//feliz año nuevo, gracias por los 34k 😍, disculpen la demora :c//

Magnus mira los labios del alfa, sus ojos están llorosos y no puede creer que la palabra es cierta, su cerebro está aún paralizado.

—Vamos a casarnos —susurra el alfa en su oído haciéndolo estremecer.

—Si —susurró, aunque el quería gritar pero su cuerpo está temblando.

Se encuentra sentado en las piernas dale más alto, las manos de este se encuentran en su espalda baja y las del Omega se aferran al cuello del pelinegro.

—Seguiré trabajando, en la hora de descanso vamos a comer y te llevaré a otro lugar.

—¡No quiero irme! —grita alarmado el Omega, sus mejillas se tornan rojas.

La risa del mayor es hermosa.

—Nadie dijo que lo harías, quédate aquí, me gusta tener tu olor cerca.

La puerta fue tocada el alfa checo a su Omega, y acomodó su ropa.

—Pase.

Una chica beta entro, sus ojos verdes llamativos fueron a la escena y no paso a desapercibida su mirada de molestia.

—Jefe —su voz no sonaba nada decente —, debería de ir a mí oficina, nuevamente.

El Omega la vio con molestia y pego su rostro al cuello del alfa, quien le transmitía calma.

—Vuelve a tu oficina, toma tus cosas y lárgate. No me gustan las mentiras y menos frente a mi Omega.

Algo que no podía soportar era al acoso y tolero demasiado a esa chica pero estar haciendo y diciendo tales cosas y más haber dicho algo frente a su Omega le molestó demasiado.

Martco a su secretaria y ordenó que la sacarán de su oficina ya que se negaba, cuando finalmente está fue retirada el Omega estaba acomodado sobre su pecho dormido, sus ojos cerrados y respirando lentamente.

Podía sentir a su alfa tranquilo h feliz de tener a su Omega ahí. Porque Magnus era hermoso y si, no le gustan las almejas y anduvo con tantas personas de una noche peor en ese momento y para su futuro solamente quería estar con una.

Su Omega.

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Cuando el más alto termino su trabajo movió lentamente a su pareja haciendo que esté empezará a despertarse.

—Vamos a comer, ya es hora —dijó en un tono bajo, el más chico se tallo los ojos y se levantó con cuidado sintiendose un poco desorientado.

El alfa le siguió y tomó su mano que a comparación de la de el Omega, era grande, beso la frente de su pareja y después le robo un corto beso en los labios.

—Alec —susurró el Omega queriendo más caricias de su alfa.

—Debemos ir a comer algo —hablo y con un Omega molesto camino fuera.

Fueron hasta el estacionamiento donde dejo su coche al entrar ambos sus ojos fueron al Omega quien empezó a sentir el olor del alfa más fuerte, su Omega reaccionó rápidamente.

—Vamos a comprar pizzas en un car service y después iremos a las afueras de la ciudad, yo te indico tengo una casa ahí.

El alfa le vio con duda pero se la guardo, cuando pidió la comida le había atendido una Omega y pido sentir como su pareja estaba griñendole a la chica.

Algo andaba raro.