencia, pues ya solo era un pobre tipo delirante.
Después, dirigió a April para que bajara del aire y se posara en el suelo entre las piernas del mutante. La chica se arrodilló y empezó a acariciar la capa de caparazón situada justo en la entrepierna. También sus muslos próximos a ella.

La consciencia desterrada de April, sin entender nada y totalmente desesperada, lloraba por hacer lo que había hecho, por hacer lo que estaba haciendo y por hacer lo que haría.

Al rato, la reacción del cuerpo de Mikey ante el gesto se hizo presente, y su miembro de tan solo 15 años, se dejó ver en una erección.

-Chucheeeees...

April ya no prestaba atención a Mikey y buscaba con la mirada algo en el laboratorio.

-Ahí.

Alzó una mano y atrajo un bote de pastillas que Donatello usaba para experimentar.

-Chuches...

-Chuches...

Con el bote flotando en el aire, volvió a las andadas con Mikey, y rozó su lengua por la punta de su miembro durante poco más de un minuto. El mutante estaba en éxtasis, pero el verdadero Mikey hacia rato que se había ido después de padecer tanto. Había sufrido un shock traumático muy severo. ¡Qué demonios, después del festival de horror que ha tenido que presenciar!
Ahora solo quedaba de él sus sentidos del tacto, el gusto y el olfato. Aunque podía ver, ya no sabía ni qué miraba. Aunque podía oír, era como, después de los chillidos de su hermano, no captara ningún sonido. Su mente no estaba clara ni era coherente. Ya solo era...Un mutante en delirio.

Un mutante en delirio que gozaba con el tacto de April, quien antes había sido su amiga y hermana, hasta el punto de soltar unos gemidos. No acostumbrado a ello, pronto se corrió. Manchó un poco el rostro de la chica.
Fue entonces cuando ella se apartó, de nuevo a flotar entre el techo y el suelo. Abrió el bote de pastillas que estaba levitando a su lado y su contenido empezó a hacerlo también. El vidrio no le servía, así que se estrelló contra el suelo, dejando solo las pastillas, de unos 4 centímetros cada una, en el aire.
Alzó un brazo. Una pastilla adoptó una posición vertical en dirección al miembro erecto de Mikey. Bajó el brazo. La pastilla ahora era un torpedo proyectado hacia...aquel orificio.

-¡Aaahh!- gritó Mikey. No es para menos, pues la pastilla había entrado en su miembro muy rápido y fuerte, colándose muy hondo.

El bote contenía más de 500 pastillas.
Solo llevaba una.

Al cabo de un rato, debido a la enorme presión, el pene de Mikey se reventó en pedazos, en una explosión de sangre.
April no había parado de inyectarle dentro una tras otra. Aún quedaban pastillas, pero con 225 ya eran suficientes. Trozos de su miembro quedaron esparcidos hasta por la pared. April rio.

-Chuches...más chuches...

April alzó un brazo. Una pastilla adoptó una posición vertical en dirección al rostro de Mikey. Bajó el brazo. La pastilla ahora era un torpedo proyectado hacia...el orificio de la nariz de Mikey.

Se le coló tan fuerte, que le llegó al cerebro, y si Mikey ya estaba suficientemente tocado psicológicamente y mentalmente, ya no habría nada que lo salvase.
Y así, una tras otra, como antes, se le colaban en el cerebro hasta rebosarle por la nariz.
Los ojos de Mikey rodaban sin sentido, su cabeza igual. Sus labios estaban temblando, uno de sus dedos adoptó un tic nervioso, al igual que una de sus piernas.

-Me divierto...mucho...

April bajó de nuevo y se tumbó encima de él, quedando cara a cara. Empezó a besarlo, metiéndole la lengua en la boca. El mutante ya no mostraba respuesta alguna. Seguía desangrándose por la parte inferior.
Después de besarlo, se retiró flotando en la misma posición pocos centímetros encima de él, y se concentró en la lengua. Con su fuerza mental, tiró de ella y se la arrancó de cuajo, decorando el panorama con otra explosión carmesí que hasta a ella le salpicó en el rostro.

Esto ya era demasiado para todo lo que había pasado Mikey. Desde el primer encuentro con el rostro de su hermano Raphael desprovisto de ojos, hasta las pastillas en el cerebro. Su cuerpo y mente ya no podían más. Su corazón reaccionó a todo, acabando con su vida.

Ésto el ente no se lo esperaba, le hubiera gustado seguir jugando con él.

April dirigió su mirada a la puerta.

-Lo he pasado muy bien aquí...Fuera lo pasaré mejor...