Segundos pasaron, en ese lapso de tiempo los nervios de Alison empezaron a ser reemplazados por enojo ¿cuál carajos era el problema de ese adolescente? ¿por qué no la quería soltar? si quería que le tomara la orden no hacía falta que la sujetara de esa manera, con tanta insistencia.

Alison lo observó de pies a cabeza, el chico era innegablemente atractivo pero nunca lo reconocería, tenía el pelo rubio revuelto y hacia arriba, dejando descubierta su frente, sus facciones eran perfectas, ojos azules, pómulos filosos y delgados, mandíbula marcada, lo cual a Alison le parecía sexy, pero otra vez no lo reconocería, nariz que hacía juego con su sonrisa perfecta y dientes perfectos, Alison le miró los labios, tenía unos labios muy lindos, eran gruesos y coloridos, su color le recordaba a las cerezas.

Alison se abofeteó mentalmente ¿qué hacía observando y analizando con tanto detenimiento cada una de las facciones de ese chico? nunca lo había hecho con nadie... ¿debería preocuparse? ¿qué tenía de especial ese adolescente que había conseguido lo que muchos otros no y causado que le atrayera a simple vista? Alison llegó a la conclusión de que si no conseguía poner sus pensamientos en orden estaba jodida.

Sin embargo a pesar de sus intentos por no mirar más, no pudo evitar echar un rápido vistazo al cuerpo del adolescente, lo recorrió con sus verdes ojos, analizando su vestimenta y... otras cosas, como su increíble físico, el chico estaba vestido con una camiseta blanca estampada, un jean negro ajustado a sus tonificadas piernas y unas vans blancas, Alison notó que también tenía tatuajes en su pecho y brazos.

A Alison se le subieron los colores al rostro, se había propuesto dejar de observarlo y sin embargo seguía haciéndolo, pensó "concéntrate Alison, no dejes que te dominen las hormonas", de repente sintió un poco más de presión en su muñeca y la ira que había estado sintiendo anteriormente salió a flote.

-Suelta mi muñeca grandísimo imbécil.-Le gruñó Alison a ese chico de intimidantes ojos azules.

Lejos de hacerle caso, sonrió de medio lado, quitándole el aliento a Alison, era muy sexy... "¡basta Alison! ¡concentración!", salió de su ensimismamiento gracias al cálido tacto en su muñeca, el chico la estaba sujetando con más firmeza todavía ¿acaso la estaba desafiando? Alison pensó decidida mientras fruncía el ceño "oh no, nadie me desafía, le dejaré bien claro como son las cosas", así que sin más movió el brazo con todas sus fuerzas hasta que logró liberarse del asfixiante agarre.

-La puta madre.-Se quejó sin importarle maldecir delante del desconocido chico.-Desacomodaste mi pulsera.-Aclaró acomodando la pulsera que cubría su tatuaje, milagrosamente no había quedado al descubierto.

Derek ni se inmutó por su hostilidad.

-¿Por qué cubres tu tatuaje?-Preguntó con curiosidad.

Alison se estremeció al oír su voz, no podía negar que la voz de ese chico frente a ella imponía autoridad, dejó de mirar su pulsera de tela para mirar a la persona sentada frente a ella pero se arrepintió al instante, no entendía por qué el verlo directamente la ponía tan nerviosa.

-No te incumbe.-Dijo bajando nuevamente la mirada, esta vez fijándola en el parquet.

Lo siguiente que escuchó fue el sonido de una silla siendo arrastrada por el suelo, Alison se alteró, levantó rápidamente la vista sin embargo no pudo hacer nada para impedir lo que sucedió a continuación, todo pasó demasiado rápido, ese chico había agarrado nuevamente su muñeca izquierda y se disponía a mover la pulsera para poder observar su tatuaje, Alison palideció, nadie a parte de Ian podía verlo.

-¡No!-Gritó y sin pensarlo le pegó una patada en la pierna, aunque no muy fuerte.

Aún así el chico lanzó un grito de dolor debido a que lo había golpeado con la punta de su zapatilla, finalmente la soltó, Alison suspiró más aliviada, gracias a sus rápidos reflejos había evitado que ese desconocido viera su tatuaje ¿quién se creía que era? no tenía ningún derecho de hacer aquello.

-¿Pero qué carajos te pasa?-Gruñó Alison apretando los puños, dio unos intimidades pasos hacia el joven dándose cuenta de que el chico le llevaba varios centímetros, le sacaba media cabeza.-Ni se te ocurra volver a tocarme maldito gigante ¿acaso querías ver mi tatuaje? ¿por qué?

Por algún motivo a Derek no le molestó ese insulto, al contrario, le causó gracia que la chica lo llamara gigante ya que no era tan alto, capaz que ella lo veía así porque le llevaba media cabeza, no podía culparla, se le escaparon unas cuantas risitas, las cuales molestaron profundamente a Alison.

-No sé que te da gracia, sinceramente.-Espetó Alison cruzándose de brazos.

Derek dejó de reír y se quedó mirándola con una sonrisa de medio lado y cara de embobado, se mantuvo unos momentos en silencio provocando que Alison se enfureciera todavía más, si eso era posible.

-¿Y bien? ¿querías ver mi tatuaje?-Dijo Alison repitiendo la pregunta.

Derek tragó saliva, esa chica se veía muy linda cuando se enojaba, apretaba sus labios en una fina línea, Derek fijó la mirada en esos gruesos labios color sandía y volvió a tragar saliva.

-¡Responde!-Exigió Alison perdiendo la paciencia.

Matt, quien había contemplado atónito la escena, se dio cuenta que era momento de intervenir así que se levantó rápidamente de su silla, se colocó detrás de su mejor amigo y sujetó sus hombros, Derek se sintió amenazado ante ese acto ¿acaso Matt pretendía llevárselo? ¡no! ¡no podía permitirlo! antes debía comprobar si la chica frente a él era su alma gemela.

