Capítulo #6 (Lazos de sangre parte 3)

El funeral de mi tía Estíbaliz se llevó a cabo y con cientos de lágrimas en los ojos pasé su muerte de la peor manera al lamentarme el hecho de no haber podido salvado solo por estar peleando con mi abuelo Alexei, sin embargo pronto viví un segundo gran dolor al ver como se llevaban a mi tía Christelle de tan solo 2 días de nacida lejos de casa en lo que serían casi 43 años de ser una pobre huérfana, así que fue evidente de que se me partiera el alma en mil pedazos y debido a ese arranque de furia le grité muy feo a mis abuelos haciendo hasta lo imposible para detener a la supuesta pareja de ancianos que se la estaban llevando para Rusia luego de llorar, suplicar y casi sin poder respirar bien, pues sentía como el corazón se me rompía en mil pedazos al ver semejante crueldad con una pobre bebecita inocente.

-¡Tú Rachel!, ¡Tú eres la única culpable de la muerte de tu hermana Liz! -aseguró mi abuelo Alexei con una expresión de dolor y desprecio, pues le hechó toda la culpa a mi pobre tía para sentirse mejor consigo mismo luego de ese gran dolor.

-¡Papá no me digas eso!, ¡A mi también me duele muchísimo toda esta desgracia, por favor! -dijo mi triste tía de tan solo 16 años mientras que bajaba la cabeza en señal de culpa aunque lo negara.

-¡Oh!, mira Fernando, ¡Ya vienen los Señores Corona! -dijo mi abuela estando algo arrepentida pero feliz por lo que haría, ya que literal fue casi obligada por mi abuelo.

-¡Ohhhhh!, ¡NO! -exclamé llorando muchísimo, ya que tomé a la pequeña niña recién nacida que sería mi tía Christelle entre mis brazos tras aferrarme a ella como una pulga en un animal callejero.

-¿Qué haces, eh?, ¡Suelta a esa niña AHORA!, pues Sofía Cristal será adoptada muy pronto y ya no hay marcha atrás, ¡Nosotros no podemos criarla! -aseguró mi abuelo Alexei cruzándose de brazos, ya que de la ira me arrebató a su propia hija de los brazos como si no le importara.

-¡Es que ustedes no lo entienden!, pues si ella es llevada a RUSIA será infeliz y crecerá llena de odio, ¡Creánme cuando les digo que ella estará mucho mejor aquí con ustedes su familia!, ya que casi fui asesinada por ella en más de una ocasión.

-¿Eh?

-¿Qué?, ¿La darán en adopción?, ¡Oh no!, ¡NO!, ¡Yo no quiero perder a otra hermana! -exclamó mi pobre tía Rachel hallándose bastante conmocionada y alterada, pues aún se estaba secando las lágrimas de los ojos por la espantosa muerte de su hermanita del medio.

-¿Cómo es que supiste acerca de que esta "mocosa" se iría a Rusia, eh?, ¿Nos estás espiando? -Preguntó mi abuelo Alexei mientras que fruncía el ceño tras encontrarse bastante confundido y preocupado.

-¡Ashh!, ya olvídalo Fer, ¡Ella es una insignificante niña insolente!, eso si, no permitas que impida la despedida de la niña, pues ella se irá lejos de aquí y jamás sabrá de nosotros o de sus verdaderos orígenes, además acuérdate que mañana es el CUMPLEAÑOS de Rachel, ¡Un año más y será mayor de edad, toda una mujercita! -aseguró mi abuela Inés con una gran sonrisa, ya que se encorvó de su cama tras estar recién mejorada del parto.

-¡Ohhhhh! -exclamé llena de pánico al saber lo que pronto pasaría con mi inocente tía Rachel.

Y fue ahí cuando esa parte de la historia SÍ pasó, pues nada cambió y mi tía fue alejada de su familia, nuestra familia dándome a entender la maldad oculta dentro del corazón de mi abuela al preferir dar una fiesta que cuidar de su propia hija, una bebé, una inocente criatura que no tuvo la culpa de nacer en una familia tan horrible años atrás, ya que Estíbaliz & Christelle habían sido literalmente borradas de nuestra familia "para siempre" rompiéndome el alma hasta el punto de querer gritar como loca de que yo era su nieta para cambiar la historia pero conforme pasaron los días supe que si llegaba a evitar la violación de mi tía mi prima Alondra JAMÁS habría nacido y por lo tanto yo no sería la heredera al trono de Rusia tras permitir aquella hazaña.

-Ahora sí Fernando, ¡Ya esa niña pasada no sabrá de nuestra relación!, pues muerto el perro las pulgas huyen. -aseguró mi abuela Inés con una expresión fría y desinteresada, pues se preparaba para cocinar.

-¿Pero qué carajos? -Pregunté escupiendo leche por la boca al hallarme anonada con lo que me dijeron esa mañana.

