Capítulo 2. Mensajes de texto.

Capítulo 2. Mensajes de texto. 


Atsushi había recolectado el maíz del día.

Los niños jugaban por el jardín, vio un par de niños llegar, - esos niños – Atsushi se acercó a Yukito – oigan niños, ¿Quiénes son sus amigos?

- Niños del pueblo

- Siii

- Jugamos con ellos

- Síiii

- Compórtense, y que regresen antes del atardecer

- ¡SIII! – respondieron todos los niños.

Ya tenia tiempo viendo a los niños del pueblo ir a jugar con sus pequeños hermanos del orfanato. Aunque juraba que jamás los había visto en el pueblo. Hacia sus trabajos y volvía cuando los niños se habían ido. Después de todo, había pedido que se fueran al atardecer y así fue. Los niños eran obedientes, así que jamás pensó mal de nada, ni de nadie, es decir, eran niños.

Un día que no tuvo tanto trabajo logro volver antes al orfanato, moría de ganas por jugar con los niños un rato, fue cuando se dio cuenta de aquella presencia. – se divirtieron hoy – pregunto el azabache a los niños

- Si, fue divertido. Gracias por traernos

- Gracias por venir – decían sus hermanos – vuelvan mañana también.

Atsushi vio aquel espectáculo intrigado, el agente llevaba niños a jugar con sus hermanos ¿Qué buscaba? Debía buscar una forma de conseguir alegar a sus hermanos de esos niños. Y debía averiguar que es lo que hacia ese agente.

Planea encontrarlo esa misma noche, Atsushi salió del orfanato, lo miro. - ¿Qué haces aquí?

- Vine por algo de té

- ¿de qué?

- De té. Vamos

Atsushi suspiro – maldición.

- Me viste ese día. Vamos a hablar.

- Bien.

Fueron al pueblo a un restaurante.

Atsushi y Akutagawa estaban allí esperando su pedido. – entonces, ¿vas a hablar? ¿Por qué traes niños a mis hermanos?

- También son algo así, como mis hermanos

- ¿Qué dices?

- Los cuido cuando mi mentor no está – añadió – que es casi todo el tiempo

- Ya veo... entonces, son tus

- Si, algo así – añadió. Suspiro y lo miro – pensé que podía distraerlos en vacaciones con tus niños – menciono. – solamente eso.

- Ya veo, pudiste decirme y ya

- Solamente pensé que estarías ocupado y así fue, también traje comida para los niños. Claro, no iba a dejarlos solo por dejarlos

- Comprendo. – añadió y suspiro en grande – bien, quédate a desayunar, iré a trabajar

- No, para nada. Quédate a desayunar conmigo

- Que niño tan torpe eres

- Tu eres el peor

- No tu

- Que tú.

Fueron interrumpidos por la camarera quien les dejo sus comidas. Comieron en silencio, se miraban entre ellos, la verdad, solo continuaban en sus platicas, pero no, no lo lograban. Querían terminar con su desayuno y escapar, pero aun con ello, ellos seguían allí bien sentados y listos para hablar.

Atsushi lo miraba. – hey ¿entonces volverás a traer a los niños?

- Si, cada que ustedes me permitan, ¿y ustedes?

- ¿nosotros?

- Quiero que acepten a mis niños también

- Si es por el verano está bien, podría llevarlos a divertirse

- Inaceptable, tendría que ir yo también

- Bien, pero tendrán que quedarse en el orfanato para que todos estén tranquilos

- Bien, ¿el fin de semana?

- Si, no veo lo malo.

- Necesito un poco más de información

- Si me das tu numero podríamos comunicarnos sobre lo que debemos hacer

- Bien, eso es una buena idea.

- De acuerdo.

Intercambiaron sus números.

Se vieron una vez más. Tenían sus números ahora.

Aunque fuese extraño, Akutagawa lo inicio. Fue un simple mensaje.

"Hay viento fuerte, los niños no quieren salir de sus camas, iremos más tarde."

La respuesta por parte de Atsushi fue aún más simple.

"Estoy de acuerdo, hoy en el almuerzo voy a estar, traeré zanahorias."

Después de dos días los mensajes avanzaron a:

"no creerás que me dijo hoy Yukito"

"¿Qué Sakura le hablo sobre el amor?, sí, me contó. Parece que a mi Sakura le atrae tu Yukito"

"son muy pequeños"

"lo sé, los niños de hoy en día se enamorar fácil."

"ni me lo digas, Dazai-san quería hacerme la prueba de destino cuando ingrese a la port mafia. Por qué debía llevar un registro perfecto de eso"

Después de unos segundos llego un segundo mensaje por parte del tigre nuevamente.

"perdón, olvide que no te gusta hablar de Dazai-san"

"No, está bien. ¿y te la hizo?"

"sí, no presente ninguna anomalía"

"a mi me la hicieron hace poco."

"¿en verdad? ¿eso es bueno?"

"No lo sé"

Su conversación termino así aquel día, pero solo con ese tema, incluso a veces trasnochaban escribiéndose ¿Por qué? Quien sabe, a veces hablaban de dulces que probaron en el día o simplemente del clima. Todo era así de simple.

Akutagawa llego aquel día a su trabajo como habitual, pero Rampo lo sabía, sonrió listo para dar su gran travesía. – Akutagawa, estas enamorado – expreso llamando la atención de todos – si quieres saberlo, podría costarte algunos caramelos

- ¿de que habla Rampo-san? No dudo de su habilidad, pero no he visto a nadie estos días

- Cierto – expreso Tanizaki, - hemos tenido mucho trabajo

- Espera, hermano – expreso Naomi - ¡AKUTAGAWA, NO PUEDES ENAMORARTE DE MI HERMANO!

