El brujo soltó un suspiro y se encogió en si mismo arriba de su caballo para tratar de conservar el calor. La nevada era agresiva y más ahora que era de noche pero un cambio de clima no era algo que pudiera detenerlo.

En silencio y solo mirando al frente el brujo dobló en un cruce de caminos y siguió adelante pateando al caballo con las espuelas para hacerlo trotar.

-Vamos, Rasch...ya casi estamos- dijo en voz alta, la yegua color marrón con manchas blancas en la cara y el lomo resoplo en forma de respuesta, apurando el paso.

-Hace rato que no vengo...me pregunto cómo están todos.- Dijo hablando con su caballo el cual no le respondió en ningún idioma que el pudiera entender, naturalmente.

El frío asentaba cada vez más penetrante en su rostro así que se subió la capucha de su capa que más bien era un largo poncho color negro de cuero curado para proteger su armadura de la nieve. El interior de la capucha era de algodón, reconfortante al tacto y cálido. El brujo no podría haber pedido algo mejor y agradeció mentalmente a su padre, Geralt por ello.

A pesar de estar con la visibilidad reducida el brujo pudo divisar una cabaña en el medio de un claro, una sonrisa se le asomo por los labios. Recorriendo algunas decenas de metros más el brujo se bajó del caballo y lo guió hasta un techo de madera que el sabia que lo habían construido para Rasch...era un lindo gesto. El brujo noto que la nieve se había metido en el pequeño establo así que tomo una pala que estaba apoyada contra la pared y empezó a remover la nieve con diligencia, con el bienestar de su caballo en su mente.

El escuchó la puerta abrirse y pasos que hacían crujir la nieve dirigiéndose hacia el. Los pasos eran ligeros y cortos, ya sabia de quien se trataba.

-Lance!- La joven pelirroja corrió al Brujo y salto. Lance, soltó la pala habiendo anticipado y, agarro a Ruby en sus brazos con una risa. Ruby rió también mientras apretaba el abrazo con fuerza.

-Como estas, pequeña rosa?- preguntó mientras le acariciaba el pelo.

-Todo esta bien por aquí, no hay mucho que hacer así que me aburro la mayor parte del tiempo. Entrenar con Qrow es mi mayor entretenimiento.- Respondió bajando de su abrazo. -Que hay de ti? Vienes de Vale?

Lance asintió con una sonrisa mientras se removía la capucha. -Ven vamos adentro y te contaré todo. Esta tu padre y Qrow?- Pregunto sin mirarla mientras acomodaba la cama de heno para su caballo.

-Sip. Están abajo.

-Y que hay de ella?- La voz del brujo tomó un tono más sombrío.

Ruby hizo silencio un momento y suspiró -En su cuarto, solo baja para comer. Apenas habla conmigo...no se que hacer Lance.- su tono se volvió notablemente más triste.

Lance suspiro al escuchar esas palabras. Se agachó a la altura de Ruby y puso sus manos en sus hombros. -Tu hermana es muy fuerte, ella podrá superarlo. Pero hay cosas que a veces nos tiran tan abajo que es difícil levantarse...para Yang no es solamente el proceso de sanación, ella esta asustada ahora...pero pasará.

Ruby miraba el piso -Como puedes saberlo?

-Porque yo también estoy pasando por algo parecido.- Lance apretó los labios y se levantó.

Ruby levanto la cara para mirarlo con culpa, el brujo ignoró está mirada. -La-Lance yo-

-Está bien, Ruby. No te atormentes con ello. Las cosas pasan. Ven, vamos adentro que me muero de hambre.- dijo con una sonrisa.

Ruby tardó un momento en desechar su tristeza pero eventualmente asintió y entro tomando la mano del brujo, eso la hacia sentir mejor y más segura de ella misma...saber que había alguien mas allí.

-Ruby? Eres tu? Quieres ayudarme con esto?

-Y-Ya voy papá!- Contesto mientras soltaba la mano de Lance pero este le detuvo cuando ella intento ir a la cocina. Ruby le miró confundida a lo que Lance respondió con un dedo entre sus labios con una sonrisa y un guiño de su ojo no vendado.