¿Y si luego no la volvía a ver? ¿y si aunque la buscara le costaba encontrarla? ¿y si la chica decidía renunciar a su trabajo para esquivarlo? Derek se abofeteó mentalmente, estaba dramatizando, obviamente la chica no haría eso, seguramente necesitaba el trabajo.

Aún así necesitaba saber si era su alma gemela y quería averiguarlo en ese preciso momento, no dejaría pasar la oportunidad que se le había presentado de dar con su destinada, se sacudió tratando de soltarse del agarre que le proporcionaba su mejor amigo, se sentía un poco alterado.

-Vámonos Derek.-Dijo Matt con voz calma tratando de apaciguarlo.

Derek siguió sacudiéndose para liberarse, Matt hizo uso de todos sus esfuerzos para retenerlo, tenía que sacarlo como sea del bar ya que sabía cuáles eran las intenciones de su amigo, Matt se había dado cuenta que Derek sospechaba que esa chica era su alma gemela y conociendo a su mejor amigo... era capaz de todo si se trataba de su destinada.

Matt no se sorprendería si Derek cometía alguna imprudencia, temía que en cualquier momento perdiera el control y arrancara la pulsera que cubría la muñeca izquierda de la rizada, no podía permitirlo ya que no era correcto, no sin el previo consentimiento de la chica y tenía que hacérselo entender.

"Derek" pensó Alison mientras miraba furiosa al rubio que le devolvía la mirada con intensidad "así que ese desubicado se llama Derek", de pronto esa azul mirada sobre su persona hizo que Alison se sintiera incómoda y expuesta, se estremeció al tiempo que pensaba "¿por qué me mira de esa manera? joder".

-Te dije que vamos.-Habló con molestia Matt tratando de arrastrar a Derek fuera del bar.

-Espera Matt.-Pidió Derek en un ruego.

Matt negó, impasible y retomó su labor de sacarlo del establecimiento, Derek se resistió, sacudió sus hombros intentando soltarse de su agarre pero como nunca Matt parecía tener mucha fuerza, se notaba que se estaba esforzando por retenerlo, es más, el castaño afianzó el agarre abrazándolo por la espalda y juntando sus manos en su pecho, aquello causó que Derek se impacientara.

-¡Suéltame Matt!-Ordenó Derek repentinamente enojado y desesperado.

-¡Vámonos Derek!-Insistió el castaño empezando a preocuparse.

Lo que estaba haciendo era por el bien de su mejor amigo y de la chica, las cosas se solucionaban hablando, no armando escenas y en ese momento Derek estaba armando una escena patética, nunca antes se había comportado de esa manera tan obstinada, parecía cegado, no entendía como su primo no se daba cuenta de eso.

-¡Estás haciendo una escena!-Le avisó Matt.

Era verdad, la escena que estaban montando había llamado la atención de todos en el bar, Alison no pudo evitar sonrojarse, sentía las miradas de los estudiantes clavadas en ella y todo era culpa de Derek, maldito Derek.

-Hazle caso a tu amigo y vete Derek.-Ordenó Alison retrocediendo unos pasos y mirando con molestia a Derek.-No sé qué carajos te pasa, no sé cuál es tu puto problema pero me importa una mierda, debo seguir trabajando.

Escuchar su voz causó un estado de calma en Derek, dejó de forcejear para liberarse y esbozó una sonrisa radiante al escuchar su nombre salir de esos labios de infarto, deseaba poder probarlos, besarlos, morderlos... estaba perdiendo la cordura, esa rizada sería su perdición y no podía negar que escucharla maldecir le resultaba extremadamente sexy.

De repente quiso saber su nombre, miró rápidamente el cartelito que reposaba en el lado izquierdo del pecho de la rizada, leyó "Alison Green", justo Matt lo soltó porque notó que Derek se había quedado quieto, Derek aprovechó eso y dio dos largas zancadas, alejándose de Matt y deteniéndose a escasos centímetros del rostro de una sorprendida Alison, quien sentía que estaban invadiendo su burbuja de espacio personal.

Derek tuvo que agachar un poco la cabeza para poder mirarla a los ojos, notó que Alison había empezado a temblar ligeramente, era evidente que su cercanía la ponía nerviosa, Derek no pudo evitar sentirse orgulloso por eso ¿Alison sentiría algo por él? esperaba que si ya que podía asegurar que esa chica era su alma gemela, por fin la había encontrado.

-Alison.-La llamó Derek con voz seria, Alison se sorprendió al escuchar su nombre salir de esos gruesos labios.-Esto apenas empieza.-Le avisó con voz determinada.

Acto seguido dejó la seriedad de lado, le ofreció una sonrisa y luego le guiñó un ojo, Alison se sonrojó, Derek sonrió aún más, retrocedió sintiéndose victorioso, otorgándole espacio personal a una muy nerviosa y confundida Alison.

Derek accedió irse con Matt, ya tendría tiempo de encarar a la rizada, además ya no estaba preocupado por perderla de vista ya que había averiguado su nombre, encontrarla sería fácil si se lo proponía.

Alison sintió que sus piernas flaqueaban ¿qué fue aquello? miró como Derek y Matt salían por las puertas vidriadas de acceso, se alejaban del bar y se perdían en la distancia, recién en ese momento pudo respirar con tranquilidad.

-¡Cada uno vuelva a lo suyo, este teatro terminó!-Gritó Toby tratando de que la actividad del bar regresara a la normalidad, luego se acercó a Alison y la miró molesto.-¿Qué mierda fue eso Alison?

-Yo no hice nada, en serio, el estúpido de Derek empezó todo.-Se defendió Alison.

