III
Olivia iba junto con Galaga. Debían salir de ahí sin ser vistos, al menos por su papá. Si él lo llegaba hacer, seguro la regañaria. Ya de por sí tenía cierta penitencia, pese a la edad, porque creía que le ocultaba donde estaba Circe.
Ella solo sabía sobre Merlín, pero no de su madre.
Los pasillos de Camelot eran un tanto confuso, más aún para ella. Si, algo estudio sobre aquel lugar pero no lo suficiente.
No estaba muy segura de dónde estaban. Al dar la vuelta, chocaron contra Jackson.
El más joven los vio, y alzó una ceja.
—¿Qué haces?— preguntó.—¿Y esa mochila?
Olivia se puso nerviosa de inmediato, y sus ojos brillaron.
—Niño, no cuestiones a tus mayores.— se interpuso Galaga.
Pero antes que pudiera decir algo, aparecio Zoe. Al igual que su hijo, los vio de la misma forma. Pero esta no dijo nada. Hizo un leve movimiento con la cabeza, que Olivia entendió, y sonrió.
—Vamos.— tomo la mano de Galaga.
Ambos se marcharon.
—Tu no digas nada.— le indico Zoe.
—Pero, ¿Si Douxie pregunta?
—No lo hará.— respondió muy a su pesar.—Él está concentrado en algo más.
Jackson frunció la boca. De todos ahí era quien menos entendía, y junto con Olivia era a quien más mantenían al margen del asunto.
—¿Se trata de ella?— pregunto.
—Es sobre ella.— le corrigió Zoe.—Ven, iremos con Clara. Les daré algunas clases.
•
No pisaba aquel sitio desde el día en que fue capturada. Y aún seguía sin hacerlo. Le faltaba un cuerpo que le permitiera hacer eso que siempre hacia. Siendo un simple ente, no podía hacer magia, ni nada por el estilo.
Caeli de algo estaba segura, no lograría su cometido sin un cuerpo físico. Deseaba con toda su alma, que quienes la encerraron sufrieran lo que ella. Qué sus descendientes pasaran lo que vivió su hermana.
Aún podía sentir el latido de Natura, pero era tan débil. Al igual que a sus esbirros. Skrael y Bellroc estaban encerrados.
—Bien.— musitó.—Necesito un cuerpo.
Busco con la mirada algo que le sirviera. Cómo dadora de vida, podía meterse en cualquier lado donde corriese un mínimo de la misma. Sintió como algo de movía bajo sus pies espectrales.
Eran hormigas.
—Empecemos con algo pequeño.— sonrió.—Aguarda cuerpo, pronto llegare a ti
Lento se fundió con el suelo. Este se iluminó con una luz turquesa, y volvió a ser del mismo color.
•
Arabella se encontraba junto con Hisirdoux buscando más información sobre Caeli. Hasta ahora no habían obtenido más de lo que sabían.
La misma historia de siempre. Ella era la mala, que ahora estaba encerrada.
El tiempo pasaba con cierta lentitud, y ningún libro hablaba de nada en particular.
—Esto es agotador.— se quejó cerrando un último libro.
—Y no creo que por acá este algo escrito por Merlín o Morgana.— dijo Hisirdoux.
Ambos se hundían en sus sillas ante la frustración.
A ellos se les unió Archie y White. La gata blanca salto sobre la bruja, y se quedó allí ronroneando. Desde que Arabella había resurgido, su familiar no hacía más que actuar muy cariñosa con ella.
Pronto, como si fuera un instinto, comenzó a masajearla con sus patas peluda. Hasta que toco donde la daga supo cortar su piel, y Arabella grito del dolor. White salto, y ella se puso de pie para ver. No tenía nada. De alguna forma se había curado pero la sensación aún seguía ahí.
—Debes ir a que Baba te vea.— le sugirió Hisirdoux.
—Si, vamos a recorrer la ciudad, mientras aún siga de pie.— dijo entusiasmada White.