Ruby lo miro por un momento pero entendió y asintió tapando una risita con su boca.

El brujo se removió su capa y la dejo sobre una silla. Empezó a caminar hacia la cocina para encontrar a Taiyang de espaldas.

-Ruby me ayudas? Lleva esto para la mesa y llama a tu hermana, la comida está lista.- Dijo el hombre mientras colocaba una bandeja con hamburguesas a su costado.

Lance se acercó a su lado y tomó la bandeja con ambas manos. -Por supuesto, padre.- Dijo el brujo haciendo saltar a Taiyang del susto contra una esquina.

-DIOS! QUE DEMO- El corazón del hombre se relajó al ver a Lance con una sonrisa, fallando por contener una risa que escapaba de entre sus dientes. -Lance! Joder, no hagas eso. Vas a darme un infarto un día de estos!

-Relájate, Tai que un buen susto es bueno para el corazón.- Lance golpeó suavemente a Tai en el hombro y este le respondió con un abrazo de amistad.

-Es bueno verte, Lance. Como esta tu ojo?

El brujo se separó y removió la venda hecha con tela marrón para dejar ver una cicatriz que le atravesaba el ojo derecho de manera vertical desde la mejilla hasta la frente, abrió el párpado para dejar ver su ojo color ámbar con características gatunas pero que sin embargo el alrededor que debía estar blanco estaba inyectado en color rojo sangre.

-Sanando aun.

-Todavía? Pero-

-Son derrames, provocados por el estrés. Pupila está bien por suerte pero toda la sangre de la herida en si termino en la córnea y se apelmazo, dejando muy débil las venas del ojo por la presión de la sangre. No tengo ningún problema para ver con el pero debo esperar a que se retome toda su fuerza...si lo fuerzo lo más probable es que los derrames sigan ocurriendo sin detenerse y eso seria malo.- Explico mientras se volvía a colocar su venda nuevamente. Ruby estaba mirándolos con un poco de pena desde la puerta a la cocina.

-Ya veo...- dijo Tai, su pergamino vibró y al sacarlo leyó un mensaje que lo hizo sonreír.

-Algo bueno?- preguntó Lance tomando la bandeja nuevamente.

-Qrow ya llega. Me alegra que estés aquí.

-Pues yo también, como han estado?- La pregunta del brujo hizo que Tai apretara los labios.

-Ruby, puedes ir a buscar a tu hermana? Vamos a comer.- Dijo Tai mirando a Ruby.

-Enseguida papá!- La niña salio corriendo.

Una vez Taiyang escucho como crujían las maderas escaleras arriba suspiró con cansancio. -Tu sabes como es aquí.

El brujo guardó silencio por un momento. -Seguimos igual, huh?

-Seeeh...- El hombre se movió hasta el refrigerador y sacó dos botellas de vidrio pequeñas, le tendió una al Brujo y este no la rechazó -Yang ha empezado a hablar mas últimamente, es un avance...Ruby pues...

-Es Ruby. Es una niña.

-Ella no entiende todo a la perfección, no como nosotros lo hacemos...pero ella también lo siente, sabes? Ella sabe que todo esta mal.

-Has intentado hablar con ella?- Lance dejo la bandeja y abrió la botella con los dientes mientras tomaba asiento

-Lo hago, de hecho...pero es cabeza dura. Tampoco ayuda que Qrow la este entrenando y alimentando sus deseos de salir afuera y tratar de hacer algo...

-Y que es ese algo?- Lance lo miro con confusión mientras daba un sorbo de su cerveza.

-Recuerdas los tres chicos de los que te hablamos? Los que eran espías?- Tai se sentó del otro lado colocando un codo sobre la mesa.

-Si. Los que vinieron de la academia Haven.

-Qrow cree que algo extraño puede estar pasando allí. Las identificaciones de esos chicos eran auténticas así que solamente hay una explicación.

-Alguien de la academia en Haven los ayudó a entrar.- Concluyó Lance mirando su botella. Suspiró -Y? Entonces que es lo que piensan hacer?