No le parecía justo que el hijo del dueño del bar la regañara cuando ella no había tenido la culpa de lo sucedido.

-¿Lo conoces?-Preguntó Toby sorprendido.

Alison negó rápidamente con la cabeza haciendo que sus castaños rizos se sacudieran.

-No, sólo sé que se llama Derek porque escuché su nombre, es la primera vez que lo veo.

Toby pareció creerle y bajó la guardia.

-Okay, olvida lo que pasó y atiende la mesa 8, acaban de llegar más clientes.

Alison asintió y se dispuso a retomar su labor, sentía una insistente mirada sobre su espalda, miró sobre su hombro y descubrió que era Ian, curiosidad era lo que reflejaban los ojos azules del pelinegro, Alison esbozó una tímida sonrisa e Ian apartó la mirada de inmediato. La rizada sintió un pinchazo en el pecho, evidentemente Ian seguía enfadado con ella y no podía soportarlo, extrañaba a su mejor amigo.

                           🐾🐾🐾🐾

Derek y Matt estaban sentados en un banco de una plaza cercana, ninguno de los dos hablaba, ambos estaban sumergidos en sus pensamientos, Derek mantenía los brazos sobre sus piernas y la cabeza gacha mientras que Matt estaba cómodamente sentado y miraba de brazos cruzados el cielo.

-Okay.-Habló Matt primero rompiendo un silencio que se había alargado varios minutos.-Dime que pasó ¿por qué mierda te comportaste de esa manera en el bar? nunca te había visto tan sacado.

Escuchó a su mejor amigo suspirar.

-Alison... ella puede ser mi alma gemela.-Dijo Derek en voz baja con la mirada perdida en algún punto inespecífico.

Matt lo miró raro, si, ya lo sospechaba pero aún así lo seguía encontrando raro, Derek no podía llegar a esa clase de conclusiones sin tener un argumento convincente.

-¿Qué carajos estás flasheando ahora Der? ¿de dónde sacaste eso? por eso le querías arrancar la pulsera ¿no? no puedes hacer eso.-Le recriminó.

Derek levantó bruscamente la cabeza y miró con furia contenida a Matt, no permitiría que lo tratase de loco.

-No lo entiendes.-Dijo entre dientes con la mandíbula apretada, estiró los brazos y sujetó a Matt de los hombros, su mirada era seria.-Tengo que volver y ver su tatuaje.-El castaño lo seguía mirando raro, Derek se enojó más.-¡Ella es mi alma gemela Matt!-Explicó a los gritos, frustrado por el poco entusiasmo y apoyo que le brindaba su amigo ante su reciente descubrimiento, él más que nadie sabía lo importante que era para él su destinada ¿por qué no lo apoyaba más?-¡Puedo sentirlo! ¡¿entiendes Matt?! ¡tú tienes experiencia en esto! ¡encontraste a Jenna! ¡bueno yo nunca antes había experimentado algo así! ¡siento que Alison es mi destinada y debo comprobarlo de una maldita vez o me voy a volver loco! ¡Alison no me va a detener! ¡veré su tatuaje aunque no quiera!

-¡Cálmate ya!-Ordenó Matt zafándose de su agarre.-¡Me estás impacientando Derek! ¡acabas de decir que podría ser tu alma gemela y ahora aseguras que es tu alma gemela! ¡no tiene lógica! ¡decídete!-Pidió extendiendo sus brazos y poniendo una expresión de exasperación.

Derek intentó mantener la calma pero no pudo, necesitaba el apoyo de Matt, de su primo, mejor amigo y compañero en todo y por alguna razón no lo tenía, eso lo alteraba, sentía que estaba solo en esto, en lo más importante que le había pasado en la vida.

-¡La tiene para mí! ¡no lo afirmé antes porque todavía no vi su tatuaje pero realmente siento que lo es! ¡¿entiendes ahora?!

Sus gritos estaban llamando la atención, un grupo de niños los miraban extrañados, algunas señoras de edad se mostraban enfadadas con ellos por causar tanto alboroto y unos cuantos adolescentes los fulminaban con la mirada.

-Iré a verla.-Anunció Derek poniéndose de pie.

Matt lo agarró del brazo para evitar que se fuera y también se puso de pie.

-Espera.-Pidió soltándolo, Derek lo miró con impaciencia, realmente quería llegar al bar "Fast Food" y encarar a Alison.-Está bien, te creo.-Dijo con voz seria, el rubio sonrió agradecido y aliviado, por fin Matt había reaccionado.-Alison podría ser tu alma gemela pero no te atolondres.

Derek estaba confundido.

-¿Qué quieres decir?

-Tienes que planificar con paciencia tus movimientos, no puedes simplemente ir a verla y arrancarle la pulsera que cubre su tatuaje.

-Pero no tengo paciencia.-Se quejó Derek.-Además... ¿qué estás diciendo? claro que puedo hacerlo, no es muy difícil.-Aclaró.

Matt se quedó pensativo, su mejor amigo tenía razón pero no era conveniente que hiciera aquello.

-Okay, de poder puedes pero no te conviene...

Derek lo interrumpió.

-Quiero saber ya mismo si Alison es mi alma gemela, no voy a seguir esperando.

-Cálmate, pareces un pendejo encaprichado y no un adolescente de 21 años.-Lo regañó Matt repentinamente fastidiado.

Derek se rascó la nuca avergonzado, se quedó mirando el pasto unos momentos, finalmente soltó un suspiro y miró a Matt.

-Okay, tienes razón.-Admitió encogiéndose de hombros.-En mi defensa nunca sentí una atracción así antes al ver a alguien por primera vez, Alison se va a convertir en mi perdición.

-O no.-Dijo Matt con una sonrisa cómplice, su mejor amigo lo miró expectante.-Se podría convertir en el amor de tu vida.

