Min Yoongi.

El ambiente dentro de la camioneta es muy tenso y triste, casi sofocante; Puedo oír como Jungkook sorbe su nariz, y por el retrovisor, logro observar que Jin está quitándose las lágrimas de sus mejillas, pues él es quien va manejando. Los demás se encuentran con la mirada perdida, y yo, estoy a punto de volver a llorar de nuevo.

Ahora que vamos de regreso a la base, no puedo evitar ver el único asiento vacío de la camioneta, que antes fue ocupado por Hoseok. Debido a la mordida, perdió mucha sangre, y aunque pensamos que podría sobrevivir por la posible inmunidad de la que tanto nos habló Vernon, dos horas después nos dimos cuenta de que él no la traía en su sangre.

Ahora realmente no sabía si lo de inmunidad era real.

—¿Qué vamos a hacer ahora que ya no tenemos a dónde ir? —Pregunta Taehyung, por lo que Jin suspira mirándonos a todos.

—No lo sé...creí que nuestra base sería muy segura...Sólo iremos a recoger nuestras cosas y nos iremos. Ahora que ese maldito grupo sabe nuestra ubicación, no podemos quedarnos.

—Podríamos ir a otro estado —Les digo, pero Namjoon ríe sin ganas.

—¿Y a dónde? Todo Estados Unidos está igual que aquí. Ya no tenemos mucha gasolina, y de ser así, primero debemos de acercarnos a la ciudad para encontrar suministros nuevos. Posiblemente saquearon todo —Dice Namjoon, por lo que yo simplemente me callo mirando a Jimin. Él se encuentra mirando a la ventana, y puedo notar que sigue llorando, pues a pesar de que no hay mucha luz, la luna hace que sus lágrimas brillen levemente, hasta perderse en su mentón.

—No lo sé, Namjoon. Sólo estoy dando opciones, no seas tan agresivo —Contesto mientras ruedo los ojos, y a él parece molestarle ya que gruñe levemente.

—Ya veremos a dónde vamos a ir. Por el momento, sería bueno perdernos en la ciudad o buscar alguna casa dentro del bosque —Interpone Jin, al ver que Namjoon piensa contestarme de la misma manera en la que yo le hablo. Así que él suspira y se recarga en la ventana del copiloto, perdiendo su mirada en el exterior.

La camioneta vuelve quedarse en silencio, por lo que yo acerco mi mano a la de Jimin para tocarla levemente. Él por fin me voltea a ver, y lo único que hago es entrelazar su mano con la mía, apretándola en el proceso, por lo que él me imita de la misma manera. Y sonríe levemente, dejando que las lágrimas de sus ojos se derramen más rápido.

Jimin piensa que tuvo la culpa.

Pero no fue así. Cualquiera de nosotros pudo haber escapado con el idiota de Vernon para ayudarlo, según Jin. Y le creía; Jimin tiene el maldito corazón más noble del mundo, y al parecer aún no capta que este lugar ya no es el mismo que cuando estábamos a salvo en Corea, con toda la gente viva a nuestro alrededor.

Incluso Hoseok se lo dijo, que él "no había tenido la culpa de nada, y que, si no hubiera pasado eso, lo volvería a rescatar mil veces más con tal de volverlo a ver".

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—Ch-chicos, ya no aguanto, bájenme por fa-favor...—La voz de Hoseok me hace dejar de correr, por lo que volteo a verle. Hemos dejado atrás a la horda, pero estábamos bastante lejos de la camioneta debido a que tuvimos que desviarnos para poder quitarnos de encima a los infectados.

Y mismo, nos encontrábamos en el jardín de una casa que utilizamos como refugio improvisado. La casa es segura por el momento, así que antes entre Jin y Jungkook, comienzan a sacar de la casa algunas mantas y lo poco que lograron encontrar para tratar de curar a Hoseok.

Aún hay un poco de alcohol, así que lo primero que hacen, es retirarle la camisa para poder ponerle alcohol a la herida. Pero me pone nervioso el hecho de en cuanto lo dejan desnudo de la cintura para arriba, es ver como unas extrañas venas moradas comienzan a marcarse alrededor de la mordida del maldito lobo infectado.

—Chicos...paren...—Murmura Hoseok, aguantándose las ganas de gritar seguramente por el ardor de su herida —. Tengo mucho frío...ni siquiera siento el brazo y el hombro. Es inútil, saben que moriré.

—Hoseok, no digas eso...—Musita Jimin con la voz completamente rota. Yo lo volteo a ver, pero él solamente se encuentra mirando a Hoseok con tristeza —. Perdóname, Hobi...