-No hay mucha comunicación con el exterior...ahora que no está la torre de comunicaciones todo se ha vuelto más complicado. Así que Qrow quiere ir a comprobar si todo esta bien en Haven.- Tai sorbió su propia bebida mientras miraba la mesa.

-Y tu crees que el quiere ir con Ruby?

-No...no es eso. Ruby en realidad quiere ir por su cuenta...yo se que Qrow seguramente irá para cuidarla pero...

-Tranquilo. Lo entiendo.- Lance lo miró a los ojos, reaccionando a su miedo. -No importa que tan fuerte o habilidosos sean...el mundo es feo afuera. Entiendo que estés asustado.

-No puedo perder a mis hijas...son todo lo que me queda, Lance.- Tai apretó los puños con fuerza al escuchar su propia voz quebrarse.

-Lo se...lo sé...

Lance dio un largo suspiro y se levantó -Vamos...ya están bajando.

-Heh, de verdad nada puede esconderse de ti no es así?- El hombre le dio un gran trago para terminar su bebida en el momento

-hmm. Así es con todos los brujos. Tienes suerte, yo no suelo ser irritable.

-La mayoría del tiempo- Sonrió Taiyang. Lance lo miró tratando de parecer herido por las palabras pero una sonrisa reptando por sus labios lo hacía imposible.

Ambos se acercaron a la mesa y dejaron la comida. -Lista la cena!- Dijo Tai mirando hacia arriba desde su posición.

-Oh! Hamburguesas, ge- Aquella voz que el tanto adoraba se detuvo en seco al verle. Yang apretó el pasamanos de la escalera un poco al sentir una invasión de sentimientos a través de su mente. -Lance...

-Yang.- El brujo se inclinó levemente en una reverencia.

-Y-Ya ahh...no sabia que venias.- La cara de la rubia enrojecio por la confusión y la vergüenza. -Debiste haberme dicho que venias.

-Quería que fuera una sorpresa- Sonrió Lance.

-Ya...ya veo...-Yang soltó un largo suspiro y permitió una pequeña sonrisa en su rostro, esto deleitó al brujo.

Todos menos ella y el se sentaron, ella bajo de las escaleras y se acercó a el. Lo tocó con su única mano en la mejilla y el brujo respondió con un leve gruñido de relajación, casi como un ronroneo. Yang se rió.

Ella se acercó un paso más y el término de cerrar la distancia para abrazarla y besarla en los labios. -Te extrañé- Dijo él con suavidad.

-hmm...yo también, brujo.- Respondió con una sonrisa mientras devolvía el beso.

Tai se aclaró la voz ruidosamente, ambos rieron ante esto y se sentaron uno al lado del otro.

-No esperamos a Qrow?- El brujo miró a Taiyang quien solamente se encogió de hombros.

-El llega cuando quiere. Que hay de ti? Como te ha ido?- preguntó con curiosidad el mayor tomando una hamburguesa.

-Me trajiste algo?!- los ojos de Ruby se iluminaron mientras miraba al brujo quien negó con la cabeza. Ruby no oculto su puchero ni su gemido decepcionado.

-Lo olvidé, Ruby. Lo lamento. Estos últimos días han sido agotadores.

-Como es eso?- Dijo yang mientras mordía su comida. -Paso algo allá en Vale?

-No los primeros días. El equipo de exterminación de Grimm ha sido bastante eficaz, créditos a Atlas por eso en gran parte. Varios cazadores hicieron la mayor parte de la contribución.- El brujo se sirvió agua y dio un trago antes de empezar a comer.

-hmm. Entonces no pasó nada?- preguntó Taiyang terminando de tragar. El brujo levantó la mano para que supieran que estaba comiendo y una vez tragó resumió.

-no al principio no pero después si. Algunos vampiros aparecieron.

Los otros tres lo miraron con sorpresa y susto, para el brujo era lo más natural.

-V-vampiros...? Osea...colmillos y se transforman en murciélagos y eso?- Preguntó Tai.

