Capítulo ✨25✨

- Les prometo chicas que no me convertiré en la mujer maltratada que dicen Helen. No volvere a verlo, pero no lo puedo denunciar. No quiero tener problemas con mi beca, mi papá está esperando a una doctora y tengo que llegar así.

- Esta bien amiga si esa es tu decisión, sabes que aquí siempre vamos a estar para ti. Puedes contar con nosotras para lo que sea.

Alaia nos ve y hace una pequeña sonrisa llena de nostalgia, sus heridas parecían infectadas y en su apartamento no tenía nada con que curar todas esas heridas.

- ¡Vamos a la farmacia Helen!, hay que tratarle esas herida a Alaia y después vamos al hospital para que la revise un médico, tenemos que asegurarnos que estás bien - dice Eun-Jin levantándose de la cama para sujetar mi brazo y llevarme con ella fuera del apartamento.

Fuimos a la farmacia y compramos alcohol, parches para el dolor, unas cremas con antibióticos y otras cosas más. Íbamos ya de regreso, cuando tres hombres con máscaras nos impiden el paso.

- Helen, ¿Quiénes son esos hombres? - Eun-Jin estaba temblando de miedo yo también lo hacía pero lo trataba de disimular.

- ¿Qué quieren? ¡Déjenos tranquilas! - les digo y los hombres se echan a reír - Ni se imaginan con quién se están metiendo, así que mejor nos dejan tranquila - les grito para hacer ruido y tal vez alguien nos ayude.

- Si sabemos quién eres tú, ¡Helen Duarte! - dice mi nombre haciendo que me sorprenda, nos sujetan a Eun-Jin y a mi tapandonos la boca con sus manos mientras nos llevaban a un oscuro callejón.

Por más que las dos íbamos forcejeando con aquellos hombres no pudimos hacer que nos soltaran, uno de ellos saca una pistola y nos apunta.

- ¡Basta de gritos y golpes niñitas!, ahora se portan bien, no queremos que alguien salga lastimado - las risas de aquellos hombres aterraban.

- ¿Qué quieren de nosotras? ¿Por qué nos están haciendo esto? - Les gritó.

- ¡ssshhh!, baja tu escandalosa voz, a tu amiga no le vamos hacer nada malo; solo la vamos a dejar ir, pero a ti se te vamos hacer mucho daño, pero antes nos divertiremos un rato contigo.

Estaba tan asustada que no sentía mis piernas, todo el cuerpo me temblaba y tenía las manos muy fría, esos hombres me querían matar y estaba decidido hacerlo.

De Pronto uno de ellos agarra a Eun-Jin por el cabello y la golpea en la cabeza dejándola inconciente.

- ¡Eun-Jin! Déjela tranquila, no la lastimen - comienzo a llorar y los hombre solo se reían al verme.

Eun-Jin no se movía, estaba tirada en el suelo y sangre salía de su cabeza. Eso me aterro mucho, sentí mucho miedo de que ella no se volviera a levantar.

✨ Hyun-Su ✨

Ya había terminado mis clases y andaba algo estresado, me preocupa esa chica; me preocupaba que estuviera sola y le pasara algo. Esas ideas daban vuelta en mi cabeza y no me dejaban tranquilo.

Subo a mi auto y voy al departamento de Alaia, voy a recojer a Helen y llevarla a donde vive, llegó y tocó la puerta, al abrir veo a una mujer fuertemente golpeada.

- ¡Hyun-Su! ¿Qué estás haciendo aquí? - me dice Alaia asombrada de verme.

- Vengo a buscar a tu amiga.

- Me imagino que es a Helen a quien buscas, ella salió a la farmacia con Eun-Jin y tardarán un poco, andan a pie. El auto de Eun-Jin se dañó y tuvieron que caminar.. - no dejo que Alaia termine de hablar, al escuchar a la chica decir que andaba caminando y no en el auto, mi corazón se acelera y salgo de ahí corriendo para buscarla.

Corrí hasta llegar a la farmacia y una empleada me dice que esas mujeres de la descripción que les di ya se habían ido hace rato.

Ya los nervios no lo podía aguantar ¿Donde estas? Me preguntaba mientras seguía corriendo buscándola por las calles.

✨ Helen ✨

El tiempo pasaba lento mientras que esos hombres nos tenían en ese callejón, nadie nos venía ayudar, nadie parecía oír nuestros gritos. Era desesperante ver cómo aquellos hombres me apuntaban en la cabeza y me decían un montón de obscenidades. Eun-Jin todavía estaba inconciente en el suelo, yo sujetaba su cabeza y lloraba al mirar la cantidad de sangre que salía.

Uno de los hombres se acerca y me agarrar por el cabello para levantarme, me da una fuerte patada en el estómago haciendome caer al piso sin aliento. El otro se acerca y me vuelve a levantar del cabello, yo comienzo a gritar fuertemente; estaba en pánico, estaba aterrada. Estos hombres me iban a matar.

- ¡Malditos dejenla tranquila! - se escucha la voz de un hombre, haciendo que aquellos tipos salieran corriendo.

Uno de ellos antes de correr se acerca a mí, me mira y hace una sonrisa aterradora, depronto sentí un horrible dolor que me paralizó, baje la mirada y veo un cuchillo clavado en la parte baja de mi abdomen, el hombre saca el cuchillo y sale corriendo. Enseguida sentí como la sangre salía de mí, ni tiempo me dio de voltear a ver de quién era esa voz que hizo correr a aquellos matones, solamente me desplome al piso y perdí la conciencia.

✨ Hyun-Su ✨

Al ver como ella se desplomaba al suelo me hizo sentir aterrado, sentí que mi corazón se estremeció dentro de mí. Corro hacia Helen y la sujeto entre mis brazos, ella estaba pálida y a su alrededor había mucha sangre. La otra chica comenzaba a despertar y se acercó a nosotros casi arrastra.

Llamó a una ambulancia y enseguida llegan llevando a las dos chicas heridas. La sirena de la ambulancia se escuchaba fuerte por las calles mientras íbamos camino al hospital. Eun-Jin ya se había despertado y se encontraba sentada a mi lado mientras un paramédico la atendía. Mientras que la otra chica estaba en la camilla de la ambulancia. Los paramédicos le cortaron su blusa y pudieron ver cómo la herida era tan profunda que no podían detener el sangrado.

Mis ojos se humedecieron al verla en ese estado y lo peor era que ella estaba pasando por todo eso por mi culpa. Me sentí tan culpable, tan patético. Yo le prometí que la iba a cuidar y no lo hice, ahora ella está luchando por su vida.

Mientras los paramédicos se movían rápido para tratar de detener la hemorragia comenzó a sonar todos los aparatos a los que Helen estaba conectada, eso me asusto yo sabía que algo no estaba bien.

- ¡Entro en paro! - escucho decir a uno de los paramédicos que se preparaban para darle un RCP.

Eun-Jin comienza a llorar desesperada, y yo me quedo en shock. El amor de mi vida estaba muriendo y por mi culpa.

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