Capítulo catorce: Libro abierto.

Park Jimin

En otras circunstancias, podría estar pasando mi día acostado en mi cama o caminando por el patio trasero de mi casa para no aburrirme. Sin embargo, lo único que puedo hacer ahora es ponerles atención a todos los sonidos y acatar las indicaciones que Yoongi nos da cada que una horda de infectados pasa por afuera de la casa. 

Luego de estar todo el día dentro de una casa ajena, resguardándonos del peligro de la calle, Yoongi nos indica que la noche ha caído y por lo tanto me toca hacer la primera guardia con él mientras los demás duermen. Un acuerdo entre ellos llegó a la conclusión de que Taemin y Jungkook compartirían una habitación principal, Hoseok se quedaría en la segunda y, por último, Yoongi y yo nos tendríamos qué quedar en la sala a cuidar la entrada principal y los dos ventanales a sus lados de esta. 

Gracias a la paciencia de Yoongi, él pudo enseñarme dónde estaba cada cosa, para así poder poner más atención a los ruidos exteriores cercanos a la entrada. 

—He terminado de tapar todas las ventanas y las puertas ya tienen seguro. Si no hacemos mucho ruido, estaremos a salvo hasta que amanezca —Comienza a decir Yoongi, una vez que se ha acercado a mí, yo levanto la cabeza hacia donde lo escucho, para después sentir su presencia al lado de mí —. ¿Seguro que no te quieres sentar en el sillón? —Pregunta, ya que yo me encuentro sentado en la alfombra de la sala principal —. Jimin, ¿No estás cansado? —Vuelve a preguntar, por lo que yo niego con una sonrisa pequeña en el rostro. 

—Sé que corrimos mucho hoy, pero desde que llegamos en la mañana me la he pasado en el sillón, me duele la columna —Contesto con una mueca en la cara —. ¿Tú no estás cansado? 

—Un poco, sí. Jalar a Jungkook para subirlo por las escaleras de emergencia me hizo lastimar los músculos de mi hombro derecho —Responde con pesar, por lo que yo frunzo el ceño y volteo a su dirección —, tranquilo. Estoy bien, sólo es como si hubiera hecho mucho ejercicio, para mañana estaré mejor. Por el momento, sólo debo acostumbrarme a mi nueva vida, aunque sea difícil... —Yoongi suspira con algo de melancolía, por lo que busco su brazo tímidamente para acariciarlo suavemente en modo de respuesta y comprensión, así que Yoongi reacciona a mi tacto, pasando sus dedos por encima de los míos hasta que siento como este los entrelaza lentamente.

Yo río tímido, seguramente rojo de vergüenza.

—Tienes una sonrisa muy bonita, Jimin —Dice con cierto tono divertido, y yo río bajando la cara —. Cuando sonríes tus ojos desaparecen, es algo muy gracioso. 

—Me gustaría saber cómo eres, digo, tu físico —Contesto con curiosidad en la voz. 

—Cuando lleguemos a Noruega estaré ahí en primera fila para que me veas. Y seguramente te vas a sorprender, pues soy muy hermoso —Dice con tono engreído, por lo que yo niego alejándome de él mientras río suavemente. Luego, él me imita y comienza a reír.

Unos instantes después, termino por acomodarme sin dejar de jugar con mis dedos, sintiéndome un poco nervioso, pues, a pesar de no ver a Yoongi, siento su mirada en mí. Y no me queda de otra más que voltear a su dirección con clara confusión en mi rostro, y mis sospechas son ciertas, ya que cuando lo hago, él ríe suavemente. 

—Pensé que no te darías cuenta de que te estoy observando —Dice Yoongi, a lo que yo asiento con obviedad. 

—Solo estoy ciego, más no tonto. Puedo sentir cuando la gente me mira, a veces es un poco incómodo porque sé que lo hacen de mala manera, para burlarse o tenerme lástima. 

—Yo jamás te veré con lástima, Jimin. A lo mejor tuvimos un pasado malo, donde me equivoqué contigo. Créeme que en el momento no me di cuenta, pero después lo pensé seriamente durante mucho tiempo...aunque no lo creas, le pedí perdón varias veces a Chanyeol por haberte gritado al tirarme una bebida sobre mi ropa, no debí reaccionar así. 

—Sí, recuerdo que me espanté mucho cuando te oí. No sé en qué terminó porque salí a esconderme con Chanyeol detrás de mí, pero mi mamá me contó que te insultó demasiado, ¿Es cierto? —Pregunto curioso, y Yoongi ríe. 

—Es cierto, casi me dijo de hasta lo que me iba a morir —Por inercia, mi boca suelta un sonido de sorpresa, por lo que rápidamente pongo una de mis manos en ella para no hacer más ruido —. Después de eso, no volví a ver a tu familia ni a ti. Dejaron de ir a las cenas que Chanyeol organizaba cada aniversario de la empresa o logro para él, por eso me sentí mal...