-No, papá- Negó Ruby con la cabeza -No todos los vampiros son iguales. Hay algunos que si se asemejan a los humanos y pueden tomar sus formas pero otros son grandes y feos y-

-Veo que has estado leyendo el bestiario de Geralt.- Lance sonrió.

Ruby apretó los labios y bajo la cabeza con vergüenza. -A veces no puedo dormir y...ya que la Internet no funciona por la torre me pongo a leerlo...perdón.

-No, tranquila. Me alegra que lo hagas, de hecho. Es útil saber sobre monstruos...algún día te llevaré a cazar conmigo si gustas.

-En serio?!- Ruby salto en su lugar de la emoción.

-Algún dia- Rió Lance. -Ahora disfrutemos esto.

-Que paso en Vale? Con los vampiros?- Yang apretó la mano a Lance, su tono sonaba emocionado. El brujo se alegro de volver a escucharla hablando de esa manera.

-Cierto. Volviendo al tema...varios de ellos seguramente fueron atraídos por el olor seguramente, es algo natural después de todo...algunos otros debían de vivir allí ya, escondidos...seguramente toda la sangre los hizo actuar de manera primitiva y empezaron a atacar a algunos soldados y obreros de la zona de peligro...jamás había visto tantas alpas juntas y había una Bruxae entre ellas, resultó ser muy difícil perseguirla pero cuando encontré su escondite fue más metódico. Se habían escondido en un edificio derrumbado así que lo hice estallar con la ayuda de Glynda y Port, un par escaparon pero logre darles caza.

-Alpas? Bruxae? Esos son tipos de vampiros?

Lance abrió la boca pero Ruby respondió por el.

-Vampiresas. A simple vista parecen chicas comunes y corrientes pero en realidad son vampiros y atraen a los hombres con su belleza para beberles la sangre.- La respuesta de Ruby dejo impresionado al brujo y asintió con orgullo.

-Tengo que esconder ese libro...- Murmuró Taiyang.

Yang sonrió y lo miro a Lance -Tu no habrás caído por alguna de ellas no?

-Yo?- El brujo la miró a los ojos arqueando una ceja. -Por favor, puedo oler a un vampiro a decenas de metros de distancia antes de que mi medallon pueda vibrar. No hay chance.

-No me refería a los vampiros...me refería a otras bellas jóvenes.- Yang sonrió tratando de silenciar una risa.

-Me hieres Yang- replicó el brujo sonando ofendido. -Me clavas un puñal y me duele, no soy diferente a los humanos en eso.

-Oh yo haré mucho más que clavarte un puñal si me entero de algo.

-Yang...-Tai suspiro avergonzado pero el brujo solamente rió.

-Estoy seguro de ello. No te preocupes, no está dentro de mi lista de quehaceres.

-Mejor así- remarcó la joven acurrucandose de costado contra el brujo.

-Entonces...todo está bien ahora?

-Si. Al menos por ahora. Dentro de un par de semanas, quien sabe? Hasta algunos necrofagos podrían intentar colarse pero es muy poco probable y aunque pudiera pasar no es una amenaza que los cazadores no puedan resolver. Los Ghouls son primitivos y no son mejores que los Grimm, ellos pueden arreglarse.

-Y que harás ahora?- Taiyang miró al brujo por un momento para luego dar otro mordisco.

Ruby y Yang lo miraron también, deseosas de saber.

-Pensaba en quedarme por aquí una temporada, hasta que pase el frío o hasta que me llamen de nuevo al menos.- Respondió sonando indiferente. -Por supuesto si es que no tienes problema con eso Tai.

El padre negó con la cabeza -Por supuesto que no. Eres mas que bienvenido aquí, aun esta el cuarto de huéspedes libre así que puedes quedarte todo el tiempo que quieras...además si te dijera que no mis hijas me romperían las piernas.

-Ruby solamente te sostendria. Yo me encargaría del trabajo sucio.- Dijo Yang mirando a Ruby de una manera sospechosa para el brujo, Ruby rió y respondió con una risa y un guiño. Taiyang sintió un escalofrío reptando por su espalda.

