Min Yoongi.

El motor de la camioneta es tan sonoro, que es a lo único que le prestó atención lo que resta del camino de regreso a nuestro hogar. A pesar de ya haber recorrido cientos de kilómetros lejos del altercado que tuvimos hace menos de media hora, aún sigo asustado por lo cerca que estuve de la muerte. 

Y ahora que me pongo a pensar, me he acercado a la muerte más por lo vivos que por los muertos.

Por fin, después de un rato, comienzo a reconocer a mi alrededor, y a su vez, las puertas del refugio aparecen en mi campo de visión, las cuales son abiertas por un par de hombres de guardia, quienes, al vernos en otra camioneta y seguramente llenos de sangre, sus miradas se vuelven de preocupación, por lo que rápidamente sacan sus Walkie Talkies para comenzar a llamar a alguien que no logro escuchar. Pero pronto sé para qué lo hacen; En el estacionamiento ya hay seis chicos con botiquines de primeros auxilios, esperando por nosotros. 

Gabriel apaga la camioneta una vez que la ha estacionado, y pronto sale de su lugar para comenzar a hablar con los chicos. Yo suspiro quitándome el cinturón de seguridad, para después bajar y abrir la puerta trasera dónde está Jin siendo cuidando por Namjoon. Por suerte, él no ha perdido el conocimiento a pesar de seguir sangrando, pero se ha estado quejando desde que huimos del lugar del choque.

Cuando Jin levanta la mirada, él me sonríe levemente con debilidad, y no puedo evitar sentirme afligido por el estado en el que se encuentra. 

—¿Cómo te encuentras, Jin? —Pregunto, ayudándole a Namjoon a bajarlo mientras que él toma a Caleb entre sus brazos. 

Sabemos que Caleb todavía respira, pero sigue inconsciente.

—Estoy bien, creo...Me duele mucho, pero por suerte no estoy desangrándome rápido. Creo que el vidrio no tocó nada vital, así que puedo seguir viviendo —Dice después de soltar una risita, que pronto para porque gime de dolor —. Mierda, necesito dormir. 

—¿Es en serio? ¿Sólo piensas en dormir cuando te estás desangrando? —Pregunta Namjoon, mirándolo con recelo.

—Sí, a comparación de ti, yo salí más herido, déjame en paz.

Namjoon sonríe acariciando su mejilla suavemente, pero es interrumpido por la voz de alguien más detrás de nosotros. 

—Denme al niño, pónganlo aquí —Dice suavemente uno de los chicos, llegando con una camilla. Y detrás de él vienen dos chicas con algunos botiquines pequeños de primeros auxilios. Rápidamente Namjoon lo deja sobre ésta, para después mirar a Jin quien también está siendo ayudado por un par de chicas que lo mantienen apoyado en ellas para que no caiga al suelo —, ¿Se aseguraron de que el pequeño siga respirando? ¿Revisaron que no tuviese nada que lo hubiese herido de gravedad?

—Sí lo revisamos, sólo fueron golpes y sigue respirando. Pero no sabemos si se fracturó algo. Llévenlo a enfermería, rápido. —Dice Gabriel, quien está siendo vendado de la muñeca por una chica. 

Manejó con la mano lastimada sin siquiera quejarse. 

Los tres chicos asienten, llevándose al niño con rapidez hasta desaparecer por uno de los pasillos del lugar. 

—Todos tienen que ir a hacerse una revisión, y decirnos qué fue lo que pasó o si alguien fue mordido, ¿Está bien? —Dice uno de los chicos, el que parece ser el más grande de todos —. Sus amigos ya fueron notificados de su regreso, y están esperándolos en enfermaría, vamos. 

Uno de los chicos nos guía por diferentes pasillos, hasta llegar al lugar donde estuvimos esperando a que despertara Taehyung, en la sala de espera. Al primero que se llevan es a Jin, quien pronto es metido en una de las habitaciones del lugar. 

Luego, otro de los chicos nos indica a Namjoon y a mí que entremos a otra habitación, donde nos dice que seremos atendidos. 

—Iré a que me curen, si ellos necesitan algo, me notificas —Ordena Gabriel, para después mirarnos y sonreír levemente —. Serán atendidos como se merecen, no se preocupen. Nos vemos en un rato.