- Tu hermano ni al hombro me llega – se quejo el mayor.

Naomi y Akutagawa tenían una pelea de miradas mientras Rampo se acostaba en el escritorio por tanta risa. Tras el acontecimiento, Akutagawa se había quedado totalmente pensativo, sus hermanos no irían, entonces no iría el. Sus mensajes no tenían mucho sentido, y tenia trabajo.

Escribió un ultimo mensaje.

"no podré hablar mucho, tengo bastante trabajo"

Después de ese día, no tuvo respuesta, ni ese día, ni el siguiente.

Pasaron varios días que no supo nada del chico tigre, aquellos días comenzó a sentirse mal, su pecho golpeaba constante y vulnerable. A veces, incluso en sus misiones, lo distraía el golpeteo. No le costó ninguna, pero pudo pasar.

A final de la semana, Akutagawa se acerco a la doctora Yosano, tocando la puerta de su consultorio con una mirada preocupada, Yosano lo miro con total tranquilidad – dime Akutagawa

- Yosano-sensei, tengo un dolor en el pecho

- Bien, siéntate, te examinaré

El chico se sentó mientras Yosano comenzó a examinarlo a esto, comenzaron a hablar de ello.

- Yosano-sensei, me duele mucho el pecho y me siento agotado, no logro concentrarme

- ¿Qué fue lo que detono estos síntomas?

- Fueron de repente. Tenía mucho trabajo y Oda cuida de los niños así que me relaje un poco por eso, pero el trabajo creció más y no he hecho nada fuera de lo normal tras ello.

- Ya veo. ¿Algo más?

- No, solo eso.

Yosano suspiro, mientras terminaba, miro al chico – tus signos están bien, tu respiración también, tus latidos son perfectos. Hay algo que no te deja continuar, algo que no dejas ir ¿puedes contarme? El secreto de medico es eterno.

Akutagawa la miro, no había nada raro, en eso, lo recordó. Yosano pudo mirar como el chico se ruborizo en la zona de sus orejas. – bueno, deje de hablar con alguien – menciono.

- Y eso ¿te molesta?

- No me molesta, es que platicábamos bien y ahora no tengo ninguna respuesta. Sé que dije que tenía trabajo, pero no era para dejar de hablarnos.

Yosano sonrió encendiendo de nuevo el monitor de latidos y presión – continua.

- ¿Qué le cuesta responderme el mensaje? ¿Qué tal si le paso algo? ¿debería ir a verlo? Peor aún, ¿Qué tal si vio a mi hermana? Quizá, el sabe algo de mi hermana, si por eso debería verlos ¿verdad Yosano-sensei?

Yosano termino de anotar lo que veía en la pantalla y le sonrió. – opino que si te preocupa tanto "tu hermana" deberías ir a ver que está sucediendo

- Tiene razón, eso debe tenerme así de mal, por favor quíteme esto, iré ahora mismo

- Me parece la mejor opción.

Akutagawa termino de arreglar sus cosas lo más pronto que pudo, tomo un autobús para llegar al pueblo, no tuvo que ir hasta el orfanato, se lo tomo en el pueblo. Atsushi reía con un chico de cabello castaño, aquello hizo que el pecho de Akutagawa fuese más rápido, se sentía como un enorme susto, aquellos que sientes un gran vacío. Fue directamente al chico, y tomo su brazo a la altura de su codo, Atsushi se asusto por el agarre y lo miro.

El joven tigre pudo ver el rostro de Akutagawa, su rostro estaba lleno de miedo y desesperación. – oye, ¿Qué ocurre? ¿tus niños están bien?

- Ah... - Akutagawa reacciono, tallo su rostro – sí, yo...

Atsushi miro aquel chico, - Kyo, debo irme, te veo luego

- Claro, si necesitan algo no duden en venir

- Gracias.

Atsushi y Akutagawa comenzaron a ir al orfanato, para esto, el azabache no había soltado el brazo del tigre. Siguieron caminando hasta adentrarse en el camino, Akutagawa por fin subió su mirada para ver al chico a su lado, ahora se sentía calmado – oye, perdona lo de hace un momento

- Está bien, si algo ocurrió puedes decirme. Claro, si no involucra cosas del gobierno.

- No, nada de eso, yo... ¿has visto a mi hermana o sabes algo de ella?

- Por supuesto que no, ahora que tengo tu numero puedo decir claramente que te avisaría de inmediato si fuese así

- ¿y por que no me has contactado está semana?

- Me dijiste que tenías trabajo

- Ah, si, pero... podrías dejar un mensaje

- No, el trabajo es importante. No debe haber interrupciones o podrías fallar

- Oh, entiendo. Bueno, ya no tengo trabajo

- ¿renunciaste?

- No, digo que ya estoy más libre, mándame mensajes.

- De acuerdo

El silencio siguió hasta el orfanato, allí el joven lo miro nuevamente – entonces, ¿a que viniste?

Cierto, solo iba por lo de su hermana – quería saber de mi hermana

- No la he visto – repitió. – pero ¿quieres cenar?

- Si – respondió rápidamente. Ni el entendía que le estaba pasando.

- Entremos entonces




...

¡Gracias por leer!

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top