-Heh, no hay por qué ser tan malignas. - Sonrió el brujo.

-Has podido averiguar algo de...eso?

La pregunta del hombre mayor tuvo un significativo peso en los pensamientos del brujo, este negó.

-No, nada...Mirvheil se desvaneció y bastante bien esta vez. No creo poder hallarlo y mucho menos si esta colaborando con la chica Cinder.

Todos hicieron una pausa por un momento, para comer y guardar respetos.

-Y el...el puede encontrarte?

-Improbable. Las veces que nos cruzamos aquí no son bajo las mismas circunstancias que en mi planeta. Debo asumir que el usó hidromancia o algún tipo diferente de magia para rastrearme cuando estaba en la tierra...aquí es diferente, tal vez su poder sea mas débil aquí de eso estoy casi seguro. Las veces que nos cruzamos aquí fueron coincidencia...bueno, no exactamente coincidencia pero ustedes entienden...sobre todo eso el quedo gravemente herido, es hasta posible que no haya sobrevivido al ataque pero...- Lance bajo la cabeza levemente -Es algo que no puedo decir con certeza...pero si se que esta herido y le tomará bastante tiempo recuperarse hasta con la ayuda de la magia y Cinder y su grupo.

-Como puedes estar seguro de que no intentará provocarte ahora?- Yang lo miro con una expresión preocupada. El brujo negó.

-Mirvheil es un ser maligno, lo mueve el odio y la venganza...pero es inteligente, de eso no hay duda. No intentará hacer nada estúpido si no tiene todas sus fuerzas.

-Y que hay de ella?- La pregunta de la pelirroja dejo en silencio al brujo. Yang miró a Ruby como regañandola, está bajo la cabeza a modo de disculpa.

-No lo se...ese si es un enigma. Lo más posible es que se encuentre con Mirvheil...de ser así tendrá algo más por lo que responder- El tono del brujo se volvió sombrío, oscuro y todos allí lo notaron.

Yang interrumpió el silencio y la tensión para tomar su mano y verlo a la cara. -Vas a ir a verlo?

El asintió volviendo su mirada a su plato -Si pero más tarde...ahora realmente estoy disfrutando este momento.- El brujo sonrió dejando el corazón de la joven en un estado de alivio mientras apretaba su mano.

Un nuevo silencio asentó en la mesa, uno con aires de calma y una sensación de bienestar. Taiyang no pudo esconder su sonrisa al ver la felicidad de su hija, el se había equivocado con el brujo y se había arrepentido con el sobre el tema pero Lance trató el tema con indiferencia como si su aprobación a el no le importara lo más mínimo...así era.

Ruby apretó los labios y se encontró inquieta en su asiento mirando a Lance fijamente como le sonreía a Yang. La pelirroja pensó que era el mejor momento y con increíble rapidez arrojó algo en dirección al brujo.

Lance se llevó una mano a la cara y apretó el cuchillo entre su dedo índice y su dedo de en medio, deteniendo su trayectoria justo antes de que se introdujera en su ojo. Taiyang y Yang lo miraron boquiabiertos, después a Ruby.

-Ruby!- regañaron los dos al mismo tiempo.

-Perdón perdón!- La pelirroja bajo la cabeza pero sin parecer apenada realmente. -Solo quería enseñarle a Lance...

-Muy bien, de hecho. Haz estado practicado pero recuerda usar el dedo del medio para guiar el cuchillo, el índice y el anular para sostenerlo.- dijo el brujo aplaudiendo a Ruby quien le brillaban los ojos y asentía con esmero.

-No puedo creer que les estés enseñando a mi hija técnicas de asesinos...- Suspiro Tai.

-No son técnicas de asesinos. Son herramientas, saber arrojar un cuchillo jamás está de más en ninguna situación. Imagínate estar sin tu arma.

-Mis puños son mis armas!- Tai rió -que acaso arrojare cuchillos con la boca si los pierdo?

El brujo se llevó la mano a la barbilla para pensar en sus palabras -Hmm...una vez vi una chica elfa arrojar cuchillos con los pies, muy talentosa.

