Capítulo 22:
❝ Malentendido. ❞

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Seokjin sentía que todos sus días eran una copia exacta. Después de clases iba directo a la florería de su madre para ayudarla como un empleado más, pero con la diferencia de que él no tenía una paga. Era su castigo, su maldición.

Soltó un suspiro viendo a través de la puerta de vidrio cómo la gente y los coches pasaban frente al local, como si se burlaran de su horrenda vida. ¿Por qué su vida tenía que ser así? Cada que sus dedos estaban tan cerca de tocar la libertad, su madre lo regresaba a la triste realidad con algún regaño por ser tan despistado, por dejar caer alguna maceta y derramar la tierra en el limpio piso, o por simplemente no prestar atención.

Sus calificaciones estaban bajando y en realidad no podía evitarlo, estaba cansado de ser oprimido por su madre pero no tenía el valor de hablar y revelarse. Quería ser como Yoongi, su ex compañero de clases y actual pareja desde hace dos semanas.

A veces le envidiaba porque hacía lo que quería sin detenerse a pensar en los demás. Su corazón latió con fuerza en su pecho al verlo pasar, reconoció su risa escandalosa, estaba con su grupo de amigos, probablemente pensando en a quién joderle la tarde. Y detrás de ellos iba un chico de cabellos negros, con la mirada perdida en el suelo.

ㅡ Míralos, holgazanes sin futuro.

Sólo asintió ante lo dicho por su madre y siguió con su siguiente tarea en el local.

Por otro lado, Jungkook se sentía fuera de lugar, como un estorbo o un bicho raro. Deseaba estar en casa y que Namjoon le ayudara a aprender palabras y frases nuevas en inglés, le gustaba pasar tiempo con ese hombre tan increíble y maravilloso que llegó a su vida gracias a la señorita Jung.

Sus mejillas se pusieron calientes y rosadas, no precisamente por el ardiente sol, sino por pensar en Kim Namjoon. Ese día, el mayor tuvo un asunto importante que tratar, pero le prometió que pasarían la noche viendo películas en la sala del departamento mientras Yoongi trabajaba.

Las risas de Yoongi y sus amigos se comenzaban a escuchar lejanas pues dejó de prestarles atención y se concentró en el moreno de hoyuelos bonitos en las mejillas que habitaba en su cabeza. Sacó su teléfono del bolsillo trasero del pantalón y buscó su número, sólo quería saludar y escuchar su voz.

Detuvo sus pasos enfrente de una cafetería para no chocar con algo o alguien. Pulsó el ícono de llamada y luego colocó el aparato en su oído derecho, suspiró al oír el primer timbre. Sus ojos se desviaron al interior del local con olor exquisito a café y de pronto sintió que todo se derrumbaba en su interior.

Allí dentro estaba Namjoon, acompañado de la señorita Jung, quien le estaba tomando de la mano por encima de la mesa y el moreno no la apartaba, sólo la veía a los ojos. ¿Qué significaba lo que estaba presenciando?

"Te lo dije, él no te ama. ¿Quién en su sano juicio amaría o querría a un niño como tú?"

ㅡ Tal vez tenga razón ㅡ murmuró dando la razón a la voz de su cabeza. El teléfono resbaló de sus manos al igual que algunas lágrimas por sus mejillas.

Yoongi notó la ausencia de su amigo al cruzar la avenida, se giró y comenzó a buscarlo con la mirada muy asustado, hasta que lo encontró petrificado viendo hacia la tienda.

ㅡ ¡Jungkook, por aquí! ㅡ le gritó pero el chico salió corriendo, empujando a cada persona que se atravesaba en su camino.

༄

Los planes de Namjoon para ese día de viernes eran sencillos, tenía un asunto que tratar por la mañana así que le dijo a Jungkook que no tendrían clase pero le prometió pasar tiempo juntos por la noche.

Su corazón se aceleró de sólo pensar en su tierna reacción, como la de un niño pequeño bastante emocionado, saltando de aquí para allá para finalizar con un abrazo y un dulce beso en la mejilla.

ㅡ ¿De qué querías hablarme? ㅡ preguntó la chica frente a él.

ㅡ Es sobre Jungkook, hay algo que me dejó pensando desde la última vez que nos vimos. El día que Jungkook tuvo la pelea, dijiste que su reacción pudo haber sido por consumo de drogas ㅡ dice Kim para luego tomar un sorbo de café caliente.

Jiwoo sintió que comenzaba a sudar y no precisamente por el café que estaba tomando. Ella aclaró su garganta y le miró.

ㅡ Estoy segura de que fue por eso Namjoon, no hay otra explicación. Sus problemas psicológicos combinados con alguna droga puede dar como resultado eso, lo que Jungkook hizo ㅡ le respondió tratando de escucharse convincente.

Kim soltó un sonoro suspiro y enarcó una ceja antes de mirarla.

ㅡ Ni siquiera tú puedes creer tus mentiras, Jiwoo. Tú sabes cómo era mi comportamiento al consumir drogas.

