Capítulo cincuenta y tres: Muertes inesperadas.

N/A: Para los que no entendieron lo que pasó en el capítulo anterior, se basó en un flashback; En la historia ya pasó un año, por eso Elena ya no está y Atlanta se infectó. Murió durante ese transcurso y los chicos encontraron un refugio (La casa abandonada) a las afueras de la ciudad, donde ahora está viviendo. También, con respecto a los animales; Los animales pequeños no se pueden convertir en infectados, simplemente mueren. Digamos que, un perro de tamaño considerable sí lo puede hacer, pero en el caso de los patos, los conejos o un gato, no sobreviven si se infectan, ya que su cuerpo es demasiado pequeño para soportarlo. Por eso no hay pájaros infectados, o incluso algún insecto. En cambio, un lobo o incluso un elefante sí se pueden infectar y ser igual de agresivos que un humano infectado. 

Espero que con esto ya se libren de las confusiones que se generaron en el capítulo anterior, si tienen más dudas, pueden escribirme aquí o por privado. :)



Min Yoongi. 


—Necesitamos implementar más seguridad en el área de la valla B, por la madrugada se concentraron bastantes infectados, seguramente por el olor de todos nosotros —Asiento mientras Jin sigue hablando. La mañana siguiente ya había llegado, y por lo tanto, el turno de guardia había sido cedido a un par de chicos nuevos que se ofrecieron a cuidar el ala B, mientras que el ala A sería vigilada por una pareja igualmente nueva en el grupo. Así que mi turno de inspeccionar el refugio junto con Jin había llegado; Y eso implicaba revisar cada rincón del lugar por si las dudas.

—¿Y si ponemos más picos de madera alrededor de la valla? —Pregunto mirando hacia ésta, donde hay un par de infectados sujetándose del metal mientras gruñen hacia nuestra dirección. Suspiro mirando de nuevo hacia Jin, quien está apuntando todo lo que necesitamos en una libreta —. Parece que en la noche son más activos, ayer Jimin y yo le disparamos a un par que estaban tratando de escalar la pared de ramas del muro principal.

—También me había dado cuenta de eso; Creo que sí, debemos de poner más picos de madera para que ya no acerquen. Si siguen aventándose a las vallas, van a tirarlas por todo el peso, y el muro de ladrillos no nos ayudará para nada ya que ni siquiera lo terminaron.

—También te quería recomendar que fuéramos a la ciudad. Debemos buscar municiones y seguramente hay alguna tienda de armas donde podamos abastecernos. Ya que ahora somos más, podríamos ir en grupo.

—Ya estoy en eso, pero primero debo asignar tareas para que también los nuevos comiencen a ayudar. La tierra del patio trasero es fértil, podríamos plantar semillas para cosechar comida, y las guardias podrán ser menos rudas para ustedes ahora que ya hay más gente cuidando las entradas. Me enteré que hay un chico y una chica de la edad de Jungkook, que sabe disparar muy bien y podrían ayudarlo con la tarea como francotirador en la noche —Dice mirándome con una sonrisa —. Hoy Jimin y tú dormirán tranquilos, en la noche me toca hacer guardia junto a Hoseok.

—Me parece buena idea, pero...tú necesitas descansar, Namjoon me dijo que no dormiste casi nada ayer —Digo tomándolo suavemente del brazo para hacer que se detenga.

—¿Y ese idiota cómo sabe que no pude dormir bien, si ni siquiera duerme en mi habitación? —Pregunta con indignación, por lo que río ante su cara.

—Te recuerdo que ayer le tocó hacer guardia en el ala A, y el balcón de tu habitación se puede ver perfectamente desde ahí. Dijo que estuviste asomándote todo el tiempo a todos lados, por eso lo sabe.

—Ah, sí...Estaba un poco nervioso, ya sabes, con la gente nueva que llegó. Mi instinto me hace desconfiar de toda la gente, pero, no son malos ahora que o veo —Dice después de suspirar con una pequeña sonrisa avergonzada. Yo asiento ante lo que dice, y antes de que él y yo podamos decir otra cosa, dos pequeñas niñas llegan corriendo hacia nosotros, pues, rápidamente volteo ante el sonido de sus pequeños pies chocando contra el piso de piedra.

—¡Señor Jin! —Exclama una de las niñas con preocupación. Una vez que llegan, las dos comienzan a respirar con dificultad, debido a que seguramente llevan corriendo unos minutos —, qué bueno que lo encontramos, señor Jin.

