018
Hoseok habló por días con sus padres, ambos entendieron las preocupaciones del menor y sin pensarlo tanto se acesoraron al respecto. El caso llevó a que se abriera una carpeta social y analizará la situación. Hablaron con el juzgado, este les permitió y les dio el derecho legal de ambos hermanos al comprobar lo dicho por ambos adultos luego de un mes de causa.
Yoongi no tenia idea al respecto de quien era aquel niño o como les conocia, aún asi, una parte suya que se debatia mentalmente entre si debia o no ingresar en aquel mundo... a través de las palabras de aquel desconocido, lo volvieron a tierra y decidió no hacerlo, aunque no tuviera suficiente dinero con los trabajos temporales y en negro en los que se encontraba.
-Lo siento... -oyo la voz de su pequeño hermano que estaba en cama.
-¿De qué hablas? -se acerco con aquel vaso de agua y aquella pastilla entre manos- toma.
-Hyung, si no fuera porque soy débil no te esforzarias tanto... -se disculpo el menor.
-No seas tonto... -la puerta se hizo oir, Yoongi se puso en pie y se dirigió abrirla- ¿En qué puedo ayudarlos? -pregunto al ver aquellos cuatro personajes en su puerta, una pareja efectivamente, y dos mujeres.
-Somos parte del distrito encargado de casos familiares. -informo una de las mujeres- Tus padres no estan en casa, ¿verdad?
-Ellos salieron. -mintio, no dejaria que lo separaran de su hermano; conocia ese protocolo, no era estúpido. De seguro los mandarian a hogares temporales para chicos en las mismas condicciones, y con suerte a casas adoptivas, pero sabia que esa seria la suerte de Jungkook que apenas tenia nueve años, a diferencia de él que ya era un adolescente.
-No es necesario que nos mientas. -sonrió la mujer que se encontraba a su lado- Sabemos que tu madre falleció hace meses y tu padre sólo...
Se fue. Completo él en su mente.
-Conocemos la condición en la que se encuentran tú y tú hermano... -pero no la dejo terminar.
-No pienso dejar que se lo lleven. -confronto con ira y determinación en su mirada. Mientras se aferraba al marco de la puerta, evitando asi su ingreso por las buenas.
-No planeamos alejarlo de ti. Ellos estan interesados en adoptarlos a ambos. -Yoongi volteo asombrado al ver aquella pareja reluciente.
-Es un gusto, Yoongi ¿verdad? -sonrio aquella mujer con ternura al verlo. Y sin poder responder, el menor se acercó detras de él hacia la puerta.
-Hyung, ¿por qué tardas tanto? -miro a los adultos para reverenciar.
-¿Tú eres Jungkook? -sonrio el hombre y el menor asintio- ¿puedes chocar mi puño? -pregunto estirando su puño hasta su dirección con una sonrisa en sus labios, este miró a su hermano y ante su aptobacion, asi lo hizo, con una tierna sonrisa en su rostro.
Yoongi se asesoró de lo importante, si no aceptaban ir con ellos, irian a una casa hogar brindada por el estado y seguramente seria la última vez en que veria a su pequeño hermano. Asi que solo empaco y los siguió, ambas mujeres les explicaron a los niños que ante cualquier situación no deseada podian acudir a ellas, las cuales estarían atentas a la salud y el bienestar de ambos.
El viaje a su nuevo "hogar" no era tan cayado, Jungkook reía y conversaba con ambos adultos; mientras Yoongi se mantenia al margen viendo por la ventana.
Aún le costaba entender cómo demonios supieron del abandono de aquel hombre, después de todo, él dejo el colegio para trabajar y pagar las deudas de su casa y encargarse de su hermano. Era imposible que el estado lo supiera.
-Llegamos. -dijo el hombre, Jungkook fue el primero en bajar del auto y por inercia, le brindo la mano aquella mujer que con una sonrisa aceptó su pequeña manita.
Al ingresar a la casa pudieron sentir el aroma a galletas recien horneadas. Y al adentrarse al comedor observaron a dos niños.
-¡Bienvenidos! -saludo Yerin con una sonrisa y sus mejillas manchadas por la harina.
El lugar estaba decorado con globos y carteles de una cálida bienvenida para ambos. Y es que la menor de la familia estaba entusiasmada con la idea de nuevos hermanitos sobreprotectores que le brindasen toda la atención.
Los ojos de Yoongi se fijaron en aquel niño de sonrisa en forma de corazón.
-Bienvenido a casa, hyung. -le sonrió con cariño Hoseok.
Realmente lo estoy haciendo bien, Yoongi, cuidaremos de Jungkook juntos, él crecerá sano y fuerte. Lo prometo.
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