Derek esbozó una gigantesca sonrisa y preguntó.

-¿Qué tienes en mente?

Matt sonrió pícaramente antes de hablar.

                           🐾🐾🐾🐾

Eran pasadas las 10 de la noche, la jornada laboral había terminado para Alison e Ian, el pelinegro estaba haciendo el conteo de la caja mientras que Alison limpiaba las desalojadas mesas con un trapo y acomodaba las sillas.

La rizada estaba demasiado metida en lo que estaba haciendo y no era consciente de la acosadora mirada de Derek sobre ella, el rubio estaba estratégicamente escondido afuera del bar y de vez en cuando asomaba la cabeza al gran ventanal para poder mirar a Alison. Derek estaba buscando una oportunidad, quería hablar con Alison a solas así que estaba esperando que ese chico pelinegro sentado frente a la caja registradora se fuera a algún lado.

-Ian...-Lo llamó Alison dudosa mientras barría el piso, ya había acabado de limpiar las mesas.

El silencio que reinaba en el lugar le estaba incomodando sobremanera, normalmente ella y su mejor amigo estarían bromeando y riendo mientras culminaban su día laboral pero todo había cambiado hacía unas horas atrás.

Alison escuchó un bufido de parte de Ian, esperó unos segundos pero el pelinegro no se dignó a responder, Alison estaba empezando a enojarse, su mejor amigo no podía seguir tratándola de esa manera tan cruel, ya había intentado pedirle perdón varias veces, no sabía que más hacer.

-Ian por favor, déjate de juegos, ya no sé que hacer para que me perdones, me equivoqué ¿okay? soy humana y cometo errores.-Dijo controlando la ira en su voz.

-Cállate, me desconcentras y tengo que contar plata.-Se quejó Ian sin siquiera dirigirle una mirada.

El pelinegro escuchó el repentino sonido de un golpe seco, levantó la vista alarmado, no comprendía que había pasado, Alison había arrojado la escoba lejos.

-¡Alison!-La regañó Toby, justo iba saliendo de la cocina y vio la rabieta de la rizada.-Si llegas a romper la escoba lo descuento de tu paga, estás advertida.

Alison sintió la ira burbujear dentro de ella pero se contuvo para no cometer otra estupidez, ya venía enojada desde el incidente con Derek y ahora el infantil comportamiento de Ian la estaba haciendo enojar más.

-No volverá a pasar.-Aseguró controlando el enojo en su voz.

-Eso espero.-Dijo Toby y regresó a la cocina.

Alison fue a recoger la escoba, la cual había ido a parar cerca de las puertas vidriadas de acceso, cuando estuvo cerca escuchó el ruido de la puerta al ser abierta y vio como de la nada Derek aparecía en su campo de visión y se detenía delante de ella.

Antes de que Alison pudiera procesar su inesperada aparición sintió como Derek la sujetaba con ambos brazos de las piernas y con una habilidad asombrosa la elevaba del suelo y la colocaba rápidamente sobre su hombro.

-¿Qu... qué?-Balbuceó Alison, incrédula.

No entendía como Derek había conseguido cargarla con tanta facilidad, evidentemente el rubio tenía mucha fuerza "bueno, con ese físico..." pensó Alison mientras visualizaba en su mente los musculosos brazos de Derek, su marcado pecho y los cuadraditos de su abdomen que si bien nunca los había visto, estaba segura que los tenía, se reprochó mentalmente "¡basta Alison! ¡deja de pensar en el musculoso cuerpo de Derek!".

-Necesito hablar contigo.-Dijo Derek, esbozó una sonrisa de medio lado y la sacó del bar.

-¡Bájame!-Gritó Alison repentinamente furiosa, el asombro había desaparecido y había sido reemplazado por la ira.-¡Nadie te dio permiso para que me cargaras! ¡¿quién te crees que eres?!

Escuchó como Derek reía y la ira aumentó, le pegó un puñetazo en la espalda, el rubio rió aún más haciendo que Alison se enfadara más todavía, si eso era posible.

-¿Eso es lo mejor que tienes?-La pinchó Derek, la emoción por estar con Alison era palpable en su voz.-Que debilucha eres Green ¿quién lo diría? tu carácter demuestra lo contrario, pareces una chica ruda pero pegas como bebé.

-¡Cállate imbécil!-Gritó Alison con vergüenza más que con enojo.

Derek tenía razón, era demasiado débil e Ian siempre se encargaba de recordárselo aconsejándole ir al gimnasio, Derek notó que habían pasado varios segundos y Alison permanecía callada.

-¿Admirando la vista?

Esa pregunta sacó a Alison de su trance.

-¿Qué vista?

-Pues mi musculosa espalda.-Aclaró Derek con falta de modestia.

-Ya quisieras tenerla musculosa.-Se burló Alison riendo, sin embargo era una completa mentirosa porque sabía que Derek la tenía musculosa, de hecho... todos sus músculos estaban marcados.

El rubio arqueó una ceja, repentinamente divertido.

-¿Ah sí? que mentirosa eres Alison, no creas que no me di cuenta como me comías con la mirada en el bar, cuando nos conocimos.

Alison sintió que su corazón se aceleraba ¿tan obvia había sido? sintió vergüenza, se puso colorada.

-Sin embargo.-Prosiguió Derek, captando la atención de Alison.-Si tienes dudas... ¿quieres comprobarlo? puedes tocarla con tus propias manos.-Sugirió en tono pícaro y seductor.

Alison se sonrojó violentamente, estaba más roja que un semáforo.

-¡No quiero sentir tus músculos Derek!-Gritó con furia y vergüenza, Derek soltó una estruendosa carcajada.-¡Bájame de una puta vez!-Ordenó pegándole otro puñetazo en la espalda.