-Oh vete al diablo.- Todos rieron ante la respuesta irritada del hombre.

La noche prosiguió de la misma animada manera con algunas de las historias de Lance sobre sus aventuras por su tierra y las jóvenes aprendiendo a jugar Gwent con el mazo del brujo que siempre tenía otro de reserva.
El tiempo decidió pasar lento para ellos, dándoles un hermoso momento y un merecido descanso entre toda la tormenta de problemas y tragedias que tuvieron que soportar...ellos estaban vivos y debían ser felices por aquellos que no lo lograron...al menos eso se decían pero no estaba bien, la calma era solamente aparente y el brujo lo sabía. Todas esas sonrisas llenas de alegría y esas joviales risas solamente era una fachada, un intento para sabotear lo que sus mentes no querían seguir pensando.

El brujo subió las escaleras con Yang a su lado, las luces apagadas y la hora de dormir había asentado gracias a Tai que mando a dormir a todos como excusa para que Lance y Yang pudieran tener un tiempo a solas, el brujo agradeció al padre por dejarlo dormir en la habitación de su hija...con ella a lo que Taiyang por supuesto respondió con un "Nada de cosas de adultos en mi casa, Lance" el brujo se mostró indignado pero por dentro estaba chasqueando la lengua con molestia.

Yang se movió en sus pijamas y se acostó en su cama, ella le miró mientras el se desabrochaba las placas de cuero y cota de malla de los hombros y se removía el cinturón cruzado en su pecho que portaba las dos vainas de sus espadas. Se aflojó el corset y se sacó finalmente el resto de la armadura que le cubría el torso, dejándolo solamente con una camiseta lisa blanca, su pantalón con placas y sus botas de expedición, se las removió también. Al final solamente quedo en camisa y paños menores cuando se subió al lado de su compañera rubia que lo recibió con los...bueno con un brazo abierto, el brujo correspondió el abrazo.

Ninguno se dijo nada, no era el momento para palabras y en eso estaban de acuerdo. Ambos pasaron un breve momento mirándose a los ojos y se besaron con ganas sin dejar reservas. Un beso bruto que contenía las ganas de meses que se habían reservado para ellos mismos, un beso que había durado tanto que para cuando se separaron ambos se encontraron estando desnudos y sus cuerpos pegados en una posición comprometedora con el arriba de ella, sus cabellos olían a perfume y shampoo ya no estaba ese olor a pólvora al que se había acostumbrado en ella...todo había cambiado.

Cuando se dieron cuenta ya era tarde, pues no podían detenerse, así que solamente presionaron adelante el uno contra el otro hasta que ambos soltaron un suspiro de placer cuando sus cuerpos se conectaron una vez más.

Paso un rato, el brujo no podía saber cuanto pero estaba seguro de que al menos dos horas habían pasado. Ella estaba sobre su pecho, rodeando sus piernas en su cintura enganchada a el, con la cabeza escondida en su cuello y su cara respirandole en el pectoral.

-Realmente necesitaba eso...- Suspiro ella mientras empezaba a acariciar el pecho del brujo con su mano.

-Somos dos...tu padre va a estar molesto sin embargo.

-Que se moleste, ya soy casi adulta.

-Me refería al hecho de que estamos teniendo relaciones en su propia casa. Es de mala educación.

Yang sonrió y se movió contra el brujo causando que ambos suspiraran de súbito placer. -No me importa~

El brujo rió bajito -Niña malcriada.

-Brujo tonto.

Ambos se miraron a los ojos y se dieron un beso en los labios, un tierno beso...pero era un beso diferente a los otros, este no era un beso como cualquiera ya que en el estaban las cargas y las preocupaciones de ambos.
Después de ese beso ambos suspiraron y empezaron a hablar.

-Como esta tu ojo?- preguntó ella.

-Sanando. Seré capaz de usarlo en dos o tres semanas

-Me alegra- Sonrió la joven.

