Capítulo 14



Maia

El sol del verano calienta mi piel. Por ende coloco las gafas sobre mis ojos para evitar que el resplandor me dañe la vista. <<Debería de haber traído un sombrero>> Pienso.

Me encanta el verano, pero no sus consecuencias: cabellos maltratados, manchas en la piel, labios resecos, entre otras cosas.

Busco en mi bolso el bloqueador solar, revuelvo todo y no lo encuentro. Sobre todo porque debo de ponerle un poco al niño. Los localizo en medio de la piscina dónde juega con su padre. Es la primera vez que lo metemos a la alberca y parece gustarle porque no deja de reír, <<es la risa más linda que he escuchado en toda mi vida>>. A veces estoy tan estresada (ser mamá primeriza no es fácil) Pero cuando sonríe, cuando se le marcan los hoyuelos en sus redondas mejillas o suelta una sonora carcajada hace que todo sea más fácil. Llena mi día de luz.

__Jake __capto su atención __ la forma en la que se curvan sus labios al reír, son idénticas. __vengan, para ponerles bloqueador.

Jake asiente y sale de la alberca con el niño en brazos. Al sentarse frente toma una toalla y seca su cuerpo mientras yo seco al bebé que juega con el bote de bloqueador tirándole de un lado a otro y balbuceando palabras que no entiende ni dios.

__¿Me das el bote cariño? __ el niño extiende el bote bloqueador hacia mi con sus pequeñas manitas.  Una vez en mis manos lo abro para untar un poco en su cuerpo, lo extiendo por sus mejillas, cuello y brazos  __creo que ya está.

__Trae __jake lo arrebata de mis manos y pone un montón en sus dedos. Para luego llevar la crema a mis mejillas. Debo de tener la cara totalmente blanca.

__¿Qué haces? __rio e intento quitarle el bote, pero lo aleja de mi.

__Te vez preciosa __si no tuviese la crema en las mejillas hubiese notado que sus palabras me han sonrojado.

__Venga, dame es... __no logró continuar las palabras cuando unos ruidos conocidos inundan el lugar. Disparos.

Intentando huir unos hombres nos impiden el escape. Apuntan ahora con sus enormes ametralladoras nuestras cabezas. Yo aferro al bebé a mi cuerpo y Jake me cubre, siento su calor y luego un frío que arremete mi cuerpo cuando tras un disparo cae al suelo manchando este de sangre. __¡Jake!.

Me levanto de golpe empapada en sudor para encontrarme con un expectante Jake frente a mí.

__¿Haz tenido una pesadilla? __asiento.

Este camina hacia mi y se sienta al borde de la cama.

__Tranquila, aquí estaremos bien __recorro la habitación con mi vista. Es la misma, la de Jake. La que destrocé horas antes. Ya está lista, como si supiesen que volveríamos.

__Me llamaste en tu pesadilla __trago saliva. No esperes que te cuente que en mi pesadilla éramos dos encantos, dos idiotas enamorados <<Ni lo sueñes Jake
Sandlers>>

__No lo recuerdo muy bien. 

__¿Enserio?

__Quiero tomar el aire __intento ponerme de pie, sin embargo obstaculiza mi paso colocándose frente a mí __. ¿Qué haces?

__Tienes que hacer reposo. Lo ha dicho el doctor.

__¿Doctor? ¿Cuándo ha venido el doctor?

__Te desmayaste... Pero no te preocupes, pues no es nada grave. Ha dicho que estás bajo mucho estrés, que necesita hacer reposo o será malo para nuestro hijo.

__Un proceso de estrés es normal teniendo esta maravillosa vida. Estoy embarazada, no enferma. Ir a tomar aire no me hará abortar. En cambio huir de una emboscada puede que si __ironizo y lo aparto para pasar. Este me sigue.

__No va a ocurrir otra vez. Los  que hicieron eso, créeme que lo pagarán __ me volteo indignada.

__¿Seguirás con esto? Continuarás metiéndote en el hoyo. Nos hundiras en el lodo contigo Jake. Lo harás.

__Se metieron con mi familia ¿No lo vez? __rio. Odio estos ataquitos de honor.

__Mira dónde estamos ahora. Casados, por culpa del honor. Ya estoy harta de eso. Escucha... __intento ceder, quizás ir por las buenas a su mente sea mejor que estar peleando todo el tiempo con él __. Dijiste que confiara en ti. Mi forma de confiar es está. Creyendo que no nos pondrás en peligro. No eres como tú padre. No haga las mismas cosas, Por favor __la tensión de sus músculos disminuye.

__¿qué soñaste? __se acerca cortando la distancia que nos separa cuando llegamos al jardín.

Desvió mis ojos de los suyos hasta recorrer el camino de sus anchos hombros y brazos marcados bajo una camiseta negra donde descubro un vendaje __¿Estás bien? __señalo la herida.

