Capítulo veintisiete: Países nórdicos.
Min Yoongi.
Oficialmente habíamos cumplido seis días en un país completamente desconocido y para nuestra mala suerte, estaba repleto de infectados bastante horribles físicamente y por, sobre todo, demasiado hambrientos. Comenzaba a pensar en cambiarles el nombre, pues ya parecían más muertos que otra cosa y desprendían un asqueroso olor a putrefacción que me daba repulsión cada que estaban cerca de mí y tristemente, podría caminar kilómetros y aun así el olor estaría ahí en el aire para molestarme.
Oslo era una ciudad bastante grande en Noruega y por lo tanto el refugio del que tanto nos hablaron parecía estar desparecido de la faz de la tierra, ya que según por lo que Alfred nos había dicho que tenía enormes muros, sin embargo, ni siquiera desde el Jet logramos verlos.
Hoy era veinte de diciembre. ¿Cómo lo sabía? Jin era quien nos lo había dicho. Desde que comenzó el apocalipsis había estado llevando la cuenta de los días para "no volverse loco" y saber cuándo terminaría el año. Porque sí, estábamos a once días del 2020 y los malditos científicos aún no podían encontrar un cura para esto.
—¿Tienes frío, Jimin? —Preguntó Jin, quien se encontraba a mi lado tratando de calentarse las manos con la pequeña fogata que habíamos hecho en nuestro refugio improvisado, que se basaba de un local pequeño con las entradas bloqueadas por los muebles y la puerta trasera sin ningún obstáculo por si teníamos que salir corriendo.
El jodido frío aquí en Noruega era extremo, allá en Corea las nevadas no podían compararse con las de aquí, que parecían querer matarnos a cada minutos que las oleadas del frío y las montañas de nieve que te impedían salir del lugar donde te encontrases.
—No, no tengo frío. —Contestó Jimin con seriedad, sin siquiera levantar la cara. Él se encontraba a un par de metros lejos de nosotros, envuelto en una enorme cobija de lana y sentado con la espalda recargada en la pared. Desde que habíamos bajado del Jet no volvió a cruzar ni una sola plática con nosotros, solo comía y decía palabras básicas como "gracias", "no quiero", "sí" y "no".
—Bueno, si tienes frío puedo darte mi cobija, ¿Sí? —Volvió a decir Jin con notable preocupación, pero Jimin solo asintió metiendo su cara en el espacio entre sus piernas y su cobija sin decir absolutamente nada.
Por suerte Jiminie se había estado recuperando lentamente estos días. Sus heridas habían comenzado a cerrarse, ya podía caminar con normalidad y correr un poco más rápido, aunque por tiempo limitados. También los moretones en su cuerpo ahora sólo eran de un color verde pálido y su ojo derecho ya no estaba hinchado por los golpes al igual que su labio inferior ya se encontraba con una pequeña cicatriz.
Jin nos había dicho que esperaba que sus heridas desaparecieran en dos semanas a los mucho y que las más profundas, ya estarían cerradas en su mayoría. Pero aún así, todos estábamos al tanto de su salud y recuperación para que ninguna de sus heridas se le volvieran a infectar o el peor de los casos, a que se le fueran a abrir de nuevo.
—¿Cuánta comida nos queda? —Pregunté mirando la pequeña flama frente a mí.
—Creo que para dos días...Debemos seguir moviéndonos para encontrar el refugio —Dijo Taemin mientras frotaba sus manos entre sí para generarse calor —, estoy seguro que el refugio está cerca del bosque.
—¿Y si está en otra ciudad de Noruega? Será muy difícil ir hacia allá —Dijo Jungkook, quien tenía entre sus piernas a KyuHyun para darle un poco de calor.
—No hemos recorrido mucho desde que salimos del aeropuerto, sé que el refugio está aquí en Oslo —Continuó Jin mirándonos a todos —. Son las seis de la mañana, así que vamos a esperar a que salga un poco más de luz y saldremos de aquí para seguir moviéndonos al centro de la ciudad. Sé que no estamos muy lejos y vamos a encontrar el refugio.