ㅡ Tú no tienes ningún trauma y mucho menos un trastorno. No puedes compararte con él, tú eres distinto ㅡ dijo y la risa del moreno le hizo fruncir las cejas.

ㅡ Es tan poco ético lo que haces, debería reportarte o incluso demandarte por usar tu título y conocimientos para que yo caiga a tus brazos. Pero déjame dejarte una cosa clara, no importa cuánto te esfuerces en tratar de endulzar mis oídos con estas estupideces de que Jungkook, mi Jungkook es un drogadicto deprimido y capaz de cualquier atrocidad como matar a un estudiante a golpes. Yo lo conozco más que tú. Sí, tú fuiste su consejera, pero yo traté de ir más allá, conocer su interior, lo que oculta, sus más oscuros secretos. Jungkook no es como tratas de pintarlo.

ㅡ Las cosas no son de ese modo, Namjoon. Estás confundido y malinterpretadando todo ㅡ formó una sonrisa con sus labios y su mano se ubicó sobre la contraria ㅡ. No voy a negar que me interesas y me atraes, pero te equivocas en que uso mi conocimiento para mi beneficio.

ㅡ ¿Ahora quieres lavar mi cerebro con tu palabrería de que estoy confundido? Jiwoo, tú eres la que está mal aquí, no yo. Esto no es una consulta, esta cafetería no es un consultorio psiquiátrico.

Ella permaneció en silencio por unos segundos mientras mantenían un fuerte contacto visual. Una guerra que Namjoon estaba ganando.

ㅡ ¿Por qué te interesa tanto Jungkook? ㅡ se atrevió a preguntar.

ㅡ ¿Por qué debería decirtelo?

Entonces, unos gritos llamaron la atención de todas las personas al interior del local. Ninguno de los dos entendía lo que pasaba allá afuera, hasta que Kim vio que se trataba de Yoongi. Dedujo que por su forma de gritar que había pasado algo con Jungkook, por lo que de inmediato se levantó, tomó su mochila y arrojó a la mesa un par de billetes para que Jiwoo pagara la cuenta.

Sin importar los llamados de la joven chica, él salió para averiguar lo que sucedía y tratar de ayudar.

ㅡ Yoongi, ¿qué pasa?

ㅡ Claro, tenías que ser tú el causante de esto. ¿Ahora estás saliendo con Jiwoo a escondidas de Jungkook? ㅡ reclamó, empujando al más alto.

ㅡ Tranquilízate Yoongi, las cosas no son así. Todo esto se trata de un malentendido que con gusto voy a aclarar después de que me digas dónde está Jungkook. Por favor, dime lo que pasa.

Yoongi le miró sólo un segundo de forma casi asesina pero decidió respirar hondo para calmarse.

ㅡ Supongo que te vio allí dentro con la hermana de Hoseok, debió ver algo que no le gustó porque salió corriendo. Yo no me di cuenta en qué momento se quedó atrás, fue mi error no estar al pendiente. Dejó su teléfono en el suelo y está bloqueado ya, no se a quién trataba de llamar o qué hacía con él.

ㅡ Con eso es suficiente ㅡ suspiró ㅡ. ¿Por dónde se fue? Tal vez pueda alcanzarlo.

༄

Lamentablemente, Namjoon no logró alcanzar a Jungkook. Preguntó a las personas que se encontraba y describía al chico lo más detallado posible pero nadie le daba gran información, simplemente señalaban a dónde se había ido pero no dio con él. Así que se decidió por buscar en su lugar especial.

El puente donde se encontraron por primera vez se convirtió en un lugar, entre comillas, especial, y a la vez también el refugio del peli negro cuando se sentía mal, herido, o sólo quería escapar por un momento de su horrible realidad.

Jungkook no estaba en el puente. ¿Era posible que la tierra se lo tragara?

Su teléfono celular comenzó a vibrar y sonar en su bolsillo, lo sacó lo más rápido posible y atendió al ver que se trataba de Yoongi. El rubio sólo le dijo en voz baja que encontró a Jungkook en el departamento y le pidió que fuera, luego cortó.

Sin pensarlo se dirigió al departamento de Yoongi y Jungkook, deseando poder volar para llegar rápido porque el maldito bus iba demasiado lento. Al llegar, luego de media hora aproximadamente, notó que el lugar se encontraba en un silencio asfixiante, tanto así que podía escuchar claramente los latidos de su corazón y su sangre recorrer sus venas.

Yoongi salió de la habitación del menor y le indicó con la cabeza que lo acompañara.

ㅡ Ya está tranquilo, ten cuidado con lo que le dices, se puede volver a alterar. Voy a atender una llamada en el corredor para no interrumpir su silencio, de todos modos estaré al pendiente ㅡ le dijo Min sin ningún rastro de bondad o amabilidad. Sólo profunda preocupación ㅡ. Tienes algo que explicarme todavía.

ㅡ Lo haré, pero quiero verlo primero.