-Paciencia, ya casi llegamos.-Comentó Derek divertido.

-¿A dónde?-Preguntó Alison con desconfianza.

¿Y si Derek trataba de propasarse con ella? Alison pensó "no, no lo haría, no seas paranoica Alison, Derek es demasiado presumido y confianzudo pero definitivamente no es un violador", por las dudas preguntó.

-¿Cuántos años tienes?

-21 ¿y tú?

-19.-Contestó Alison sin pensar, luego se abofeteó mentalmente.-Mierda, no debí decirlo.

Derek rió nuevamente.

-¿Por qué?

-Porque no tengo por qué darte información sobre mi persona.-Explicó Alison y pensó su siguiente pregunta.-¿Qué estudias?

Escuchó la suave risa de Derek de nuevo.

-No quieres hablarme sobre ti pero... ¿quieres que yo te hable sobre mi?-Cuestionó con una ceja arqueada.

-Lo mínimo que merezco es que respondas mis preguntas.-Rebatió Alison con fastidio.-Prácticamente me estás secuestrando.

-No te estoy secuestrando dramática.-Repuso Derek con diversión.

Estar cerca de Alison sacaba lo mejor de él, nunca antes le había pasado con nadie.

-Llévame al bar entonces.-Ordenó Alison con poca paciencia.

Debía regresar, no había terminado de trabajar, estaba limpiando cuando Derek apareció y decidió llevársela sin siquiera consultárselo, el rubio rió con maldad.

-Ya quisieras Alison.

-¡¿Ves?!-Gritó Alison furiosa.-¡Me estás secuestrando!-Afirmó asestando otro puñetazo en la espalda de Derek.

-No te estoy secuestrando Ali.-La contradijo Derek entre risitas.

Alison se estremeció ¿por qué Derek la llamaba por ese apodo tan cariñoso? la rizada sintió mil mariposas revoloteando en el interior de su estómago y no le agradó la sensación.

-No me llames así.-Pidió con la voz temblorosa.-Para ti soy Alison y punto, Ali, Alis, Alisonsita, cualquiera de esos apodos sólo pueden decirme mis amigos, apenas te conozco Derek.-Aclaró con hostilidad.

-Lo siento.-Se disculpó Derek de inmediato, sabiendo que había cruzado la línea pero en su defensa no se había dado cuenta, sin embargo era consciente de que debía ganarse la confianza de Alison primero.

El problema era que quería empotrar a Alison contra la pared y besarla con todas sus fuerzas, al mismo tiempo quería protegerla, al mismo tiempo quería abrazarla y mimarla todo el día, al mismo tiempo quería invitarla a salir, pensó "¿qué me estás haciendo Alison?".

Se propuso apurarse y poner en marcha el plan que le había dado Matt, su mejor amigo le había dicho que le convenía hacerse amigo de Alison para ganar su confianza y finalmente pedirle que le mostrara su tatuaje, Matt sostenía que si Alison ocultaba su tatuaje era porque tenía sus propios motivos y que Derek no hacía bien obligándola a mostrárselo, Alison debía decidirlo por sí misma, confiar en él.

Derek creía que Matt podía tener razón, el único problema era aguantar las ansias de averiguar si Alison era su destinada, si por él fuera le arrancaría esa pulsera de la muñeca y vería su tatuaje esperando encontrar una pequeña huella como la suya.

-Llegamos.-Anunció Derek y finalmente dejó a Alison en el suelo.

La rizada se tambaleó, había perdido el equilibrio ya que Derek la había tenido demasiado tiempo cargada, en un milisegundo sintió los brazos del rubio sujetándola de la cintura para evitar que cayera, volvió a sentir las molestas mariposas en el estómago así que se apartó bruscamente de él, liberándose de su agarre.

-No me toques.-Gruñó a la defensiva.

Derek levantó las manos en un gesto inocente y se sentó en un banco, Alison miró alrededor, estaban en la plaza que quedaba cerca del bar pero había poca gente ya que era de noche, la rizada se molestó, si Derek creía que ella estaba dispuesta a hablar con él estaba muy equivocado y se lo iba a demostrar, Alison permaneció de pie delante de Derek y observó los alrededores, pensando una manera de irse.

-Siéntate.-Pidió Derek palmeando el lugar a su lado, la rizada lo fulminó con sus verdes ojos, el rubio esbozó una pequeña sonrisa.-Okay, no te sientes si no quieres, no te presionaré.

-Lo que quiero es irme a mi departamento así que apúrate y dime la mierda que me tengas que decir de una vez.-Espetó Alison con poca paciencia mientras se cruzaba de brazos.

Se había resignado, iba a escuchar a Derek pero más le valía que hablara rápido.

-Tranquila Alis.-Dijo el rubio con tono apaciguador.

Alison rechinó los dientes, furiosa, Derek le había puesto otro apodo cariñoso, maldito manipulador.

-No voy a seguir perdiendo mi tiempo.

Quiso marcharse, Derek lo presintió y actuó rápido, sujetó la mano de Alison y tiró de ella provocando que la rizada cayera sentada a su lado.

-No te vas a ir sin antes escucharme.-Espetó con voz firme dejando la diversión de lado.

Alison frunció el ceño.

-A mí no me vas a dar órdenes.-Contestó la rizada con rebeldía, se soltó del agarre de Derek ya que el chico seguía sujetando su mano e intentó ponerse de pie pero esta vez Derek la sujetó de los brazos, Alison empezó a forcejear pero el rubio tenía mucha más fuerza que ella, lógicamente.-¡Basta Derek! ¡déjame en paz!

-Por favor Alison.-Pidió Derek con súplica en sus ojos azules.-Sólo te pido que me escuches, será un momento, no te robaré mucho tiempo, lo prometo, dame una oportunidad para hablar, realmente lo necesito, necesito hablar contigo.

