♡┆capítulo 02: el trato.
Yoongi definitivamente se siente confundido.
Luego de que ese chico le diera su mano, se vio arrastrado a este cuarto y dejado ahí, sin más que una orden de que se cambiara la ropa mojada y esperara.
El alfa acaricia su pecho, no ha dejado de andar rápido y su lobo es otro que no se calma, Yoongi sabe que es por las notas aromáticas que están esparcida en la habitación, solo que no deduce el por qué su lobo se comporta de esa manera; queriendo marcar el lugar. Nunca ha reaccionado así.
Almendras recién tostadas, el dulce de la miel y, definitivamente, lo refrescante y suave de la flor de ylang ylang, el alfa asegura una vez que su nariz huele el cojín que tiene en las manos.
¿Por qué ese omega lo reclamó como su alfa?
→ ☆ ←
Jimin agradece a Hoseok, Jungkook y Taehyung por su tiempo y servicio prestado, entretanto sale del estudio dando por finalizado su día de trabajo, camina hacia su camerino, pero se detiene en el momento en que toma el pomo de la puerta.
El hombre peli naranja está allí dentro.
Inhala un poco de aire y vuelve a llegarle esa agradable y dulce esencia de leche de coco combinada con la agridulce característica de la manzana verde. Al omega se le hace refrescante y al parecer a su lobo le encanta.
Cuenta hasta tres y abre la puerta con cuidado.
Yoongi deja de observar el techo cuando escucha la puerta abrirse, se sienta erguido y le da una sonrisa apenada al omega que lo mira con curiosidad genuina.
—Lamento haberte dejado aquí, tenía que terminar la sesión. —explica agarrando su albornoz de satín para colocárselo y aunque nunca se ha sentido acomplejado por su cuerpo ¡por dios! es un modelo curvy, de repente se siente expuesto a la mirada del alfa.
—No se preocupe, s-señor. Estoy bien, pero debería volver al trabajo, no quiero perderlo.
—Oh, no, no te preocupes. —niega con la mano y se sienta frente a él—. No tendrá ningún problema si dice que estaba conmigo, sigues siendo empleado de aquí.
—Oh.
—Bueno, yo quería hablar contigo sobre lo que paso y también disculparme por lo que hizo mi asistente no tenía por qué tratarte de esa manera. Y-Y yo tampoco debí d-decir que eras mi alfa, lo siento.
—Está bien, n-no se preocupe, señor —dice el peli naranja cuando siente su cara ponerse un poco caliente—, usted me ayudó y es lo que más agradezco, no importa lo que dijo.
Ese hermoso omega no debería estar disculpándose, más bien se siente halagado porque haya dicho eso.
El alfa no cree que alguna vez tenga la oportunidad de salir –o conquistar– con un omega tan lindo.
—Puedes decirme Jimin, soy muy joven para las formalidades. —sonríe, y el alfa siente que todo el aire es drenado de sus pulmones.
Es maravillosamente lindo, el cómo sus mejillas se abultan y sus ojos se cierran, pareciendo que también sonríen hacia él.
—Me llamo M-Min Yoongi.
—Bien, Yoongi-ssi ¿te lastimaste cuando Youngbae te empujo? —Jimin alcanza una toalla desmaquillante y comienza a pasársela por la cara.
—El codo, pero ya dejó de sangrar. Para mañana estará bien.
—Pasa a qué te revisen en enfermería y luego tomate el resto del día, igual te pagarán. —le regala una sonrisa para tranquilizarlo— Solo anótame el nombre de tu jefe y lo llamaré por ti.
El omega pide levantándose para buscar un papel y bolígrafo.
—Jimin-ssi, y-yo no sé e-escribir, lo siento.
El omega lo mira un par de segundos sin decir nada y luego asiente con una sonrisa.
—No hace falta disculparse, entonces, dime el nombre y lo anotaré por aquí.
→ ☆ ←
Jimin cierra la puerta de su casa ya una vez dentro y comienza a quitarse sus deportivas cuando capta un movimiento frente de él. Corre a prender la luz y susurra una maldición cuando ve a su madre servirse una copa con tranquilidad.
—¡Madre! Te he dicho que no estés en la oscuridad cuando vengas a mi casa, me dará un infarto un día de estos y serás la responsable.
—También me da gusto verte, cariño. —suelta risueña la alfa, Jimin suelta una risa y trota para abrazarla.
