❤️ Capítulo 16❤️

Abro mis ojos, me duele mucho la cabeza. Miro a mi al rededor y no estoy en mi habitación.

<<Donde diablos estoy>>

Me miro rápidamente y estoy tapada con una camiseta.

<<HAY MI DIOS QUE PASÓ ANOCHE>>

Me levanto rápidamente y me miro en el espejo, luego hacia todos los rincones en busca de una foto o algo que me pueda ayudar a identificar con quién carajos me he acostado.

—¡Me estás buscando!—una voz varonil resuena en mi espalda y se a quien pertenece.

<<Estoy jodida>>

¡Mierda, mierda, mierda!

Me giro lentamente para confirmar mis sospechas.

—Señor Ruscher.—digo su nombre.

—Buenos días, tu ropa está seca encima de una silla en el comedor. No olvides ponerte las bragas.—dice esto y casi como un impulso mi mano va hacia mi vulva.

¡Mierda! ¡Mierda! Y más ¡Mierda! Estoy sin bragas eso significa que si me acosté con él. Si nó que haría aquí en su departamento, sin bragas y con una de sus camisas puesta.

No pude responderle solo me quedé mirándolo con cara de no entiendo nada. El sonríe al ver que me toqué mis partes delante de él y da la espalda.

—Te prepararé desayuno vez pensando en que le dirás a Milena tienes treinta y dos  llamadas perdidas y varios mensajes.—comenta y sale de la habitación.

Me dejo caer en la cama  tratando de acordarme de algo. Lo único que tengo en mi cabeza es que me molesté con Bairon y me bebí varias copas. Ya después todo es muy confuso.

—¡Ahh! —dejo salir un gruñido ya que el dolor de cabeza me está matando, además de que estoy afligida por no recordar nada. ¡Dios tal vez tuve el mejor polvo de mi vida y no lo recuerdo!

Salgo de la habitación silenciosamente veo mi ropa como había dicho encima de una silla la cojo sin que él me vea y me vuelvo corriendo en puntillas a la habitación para cambiarme. Entro al baño, me aseo y me coloco la ropa del día anterior.

Me miro en el espejo y me viene algo a la cabeza, yo vomitando.

¡Qué Asco!

Ya vestida salgo hacia donde el está y lo encaro esto de no saber qué pasó me está matando.

—¿Tuvimos sexo?—digo directamente y el sonríe.

—¿No recuerdas?—habla curioso.

—Solo se que me pasé con la bebida y vomité pero más nada.—admite frustrada.

—Pues sí, nos acostamos y aunque no te acuerdes puedo asegurarte que te gustó mucho. Podemos repetir cuando quieras.—me dice el muy imbécil así sin más.

Me levanto furiosa de mi misma, de mi comportamiento y de su arrogante y estúpida sonrisa.

—Ya nos veremos.—me dice antes de salir a lo que tiro muy fuerte su puerta.

Al estar en el pasillo reviso mi teléfono, es cierto que tengo un montón de llamadas y de mensajes de Mile. Tocó el timbre y enseguida me habré.

—¡Más te vale tener una buena escusa!  —me grita apenas entro a la casa.

—¡Me acosté con el vecino! ¡Me acosté con mi jefe por dios!—grite no tan alto.

—¡WoW!—grita Milena.—Empieza por el principio que no entiendo nada.

—Yo tampoco.—menciono tapándome la cara.—No recuerdo nada, no tengo ni puta idea de qué pasó.

—¿Tan borracha ibas?—me pregunta.

—Al parecer.—also los hombros.—Todo comenzó porque me molesté con Bairon, creía que era maduro o tal vez un poco diferente a su hermano pero resulta que también es un capullo.

Le cuento todo lo que pasó.

—No creo que sea para tanto, solo trató de marcar territorio, se nota que le interesas y tiene miedo de que Branly se le adelante. Corrección tenía miedo porque ya se le ha adelantado.—se ríe.

—No tiene gracia. Estaba borracha cómo fue capaz de acostarse conmigo. —me pregunto enfadada, pero claro ya se la respuesta.—Eso me pasa por andar de borracha, juro que no bebo nunca más.

—Si, eso también dijiste la última vez que te emborrachaste.—me dice y se que tiene razón mejor no juro nada.—Me voy a dormir estoy muy cansada.

—Bien, pero antes come algo.—le agradezco y voy a la cocina.

Después de comer algo fui a la cama estaba que me dolía todo, parecía que un tren me pasó por encima.

Me despierto al rato por una pesadilla, más bien era un sueño erótico con mi jefe pero realmente me asusta que esté soñando con él y más de esta manera.

Me levanto y voy a tomar agua, estoy seca.

Suena mi teléfono y es Bairon, no contesto.

Si antes teníamos alguna posibilidad ya no es posible me he acostado con su hermano. Además de que la ha cagado, se comportó como un imbécil pero en realidad lo iba a perdonar con el tiempo solo fue la rabia del momento.

Ahora todo es muy diferente cómo podré tener algo con él sabiendo que me acosté con su hermano y por otro lado no quiero ni imaginar cómo voy a trabajar con mi vecino, si de por si es arrogante no quiero ni saber cómo debe estár ahora. Me hará la vida imposible.

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