-Como esta tu brazo?- El brujo apretó el abrazo entre ambos, el sabia que era un tema muy delicado para ella y pensó que su tono de indiferencia podría tal vez no sonar con la preocupación que el le puso...pero ella le entendió, le entendió a la perfección. Ella sabía que estaba con un brujo.

-Ya no tengo nada...literalmente. heh...

-Yang...

-Está bien- Respondió con leve molestia.- El general Ironwood me envió una prótesis de atlas para reemplazarlo...y es hasta posible que con el pueda volver a ser yo de antes pero...no lo se.

-No se sentiría natural? Como parte de ti?

Yang miró a la nada antes de suspirar y dar su respuesta -Eso creo...no se que voy a sentir, sentiré que tengo un brazo siquiera? O es...solamente un pedazo de metal frío...- La joven tembló por unos momentos ante la sensación y luego lo miro a el a los ojos. -Que crees tu?

El brujo dirigió la mirada al techo mientras acariciaba la sien de Yang con sus dedos. -Hmmm...no lo se. Creo que si llegara a perder un brazo seguiría luchando sin el...de todas formas de donde vengo estamos a miles y tal vez decenas de miles de años es desarrollar una tecnología tan exacta o precisa...pero si tuviera la oportunidad tal vez la tomaría.- Lance bajo la mirada para reasegurar a la joven.

-Solamente para hacer la prueba, si no resulta pues seguiría trabajando sin un brazo. Muchos brujos reconocidos han perdido brazos o piernas y sin embargo se las han arreglado segun la situaciones se fueron desempeñando.- Concluyó el brujo.

-Ya veo...entonces crees que debería aceptarlo?

-Digo que al menos deberías probarlo...el cambio siempre asusta, pero debemos estar abiertos a el para sobrevivir.

Yang suspiró y asintió levemente con un bostezo. -Lo pensaré...de todas formas no puedo quedarme aquí sabiendo que tu y Ruby planean irse a perseguir a Cinder.

-Yang, yo no-

-Oh vamos, no intentes jugar esa conmigo.- La rubia sonrió y detectó la culpa en los ojos del brujo. -Es increíblemente obvio que quieres ir.

Lance suspiro pesadamente -Vamos a hacer de esto algo más grande de lo que es en verdad?-

-No, solo estaba tratando de decirte que no necesitas mentirme...esta bien si quieres ir.

El brujo abrió los ojos con sorpresa y bajo la vista para verle a la cara -Hablas en serio?

-Me estas jodiendo? Si mi padre hubiera muerto habría salido corriendo a Haven hace rato ya...me alegra que no lo hayas hecho tu por ahora pero...- La rubia suspiro en su pecho y le dirigió la mirada a su único ojo visible. -Se que tienes que hacerlo...eso va más allá de ser un brujo o de cualquier excusa.

El brujo no respondió este solamente se aferro con más fuerza a su amante y los tapó a ambos con las mantas para protegerlos del frío del invierno. El lo sabía, nada estaba resuelto...era libre al fin y si lo deseaba podría irse a donde quisiera y nadie lo detendría de ello, podría subirse a su caballo y vagar hacia el horizonte como cualquier brujo.

Que seas un brujo no significa que debas vivir como uno

Esas palabras sonaban en su cabeza incesantemente. El brujo giró la cabeza para mirar un pequeño montículo de nieve que se acumulaba afuera de la ventana, pensando como fue que llegaron a este punto.

Beacon. Meses antes de la caída de Beacon.

-Tu lo tienes, Lance. Acabalo!- Vitoreo la pelirroja.

El joven brujo tenía una sonrisa llena de astucia y picardia mientras enfrentaba a su oponente, Geralt de rivia.

Geralt sostenía una cara seria mientras lo miraba directamente a los ojos ignorando a los demás a su alrededor, Lance podía jurar que veía una pequeña llama en estos.

El equipo RWBY los miraba sintiendo la tensión en el aire que casi se podía cortar con un cuchillo. Ambos brujos se miraban con deseo de destruirse el uno al otro.

Una batalla decisiva estaba tomando lugar y ninguno iba a ceder terreno.