-¡Ya estoy harta en verdad de ti, eh mocosa!, ¡Pero ahora mismo te me vas de mi casa! -aseguró mi abuelo Alexei estando muy enojado, pues me tomó del cabello fuertemente.

-¡Ahhhh! -exclamé encontrándome adolorida y preocupada, pues lloré mucho al suplicar piedad.

-¡Padre!, ¡Madre!, ¡Hoy es mi cumpleaños #17!, ¡Finalmente falta poco para la mayoría de edad!, ¿Y ve harán una fiesta verdad? -afirmó de pronto mi tía Rachel estando muy feliz por su aniversario de vida, pues saltó de alegría a pesar de haber visto morir a una hermana días atrás y ser adoptada a la otra menor.

-¡Ohhhhh!, ¡Dios es verdad!, ¡Mi amor felicidades!, pronto tendremos que buscarte ESPOSO y la fiesta durará horas. -dijo mi abuela sorpresivamente abrazando a mi tía.

-Papá, ¡Escúchame solo por esta vez!, ¡Por favor no eches a esta chica mugrosa aún!, pues debe ser testigo de como yo celebro mi cumpleaños a lo grande, ¡Ashh!, no se porqué rayos pero ella me parece de algún modo fa... Familiar. -aseguró mi tía Rachel con una mirada de codicia e interés, pues solo pretendía lucirse conmigo.

-Hmm... Dile a tu madre, ¡Yo no tengo nada que ver contigo!, recuerda que tú eres culpable de la muerte de tu hermana Estíbaliz. -exclamó mi abuelo Alexei con una mirada de desprecio, ya que desde ese momento odiaba a mi tía sin aún haber sido cruelmente violada.

-¡Ohhhh!, ¿Por qué eres así de malo, eh?, ¡Yo no soy culpable!

-¡Basta!, ¡No quiero peleas!, y si, de acuerdo mi niña hermosa, lo haremos solo por ti, pero la fiesta ya casi empezará, ¡No pierdas más tu valioso tiempo defendiendo a esta gata vulgar! -dijo mi abuela cruelmente mientras que trataba de tapar el sol con un dedo, ya que era muy evidente que padre e hija no se llevaban bien desde que Estíbaliz murió.

-¿Qué?, ¿Ya se les olvidó su otra hija?, ¡SOFÍA CRISTAL es su hija y esto va para los 2!, ¿Tan rápido la borraron de su corazón?, ¡Ella ni si quiera pudo conocerlos y por esa razón se volvió malvada! -Pregunté estando realmente impactada por las actitudes de mis abuelos, pues lloré mucho tras ver su frialdad.

-... ¡Ese feo nombre ya no se menciona más en esta casa! -Gritó mi abuelo Alexei mientras que me empujaba sin tener remordimiento.

-¿En qué momento fue que te volviste así de cruel, eh?, ¿Qué no te bastó con casi MORIR junto con tu familia los ROMANOV hace casi 60 años? -dije sin querer confesando la verdad de mi viaje anterior a 1918, ya que debido al calor del momento y la ira dije cosas que por nada del mundo tuve que revelar.

En ese momento hubo un frío silencio sepulcral... Nadie habló durante unos minutos causándo pánico en mi familia quienes no podían creer lo que confesé abiertamente, pues la verdadera identidad de mi abuelo solo la conocía mi abuela Inés.

-¿Cómo sabes eso, eh muchachita malcriada? -Preguntó mi abuelo Alexei encontrándose completamente pálido ante mis palabras, pues se mareó un poco luego de todo.

-¿Eh? -exclamaron mi tía Rachel y madre Nathalia estando en verdad asustadas y en shock total por mi.

-... ¡Ja, ja, ja!, ¡Pero miren qué imaginativa resultó la mugrienta!, vamos, ¡La fiesta de Rachel ya empezará! -dijo mi abuela Inés con u tono de voz seco y cortante al tratar de esconder la verdad de sus 2 traviesas y curiosas hijas.

Por el momento todo fue opacado, ya que la fiesta de los XVII años de mi tía Rachel se llevó a cabo y fue un rotundo éxito porque los abuelos tiraron la casa por la ventana debido a la gran celebración en el salón que tuvo, con sus bailarines, el pastel de color verde claro que era su preferido, la banda sonora más popular de la época, el hermosísimo vestido verde acorde con el pastel y el vals final con mis abuelos, pues mi pobre tía fue muy feliz... Hasta el día siguiente, ya que aquel martes 1 de agosto de 1979 sería su traumática violación, acto el cual no podía cambiar, alterar o tan si quiera evitar, ya que si cometía un error como ese mi prima Alondra no nacería nunca gracias a ese asqueroso acto, así que lloré mucho ese día, inclusive desde antes de dicha tragedia al ser en verdad tan espantoso como decía el diario secreto de mi tía Rachel que leí 11 años atrás en mi época.

...


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