Arabella sonrió, y acepto ir a visitar a su vieja amiga.
—¿Puedes llevar a Nari? Le hará bien salir un poco.— pidió Hisirdoux.
Ella aún no sabía nada de la pequeña semidiosa, y asintió. Lo mejor sería volver a conocer a quien supo estar muy cerca de Caeli. Saber un poco más, para ver que buscar en los libros.
En cuanto salieron de la biblioteca, Archie salto al hombro de Hisirdoux.
—Me imagino que aún no le has dicho de ya sabes quien.— dijo el gato.
—No y creo que por momento no debe saberlo.
Archie rodo los ojos, y prefirió guardar el regaño para otro momento. Aún sentía frágil a su familia, y tener que tratarlo como un niño no se le hacía muy buena idea.
—Lo positivo es que está con nosotros.— dijo el gato, cambiando de tema.
Salto otra vez a la mesa, y se puso en dos patas.
—Ahora debemos advertirle a Circe, quizás ella …
—No.— le interrumpió.—Ella decidió su camino.
—Pero si Caeli está detrás de nosotros ella debe saber.— insistió.—Es tu hermana Hisirdoux.
—No, porque detendremos a Caeli antes que sea una locura.
Él también se puso de pie, tomo un libro y se marchó de ahí. Archie dio un suspiro de cansancio.
•
Junto con White salieron al gran patio de Camelot. El sitio estaba como recordaba. Las flores abundaban, tan coloridas y llenas de vida. Al igual que un par de árboles donde tomaba el té bajo su sombra y una fuente de agua.
Le traía tanto buenos recuerdos. Así como también la vez en que su madre le hizo la pregunta que la puso en un rumbo oscuro.
Agitó la cabeza para despejar la mente de esa noche, y comenzó a llamar a Nari. Tras unos minutos la niña de color verde se hizo presente. Salió de su escondite, un gran arbusto de jazmín amarillo.
—Hola amiguita.— saludo poniéndose en cuclillas.—¿Me recuerdas?
Nari se acercó a ella, y tomo la mano que está le ofrecía. Sonrió, si la recordaba, al menos de las pocas veces que se supieron ver.
—Veo que solo te has puesto más brillante de la última vez que nos vimos.— le halago.
—Y tú te ves aun más linda.— sonrió.—Hija de Morgana.
Oír aquello le erizó los vellos de la piel. Hacía mucho que nadie la llamaba así, pero no podía culparla, fue así como se conocieron.
—Mejor dime Arabella.
—Como gustes, princesa.
La invitó a ir a ver a Baba, y Nari aceptó gustosa. A ella le gustaba salir a pasear por la ciudad debes en cuando mas si luego irían a ver a la otra semidiosa.
Se toparon con Zoe para que les diera una mano, y a esta sin querer se le escapó que Olivia hacia el trabajo de mensajería. Lo cual llevo a que preguntara por ella, y de paso por el otro hechicero, Galaga. A ninguno los veía por ahí, lo cual era medio extraño.
Y antes que pudiera seguir hablando, Clara de hizo presente. Chillo de alegría al verla, nadie la había dicho nada sobre su estado. Estaba contenta de verla, y por suerte no guardaba rencores.
—Igual no puedo hablar por Jim.— respondió cuando Arabella pregunto por él.
—Lo se, nadie hablar por la pareja.— dijo Arabella.
—Además no estamos más juntos.— añadió Clara.
La rubia la vio con sorpresa. Nunca pensó que su relación llegaría a un fin. Cuando los vio la primera supo al instante que ellos debían estar juntos frente a las adversidades.
Ahora se decía así misma que perdió aquel toque sobre la química humana.
—Pero somos amigos, estamos bien.— insisto Clara.
Sus mejillas se habían acalorado, y Arabella lo noto de inmediato.
—Quizas no estoy tan equivocada después de todo.— murmuró.
—¿Qué dices?— pregunto Clara.