Alison suspiró y bajó un poco la guardia, se quedó quieta por lo que Derek la liberó, la rizada apartó la mirada de él y la fijó en un punto lejano, Derek quedó embelesado admirando su perfil, todo de Alison le llamaba la atención, el color verde de sus ojos ya que nunca había visto unos ojos tan bonitos, su nariz perfecta y delicada, su piel pálida, sus rizos castaños desordenados, sus labios gruesos color sandía, esos labios... Derek quería besarlos.

-No tendría por qué estar escuchándote en primer lugar.-Habló Alison de mal humor sacando a Derek de su estado de aturdimiento.-No te debo nada pero lo haré con una condición.

Dicho eso dejó de mirar a la nada, fijó sus verdes ojos en Derek durante unos segundos provocando que el rubio se estremeciera e hizo lo más sexy que Derek había visto en su vida, se llevó una mano a su pelo y se lo revolvió con elegancia.

Derek prácticamente estaba babeando, sentía que se le secaba la boca, pensó "necesito un vaso de agua con urgencia, no, mejor aún, necesito que Alison me pase un poco de su saliva, tal vez podría besarla..." se abofeteó mentalmente "¡contrólate Derek! la asustarás y tienes que empezar siendo su amigo, su amigo, si", tuvo que repetirse la palabra amigo unas cuantas veces para tratar de convencerse de ello.

-Joder.-Escuchó maldecir a Alison.-¿Estás en este mundo estúpido?

Derek parpadeó varias veces y pensó "si estoy así de distraído es por tu culpa Alison, tu maldita belleza me distrae", en vez de decir eso carraspeó y contestó.

-Si, lo siento.

-Como sea.-Dijo Alison encogiéndose de hombros.-Te decía que te escucharé con una condición.

-¿Cuál?-Se interesó por saber Derek, tenía curiosidad.

-Quiero que respondas todas las preguntas que te haga.-Exigió la rizada con una sonrisa pícara que marcaba los hoyuelos de sus mejillas.

Derek, al percibir los hoyuelos de Alison, sintió que le faltaba el aire, estaba embelesado nuevamente, pensó "maldición Ali, si sigues provocándome no me haré cargo de las consecuencias", se sacudió su rubio pelo con una mano, tragó saliva y luego fijó sus azules ojos en Alison.

-Okay pero tú vas a responder las mías.-Dijo tratando de que su voz saliera natural y no seductora debido al deseo que sentía en esos momentos.

Le estaba costando mantenerse en su lugar, quería abalanzarse sobre Alison, besarla, abrazarla, acariciarla, pedirle que le dejara ver su tatuaje porque estaba seguro que era su alma gemela, nunca antes había sentido una atracción tan grande hacia nadie, no podía haber otra explicación, Alison era su destinada, Derek podía asegurarlo, lástima que la rizada ocultara su tatuaje.

Derek pensó "¿y si mando a la mierda todo este plan de ser amigos que me recomendó Matt y le arranco la pulsera a Alison? puede que ella se enoje mucho conmigo si hago eso pero creo que vale la pena correr el riesgo, en algún momento el enojo se le pasará, supongo", realmente estaba tentado de hacerlo, de repente se dio cuenta que Alison lo estaba mirando mal, Derek arqueó una ceja.

-¿Cuál es el problema?-Preguntó confundido.

-Ese no es el trato.-Se quejó Alison cruzándose de brazos, haciendo un berrinche.

Derek soltó una risita.

-Ese trato me parece más justo, así como tú quieres conocerme yo también quiero conocerte.-Repuso sonriendo.

Alison rodó los ojos.

-Okay, okay, responderé tus estúpidas preguntas ¿feliz?-Dijo rendida.

Derek sonrió aún más.

-Por supuesto.

-Bien, yo empiezo.-Indicó Alison y se acomodó en su asiento.-Nombre y apellido.

-Derek Welling ¿el tuyo? ¿tienes un segundo nombre?-Preguntó Derek con curiosidad, él ya sabía el nombre y apellido de Alison y lo encontraba hermoso, todo lo relacionado con Alison le parecía hermoso.

La rizada negó.

-Nop, soy Alison Green pero...-Frunció el ceño.-Eso ya lo sabías, leíste mi cartel en el bar, pensé que ibas a hacer otra pregunta.

Derek soltó una risita de diversión, luego miró sonriente a Alison y se explicó.

-Por eso pregunté si tenías un segundo nombre Ali.-Se encogió de hombros y añadió.-Justamente ya me sé tu nombre y apellido.

Alison se sintió ridícula por no razonar algo tan tonto, luego repitió las palabras de Derek en su mente y sintió un vuelco en el estómago al percatarse de que la había llamado "Ali", cada vez que Derek le decía algún apodo cariñoso sentía aquello y no le agradaba la sensación.

Alison se encontraba extremadamente frustrada y confundida ¿qué le estaba pasando? quizás le habían caído mal los cereales que había comido a la hora del té en su departamento antes de ir a trabajar al bar, antes de conocer a Derek, si, seguro era eso ¿qué otra cosa sería sino?

-No te hagas el pícaro Welling.-Ordenó molesta, con el orgullo herido.

Derek frunció el ceño.

-No lo hago, te lo aseguro.-Aclaró en tono tranquilo, no quería que Alison se enojara con él, apoyó una mano en el hombro de la rizada, le dio un ligero apretón y le ofreció una sonrisa de medio lado.

Alison sintió un escalofrío recorrerle la espalda, rápidamente apoyó una mano sobre la de Derek y se la sacó de la manera menos disimulada posible, sin nada de delicadeza, dejando libre su hombro nuevamente, luego se dio cuenta de su acto tan imprudente y hostil, así que se llevó la mano al pelo y se lo revolvió mientras fijaba la vista en el pasto, Derek la encontró extremadamente tierna, estiró el brazo y sujetó la barbilla de Alison con sus dedos.

