Bright había empezado a investigar, desde el día en que su mejor amigo le contó lo que le estaba pasando.

Creía en sus palabras, en que sentía que había encontrado a su destinado, en este caso a sus dos destinados. Pero era una cosa extraña, pues nunca había escuchado hablar de algo así, además de que el mismo Chimon y hasta su primo Gun le habían comentado que los alfas dueños de la compañía eran pareja y le asustaba que su amigo saliera lastimado en todo este enredo.

No estaba en contra de las relaciones fuera de lo "común" o "normal" como la gente decía, pues él mismo estaba en una de esas relaciones. Su novio Win era omega, igual que él y eso no había representado impedimento para que se enamoraran el uno del otro.

Ahora, ellos, conocían los detalles por boca del propio Chimon, pero no se limitaron a sólo la búsqueda en Internet, como el primer día.

Bright y Win, fueron a la biblioteca de la ciudad y leyeron todos los libros que mencionaran algo al respecto e incluso contactaron a un sujeto que decía saber mucho sobre múltiples destinados.

Entre los libros de la biblioteca encontraron uno sobre leyendas ancestrales en el que se mencionaba a los antiguos cambiaformas que habían sido almas fuertes y dominantes, capaces de reencarnar después de la muerte en más de un individuo y de ahí provenían las historias de destinados. Dos mitades de una sola alma que se reunirán a través de los tiempos en una y más vidas, para volver a conectarse y convertirse en uno.

Sin embargo, existieron almas tan fuertes que lograban dividir su esencia en más de dos partes y según lo que decía el libro muy pocas de esas almas lograban reunir todas sus partes en una misma vida. Pero de hacerlo la conexión era tan fuerte como irrompible. Almas capaces de vencer cualquier obstáculo.

La información obtenida del libro les daba a los omegas que investigaban, una perspectiva del destino que le había tocado a su amigo, pero no se quedarían solo con eso y fue así que también contactaron con el que se suponía era un experto en estos casos, al parecer poco frecuentes, pero no imposibles.

Obtuvieron la información de contacto del sujeto en la guía telefónica, debajo de un anuncio que decía "Experto en relaciones y multi-parejas". Esperaban que fuera de ayuda.

Hicieron la llamada telefónica al número que aparecía en el directorio.

—Hola.

—Sí, hola ¿Es el señor Wang?

—Él habla. ¿En qué puedo ayudarlo?

—Queremos programar una cita y obtener sus servicios, por favor.

—¿Queremos? ¿Son una pareja en busca de ayuda?

Win era quien hablaba al teléfono, realmente nervioso por no saber si con quien hablaban era un charlatán que quisiera aprovecharse de las personas.

—No exactamente señor Wang. Pero si necesitamos de sus servicios en el tema o al menos un poco de información que nos ayude con una investigación que estamos realizando.

—Okey. Tengo un espacio libre esta tarde. Puedo recibirlos si están de acuerdo.

—Está bien para nosotros señor ¿A qué hora sería?

Concertaron la cita con el experto. Estaban realmente intrigados con el tema y deseaban poder aclararle a su amigo las muchas dudas que tenía.

Llegó la hora de la cita con el "experto" y ya se encontraban en la sala de una casa de aspecto elegante y clásico. Ni siquiera había un rótulo que lo identificará como ¿consultorio?

Bueno, ya estaban ahí y fueron recibidos por una chica muy bonita, que por su aroma y la marca en su cuello dejaba ver que era una omega.

—Buenas tardes. Tenemos una cita con el señor Wang.

—Si. Pasen por acá, por favor. Mi nombre es Rosé y si necesitan algo solo avísenme. Jackson los atenderá en un instante.

Entraron a una habitación que parecía una oficina y esperaron por un par de minutos hasta que apareció la persona a la que buscaban.

—¡Bienvenidos! Soy Jackson Wang. Tomen asiento y explíquenme cuál es el motivo de su visita, consulta o cómo lo quieran llamar.

—Soy Bright Vachirawit Atthaphan y como le comentamos por teléfono, tenemos un amigo que se encuentra en una situación algo complicada y creemos que quizá usted pueda ayudarnos.