__¿Me estás vacilando Maia? __parpadeo sin entender. Niego.

__ No te tomo el pelo __me cruzo de brazos.

__Te he hecho una pregunta.

__No quiero contestar.

__Yo estaba en ella, tengo derecho a saber __su comentario me obliga a reír.

__¿Ahora mandarás en mi mente?

__Ya entiendo. Te da vergüenza decir que rememoraste la noche del...

__¿Qué dices? Estás loco, ya quisieras __Interumpo sus palabras cuando noto que la vergüenza por su comentario subió a mis mejillas.

__Te has puesto roja __se burla.

__Idiota __Intento escapar, pero sostiene mi mano y tira de mi hasta juntar nuestros cuerpos. El corazón se me acelera cuando su calor roza mi anatomía. Capto con el olfato un cítrico olor a colonia masculina,  nunca había olido algo tan embriagante. Parpadeo cuando su aliento choca con mi oreja mandando escalofríos a todas partes de mi cuerpo tembloroso.

Creo que unas de las cosas por las que nunca tuve novio, era por esto, por miedo a sentirme vulnerable cerca de un hombre. Jake me hace sentir así cada vez que se acerca. Pierdo todas mis facultades mentales y acabo apagando mi cerebro, dejándome a su voluntad.

__¿Qué soñaste Maia? __susurra cerca de mi oído.

__soñe... Soñe que,  te disparaban __balbuceo. Y luego parpadeo volviendo a la realidad cuando me doy cuenta que he metido la pie bien hondo.

__¿Te preocupa que me maten? __dice ahora a una distancia prudente, pero sin dejar de abrazar mi cintura con sus manos <<no se en que momentos llegaron sus manos ahí>>

__Si __confieso. Y no miento. Puede que un poco por mi propio bienestar y el del bebé, pero, tampoco me gustaría que le pasase nada.

Una sonrisa se dibuja en su rostro __¿Sabes porqué me gustaste aquella noche, entre tantas chicas? __. Su mano lleva un mechón de mi cabello tras mi oreja. Tiemblo bajo su tacto y niego en respuesta.

__Nunca me  gustaron las chicas sumisas. Y tú, tu eres tan diferente __rie __. Y Creo que por eso me pareces tan insoportable.

__¿Quieres saber porque te besé aquella noche? __el niega __. porqué estaba borracha, sino, jamás hubiera dejado que me llevaras a la cama. Jamás __ me separo de él alejándolo de un empujón. Ríe ante mi respuesta.

__Lo dice doña gemidos __abro la boca del asombro ante su descarado comentario que provoca un revuelo de mariposas en mi estómago.

Aprieto los puños por la impotencia de pegarle un coñazo. __Eres, eres...

__¿Qué soy Evans? __se acerca y retrocedo. Pero no se detiene y sigue caminado hacia mi mientras yo retrocedo. Hasta que mi cuerpo choca con la pared de la casa.

__Aun los tengo grabados en mi memoria. Se repiten todos los días, y todas las jodidas noches. Sabes Maia. No me puede sacar aquella noche de la cabeza __Quiero traspasar la maldita pared como un súper héroe y desaparecer. Lastima que esto no sea un cuento o una película de ciencia ficción.
Mi corazón bombea a toda velocidad, parece querer salirse de mi pecho. Respiro para desatar los nudos en mi garganta.

__Alejate __demando dándole un empujón que no logra moverlo. En cambio sus manos me aprisionan entre él y la pared.

__ ¿Por qué? __juega conmigo. Muerde su labio inferior y me mira como si quisiera devorar cada trozo de mi.

__¿Qué pretendes hacer?, Ve a seducir con tus tácticas baratas a otra. Y déjeme en paz.

__No quiero a otra __contengo los nervios en mis puños __. A partir de hoy, decido que te quiero a ti. 

Guardo en lo más profundo de mi intrínseco ser todas las ganas que tengo de correr lejos de él y de lo tenerlo cerca me causa. Entonces lo enfrento. Mucho más al de lo carnal, de los deseos que pueda despertar en mi, nunca pasará nada entre ambos. Esto nunca debió ser. Nunca.

__Te dije que no soy bella, no me voy a enamorar de ti. Este cuento no tendrá un final feliz. Te lo puedo asegurar.

__No quiero que te enamores de mi Maia. Con qué quieras quedarte basta. Y créeme, el día que el cuento acabe, no podrás dejarme. No lo harás __indica con tanta seguridad que me deja sin palabras y tras esto se despide dejando un cálido beso que dura unos segundos, en mi frente.

Respiro con normalidad cuando desaparece por la puerta. Me llevo la mano al pecho creyendo que esto controle los grandes azotes de mi corazón.  Pero no, parece que una manada de caballos galopan en mi pecho.

¿Dónde dormiré ahora? En el jardín quizás. Porque no planeo subir a la misma habitación que ese especímen de bestia.

 

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