—¿Qué sucede, pequeñas? —Pregunta Jin hincándose frente a ellas, y al mismo tiempo revisándolas para saber que no le ha pasado nada malo —, ¿Qué pasa? No me asusten.

—El abuelo se puso muy mal, está vomitando sangre, por favor, ven a ayudarlo —Contesta otra de las niñas, quien, al voltear a verme, se nota que sus ojos están llenos de lágrimas.

Jin no lo piensa más, así que sale corriendo de su lugar para desparecer del otro lado del patio. Yo rápidamente lo sigo, haciéndole señas al par de niñas para que nos queden solas aquí y me sigan también.

Una vez que llego a donde oye el alboroto, empujo suavemente a la gente que se ha concentrado en el patio delantero, donde todos los nuevos tienen sus casas d campaña y sus cosas acomodadas. Y dentro de una de las casas, está el señor que las niñas dijeron, al lado de la que parece ser su hija, tomándolo de la cadera para que no se caiga. Y entre sus piernas, hay un bote lleno de sangre.

¡Por favor, todos váyanse con Jimin! —Exclama Jin levantándose de su lugar, señalando a Jimin quien está haciendo señas para que lo sigan, pero parece que no quieren hacer caso, pues ninguno se mueve —, ¡Es una orden, quiero todos fuera de aquí!

Por favor, hagan caso a las indicaciones, Jin resolverá esto —Digo mirando a todos, por lo que algunos asienten, comenzando a caminar hacia donde se encuentra Jimin para seguirlo. Cuando ya no queda ni uno solo, me hinco al lado de Jin, quien está tratando de revisar al pobre anciano que con trabajos y está despierto.

—¿Cuándo comenzó a vomitar? —Pregunta Jin hacia la chica que tiene la cara horrorizada por lo que está pasando.

—H-hoy. Estaba bien, pero de la nada dijo que se sentía muy mal y comenzó a vomitar —Dice la chica con un hilo de voz, así que Jin sólo asiente volteándome a ver.

—¿Puedes traerme la caja de primeros auxilios? Está en la sala principal, debajo de... —Pero Jin no termina de hablar, pues, mientras revisa al anciano y levanta la manga de su camisa, se da cuenta que su muñeca está vendada y está ligeramente teñida de rojo —, ¿Qué le sucedió?

—Eh, se rasguñó con una rama hace un par de días —Vuelve a decir la chica, pero la noto muy nerviosa.

—La venda está muy sucia, se la quitaré para sanarle a herida ya que seguramente le está haciendo alguna infección.

—No, no se la quites —Dice la chica rápidamente, alejando la mano de Jin de la muñeca de su familiar. Jin frunce el ceño, claramente confundido y suspira con frustración.

—Quiero que me digas qué es lo que exactamente lo pasó, o lo haré a la fuerza —Ordena Jin con un tono claramente molesto, por lo que ella simplemente suspira con tristeza.

—A mi papá lo mordió un muerto hace un par de días, pero no presentó signos de infección, por eso es que sólo le vendamos la muñeca. Hasta apenas hoy comenzó a vomitar sangre y a tener temperatura...Por favor, no lo maten, sé que puede curarse.

—Eso es imposible, ¿Lleva dos días infectado? —Pregunto mirándola y ella asiente. Rápidamente observo al anciano, quién está demasiado y con unas cuantas venas marcadas alrededor de su cara.

Estaba por morir y ella está demasiado cerca.

—Te pido que salgas de ahí ahora mismo —Digo, estirando mi mano para que ella salga, pero rápidamente niega apretándose contra el cuerpo de su padre —. Por favor, sabes qué sigue después de esto, mírale la cara.

—¡No pueden matarlo, es mi papá! —Exclama, comenzando a llorar y tratando de que Jin ya no se acerque. Sin embargo, él simplemente se aleja cuando el señor vuelve a toser con fuerza, escupiendo más sangre y respirando con dificultad —, ¡Sólo aléjense!

—¡Sal de ahí! —Ordeno de nuevo, viendo como el anciano ya ha dejado de moverse y de su boca comienza a salir un extraño líquido negro que comienza a manchar su ropa y las manos de su hija que se encuentran entrelazados en su estómago —, ¡Maldición, sal de ahí!

—¡Estará bien, ya lo he visto! —Grita de nuevo la chica, pero antes de que Jin pueda jalarla y sacarla de ahí, el anciano despierta, gimiendo con debilidad para voltear hacia arriba, donde el cuello de su hija está expuesto.