—¿Al menos saben hablar inglés? —Preguntó Hoseok dejando de lado el cuchillo que estaba afilando entre sus manos —. No sabemos noruego, al menos para comunicarnos debemos saber inglés. Yo sé hablarlo, pero no sé ustedes.
—Yo sé hablarlo perfectamente —Dijo Taemin —, debía comunicarme en varios idiomas cuando estaba trabajando, así que sé hablarlo.
—Yo también sé hablarlo, mi empresa me obligó a aprender inglés para promocionar a los idols y mi trabajo como productor —Dije jugando con los extremos de mi cobija —, no es difícil para mí hablar en otro idioma.
—Yo sé hablar un poco... pero todavía me cuesta un poco. No terminé mi curso de inglés en la universidad —Dijo Jungkook con una mueca —, espero que no me hablen demasiado rápido o no entenderé nada.
Todos asintieron y nuestras miradas se dirigieron a Jin, quien estaba perdido viendo como el fuego de la fogata crecía y bajaba lentamente. Pero en cuanto sintió que lo observaban, levantó la cara y asintió.
—Sé hablar inglés, coreano y un poco de español. No será un problema comunicarme con la gente así que no se preocupen —Dijo con una sonrisa.
—A mí ni me pregunten, yo sólo sé hablar coreano —Dijo KyuHyun con una risita y todos le siguieron con risas en volumen bajo para no llamar la atención de lo que había afuera —, pero puedo hacer el intento de aprender si ustedes me enseñan.
—Entonces tenemos un peso menos. Sólo es de traducir lo que los noruegos nos digan a Jimin y a KyuHyun para que también entiendan de qué nos están hablando —Dije con una pequeña sonrisa y todos asintieron satisfechos.
—Entonces ya está, en cuanto salga un poco más de luz nos vamos de aquí para seguir nuestro camino, ¿Está bien? —Dijo Jin para después levantarse y comenzar a guardar sus cosas en su mochila. Todos parecieron entender e hicieron lo mismo con sus cosas, así que me levanté de mi lugar y para imitarlos.
Pero primero, mientras todos estaban en lo suyo, me acerqué a Jimin para poder ayudarlo. Él seguía en su misma posición, así que hinqué frente a ella y toqué suavemente su rodilla.
—¿Quién es? —Preguntó levantando la cara.
—Yoongi, hola —Dije con una pequeña sonrisa y él relajó su rostro, para después volverse a meter en su cobija —, debemos guardar nuestras cosas, ¿Quieres que te ayude?
—No saqué nada de mi mochila, así que no, gracias. —Dijo casi en un murmuro y suspiré.
—Hoy te irás conmigo, me toca cuidarte —Dije acariciando su mejilla pero él rápidamente se alejó —. Lo siento, ¿Te lastimé? —Pregunté preocupado y él negó.
—No me toques, por favor. Ya se los he dicho mil veces...no es contra ti, pero no quiero que lo hagan, me hace ponerme nervioso...
—Lo siento, yo...Prometo sólo tomar tu mano en el camino solamente, ¿Sí? —Jimin asintió quitándose la cobija de encima, para después apoyar sus manos en el suelo y levantarse lentamente, por lo que yo también lo imité y me levanté del lugar donde me encontraba. Observé que estaba buscando su mochila, así que la tomé y se la puse cerca de sus manos para que él la tomara y pudiera ponérsela con más facilidad.
—Gracias. —Dijo dándome la espalda para seguir haciendo sus cosas y yo sólo suspiré regresando a mi lugar para también comenzar a guardar mis cosas.
Jiminie, sé que te he hecho daño, pero quiero que me vuelvas a tener confianza...
Cuando salió la luz de entre las nubes grises, Jin ordenó que era hora de salir de nuestro refugio improvisado. Por obvias razones no quitaríamos los muebles de las puertas, no sabíamos que había afuera así que decidimos irnos por la puerta trasera. Podríamos trepar la barda con tranquilidad y brincar al jardín de la casa de al lado.