—¿Por qué...me pides perdón? —Pregunta Hoseok mirándolo con debilidad —. Tú no tienes la culpa de nada, Minie. Pude haberle pasado a cualquiera, ninguno de nosotros está a salvo, y eso no te hace culpable de nada —Y por primera vez desde que lo mordieron, vuelve a sonreír, haciendo que mi corazón se estruje —. No tienes la culpa, Jimin...y si tuviera que rescatarte mil veces, esas mil veces lo volvería a hacer, porque te quiero. Así que ya, quiten esas caras largas.

—¿Cómo pides eso, Hobi? —Contesto acercándome a él —. Chicos, necesito hablar con Hoseok, ¿Pueden dejarnos solos?

Todos asienten, metiéndose a la casa para poder dejarnos solos. Y cuando veo que él último se mete, volteo a verlo con las lágrimas acumulándose en mis ojos.

—Yoon, no llores —Dice levantando su mano con debilidad, acariciando mi mejilla para poder quitar las lágrimas que han comenzado a caer —. Estarás bien, prométeme que...

—Hobi, no me hagas prometer nada, me siento peor...

—Yoongi, escúchame. Por favor, pro-prométeme que le vas a quitar esa idea de la ca-cabeza a Jimin de que tiene la cu-culpa. Cuídalos a todos, ¿sí? —Balbucea, con una pequeña sonrisa en el rostro —. Te quiero, hermano. Desearía que esto jamás hubiese pasado, pero...tuvo qué.

—No me dejes, Hobi —Susurro, acercándome para poder abrazarlo y sollozar con fuerza en su hombro sano. Puedo sentir cómo me abraza, y también llora. Llora con la misma fuerza que yo, y aunque esté débil, su abrazo se vuelve fuerte y cálido, algo que me hace sentir como mi pecho se estruja con violencia.

Nunca más volveré a sentirlo. Nunca más volveré a verlo sonreír, reír o enojarse conmigo, ni tampoco podré volverle a pedir consejos cuando no tenga un buen día...

—Por favor, no lo hagas...—Susurro, temblando de la impotencia por no poder hacer nada.

—Ya...tranquilo, debemos a-afrontarlo. Cada vez me siento más débil, y sé que no me que-queda mucho tiempo...Así que, quiero que en cu-cuanto cierre los ojos y deje de re-respirar, me maten. No quiero despertar con-convertido en una de esas mierdas.

—Lo haré, Hobi. No quiero que deambules por ahí solo...Te quiero, hermano. Mucho, mucho.

"Te quiero, hermano..."

—¿Sabes a quién tengo muchas de ver de nuevo? A Taemin, lo extraño mucho...Volveremos a estar juntos —No puedo volver a evitarlo, así que vuelvo a abrazarlo con mucha fuerza.

Pronto el sol del siguiente día comienza a salir lentamente, y con él, los primeros rayos de luz que impactan suavemente contra la cara de Hoseok. Todo lo que restó de la noche me quedé junto a él, diciéndole que jamás lo olvidaría, y que cuidaría de todos para que esto ya no volviese a suceder.

Hoseok por su parte, con el paso de las horas dejó de hablar coherentemente, sólo gruñía entre palabras o decía que tenía mucha hambre. Y cuando los chicos salieron, sólo los seguía con la mirada, sin decir ni una sola palabra, como si estuviera cazándolos. Incluso a mí me miraba durante largos minutos, tanto que desviaba la mirada por la profundidad de la suya.

Su piel comenzó a volverse pálida, y las venas moradas comenzaron a resaltar en su cara y cuerpo. Por un momento pensé que tendría frío por no tener playera, así que incluso lo tapé con las mantas para que dejara de temblar de una forma extraña.

Y el momento llegó. Jin tuvo que quitarme de ahí cuando Hoseok cerró los ojos y de su boca sólo salieron hilos de sangre. Quise apartarlo de ahí, y quedarme para poder abrazarlo, pero en cuanto oí el primer gruñido grotesco, Jimin me abrazó, aplastándome contra su pecho para que no viera.

Luego, sólo fue silencio.

Un silencio que me hizo saber que él ya no estaba aquí.

Se había ido para siempre.

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Todo lo que está en letras cursivas fue lo que pasó antes de que se subieran a la camioneta y se fueran.

...

Hola mis amores, ¿Están llorando como yo? Lo sé, estoy mal por matar a Hobi. Pero la trama es así y no puedo cambiarla.

Scenery de Taehyung me ayudó a escribir este capítulo. El tono de la canción se me hace muuuuy triste, y adivinen quién está llorando. :)

En fin, perdón si hay faltas de ortografía.

¡Recuerden que los amo mucho! A pesar de que estén enojados conmigo. ):

Adiós. c:

Mañana no sé si haya capítulo, espero que sí.