Contaron los detalles al alfa frente a ellos y esperaron expectantes a lo que este les fuera a decir.

—Veo que se han informado bastante bien, pero hay algunos detalles que han sido omitidos en los libros. Su amigo omega si está conectado a esos dos alfas de la manera en que los textos lo exponen. Ellos ya deben haberse dado cuenta del lazo que se empezó a formar desde que se vieron y olieron la primera vez. —explicó el Hombre. Un alfa a todas luces— Son casos, realmente raros, ya que no hay muchos o al menos no tantos que sean conocidos. Este es un tema tabú en la sociedad, como muchos otros y no se habla mucho de ello por la misma razón.

—Pero esos dos alfas ya están en una relación ¿En qué posición queda nuestro amigo en todo eso? Si ellos no están de acuerdo en aceptarlo como su omega.

—Los alfas están juntos por una razón. Ellos se encontraron primero hace tiempo. Se han reconocido y acoplado, pero han dado en cuenta que les falta una pieza en su conexión, por eso es que ninguno ha marcado al otro y no piensan en convertirse en delta porque sus lobos han estado esperando por el omega que les corresponde y ahora que lo han encontrado es cuestión de tiempo para que la necesidad de marcarlo como suyo surja, así como el deseo del omega por recibir la marca de sus alfas.

—Pero eso es imposible. Todos saben que, si un omega recibe una marca y luego es mordido por otro alfa, el primer lazo se rompe.

—No en este caso. Ellos están destinados a ser y estar unidos. El lazo ya se empezó a formar entre los tres y la marca sólo va a reforzarlo cuando llegue el momento, y hay un ritual de apareamiento en el que ambos alfas podrán marcar al omega a la vez y emparejarse como se debe.

—Disculpe la pregunta señor Wang, pero ¿Cómo es que sabe usted todas estas cosas?

—Todas las personas que vienen en busca de mi ayuda hacen la misma pregunta. Mis antepasados pasaron por estas experiencias, desde siglos atrás. Mis bisabuelos fueron un alfa y un omega enlazados a un beta, y los tíos de estos eran dos alfas enlazados a un omega como su amigo y sus jefes. Eso en el pasado. En la actualidad mi propio caso es un ejemplo.

—¿A qué se refiere señor Wang? —preguntó Win, curioso.

Win tenía mucha curiosidad y en ese preciso momento entró a la habitación un chico bastante hermoso quien saludó al hombre tras el escritorio con un casto beso.

—Pues déjenme presentarles a Joung. Él es mi omega desde hace cuatro años y la señorita que los recibió es Rosé, ella también es mi omega. Ambos llevan mi marca en el cuello como prueba de nuestro emparejamiento.

Win y Bright se quedaron helados con la revelación frente a ellos, tomados de la mano en un fuerte agarre por la impresión del nuevo descubrimiento. Pero estaban aliviados de por fin tener las respuestas que buscaban.

—Algo más jovencitos. —dijo el alfa frente a ellos— Puedo ver que ustedes son una pareja de omegas.

—¿Qué lo hace pensar eso?

Bright no era fan de exhibir su relación, pues no le gustaba que los malos comentarios y la crítica afectaran a Win. Aunque este no lo demostrara podía notarlo en su expresión cuando escuchaban a la gente hablar a sus espaldas.

—No hay que ser adivino para darse cuenta, muchacho. Sólo les diré que, así como existen parejas de alfas en las que uno de ellos se puede convertir en delta y sellar una unión y están los casos como el de su amigo o el mío propio, también hay casos de destinados omegas y puedo ver que ustedes son uno de esos. Sólo que se han dejado llevar por el qué dirán y no se han dado cuenta de que su conexión va más allá de solo amor. Deben escuchar a sus lobos y ellos les darán la respuesta. Si están dispuestos a estar juntos y olvidarse de las normas sociales también pueden sellar su lazo con una marca, sí y solo sí, uno de los dos considera convertirse en el gamma del otro.

» Salieron de la casa del experto con más información de la que buscaban y con muchas preguntas que solo ellos mismos podrían responderse. 

𝕰𝖛𝖎𝖎 𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