El primero en salir fue Jin para inspeccionar que nada estuviera acechándonos, y cuando dio la señal de que podíamos salir, primero lo hizo Taemin y Jungkook, junto con KyuHyun y por último Hoseok, Jimin y yo.
Para nuestra buena suerte, detrás del local no había ningún infectado esperándonos, así que pudimos comenzar a emprender nuestro camino con tranquilidad y preocupándonos solamente del horrible frío que estaba haciendo. Y no era para menos, pues en tan sólo unos minutos ya se me habían congelado los dedos de las manos, a pesar de que mi mano derecha estaba entrelazada con la de Jimin y la izquierda estaba metida en el bolsillo de mi chamarra.
—¿Tienes frío, Jimin? —Pregunté volteándolo a ver, sintiendo como temblaba ligeramente al lado de mí.
—Un poco... —Susurró agachando la cabeza hacia el suelo.
—A ver, espera —Me detuve unos segundos soltándolo de la mano y poder hincarme para sacar mi cobija rápidamente de mi mochila. Una vez que lo hice, volví a levantarme para ponerme detrás de Jimin y dejarle caer suavemente mi cobija sobre sus hombros. Rápidamente pasé dos extremos de la cobija por su cuello, para después hacerle un pequeño nudo y que esta quedara como un capa y no se le cayera en el camino.
—¿Así está mejor? —Pregunté poniéndome a su lado, tomándolo de la mano para comenzar a caminar de nuevo junto a los chicos, pues se habían adelantado un poco de nosotros ya que seguramente no vieron que nos habíamos detenido.
—Sí, está mejor...gracias —Dijo con una leve sonrisa que me hizo ponerme feliz por un segundo. Después de tanto tiempo, había sonreído un poco y lo había provocado yo.
Cuando llegamos junto a los chicos, observé como Jin estaba hablando con Taemin y al mismo tiempo señalando los letreros que indicaban el nombre de la calles, seguramente para saber a dónde dirigirnos.
—Ahí hay un súper mercado, deberíamos ir para que consigamos un poco de comida y cosas que necesitemos —Dijo Hoseok señalando un pequeño súper mercado en la esquina de una de las calles, así que todos estuvimos de acuerdo y comenzamos a caminar hacia él.
En cuanto llegamos a uno de los extremos del súper mercado, Jin ordenó que nos detuviéramos para que Hoseok, Jungkook y él inspeccionaran que nadie estuviese dentro y que no fuese a hacer daño, así que en lo que ellos entraban, Taemin se quedó junto con nosotros para que no quedáramos desprotegidos.
—¿Estás bien, KyuHyun? —Preguntó Taemin hincándose frente a él. KyuHyun asintió escondiendo sus manos en el bolsillo de su chamarra por el frío y sorbiendo su nariz roja.
—Tengo mucho frío, pero estoy bien, gracias Taemin —Dijo con una pequeña sonrisa.
—¿Y ustedes, están bien? —Preguntó viéndonos ahora a nosotros y asentí, para después mirar a Jimin quien también asintió sin levantar la cara —. Oh Jimin, veo que tienes la cobija de Yoongi como capa para que te resguarde un poco de frío.
—Fue idea de Yoongi. —Dijo casi en un susurro y yo sonreí levemente apretando su mano en forma de un cariño, pero él no me respondió por lo que dejé de hacerlo.
Nos quedamos en silencio viendo hacia la entrada del establecimiento esperando a los chicos, hasta que Jin salió y luego los otros dos con caras neutrales, por lo que me sentí más tranquilo ya que eso significaba que no había peligro alguno.
—Tomen lo que sea necesario para poder irnos lo más rápido posible, este establecimiento tiene dos entradas y no podemos estarlas cuidando al mismo tiempo, ¿Está bien? —Todos asentimos y entramos, separándonos por pasillo para comenzar a buscar cosas de importancia. Aunque tristemente, desde que entré me di cuenta de que no había muchas cosas qué escoger.