—Bueno, pero todo ya ha quedado en el pasado. Creo que, con todo lo que estás haciendo ahorita, te has ganado tu perdón —Contesto de forma sincera. 

—¿De verdad? Creo que eso es lo que más me importa ahora. Bueno, eso y también sobrevivir —Dice antes de reír —. ¿Entonces estoy perdonado? —Pregunta de nuevo.

—Sí, pero con una condición. 

—¿Cuál? —Pregunta confundido, por lo que yo suspiro para calmar los crecientes nervios que de la nada aparecen. Por inercia, comienzo a jugar con mis dedos, pensando en que lo diré para no sonar muy atrevido. 

—Yoongi... ¿Me dejarías conocerte? —Pregunto casi en un hilo de voz.

—¿C-cómo? Digo, ya nos conocemos...

—Me refiero a que, si me dejaras tocarte...para saber cómo eres. 

—Eh, sí. Está bien... —Accede, por lo que de pronto, siento su presencia más cerca de mí. Y me sorprende que haya aceptado, así que no pierdo más mi tiempo cuando él toma mis manos para acercarlas a su torso. Yo, con mucho cuidado, paso las puntas de mis dedos por la tela de su chamarra, hasta poner mi mano entera en ella.

Me siento muy nervioso, pero comienzo a hacer mi recorrido con cautela; subo lentamente mis manos por sus hombros, los cuales parecen ser muy anchos. Luego, me dirijo a su cuello y su manzana de adán, donde puedo sentir que él ha tragado saliva con fuerza. 

Está nervioso. 

Ahora, llego a su mentón y comienzo a pasar mis dedos por sus orejas, donde hay unas cuantas perforaciones en ellas. Sigo hacia su cabello, este se siente lacio y muy suave, por lo que yo sonrío porque recuerdo que por la tarde se bañó, así que se siente limpio. Finalmente, sigo mi recorrido por su cara con mucho cuidado de no lastimarlo, sintiendo la piel suave y fría de sus mejillas junto con sus labios que parecen ser un poco delgados. Después, me dirijo a su nariz, dándome cuenta de que tiene una ligera curvatura en ella. 

Paso mis dedos por sus cejas y lentamente los bajo hacia sus ojos. Entre mi tacto, siento cómo Yoongi cierra sus párpados para que yo siga su recorrido y así puedo sentir sus pestañas que son largas. Y para no tenerlo con los ojos cerrados tanto tiempo, quito mis dedos rápidamente para pasarlos de nuevo a la piel de sus mejillas que se sienten ahora calientes.

La calidez de su piel me gusta, por alguna razón. Es la misma energía que irradia cuando agarro su mano o cuando me abraza. 

Cuando termino de recorrer su rostro, bajo mis manos a sus brazos con lentitud hasta que me detengo en sus codos y después lo suelto, sonriendo satisfecho por la oportunidad que Yoongi me ha dado.

—Gracias... —Susurro bajando mis manos hasta mis rodillas en un intento por controlar mis nervios. 

—¿Qué tal la inspección de mi cara? ¿Cómo crees que soy? —Pregunta una vez que nos hemos quedado en completo silencio por varios segundos. 

—Tu piel es muy suave, es como cuando acaricias un gato —Digo lo primero que se me viene a la mente. 

—¿Soy como un gato? 

—¡No! Bueno, sólo que eres muy suave...—Contesto nervioso —. No sé cómo luzca la belleza física, así que sólo puedo comparar con cosas que he tocado. Pero, al ser tan suave como un gato, significa que tu piel es muy saludable. 

—Sí, un poco. Por mi carrera tenía qué cuidar mi apariencia física —Contesta, por lo que yo asiento —. Por ejemplo, tu piel también es muy linda, ¿Sabes? Parece que también te cuidas o tu mamá te cuidaba bastante.

—¿En serio mi piel es linda? —Contesto levantando mi mano hacia mi mejilla para tocarla, por lo que Yoongi ríe —. ¿Y yo cómo soy para ti? ¿Podrías describirme? 

—Pero...

— Adelante, dime como si yo pudiera verte. 

—Bueno...tu cabello está un poco largo y es café. Tienes las cejas semipobladas y tus pestañas son muy largas. Tus labios son anchos y tu piel no tiene imperfecciones a excepción de las pequeñas heridas que te has hecho estos días. Tus ojos son pequeños, rasgados y de color gris...pero si los vemos de cerca, hay unos cuantos pigmentos cafés muy claros. 

Sonrío en cuanto termina de hablar, para después esconder mi cara entre mis manos por los nervios. Siento mis mejillas muy calientes y estoy demasiado avergonzado. Jamás había tenido a alguien que me observara tan de cerca, porque nunca se lo he permitido a nadie. 