Él ya está muerto, ya que sus ojos inyectados en sangre se mueven lentamente y su mandíbula llena de sangre negra comienza a temblar al ver comida fresca.

—¡Mierda! —Grita Jin en cuanto el anciano se lanza contra su hija, arrancándole el cuello con violencia. La chica comienza a gritar, haciendo que voltee a todos lados por todo el maldito ruido que está haciendo.

—¡Dispárale, no traigo mi pistola! —Exclamo levantándome de mi lugar, en cuanto el anciano deja de destrozar a su hija para voltearnos a ver. Él lentamente comienza a gatear para salir de la tienda de campaña, gruñendo y escupiendo levemente toda la sangre que escurre de su boca —, ¡Vamos Jin!

Los dos retrocedemos, y sólo veo cómo Jin saca su pistola, cargándola y apuntando hacia el anciano. Un disparo limpio retumba por todo el lugar; La bala ha atravesado la cabeza del anciano, mandándolo hacia atrás con rapidez y haciendo que su cuerpo caiga en seco al suelo.

—Demonios —Susurra Jin mirándome con nerviosismo —. Debemos limpiar todo esto, y encargarnos de la hija del anciano.

—Préstame tu cuchillo, yo lo hago —Digo extiendo mi mano hacia él, donde segundos después siento el mango del cuchillo sobre mi palma. Lo aprieto con fuerza, saltando al cuerpo muerto debajo de mí para acercarme y entrar hacia la tienda de campaña.

Todo es un completo desastre asqueroso, por lo que trato de no tocar toda la sangre que hay regada por todos lados; La chica se encuentra de lado, y parece que ya no respira, además de que tiene los ojos cerrados.

Ni siquiera trato de saber si está viva o no, simplemente la tomo levemente de la ropa para acercarla un poco y luego, enterrar el cuchillo por debajo de nuca para terminar de matarla y estar seguro de que ya no se volvería a parar nunca más.

—¡Chicos! Oímos el disparo, ¿están bien? —Pregunta Jungkook llegando hacia nosotros, pero se queda callado en cuanto ve lo que ha sucedido —, oh....mierda.

—Asegúrense de vigilar cada espacio del refugio, el sonido de la bala seguramente alertó a los infectados más cercanos. No usen armas a menos que se concentren demasiados —Dice Jin levantándose rápidamente —. Háblenle a Namjoon y a Hansol, debemos de planear algo rápido para enterrar los cuerpos afuera y asegurar que las hordas de infectados no se acerquen a las vallas, vamos, no hay mucho tiempo.

Observo a todos lados sin dejar de apuntar con mi pistola. Arriba de mí, en el muro, se encuentra Jungkook y uno de los chicos nuevos con sus rifles, esperando a que algún infectado salga de la maleza a atacar. Y frente a mí, está Jin, Namjoon y Hansol cavando un par de agujeros en el suelo, mientras que Jimin y Hoseok están igual que yo, atentos a lo que pueda pasar.

Llevamos más de media hora fuera del refugio, cuidándolos a ellos mientras que cavan la tierra para poder enterrar a los dos cuerpos envueltos en sábanas blancas que Jin encontró en la casa.

Después de todo el salpicadero de sangre, lo mejor fue envolverlos en sábanas, ya que al momento de sacarlos, haríamos un desastre de restos humanos y sangre por todo el suelo.

—Listo, ya quedaron los agujeros; metamos los cuerpos para entrar de una vez por todas —Dice Jin, limpiándose la cara por el sudor con la manga de su sudadera. Namjoon y Hoseok levantan al primer cuerpo del suelo, para después dejarlo en uno de los hoyos que han hecho. Seguidamente, toman el otro cuerpo y vuelven a hacer lo mismo, así que cuando estos dos ya se encuentran en sus respectivos lugares, Jin asiente, tomando una de las palas para empezar a echar toda la tierra de regreso a su lugar.

—Cuidado, se movieron las hojas de ese lado —Advierte Jungkook, señalando detrás de Jimin. Todos volteamos a su lugar, donde lentamente sale la cabeza de un infectado, olfateando el aire y segundos después, mirándonos a todos con ansias de comer.

Pero una flecha rápidamente se impacta en su cráneo, haciéndolo caer hacia atrás por la fuerza. Volteo a ver a Jimin, quien tiene su arco levantado, y segundos después lo baja para mirar hacia Jungkook.