Tomé con fuerza la mano de Jimin y lo jalé hacia uno de los pasillos para comenzar a buscar. En las repisas no había mucho, así que busqué con detenimiento encontrando unas cuantas latas de comida y unos cuantos jugos en los refrigeradores.
—¿Qué has encontrado? —Preguntó Jimin con cierta curiosidad.
—Unas latas de comida y jugos, al menos todavía no caducan y podemos llevarlos —Dije buscando en el último anaquel del pasillo. Seguí caminando con Jimin recorriendo dos pasillos más, encontrando ropa abrigadora que posiblemente le quedaba a alguno de los chicos, así que también la metí entre mis cosas por si acaso.
En el camino fui encontrándome a los chicos uno por uno hasta que estuvimos todos juntos.
—¿Qué encontraron? —Preguntó Jin —, yo encontré comida, cosas para hacer fuego y batería para las linternas.
—Jungkook y yo encontramos más cobijas —Dijo KyuHyun con una pequeña sonrisa tímida.
—Nosotros comida, jugos y ropa —Dije enumerando cada una de las cosas que nos encontramos.
—Nosotros encontramos un paquete de agua que nos puede durar toda la semana si la administramos bien y cuchillos de cocina, pero que nos pueden servir —Dijo Taemin mirando a Hoseok —, dividimos la cantidad de botellas en nuestras botellas para que no pesen tanto a la hora de correr.
—Entonces creo que deberíamos seguir nuestro camino, ya no hay nada más que buscar, ¿no? —Dijo Jin y todos estuvimos de acuerdo con él. Esto podría ayudarnos una semana más para sobrevivir sin tantas complicaciones.
Íbamos a seguirlo, pero KyuHyun chilló con miedo; así que volteamos a verlo con preocupación, pero a él no le había pasado nada, más bien, lo que lo estaba inquietando era lo que estaba mirando fuera del súper mercado.
Era una enorme horda de infectados que se estaba dirigiendo rápidamente hacia donde estábamos y parecía que ya nos habían visto, pues comenzaron a hacer extraños ruidos parecidos a gritos horrorosos que me estaban lastimando los malditos oídos.
—¡Corran, ahora! —Gritó Jin con desesperación, por lo que comenzamos a seguirlo rápidamente para no quedarnos atrás. Tomé la mano de Jimin con fuerza y corrí lo más rápido que pude, jalando a Jimin para que no se quedara atrás.
Sin embargo, por sus heridas y su recuperación comenzó a jadear con cansancio en los rimeros minutos que corrimos, así que tuve que bajar la velocidad para que descansara un poco. Y era lo que más me preocupaba, pues más infectados comenzaron a salir de todos lados, como si los hubieran alertados que había carne fresca cerca.
—¡No se queden atrás, vamos! —Gritó Jin volteándonos a ver, pues poco a poco estábamos quedando más lejos del grupo y no podía hacer nada para seguir corriendo a su par o lastimaría a Jimin —, ¡Yoongi, Jimin, vamos!
—¡No puedo! —Gritó Jimin tratando de correr lo más rápido que podía. Ver que estaba haciendo tanto esfuerzo físico me hizo sentirme mal, pues no podía cargarlo y llevarlo ya que estaba demasiado cansado y débil por la falta de comida de los últimos días que no habíamos encontrado nada en los antiguos súper mercados que habíamos visitado.
Volteé unos segundos hacia atrás, observando como una horda de infectados nos estaba siguiendo y a cada segundo se le unían más miembros para perseguirnos. Pero temía de una sola cosa que me inquietaba más que toda esa horda junta, ¿Y si de nada aparecían mutantes? Desde que salimos de Corea no habíamos vuelto a ver uno, pero no cabía duda que aquí en Noruega también habría ya que el mismo virus estaba atacando a todo el mundo.