-Hey, tranquila, no pasa nada.-Le indicó levantándole la barbilla para que lo mirara a los ojos.

Alison tragó saliva y quedó paralizada, el tacto de Derek en su cara era reconfortante pero ni ahí lo reconocería, al igual que tampoco reconocería que lo encontraba extremadamente atractivo desde el momento en que lo vio por primera vez y aún se seguía sintiendo nerviosa y cohibida en su presencia, pensó "¿quién no lo estaría con semejante dios griego al frente y que te trata con tanto cariño? no es mi culpa, estúpido Derek Welling".

-Sigamos con las preguntas ¿te parece?-Propuso Alison haciendo la cara a un lado para que Derek dejara de tocarla.

La mano del rubio quedó suspendida en el aire, Derek retiró la mano llevándosela a su pelo y se lo revolvió, dejándolo más sexy de lo que ya estaba en opinión de Alison, y asintió.

-De acuerdo.

-¿Qué estudias?

-Ciencias económicas, estoy cursando cuarto año.-Contestó Derek.

-¿En qué Universidad?

-En la del campus.

Alison se relajó al escuchar aquello, Derek era un estudiante de la Universidad a la que ella asistía sólo que de otra carrera y dos años mayor, saber eso hizo que su confianza en el rubio aumentara, no podía ser una mala persona.

-¿Tú?-Preguntó esta vez Derek.

-Estudio en la misma Universidad...

El rubio la interrumpió.

-¿Cómo es que nunca antes te vi?-Preguntó con incredulidad y un poco de molestia.

Le hubiera gustado encontrarse con Alison mucho antes.

-Porque estudio otra carrera.-Respondió Alison como si fuera obvio.

-Oh... eso lo explica ¿qué estudias?

-Arquitectura y estoy cursando segundo año.

Derek sonrió pícaramente.

-Ahora me toca preguntar a mi.-Anunció, Alison asintió e hizo un gesto con la mano para indicarle que hablara.-¿Estás en una relación seria?

Alison empezó a toser descontroladamente, Derek le palmeó delicadamente la espalda para ayudarla a recuperarse, cuando la rizada se puso bien lo miró enfadada.

-¿Qué clase de pregunta es ésa?-Se quejó sonrojándose violentamente.

-Quiero saberlo.-Insistió Derek un tanto ansioso.

-No responderé eso, es muy personal y recién te estoy conociendo, vete a la mierda.

Derek frunció el ceño y dijo con seriedad.

-Hicimos un trato Alison.

La rizada se encogió de hombros despreocupadamente.

-Pues me vale, no me puedes preguntar cualquier cosa Welling.

-Dime, por favor.-Exigió Derek juntando sus manos en señal de ruego, comenzaba a desesperarse, Alison negó, Derek bufó frustrado.-Me lo vas a decir, sino estarías rompiendo el trato, no seas tramposa, dímelo.

Alison le mostró el dedo medio y dijo desafiante.

-Oblígame.

Derek arqueó una ceja, luego sonrió malévolamente, Alison tragó saliva, no se vio venir nada bueno.

-Tú lo quisiste.

Alison lo miró con un poco de miedo, sin previo aviso Derek se abalanzó hacia ella y empezó a hacerle cosquillas, la rizada no aguantó y empezó a reír a carcajadas.

-¡Pa... para! ¡para! ¡por... por favor!-Rogó entre balbuceos mientras se retorcía de la risa.

-Dímelo entonces Ali.-Ordenó Derek sonriendo alegre mientras le seguía haciendo cosquillas.

Alison había quedado acostada en el banco, estaba tratando de aguantar las cosquillas mientras no paraba de reír, Derek estaba sentado al lado de ella y seguía haciéndole cosquillas.

-Yo que tú hablaría porque no me voy a detener hasta saberlo.-Avisó Derek con una sonrisa pícara.

Alison ya tenía los ojos bañados en lágrimas, trató de resistir pero no aguantó más.

-¡No! ¡no lo... no lo estoy! ¡soy... soy soltera!

Derek la dejó en paz y esbozó una sonrisa de felicidad y alivio, Alison tomó grandes bocanadas de aire y se secó las lágrimas, cuando estuvo totalmente recuperada se sentó correctamente, miró mal al rubio y le volvió a mostrar el dedo medio.

-Maldito tramposo, embustero de cuarta.-Lo insultó bastante enojada, eso era chantaje, Derek rió a carcajadas.-Me toca.-Anunció.

El rubio dejó de reír y asintió, Alison se demoró un poco en hacer la pregunta, había bajado la cabeza y jugaba con los dedos de sus manos, Derek la miraba un poco preocupado, luego de varios minutos la rizada se armó de valor y levantó la cabeza, fijó sus verdes ojos en el rubio y habló.

-¿Por qué quisiste ver mi tatuaje?-El tono de voz que usó era frío.

Derek sintió un vuelco en el estómago, no podía contarle a Alison sobre su obsesión por encontrar a su alma gemela porque su plan se iría a la mierda.

-Pues...-Empezó a decir mientras se rascaba la nuca y fijaba sus azules ojos en el pasto, Alison estaba esperando su respuesta y no tenía una excusa válida que justificara su anterior comportamiento, decidió contarle la verdad.-Porque tengo la costumbre de... de mirar las muñecas izquierdas de las chicas porque...

Alison lo interrumpió, había comprendido todo.

-Quieres encontrar a tu alma gemela.-Su tono seguía siendo frío.

Derek levantó la mirada y fijó sus azules ojos en la rizada.

-Si.-Admitió repentinamente serio, los nervios se habían esfumado.

