Heather.

Dean estába apoyado en la puerta, con sus brazos cruzados. Automáticamente me aleje de Liam dando un paso atrás.

- Hey Dean, ¿qué haces aquí? -le pregunté de la manera más casual del mundo. Pues suponía que a esta hora estaba en la universidad.

- Pues aquí vivo. -dice Dean, y se acerca a nosotros hasta quedar al frente de Liam- ¿Tú qué haces aquí?

- Yo vine a traer a Heather a casa. Supongo eres su hermano.

- Hermano mayor -dice Dean tratando de sonar amenazante, pero vamos, es Dean.

- Ah, qué bien, yo soy Liam, un gusto conocerte - Liam le extiende la mano y Dean se la da saludándolo.

- ¿Liam qué?

- Sanderson.

- Me refiero a ¿qué eres? ¿novio, amigo, aman...

- Es mi compañero de escuela, y ya se tiene que ir -digo interrumpiendo- Liam es un chico muy ocupado y tiene que ir a practicar-Obviamente estoy mintiendo, no quiero que Dean haga como hizo con Michael, de mi antigua escuela, quien termino huyendo de mi casa luego de que Dean y mi padre se encargarán de ahuyentarlo con un largo interrogatorio. Hasta yo quería huir de mi casa ese día.

- ¿Qué práctica? -pregunta Dean queriendo sacar información de Liam. Para interpretar a Sherlock Holmes búsquenlo.

- Sí, ¿qué práctico? -me pregunta Liam, gira hacía donde mi cruzado de brazos expectante por mi respuesta.

- No ayudas Liam. Como sea, gracias por traerme, espero verte mañana.

- Adiós Heather, y adiós Dean. Y bien, nos vemos mañana.

Liam se acerca a mí para darme un abrazo de despedida o algo, pero Dean toce haciendo que Liam se devolviera y se montara en su carro. «Gracias hermano» pensé irónicamente.

Entro a la casa con Dean siguiéndome el paso.

- Hermana, ¿tan pronto ya tienes novio? Dios, sé que tienes la genética Peterson, pero espérate un poco, chica, debes calmarte ¿okey? -dice Dean bromeando un poco.

- Ay Dean, no es mi novio, casi y lo conozco de hoy. Simplemente afuera paso algo que...- Estaba pensando en como explicarle sin que lo malinterprete, pero nada se me ocurrió, es Dean-, bueno nos estábamos despidiendo.

- Pues Dede, la gente se despide con abrazos, no con besos..., que yo sepa.

- Bueno Bro, como dijiste; que tú sepas.

Dean coge la almohada del sofá y me la lanza, así es como empezamos una guerra de almohadas, y como toda guerra de almohadas, siempre hay un final trágico, y pues esta no fue la excepción. Así fue como por un almohadazo de Dean, el jarrón de mamá cae en el suelo.

Las risas de nuestra antigua pelea cesaron, y los dos nos miramos serios a los ojos.

- Ni tú dices nada, ni yo tampoco -dice Dean analizando la situación.

- Me parece perfecto, pero en cuánto crees que se dará cuenta mamá.

- Veremos cuanto nos dura la mentira -dice él, y se dispone a limpiar las piezas junto a mí.

Luego de que llegará mi familia y que todos cenemos me dispongo a subir a mi habitación.

Me siento en mi escritorio y busco una película en la computadora, justo cuando la voy a empezar diviso en la ventana de al frente a mi vecino, Allek. Él apenas cruza delante de la ventana ya que de una vez se va hacía otro lado.

Allek me dio su número hace dos días y todavía no le he escrito, tal vez hoy ya debería saludarlo.

Saco mi celular y busco su número en Whatsapp, ya que antes lo había agenda-do.

Entro en el chat y me dedico a saludarlo.

¡Hola Allek! ¿Qué tal? ¿Sabes quién te habla? Es Heather, la chica de al lado.

Bueno, mejor así no, suena muy formal. Borro el mensaje y escribo otra vez.

Hello Allek, ¿sabes quién soy?

Automáticamente leo el mensaje en mi mente me doy cuenta que es algo estúpido, cómo él sabría quién soy si nunca le he escrito.

Así que decido saludar con un amable y cordial...

Hola.

Chequeo que el mensaje se haya enviado para luego seguir con la película. Poco después de ponerme a ver la película recibo un mensaje de Allek.

¿Quién es?

Diablos señorito, ¿ni un hola?

Hola, ¿quién es?

Es un secreto que no se puede revelar. ¿Cómo estás?

¡Oh por Dios! ¿quién será que me escribe en secreto? Esto me intriga demasiado...

Está bien, no mueras, es Heather.

Mmm, si, no sé quién es, xd.

Leo su mensaje, y me deja algo perpleja, pues, pensaba que al menos se sabía mi nombre. O que se acordaría de el. Me quedo mirando la pantalla del celular a ver si pondrá algo más, pero no.

Y tampoco es que se tendría que acordar de mí, digo, apenas me conoce hace como tres días.

Antonella no me llama Drama queen por nada.

Dejo el celular sobre el escritorio y le doy play a la película, esta se llama The Have U Give. Otra vez el tono de mi celular empieza a sonar, pero esta vez me doy cuenta de que es una llamada, de Allek, lo que me toma por sorpresa, ¿qué haría llamando a un desconocido?

- Aló.

- Heather, ¿cómo estás? -pregunta Allek por el celular. Su voz suena ligeramente más ronca que lo usual.