En cuanto entro a la habitación que nos han asignado a Nam y a mí, mi pequeño novio corre rápidamente hacia mí en cuanto me ve, pasando sus brazos por mi cuello y abrazándome con fuerza mientras solloza levemente. Luego, siento sus suaves labios en mi mentón, así que sin siquiera pensarlo, correspondo su abrazo con fuerza, a pesar de que aún estoy adolorido. 

—Pensé que jamás volvería verte...—Susurro, hundiendo mi cara en el espacio de su cuello y hombro. Él niega rápidamente, apretándome más contra él, por lo que hace que gima de dolor —. Mi amor, me estás lastimando...

—Lo siento...sólo que, en cuanto me dijeron que venían heridos pensé lo peor, ¿Qué fue lo que sucedió, por qué están lastimados de esta forma? —Pregunta Jimin con clara preocupación, sin dejar de abrazarme. Sólo que ahora con menos fuerza.

—Nos atacó el maldito grupo del norte, al que te llevó Vernon—Dice Namjoon, quien está sentado en una de las camillas siendo vendado del hombro derecho por una chica. Su abdomen levemente marcado está lleno de sangre y raspones, por lo que yo suspiro para después mirar a Jimin de nuevo —. Nos embistieron con la camioneta en la que llegamos, y los mayores golpes se los llevaron Gabriel, Caleb y Jin. Por suerte, a Yoongi se le ocurrió un plan que nos salvó la vida a todos, y estoy bastante agradecido por eso, amigo —Dice mirándome con una sonrisa —. Estuvieron a punto de dispararle a Jin en la cabeza, pero Yoongi hizo una locura que ni a mí se me hubiese ocurrido, aunque hay que destacar que también le debemos una a los malditos infectados que atacaron al otro grupo.

—¿Infectados? —Pregunta Jimin, y yo asiento. 

—Una pequeña manada de perros terminaron de ejecutar mi plan —Digo con tranquilidad. En cuanto termino de decirlo, Jimin abre los ojos con asombro, y al mismo tiempo, con miedo. 

—¡Pudieron haberte atacado! —Exclama Jimin abrazándome de nuevo —. No lo vuelvas a hacer nunca, por favor...

—Tranquilo, amor —Digo besando la coronilla de su cabeza con delicadeza. 

—¿Dónde está Jin? —Pregunta Jimin después de separase de mí.

—Está en otra habitación, seguramente le están cosiendo la herida del costado. Se le enterró un vidrio, pero no te preocupes, estaba consciente cuando llegamos —Dice Namjoon, siendo ayudado a ponerse una nueva playera que el chico que lo curó le ha dado. Acto seguido, un par de chicos entran a la habitación con la orden de limpiarme las heridas y revisar que no me haya lastimado de gravedad. 

Uno de ellos me pide que me quite la playera, por lo que Jimin decide ayudarme. Pronto, sé que no estoy tan lastimado como pensaba. 

Sólo son unos cuantos golpes y rasguños que terminan tapándome con gasas y vendas. 

—¿Charlotte ya está con su hermano? —Pregunto, y Namjoon asiente —Qué bueno, espero que no se le haya fracturado nada, fue el primero que recibió el golpe, junto con Gabriel. 

Después de largos minutos, por fin terminan de curarme. Pero ésta vez, Jimin y yo nos encontramos solamente con los chicos que me estaban limpiando las heridas, ya que Namjoon ya no se encuentra en la habitación por ir a buscar a Jin. También, debido a los golpes que recibí por el choque, me han dado algunos analgésicos y cremas para eliminar los moretones con más rapidez, así que ahora sí los chicos me dan la autorización de salir de la habitación, por lo que tomo la mano de Jimin y juntos salimos de ahí para buscar a Gabriel, quien, por suerte logramos encontrar fuera de nuestra habitación hablando con uno de los guardias. 

 —Oh, por fin salen —Dice Gabriel con una sonrisa. Antes de que nos siga hablando, le da un asentimiento de cabeza al guardia, y éste sale rápidamente del lugar, dejándonos solos a los tres —. Sus cosas están dentro de una habitación en el tercer piso del edificio, un guardia ya los está esperando allá para que puedan escoger sus habitaciones libremente. Son cuatro habitaciones compartidas, así que escojan las que más les guste. Cuando lo hagan, pueden tomar una ducha y descansar —Dice con una sonrisa —. Oh, se me olvidaba. La hora de comida es a la tres y media, y si necesitan algo, estaré en la planta baja. 