—Yoongi, ya no puedo más... —Balbuceó Jimin, por lo que volteé a verlo con preocupación.
—Vamos a correr unos metros más, ¿Sí? Te prometo que ya no te haré correr más por un buen rato después de esto, te lo prometo. Sólo aguanta un poco más, ¿Sí?
Jimin lo pensó unos segundos, hasta que apretó los ojos con fuerza y tomó una gran bocanada de aire para seguir corriendo a mi lado con cierto pesar y cansancio. Y agradecía que me hubiera escuchado, pues no sé cuánto aguantaría más jalándolo para que no cayera o simplemente nos devoraran los infectados.
—¡Por ahí! —Gritó Jin señalando lo que parecía ser una calle. Así que nos demoramos tanto tiempo en pensarlo, simplemente comenzamos a correr siguiendo las órdenes de Jin para tratar de perder al menos a la mitad de los infectados que ya nos estaban pisando los talones.
Por suerte y gracias a que Jimin me escuchó, aumentamos la fuerza en nuestros pasos y pudimos alcanzar a los demás del grupo, ganando unos cuantos metros de distancia de los infectados y que poco a poco les fuéramos ganando terreno y así, tratando de perderlos entre la ventisca de nieve.
—¡No, mierda! ¡Deténganse! —Gritó Jin en cuanto dimos vuelta para seguir corriendo por otra calle. Me detuve en cuanto todos lo hicieron, pues sino chocaría con la espalda de Hoseok. Una vez que los hice miré a todos confundido y luego hacia mis espaldas, oyendo como los infectados se estaban acercando lentamente hasta nosotros.
—¿¡Qué mierda les sucede!? ¡Sigamos corriendo! —Grité oyendo más de cerca los gemidos y alaridos de los infectados. Pero en cuanto levanté la mirada por encima de la cabeza de Jin, el terror corrió dentro de mi cuerpo.
Nos habíamos metido en un maldito callejón.
—¡Hay que salir de aquí antes de que nos acorralen! —Gritó Jungkook, pero fue demasiado tarde, pues tres infectados que lideraban la horda nos habían visto y venían lentamente hasta nosotros. Poco a poco comenzaron a aparecer los demás, obligándonos a correr hasta que la pared del callejón nos detuviera.
Eran demasiados para matarlos con cuchillos y sólo teníamos dos cargadores de las pistolas que no nos servirían de nada. Y aun así, Jin y Jungkook comenzaron a disparar mientras que Hoseok y Taemin peleaban con los que estaban más cerca de nosotros. Pero por alguna razón, seguían entrando más infectados al callejón hasta que topamos con la pared.
—¡Ya no tengo balas! —Gritó Jungkook sacando su cuchillo para comenzar a matar a los infectados que tenía más cerca. Segundos después a Jin se le terminaron, por lo que quedamos totalmente indefensos y sin municiones.
—¡KyuHyun, súbete al contenedor de basura, vamos! —Grité llamando su atención para que corriera hacia mí y que pudiera cargarlo para que quedara sobre la tapa de un contenedor de basura que estaba pegado contra pared. Y aunque trató de alcanzar con sus dedos el final de esta, quedaba muy alta para él, por lo que solo me miró con miedo y a punto de llorar.
—Dejen de pelear...—Dijo Jungkook cuando mató al último infectado cerca de él —, jamás vamos a terminar, son demasiados.
—¡No, vamos! —Gritó Jin empujando a tres infectados que quisieron brincarle encima —, ¡No se rindan, vamos!
—¡Jin, Jungkook tiene razón...! —Gritó Hoseok bajando su cuchillo. Miré hacia la salida del callejón donde había más de treinta infectados acercándose a nosotros. Todos ya estaban cansados y no aguantarían mucho, por lo que poco a poco fueron dándose por vencidos.
—¡No hay que darnos por vencidos, no puedo hacerlo! —Gritó Jin matando a otro infectado que llegó hasta donde estábamos nosotros. Cuando sacó el cuchillo de su cráneo, nos observó, todos cansados de estar corriendo y de matar a los infectados que lideraban la horda —, chicos...