Pensó que Alison lo tildaría como un bicho raro pero no fue así.

-Comprendo, es normal, todos sueñan con encontrar a su alma gemela.-Dijo Alison, decir que Derek estaba sorprendido era poco, estaba en estado de shock, sintió esperanza pero se fue por el caño cuando la rizada continuó hablando.-Sin embargo a mí no me interesa eso, me parece estúpido, buscar a tu destinado... que pérdida de tiempo, me importa una mierda si el tatuaje indica que tienes un alma gemela, un estúpido tatuaje no marcará mi destino.

Derek la miró mal.

-No puedes pensar así.

-Tú no me vas a decir como tengo que pensar Welling, apenas me conoces, además ya tengo suficiente con Ian.-Dijo Alison empezando a enojarse.

Derek abrió grandes los ojos.

-¿Ian?

-Ajá.

-Me dijiste que no estabas en una relación seria.-Recriminó, el rubio ardía en celos.

Alison soltó una estruendosa carcajada, Derek la miró confuso.

-Ian es mi mejor amigo desde que tenemos 5 años.-Aclaró.-Compartimos departamento y trabajamos en el mismo bar.

Al escuchar lo último Derek se quedó pensando.

-¿El rubio que estaba en la caja registradora?

Alison lo miró sorprendida ¿cómo podía saberlo? ¿acaso la había estado observando?

-Si ¿cómo carajos sabes quien es?

Derek no respondió esa pregunta, iba a dejar en evidencia que la había estado espiando.

-En fin, quise ver tu tatuaje para comprobar si eras mi alma gemela, te encontré demasiado atractiva y esperaba que lo fueras.-Confesó sin filtro.

Alison se sonrojó violentamente, Derek la encontró extremadamente tierna, la rizada carraspeó y recuperó su tono frío.

-No te emociones, no estoy interesada ni en ti ni en nadie, soy alérgica al compromiso, hazte la idea de que no soy tu alma gemela, hablo en serio Welling, si quieres que seamos amigos compórtate como tal, la verdad es que estoy harta de que adolescentes hormonados me tiren onda...

Derek la interrumpió fastidiado.

-No soy un adolescente hormonado, sólo quiero encontrar a mi pareja de vida, yo voy en serio, nunca antes tuve una relación porque me parecía una pérdida de tiempo, mi alma gemela lo es todo para mí.

Alison lo miró mal.

-Pues me parece genial, haz lo que te plazca, sólo te aclaro que no soy yo.

Derek estaba empezando a enojarse.

-No lo sabes.

-Da igual, puedo asegurarlo.-Contestó Alison desafiante.

Sin embargo no pudo evitar echar un rápido vistazo a la muñeca izquierda de Derek, se sorprendió al ver una pulsera de tela alrededor de ella, el rubio se dio cuenta del acto de Alison y sonrió con maldad.

-Si tan segura estás de eso Green ¿por qué intentas mirar mi tatuaje?

Alison se estremeció, su corazón había empezado a latir rápidamente debido a los nervios, Derek la había agarrado con la guardia baja, no esperaba que lo notara.

-No estaba mirando tu maldita muñeca.-Contestó a la defensiva.

-Claro que lo hacías.-Aseguró Derek más enojado que ella.

-Vete a la mierda.

El rubio sonrió cínico.

-Muy maduro de tu parte, empezar a insultar cuando no sabes que decir.

Alison abrió y cerró la boca repetidas veces, se había quedado sin palabras, se esforzó para encontrar una respuesta.

-Me importa una mierda lo que digas, si no quiero no te muestro mi tatuaje y punto, no tengo por qué andar comparando el mío con el tuyo Welling.

Derek bajó la guardia, Alison tenía razón, no podía obligarla a mostrarle su tatuaje, bueno... técnicamente si podía pero no era correcto y no era el plan, el rubio pensó "¡el plan! ¡debo apegarme al plan!".

-Okay, tienes razón, estás en todo tu derecho Alison, si no quieres no me lo muestres.-Dijo Derek con voz neutra.

Alison abrió ligeramente la boca, no lo podía creer, Derek era una caja de sorpresas, pensó que seguiría insistiendo pero había desistido, soltó un suspiro de alivio y se sintió más alegre.

-Me alegro que nos estemos entendiendo.

Derek sonrió y habló con tono amigable, lo último que quería era enfadar a Alison si quería ser su amigo temporal.

-Lo mismo digo, creo que empezamos con el pie izquierdo.

-Pienso lo mismo.-Concordó Alison sorprendida por el cambio de actitud de Derek.

El rubio carraspeó y extendió su mano hacia Alison, la rizada lo miró sin comprender.

-¿Podríamos empezar de nuevo Alison? me disculpo por ser tan entrometido, no volverá a pasar, lo prometo.

Alison lo miró dudosa, por un lado quería creerle porque Derek parecía ser buena persona, podría ser su amigo ahora que Ian no la quería en su vida, Alison realmente estaba necesitando un amigo en esos momentos.

-¿Puedo confiar en ti Derek? realmente me gustaría que seamos amigos.

Derek sintió una punzada en el pecho, él quería ser más que un amigo para Alison pero se conformaba con eso por el momento.

-Por supuesto.-Mintió.

Apenas se ganara la suficiente confianza de Alison le pediría que le mostrara su tatuaje, si llegaba a ser una huella la rizada podría ir olvidándose de ser su amiga porque haría hasta lo imposible por conquistarla.

-Bueno... amigos entonces.-Aceptó Alison tomando su mano y esbozando una gran sonrisa que dejaba a la vista sus hoyuelos.

El corazón de Derek se aceleró, ser amigo de Alison era el mayor desafío que se le había presentado, era complicado cuando lo único que pensaba y deseaba era que Alison fuera su alma gemela, su destinada, su pareja de vida.