—¡Te gané! —Dice con una pequeña sonrisa.

—Listo chicos, vamos de regreso al refugio —La voz de Jin hace que voltee hacia su dirección, por lo que bajo mi arma para comenzar a caminar hacia la puerta del refugio —, ¡Jungkook, abran, por favor!

Unos minutos después, los dos portones se abren; Taehyung y una chica están empujando una puerta, por lo que todos agradecemos para poder entrar y que ellos vuelvan a cerrar detrás de nosotros, poniendo todos los seguros y barrotes sobre las puertas.

—Hansol, necesito que toda la gente nueva se concentre en el patio principal, necesito revisarlos a todos después de lo que sucedió —Dice Jin, por lo que Hansol asiente con una mueca en la cara.

—No estaba al tanto que uno de mi grupo estaba infectado, pero está bien, por seguridad, hagámoslo —Dice caminando rápidamente hasta Jin, donde los dos comienzan a hablar acerca de temas que, conforme se alejan, dejo de prestar atención para enfocarme mejor en Jimin, quien está limpiando la flecha que anteriormente disparó contra el infectado.

—Jiminie —Digo acercándome, por lo que cuando me escucha, levanta la cara para sonreírme.

—Yoongi, tenemos una misión que hacer —Dice levantándose de su lugar —. Vamos a ir a la ciudad.

—¿Qué? ¿Cuándo sucedió eso y por qué no me avistaste? —Pregunto en cuanto él comienza a caminar directo a la casa, así que, lo sigo rápidamente.

—Hoy en la mañana, cuando estabas dormido, Jin me avisó que me tocaba hacer una misión con otro compañero del grupo. Ya revisamos todos los vecindarios cercanos, y se está acabando todo. Por eso, debemos comenzar a buscar en otros lados; Pensaba irme con Hoseok en su motocicleta, pero hará demasiado ruido y lo que menos quiero es que hagamos más alboroto. Mejor, prefiero que vayas conmigo para que tú manejes la camioneta.

—¿Solo por eso quieres que vaya contigo? —Pregunto tomándolo de la cintura, para acercarlo a mí y que su cuerpo quede a unos centímetros del mío.

—Hey, aquí no, no seas irrespetuoso —Dice tratando de alejarse de mí, pero yo río acercándolo más a mí —, ¡Yoongi, ya! Está bien, no quiero que vayas conmigo solo para que manejes, sólo que me siento más tranquilo si estoy contigo, y en el mismo lugar. Me aterra estar separado de ti, no sé si en algún momento alguno de los dos nos regresará y no planeo vivirlo ahora.

Observo su carita de tristeza, por lo que lo único que se me ocurre es abrazarlo con fuerza ante lo que me ha dicho. De verdad, no sé qué demonios hice para ganarme a una persona tan maravillosa como él.

—Yo tampoco quiero estar separado de ti, así que sí, yo te acompaño. Sólo hay que avisarle a Jin que nos iremos en un rato, para que vigile la entrada y podamos irnos sin que ningún infectado esté merodeando por ahí.

—Sí, iré por nuestras armas; Mientras prepara lo necesario para meterlo a la camioneta, será un viaje un poco largo y extenso.

—¿Por qué extenso? —Pregunto en cuanto él logra zafarse de mí para comenzar a caminar hacia las escaleras.

—Regresaremos en la noche, seguramente. La ciudad está lejos y nos tardaremos en ver qué nos sirve y qué no. Además, debemos buscar una tienda de armas o una estación de policía, hice un inventario rápido de nuestro almacén y ya casi no tenemos municiones. Si el sonido de la bala de Jin atrae a más infectados, no podremos defendernos.

—¿Y por qué sólo iremos dos personas? —Vuelvo a preguntar una última vez, antes de que Jimin comience a subir los escalones.

—Es mejor que seamos pocos, podremos movernos más rápido. Ya, deja de hacer preguntas y comienza a llevar las cosas a la camioneta que si no se nos hará más tarde.

Y pronto veo cómo él sube las escaleras con rapidez, así que yo suspiro.

Sí, cómo usted diga, mandoncito —Digo, pensando que lo dije en voz baja, pero en cuanto oigo la voz de Jimin, pego un pequeño brinquito en mi lugar por la repentina respuesta que no pensaba que llegaría.

¡Sí te oí, Min Yoongi! ¡Espero que cuando baje ya estén las cosas afuera o te golpearé! 



Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top