Peleas


Era una mañana común, las discusiones de nuestros dos personajes ya eran costumbre de verse, la razón de esta fue por la intromisión de la eriza rosa en los asuntos del azabache vetado.

Shadow: Valla que tienes muy pocos valores, de alguna forma me impresiona que seas más entrometida que Rouge –Se sirve una copa de vino tinto y lo degusta lentamente, a este paso se le derramaría la bilis por tanto coraje.

Amy: Ni que fuera para tanto –Pasa a un lado del huraño quedando recargada en el marco de la puerta.

Sus amigos solo los observaban con atención, hace mucho dejaron de intentar separarlos, en realidad, estaban de acuerdo con el vetado, después de las cosas que hizo la rosada se les dificulta creer que quiera estar en esa casa.

Shadow se acercó a Amy cautelosamente por detrás, cuando estuvo a una distancia considerable, le derramo lo que le quedaba de vino encima, la expresión de la hembra era una joya para todos, completa sorpresa y humillación.

S: Esto no es para tanto.

Amy ni si quiera lo volteo a ver, se enfocó en su vestido verde agua semi-nuevo, incluso el líquido llego a sus zapatos, decidida agarro una taza de café para aventarla sobre la camisa blanca del azabache, llegando a manchar la parte superior del pantalón.

Algo esta a punto de suceder, instintivamente los dos zoomorfos salieron al patio seguidos del Team, solo que estos se quedaron en la puerta a una distancia considerable.

S: Tu falta de respeto ya me está cansando, sabes perfectamente que no perteneces aquí.

A: No puedes obligarme a irme, llegue mucho antes que tú –Se prepara e invoca su martillo poniéndose en posición de batalla.

S: Eso no cuenta en nada, ¿Olvidaste las decisiones que tomaste? Regresaste con el rabo entre las piernas justo como te lo había dicho, ¿Enserio pensaste que íbamos a aceptarte como si nada hubiera pasado? No eres más que una eriza rastrera y barata no vales nada Rose, mejor vete con tus amiguitos ¡Oh cierto! Les dieron su merecido...

A: ¡Yabasta! No tienes el derecho de llamarme así  –Se lanza hacia él iniciando una pelea cuerpo a cuerpo.

S: -La esquiva y la de propina una patada por detrás - ¿Entonces quien tiene ese derecho? –Se le abalanza tomándola del cuello –Aun recuerdo como te excitaba que te dijeran perra mientras te la metían –Sostiene el martillo de la contraria –No eres digna de nada, te volviste una completa escoria.

Terminando esto la deja caer al suelo, sujeta el martillo y lo estampa contra la cabeza de la eriza.

Nadie dijo nada, solo le abrieron paso a Shadow cuando entro de nuevo a la casa, todos lo siguieron y continuaron con lo suyo. Mientras, Amy se mantenía en el suelo, en ningún momento se había desmayado, pero era mejor esperar a que el dolor pasara, volteo su mirada hacia unas flores ya marchitas...

Señorita Amy aquí está su corona jejejeje...

Estas flores simbolizan nuestra familia, están más bellas que nunca.

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Ya era tarde, un baño de agua caliente no pudo ser mejor opción en esta ocasión, miro atentamente su cuarto, muchas cosas se encontraban tiradas o mal puesta.

- ¿Qué voy a hacer? Solo dame una señal

Baja a la cocina a prepararse algo de cenar, después de todo no había comido en todo el día, vio al azabache en la sala leyendo un libro.

A: ¿Dónde están los demás?

S: Salieron.

Curiosamente, el dispositivo de Shadow estaba sobre la barra, lo agarra y desbloquea sigilosamente mientras finge estar haciendo su comida, en un momento abrió el refrigerador para "sacar unas verduras"

S: Sigues de metiche en todo, ¿Verdad? –Dice esto haciendo exaltar a la hembra frente a él. De manera rápida cierra el refrigerador y acorrala a la eriza contra la cubierta.

S: Ya fue suficiente de tu insolencia, te hare entender todo a tu manera.

A: ¡Shadow basta! –Comienza a gritar y patalear al sentir como alza su vestido rojo, no puede ver la expresión de él puesto que esta de espaldas - ¡NO LO HAGAS!

El macho hace caso omiso a los quejidos de ella, para asegurar que no se mueva mucho la sujeta de las muñecas con una mano y las sostiene fuerte sobre su espalda baja, mientras que con la otra baja la trusa de encaje y prepara la entrada introduciendo su pene en ella.

-¡S-shadow detent... AH! Sin duda estaba siendo brusco, las lágrimas de la pequeña peli-rosa desbordaban desesperadamente al tiempo que sentía las embestidas del vetado más rápidas que al principio y más adentro de lo que alguien hubiese llegado.

¿Qué había hecho para merecer esto? Porque en realidad no lo merecía, ¿O sí? Entonces, recordó lo que hizo, las decisiones que tomo, sabía perfectamente las consecuencias de todo aquello, pero no le dio importancia, por su culpa Shadow es así de serio y desconfiado con los otros, ella tiene la culpa de la fractura en ese hogar.

Ni en sus más locas y horribles pesadillas vio lo que en la actualidad vive, su mejor amiga se había ido muy decepcionada, el Team ni siquiera le dirigía la mirada, ni hablar de su más confiable y querido amigo el cual ahora la trata menos que una cualquiera violándola de una manera tan hiriente.

Claro que lo merecía, su llanto se volvió amargo y dejo de gritar, al poco tiempo Shadow sale de ella para venirse en el lavabo.

S: Espero te haya quedado claro –Toma su dispositivo junto con su libro para poder irse de la casa.

A: Fue más que eso.

La eriza empaco todas sus cosas, lo roto lo tiro, los muebles los acomodo e incluso limpio el sótano luego de sacar sus pertenencias. En la madrugada un camión había llegado para llevarse todo a otro lugar, Amy volteo a ver una última vez lo que considero su hogar diciendo por ultimo...

Lo siento

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