Pero Yoongi me genera tanta confianza, que el haberlo hecho me hace sentir muy bien. 

—Y, también tu sonrisa es muy bonita —Finaliza antes de reír suavemente y yo lo imito. Luego, me acomodo en mi lugar después de soltar un suspiro —. Jimin, ¿Te da pena que te observen? 

—Sí, más cuando lo hacen para averiguar si estoy ciego o no. Siento las miradas de gente y sé cuándo lo hacen de buena o mala manera. 

—¿Y cómo sientes mi mirada? 

—Es una mirada que no me juzga por lo que soy, o por lo que tengo...Me agradas Yoongi, me he sentido con mucha confianza contigo estos tres días que hemos pasado juntos. No sé, a lo mejor es muy poco tiempo, pero me siento en paz contigo. 

—Tú también me generas paz, Jimin. Saber que estás bien, es un indicativo de que todo también lo estará...Además, tenerte conmigo, es como tener a mi mejor amigo a mi lado...a veces haces cosas que hacía él, y me hace sentir familiarizado contigo, ¿Sabes? 

—¿De verdad? —Pregunto, sintiendo una extraña presión en el pecho al oír el nombre de mi primo. 

—Sí, creo que, por eso, nos hemos tenido confianza tan rápido. Era muy común que Chanyeol y yo tuviéramos muestras de afecto, como abrazos, estar todo el día juntos o hablar todo el tiempo de cualquier cosa. ¿Has oído hablar del "amor de tu vida" pero en amigos? Creo que así me sentía con él...además, ¿Quieres que te cuente algo? Pero no le digas a nadie. 

—Te prometo que no lo haré —Digo curioso, sintiéndome emocionado por saber un poco más de la vida de Yoongi. 

—Casi nadie lo sabe, pero yo también soy bisexual. Y, cuando apenas lo estaba descubriendo, le pedí a Chanyeol que me ayudara a saber mi orientación sexual. Él accedió, ¿Sabes cómo? Dándome un beso. Curiosamente, mi primer beso fue con mi mejor amigo. 

—¡¿En serio?! —Pregunto asombrado. 

—Sí, ahí me di cuenta de que los hombres y las mujeres me gustaban. Pero Chanyeol y yo jamás intentamos algo más que no fuese una amistad, nuestro lazo era tan fuerte que tratar de ser una pareja no estuvo en nuestros planes. Gracias a él, descubrí muchas cosas y por eso le agradezco demasiado, porque ambos nos dimos a la tarea de conocernos y conocer cosas nuevas, pero juntos —Dice con cierta melancolía en su voz, por lo que yo sonrío al oír que mi primo tuvo una vida muy bonita gracias a Yoongi —. ¿Y tú, Jimin? ¿Te enamorarías de un hombre o te gustan las mujeres? —Pregunta, por lo que yo hago un sonido con mi boca al pensar. 

—Realmente no reconozco físicamente como debe de ser una mujer y un hombre. Para mí los dos géneros son iguales y no, no me importaría enamorarme de un hombre o de una mujer —Contesto con una sonrisa —. ¿Y tú, Yoongi? ¿Te has enamorado de un sólo género en específico? 

—No, aún no. Desde que soy pequeño he dicho que el género no delimita al amor. Si es hombre y te gusta, ese es tu destino y debes de aceptarlo, o al revés. Tristemente en casi todo el mundo está muy mal visto querer a alguien de tu mismo género con tanta pasión —Suspira, para después poner su mano en mi rodilla y jugar con la costura de mi pantalón —. Yo en mi caso, he tenido novias y novios y me da igual el hecho de me miren extraño, pero como tal, nunca me he enamorado bien de alguien. 

Yo asiento por lo que acaba de decir Yoongi. 

Yo no puedo enamorarme por el físico, como todo el mundo lo hace, pues las palabras belleza física no está en mi vocabulario. ¿Será que alguna vez alguien podrá sentir amor por mí?

—Tienes mucha razón, Yoongi...si te gusta alguien de tu mismo género, deberás aceptarlo y ser feliz con ello, porque para el amor, no hay géneros —Finalizo, dejando caer mi cabeza hacia su hombro, para simplemente recostarme en él. Y Yoongi no se quita, incluso se junta más hacia mí para que yo no me lastime mi cuello —. Gracias por contarme de ti, Yoongi. 

—Cuando me siento en confianza, soy un libro abierto. 

Y de repente, un beso sobre mi cabeza me hace quedarme helado. Yoongi sólo ríe cuando seguramente siente mi cuerpo rígido, y yo trato de mantener la compostura. 

—Eres como un Chanyeol chiquito —Responde después de que yo carraspeo la garganta —. Te cuidaré de la misma manera que lo hice con mi mejor amigo, Jimin. Solo que esta vez, lo haré de la manera correcta, lo prometo.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top