—¿Si nos puedes abrir un portal a la ciudad?— dijo nerviosa Arabella.—Queremos helado e ir a ver a una vieja amiga.
Tras ella salto Jackson. Arabella dio un brinco, para su gusto ese niño era muy silencioso.
—¿Aún escuchando las conversaciones?— pregunto graciosa Arabella.
—No, tal vez un poco.— respondió dando una leve sonrisa.—¿Puedo ir con ustedes?
Los cinco vieron a Zoe. Después de todo ella era la más responsable de los adultos presente. Asintió, y Jackson festejó junto con Arabella.
Clara les hizo un portal, y estos pasaron despidiéndose del resto. En cuanto se cerró Zoe y Clara se vieron.
—No creo que ella sepa algo.— dijo Clara.
—Y cuando lo sepa va a destrozar Camelot.— añadió Zoe.
•
Tras cruzar el portal quedaron en medio de un callejón. Arabella por puro instinto le tomo la mano a ambos, y salieron de allí, para ser el nuevo centro de atención. Pues no todo los días, en la ciudad de New York alguien se cruzaba a dos adolescentes, con una niña disfrazada de algo verde y una gata blanca bastante peluda.
—¿Es normal que miren tanto?— pregunto un poco incómodo Jackson.
Ella llevo su dedo a la comisura de su boca, y puso cara pensativa.
—Si, en realidad me acostumbre.— respondió.—Pero no te preocupes.
Paso un auto frente a ellos y les gritaron algo que avergonzó por completo a Jackson.
—Oye niño.— llamo White.—Al menos no te gritaron algo sobre ir con tu hermana de la mano por la calle.
Jackson soltó su mano con rapidez, y apuro su paso para ir a lo de Baba. Pero Arabella lo detuvo antes que cruzará la calle.
—Antes debemos ir al banco.— le dijo.—Asi que toma la mano de tu hermana, y me sigues. Nada de ir solo a ningún lado.
Nari tomo su mano con alegría, mientras que con la otra cubría su risa.
—Ya somos hermanos Jack.— festejo Nari.
—Si como digas.— bufó.
Al llegar les pidió que se quedarán a fuera junto con la gata. Arabella entro, y fue directo con una cajera que ya conocía de hacia muchos años.
Era una creación de su madre, que para ventaja de la rubia aún trabajaba allí.
Solo le tuvo que sonreír para que la dirigiera directo a su caja. Allí tenía una parte de sus ahorros. Aunque si buscaba eso, también obtuvo algo más. Tomo una vieja cadena de oro, y la guardo.
—¿Necesitara algo más princesa?— pregunto la mujer.
—Por ahora no.— respondió.—Espera, si.
Haciendo memoria, mientras buscaba algo junto con Hisirdoux, recordó que por algún lado había un diario de su madre. Quizás allí hablaba de lo ocurrido con Caeli.
—Como hija de Morgana exijo saber dónde está su guarida de la memorias.
La mujer la vio con intriga.
—Admito que nunca fui, y no recuerdo donde queda— añadió.
La cajera rió, y le pasó la dirección. Estaba escrita en un papel amarillento, con tinta un tanto antigua.
—Es un gusto tenerla de nuevo Hija de Morgana.— dijo la mujer haciendo una reverencia.
—Como digas, de algo debe servir aquel título.
Salió acompañada de la cajera, y está dijo algo, que no solo la confundió, sino que además la enojo.
—La está esperando.— anunció sin dejar de sonreír.
Arabella volteó, y la joven asintió.
—Maldicion.— murmuró.
★★★
Holis chorolis... Otra vez.
Otro sábado, otra historia.
Soy fan de la relación de Jackson y Nari, además con el tiempo se pone de linda. Se que Nari es mayor, pero Jackie la cuida como si fuera su hermanita 🥺
Esta historia es más movida, y tiene un par de subtramas que yo que les va a gustar 😎
Bien, sin más que decir hasta el próximo sábado ✨ besitos besitos, chau chau✨
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