—Se acabó Jin, no podemos hacer nada, ¡Siguen llegando más! —Gritó Taemin acercándose a KyuHyun para bajarlo del contenedor y abrazarlo con todas sus fuerzas. Hoseok suspiró bajando su cuchillo y Jungkook también, cerrando sus ojos con miedo y esperando a la horda.
—Puta madre —Gruñó Jin poniéndose al frente de nosotros —, no dejaré que se rindan tan fácil, ¡Así que no dejaré de pelear!
Observé como poco a poco la horda se hizo más grande, por lo que quedamos bloqueados de cualquier salida y matando nuestras esperanzas de sobrevivir a esto.
Miré la cara de Jimin rápidamente; Estaba muy asustado y había comenzado a llorar con desesperación. Sabía que no teníamos escapatoria y no había nada para evitarlo, así que me acerqué a él y con todas mis fuerzas lo abracé, cerrando mis ojos en el proceso y escondiendo mi cara en la curvatura de su cuello con pesar.
—Relájate, esto terminará pronto...—Le susurré en el oído y sollozó, apretándome entre sus brazos con fuerza mientras temblaba y hundía su cara en mi pecho.
¿Así era como terminaría todo esto?
Oí como los infectados se acercaron más y apreté mis dientes con fuerza. Oh mierda, esto dolería muchísimo.
Sin embargo, esperé unos segundos más, donde comencé a darme cuenta de que los infectados no llegaron y luego, el sonido de la bocina de un auto hizo sacar mi cabeza del cuello de Jimin para mirar hacia donde estaba la horda.
Había un par de camionetas negras de policía al inicio del callejón nos hicieron separarnos y mirar con asombro lo que estaba pasando. En segundos los infectados comenzaron a caer y una oleada de disparos se oyeron por todo el callejón, haciendo que por instinto me agachara y jalando conmigo hacia el suelo a Jimin para que no le tocase ningún disparo.
—¡Agáchense! —Gritó Jin tirándose al suelo para salvarse de los disparos, pues las personas que nos estaban ayudando no podían ver hacia dónde estaban yendo sus disparos perdidos.
—¡Agh, mierda! —Gritó Taemin con una mueca de dolor mientras se agarraba uno de sus costados y se tiraba al suelo. La oleada de disparos se oyó unos segundos más hasta que cesaron.
Levanté la cara y ocho personas se acercaron con rapidez hasta nosotros, apuntándonos con sus pistolas y mirándonos con hostilidad.
Las personas comenzaron a hablar en su idioma, por lo que no supe qué demonios nos decían y que por sus gestos, no parecían estar muy felices ya que no les estábamos haciendo caso.
—¡No hablamos Noruego! —Gritó Jin hablándoles en inglés. Los noruegos se quedaron callados y nos observaron por unos segundos antes de tendernos la mano para que nos levantáramos.
Sin embargo, cuando Taemin lo hizo, gritó de dolor, agarrándose con fuerza uno de sus costados. Rápidamente observé su mano y me asusté mucho cuando vi como esta comenzaba a teñirse de sangre.
—Hola, mi nombre es Ragnar y sentimos mucho haber lastimado a su amigo, pero pronto recibirá ayuda médica para que no siga perdiendo más sangre. Los llevaremos con nosotros para que les hagan una revisión, porque por lo que veo, no son de aquí y seguramente están buscando el refugio de Oslo, ¿Verdad? —Dijo uno de ellos con una sonrisa, junto con un extraño acento en su inglés. Observé como les habló en Noruego a los demás y se llevaron a Taemin con cuidado de no lastimarlo mientras que los demás comenzaron a guiarnos hacia las camionetas con cierta tranquilidad, seguramente para no asustarnos más de los que ya estábamos —, no se preocupen más, ahora ya están a salvo y no tendrán que pasar de nuevo por esto, se los prometo.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top