- ¿No que no sabías quién soy?

- Pues, era una broma, ¿qué no la sabes reconocer?

- Gran chiste, Allek -le respondo siendo sarcástica, ya que, vamos, llamar chiste a eso, es un insulto a los chistes malos.

- En realidad sólo estaba tratando de ser interesante, pero resulta que se me hace imposible. Creo que moriré solo.

- Si morirás solo, ¿qué nos queda a los simples mortales? Sólo digo que... -me di cuenta que iba a empezar a halagarlo pero vamos, creo que él ya tiene bastante ego para incrementarlo.

- ¿Qué dices? -pregunta Allek, luego de eso escucho como algo se cae, un sonido algo fuerte, pero rápidamente él me informa que paso- Mierda, se me cayó el celular.

Automáticamente empiezo a reír como loca, mi sentido del humor aveces puede ser muy simple.

- Dios, eres tan torpe -digo entre risas-. ¿Se rompió?

- No, bueno, creo que no.

- ¿Cómo que crees? O sea, ¿no lo ves?

- Sí, es que antes estaba muy roto, entonces no creo que tenga más que antes, si se puede romper más mi pobre teléfono. Como sea, ¿podrías pararte frente a la ventana?

Tal como Allek me sugirió me acerqué a la ventana de mi cuarto y lo vi en la ventana de su habitación, él estaba sentado en la ventana de su habitación con los pies hacía afuera, llevaba un abrigo azul oscuro, un t-shirt blanco debajo y un pantalón de pijama.

- ¿Estás loco? ¿Y si te caes? -le digo mientras estoy parada al frente de la ventana viéndolo viéndome, él me guiña un ojo y sonríe.

- No sería la primera vez que me caigo de un segundo piso. Además así podemos hablar de frente, ¿no crees?

- Sabes, vivimos literalmente al lado, podrías venir a mi casa y así hablamos sin tener un patio entre nosotros -le sugiero diciéndole lo obvio.

- Oh, claro, ¿cómo no lo pensé? De haberlo pensado me aparezco en tu casa a las 11 y digo, hola padres de Heather, sólo vine a hablar un rato con su hija a las 11.

- Pues no sé, te podrías escabullir en mi habitación por la ventana como ya lo hiciste unas, no sé, 20 veces.

¿Qué acabo de decir? Claro que es muy normal decirle a un recién conocido que vaya a tu habitación.

- ¿Me estás ofreciendo escabullirme en tu habitación? ¡Por Dios señorita Heather, esa es un propuesta indecente! Pero si quieres sí. - Al terminar de decir eso, Allek se empieza a reír, él tiene una risa muy particular, se ríe a carcajadas sin poder parar. Parece una foca. Una foca linda.

- Sabes lo que quiero decir, ¿okey? -Luego de que la fuerte risa de Allek cesara, me surge la idea de preguntarle algo, que aunque no ha rondado tanto por mi cabeza, me siento algo preocupada al respecto, qué tenía a Allek tan deprimido la vez que lo abrace- Oye Allek...

-¿Sí? - Pregunta volviendo a prestar atención a la conversación y dejando la risa de lado. A él al parecer le empiezan a caer copos de nieve en el cabello ya que se lo sacude y luego lo peina hacía atrás.

Damn, se vio muy sexy.

- Sé que acabo de llegar aquí, y soy prácticamente nadie para ti y...

- No digas eso -dice interrumpiéndome Allek- Para mí eres Heather -Al terminar de hacer eso, hace la mitad de un corazón con su mano izquierda ya que con la derecha agarra el celular.

- JA, JA, muy chistoso -le digo mientras le hago una mueca.

- Es una de mis grandes cualidades ser gracioso.

- Bueno amigo, si esa es tu gran cualidad..., ya veo porqué morirás solo.

- Dije; una de mis grandes cualidades -me corrige.

- Disculpa por equivocarme, su majestad, como decía, sé que acabo de prácticamente llegar aquí, pero me gustaría saber si estás bien, ¿lo estás?

- Mmm, sí, ¿por qué? -pregunta Allek algo confundido, he imagino que no sabe que le pregunto por lo del otro día.

- Me alegro, pero, seré más especifica sobre lo que quiero hablarte. Él día que nos conocimos, en el que estabas afuera, muy triste, pues, si quieres me lo puedes contar, como ya te dije apenas me conoces pero si no tienes a nadie con quién hablar tus problemas, puedes contarme lo que sea, ¿bien?

- Gracias por preocuparte Heather, pero son problemas familiares y sinceramente no quiero hablar contigo ni con nadie al respecto -responde muy sincero.

- Sea lo que sea, espero mejoré.

- Pues, está mucho mejor todo, créeme -responde Allek y se encoje de hombros, al parecer mi pregunta lo incomodo ya que se ha quedado callado y cabizbajo.

- Mmm, bueno estoy viendo una película así que..., hablamos después, bye.

- Adiós Heather, me alegro mucho hablar contigo hoy, buenas noches - Allek cuelga la llamada y entra a su habitación, para luego cerrar la ventana, yo hago lo mismo y continúo viendo la película.

¡Jelouuu! Este es el nuevo cap de hoy, espero les haya gustado. Déjenme decirles que el próximo capitulo vendrá algo fuerte, sólo alguito. Heather se dará un beso con ________.

¿Ustedes quién creen que sea? Chan, chan, chan.

Anyway, si les gusto voten y comenten, ¡no tengan pena! Amo leer los comentarios con todo mi heart<3.