—¿Dónde está Drago? —Pregunta Jimin.

—Está en el patio, jugando con los niños. Espero no les moleste, es muy sociable con la gente.

—Oh no, para nada. Sólo preguntaba porque no sé si tenga hambre —Dice Jimin, pero Gabriel niega. 

—Le dieron de comer hace rato. Su amigo, Jungkook, les ayudó a mis guardias a prepararle un poco de pollo cocido. De todos modos, la comida para perro ya está agregada en las listas de provisiones para nuestra próxima expedición. 

—Por cierto, ¿Cuándo podremos conocer el laboratorio del último piso? —Pregunto, y Gabriel asiente. 

—Cuando ustedes lo deseen. Me gustaría que todos fuesen juntos para que les expliquen, ya que los científicos son un poco gruñones y se desesperan con mucha gente cerca. Así que, puedo llevarlos a ustedes dos primero, pero como les repito, me gustaría que fuesen todos juntos cuando estén en mejor estado. La mayoría de ustedes tiene heridas abiertas, y cualquier roce con los infectados o el sujeto de prueba podría hacer que se infecten.

—Tienes razón, mejor vamos cuando estemos curados —Digo, y Gabriel asiente —. Iremos por nuestras cosas para acomodarlas...Gracias por aceptarnos aquí, Gabriel. 

—Gracias a ustedes por confiar en mí, de verdad me gustaría traer a más gente aquí para ser un grupo más grande. Sé que nuestros científicos van a encontrar la cura, y ustedes serán afortunados de verlo conmigo —Gabriel sonríe con emoción, por lo que me contagia su felicidad por un momento —. No les quito más tiempo, tengo que ir a ver a sus amigos para ver cómo se encuentran. En especial Caleb, dicen que ya despertó. Hasta luego, chicos. 

Jimin y yo asentimos, despidiéndonos con la mano para después salir de la sala de espera para comenzar a caminar por el pasillo que da hacia las escaleras, las cuales tiene un par de ventanales que dan hacia la calle de atrás. 

Está lloviendo de nuevo. 

—Cuando lleguemos a la habitación, ¿Nos bañamos juntos? —Pregunto con una sonrisa, por lo que cuando veo a Jimin, éste se sonroja levemente —. ¿Por qué te pones rojo? Ya me conoces desnudo, y yo a ti. 

—¡Yoonie! No lo digas aquí tan fuerte, pueden escucharnos...—Murmura, golpeando levemente mi hombro —. Pero sí, bañémonos juntos. 

—Te amo, Minie. 

—Te amo más. 

Los dos sonreímos, sin dejar de caminar hacia nuestro destino. 

—¿Crees que los infectados tengan frío? —Pregunta Jimin de la nada, al ver a los únicos tres infectados merodeando lentamente por la calle. Sin quererlo, río suavemente, por lo que Jimin me mira con una ceja enarcada —, ¿Qué es lo gracioso? Quizá todavía tengan reflejos humanos. 

—No creo que tengan frío, Minie. Y si llegaran a tenerlo, sería una minoría en su población que llegasen a sentirlo. 

—Tal vez...—Dice, en cuanto terminamos de subir las escaleras siguiendo los letreros pegados en las paredes —. Mira, ahí está el guardia. 

Y Jimin tiene razón, hay un guardia recargado en la pared, que en cuanto nota nuestra presencia, nos voltea a ver con una sonrisa. 

Es asiático. 

—Hola, ustedes deben ser los nuevos —Dice acercándose —. Gabriel me encargo de su cuidado hasta que todos puedan tomar sus habitaciones, así que estaré merodeando por aquí de vez en cuando por si necesitan algo. ¿Cómo se llaman? Al parecer yo seré su guía para algunas cosas. 

—Yo soy Yoongi —Digo con una sonrisa —. Y él es mi novio Jimin, un gusto. ¿Cómo te llamas tú? 

—Aquí me dicen Choi, porque es mi apellido. Pero pueden decirme Siwon. ¿Son de Corea del Sur? —Pregunta, y los dos asentimos —. Supongo sus amigos también los son, así que me alegra mucho escuchar eso, creo que nos vamos a llevar muy bien.