—Iba a visitarte la semana que viene. —se sientan abrazados y el omega recuesta la cabeza de su hombro y aprovecha a inhala la esencia de pomelo y nerolí.
—Eso dijiste el mes pasado y aun sigo esperando esa visita.
—Últimamente tengo la agenda muy llena, pero en dos semanas estaré yendo a Busan.
—No entiendo porque trabajas tanto si es tu agencia, no deberías ni modelar.
—Me gusta hacerlo, madre y no quiero estar sentado todo el día en una oficina. De eso se encarga Namjoon hyung.
—Bueno y por eso aun respeto tu decisión. —acaricia la espalda de su hijo.
—A parte de regañarme, por qué viniste.
—Sabes bien por qué... —arquea una ceja y Jimin hace un puchero, mientras suelta un quejido.
—Youngbae se lo merece.
—Llamo llorando y diciendo que lo despediste, ¿es muy grave lo que hizo?
—Lo he soportado por tres meses, mamá, meses los cuales quiso sabotearme. Me acepta sesiones cuando le digo directamente que no, esta mañana me dijo que tenía fotos con LV y no era cierto, eran para el calendario de la sex shop; no es la primera vez que se "equivoca" y trata mal al personal, sabes que no tolero la mala educación y lastimo a alguien.
—¿A tu alfa?
Pequeño mierdilla chismoso.
—No quiero hablar de eso, mamá. —se separa con las mejillas sonrojadas.
El mismo omega aún se cuestiona de por qué dijo semejante cosa, esa tarde las palabras salieron por si solas y se dio cuenta de su error cuando vio la cara de sorpresa en su ex-asistente y era lo suficientemente orgulloso como para retractarse ante ese imbécil.
Estaba seguro que ya para mañana todos en la agencia lo sabría, hasta posiblemente la prensa y por eso en su bolso traía la información del alfa proporcionada a la empresa.
Debía idear un plan y ejecutarlo cuanto antes.
—¿Por qué? Tu madre quiere conocer a ese alfa que conquisto el corazón de su bebé~. —canturrea divertida— ¿En qué sector trabaja?
Pero primero debía convencer a la quisquillosa de su madre.
—Es un chico normal, se llama Yoongi y tiene 28. Entro hace cuatro meses como conserje, pero es muy amable y me trata bien.
—Oh, eso es... interesante. —toma un sorbo de su vino y sonríe por el borde de la copa— Debe tener un gran carisma si te conquisto en poco tiempo... ¿Es guapo? —abre los ojos con curiosidad.
—Es tan guapo como un modelo, pero a penas empezamos, madre por eso no te había mencionado nada. —miente jugando con sus manos, pero la alfa lo toma con una señal de timidez.
—Ay, cariño. Quiero conocerlo pronto, llévalo a casa cuando vayas a Busan. Hablaré con Youngbae y me encargaré de que se comporte, le daré otro puesto, pero si sigue siendo irrespetuoso, despídelo sin piedad. —lo señala con una sonrisa., y se levanta agarrando su cartera—, me iré y tu ve a descansar. Te amo.
—También te amo. —le da un abrazo como despedida y se tira a sofá soltando un suspiro nervioso.
Ahora debe convencer a ese alfa para que le siga la corriente por un tiempo.
→ ☆ ←
Dos días después, el omega pelinegro va de un lado a otro frente a la puerta de servicio que tiene enfrente y muerde su labio, sus manos están sudorosas y su lobo se siente inquieto, ¿qué es lo que lo tiene tan nervioso?
Jimin ya tenía ensayado su discurso para convencer al alfa, iba a ofrecerle lo que pidiera con tal de que lo ayudara por un tiempo en su mentira. Porqué debía aflojar la soga que el mismo se echó al cuello.
Cuando va a tocar, escucha pasos suaves a su izquierda y se gira encontrándose con el alfa que viene arreglando su uniforme con una tierna mueca.
Jimin se toma el tiempo para apreciarlo. Su piel es tan pálida y puede decir que tersa, incluso su cabello peinado hacia atrás con ese color resaltando sus atractivos, esos ojos oscuros y curiosamente parecido a los de un gato, mejillas prominentes, nariz pequeña y labios delgados, de rosa natural y un poco agrietados.
Pero definitivamente, era muy atractivo y Jimin no sabía si llamarlo buena o mala suerte, porque ese alfa era su tipo.
—Oh, h-hola. —el peli naranja se detiene y hace una reverencia en el momento que nota la presencia del omega.