El rubio asintió y Namjoon también lo hizo, fue como la señal para despedirse en ese momento. Cuando abrió la puerta, no pudo ver más allá de la oscuridad de la habitación. Las cortinas estaban cerradas para impedir el paso de la luz solar.

ㅡ ¿Jungkook? ㅡ preguntó en voz baja, cerrando la puerta después de entrar.

ㅡ ¿Te gusta la señorita Jung? ㅡ la voz de Jungkook se escuchaba rota y herida, algo que hizo que su pecho doliera.

ㅡ No, yo quiero a otra persona ㅡ respondió, avanzando con cuidado por la oscura habitación hasta topar con la cama ㅡ ¿Me permites verte?

Silencio. Jungkook no quería, estaba apenado y dolido. Así que antes de encender su lámpara echó una frazada sobre su cabeza, cubriendo su cuerpo también. Sus miradas se conectaron de inmediato.

ㅡ ¿Por qué tomó tu mano? ㅡ sus ojitos se aguaron de sólo recordar.

ㅡ No es por lo que piensas, ella quería convencerme de una tontería absurda por que yo no le creo. Es una mentirosa y una mujer que no vale la pena ㅡ contestó tomando asiento en la orilla del colchón.

ㅡ ¿Entonces no te gusta?

ㅡ No me atraen las mujeres, si es lo que intentas averiguar ㅡ una pequeña sonrisa decoró su rostro.

ㅡ Ignoraste mi llamada y no apartaste su mano de ti.

ㅡ Lo lamento, Moonchild, no me di cuenta de la llamada. Estaba muy concentrado en la plática, en serio lo siento. Pero no volverá a pasar, lo prometo. Estamos a tiempo de preparar palomitas e ir a comprar refrescos para nuestro maratón de películas.

Jungkook asintió no muy convencido y bajó la mirada en el proceso, aún había muchas dudas rondando por su mente y Namjoon lo notó.

ㅡ Oye, ella no me gusta y no sentí nada porque tomó mi mano ㅡ hizo que el menor levantara la mirada tomándolo del mentón con suavidad ㅡ. Y en mi corazón sólo existes tú.

Su rostro se iluminó, sus ojitos brillaron y Namjoon juró ver estrellas y la galaxia entera en ellos. Se atrevió a plantar un beso pequeñito en la punta de su nariz, acción que lo hizo reír.

Estúpido malentendido.

༄

Namjoon salió de la habitación, dejando en el interior a un chico de veintiún años y cabellos negros durmiendo. Había sido una mañana complicada para él y su mente necesitaba descansar.

El moreno buscó a Yoongi y lo encontró en el balcón, fumando un cigarrillo con las cejas fruncidas. Algo le molestaba, o más bien, le preocupaba. Dejó salir el humo al darse cuenta de que ya no estaba solo.

ㅡ Jungkook está dormido, hablamos y todo está mejor con él ㅡ habló rompiendo el silencio.

ㅡ Bien, ahora debes hablar conmigo y convencerme de no echarte a patadas por herirlo ㅡ llevó el cigarrillo a sus labios, dando una calada que parecía agresiva.

Tal vez buscaba intimidar.

ㅡ Sólo me di cuenta de que algo no cuadraba en lo que Jiwoo dijo un día acerca del comportamiento de Jungkook, así que decidí encararla ㅡ se recargó en la pared mientras cruzaba los brazos.

ㅡ ¿Qué tipo de cosas dijo? ㅡ preguntó dejando salir el humo en el proceso.

ㅡ Estupideces de que Jungkook consume drogas y por eso su comportamiento es como una bomba de tiempo. Quizá ella tenga un título, pero yo viví en carne propia los efectos de las drogas.

Cierto silencio nada incómodo se instaló entre ellos, ambos estaban preocupados por Jungkook y preguntándose qué pasaba con él. Ambos deseando leer su mente para comprenderlo y ayudarlo de la mejor forma.

ㅡ ¿Quieres? ㅡ ofreció Min con una ceja alzada, sacando un cigarrillo nuevo para él.

Dependiendo de su respuesta, tomaría cartas en el asunto y decidir si él podía seguir siendo amigo de Jungkook. Claro que no es de su completo agrado, no todavía, por lo que seguiría poniéndole pruebas.

ㅡ No, estoy limpio desde hace años y no pienso ensuciarme ahora ㅡ contestó.

ㅡ Bien dicho.

Yoongi le sonrió antes de encender su cigarrillo y dar una calada profunda. Su pecho dolía y no precisamente porque sus pulmones poco a poco se jodían más y más, sino por Seokjin. Su novio.

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~Nota~~
¡Hola, amores! *le tiran piedras* Pido perdón por lo mucho que tardé pero la verdad es que la inspiración no llegaba uu.

Tal vez piensen algo cómo: "¿Tantos meses para tan poco? Canceladísima". Me voy a esforzar más para traerles, por lo menos, un capítulo a la semana. ¿Qué día les gustaría que actualice? Las opciones son Martes o Viernes ♡.

Muchísimas gracias por los 10K de lecturas, no lo merezco, ay ♡.