—Buenos días. —el omega saluda con una sonrisa tímida, cuando el alfa se acerca con pasos cauteloso— ¿Cómo sigue tu codo?
—Mejor, ya está comenzando a cicatrizar. —explica abriendo la puerta y Jimin boquea ante el estado del cuarto. Ese no es un cuarto de descanso es un maldito depósito de cosas viejas.
—¿Yoongi-ssi?
—¿Sí?
—Este no es, eh, un cuarto de descanso. —mira alrededor con un poco de desagrado, está todo lleno de polvo y ni hablar de olor que emana el lugar; a humedad y moho— ¿por qué vienes aquí? Estoy seguro que hay más salas de descansos, salas reales. No esto.
—Aquí fue donde me mando mi supervisor, Jimin-ssi.
—Ah, claro —murmura con enojo, pero no dirigido hacia el alfa porque es obvio que no tiene la culpa, Dios, ¿qué clase de trato le han estado dando a este hombre? Es notorio el desagrado que le tienen, por esto y debido a que cuando llamo a su supervisor, ese beta hablo del alfa como un ser inferior— ¿Por qué no limpias un poco? Ya llevas tiempo aquí.
De solo imaginarlo comer en este lugar, hace que su sangre hierva.
—Me dijeron que no, que al presidente de la agencia no le gustaba que tocarán este lugar. Pero es transitorio, o eso fue lo que dijo el señor Bae, mientras se desocupa un lugar en alguna de las salas.
El omega mira fijamente al alfa y luego niega, ni siquiera sabe que está siendo rechazado. Aclarando su garganta, dice:
—N-no te cambies todavía. Ah, ¿podemos ir a mi camerino? Quiero hablar adecuadamente contigo y maquillaje debe estar buscándome.
—Oh, c-claro. —sonríe abriéndole la puerta al omega y haciéndole una señal de que salga primero. Jimin agradece un poco abochornado, pero comienza a guiar el camino.
Cuando ya se encuentran sentados uno frente a otro en el camerino del modelo, Jimin toma un sobre y se lo entrega al alfa, que lo mira confundido.
—Bueno, Yoongi-ssi es una situación un poco extraña y yo aceptaré si la respuesta es un no. Pero quiero que primero me escuches atentamente. ¿Tienes parejas o alguien con quien convivas románticamente?
—N-no, yo vivo solo. — responde ruborizado.
—Vale, lo que tienes ahí —señala en el regazo del mayor —, es un contrato para que te hagas pasar por mí alfa.
—¿P-por qué yo haría tal cosa? N-no quiero ser incriminado por nada ilegal.
—¿Qué? ¡No, no! —el omega ríe y se mueve quedado de lado del alfa, toma la carpeta con cuidado y la abre—. Prometo que no es nada ilegal, pero tampoco con fines legales. No hay trampas, es solo un acuerdo entre tú y yo. Puedes llevarlo algún familiar o conocido para que lo lea.
—Entiendo lo que me dice, pero ¿por qué yo? Usted es b-bonito y puede tener a q-quien quiera.
Jimin se ruboriza mientras ríe quedito. —Puede que tengas razón, pero hace dos días te llame mi alfa y bueno, mi ex-asistente se ocupó de correr la voz. Así que todos piensan que salgo con alguien, incluso sale en las noticias.
—Oh.
—Por eso debes ser tú. —lo mira con su mejor cara de cachorrito y el alfa ríe silenciosamente, pero sus hombros se sacuden. Jimin lo mira encantado y con una sonrisa contagiosa—. A cambio te daré lo que quieras, lo que sea.
—Siempre he querido aprender a leer o escribir, pero los tutores son muy costosos. —explica el alfa— ¿Puede costearme uno?
—El mejor de Seúl si es lo que quieres, ¿algo más?
—Solo anhelo eso.
—Bueno, pero si deseas algo más puedes decirme. Ah, antes que se me olvide, el acuerdo es por seis meses, pero se puede extender o cortar si así lo desea alguna de las dos partes. —tiende una cajita rectangular.
—De acuerdo, ¿y qué gana usted? Ambas pautas mencionadas me benefician a mí. —refuta el alfa con el entrecejo arrugado viendo el papel que tiene en frente, claramente no sabe lo que dice, pero el omega frente a él le trasmite la confianza suficiente como para saber que no está siendo engañado, abre la almohadilla con tinta roja y coloca su huella como firma— Diré que tengo a un bonito modelo como omega y conseguirá a alguien para que me enseñe a no ser tonto.
Jimin abre los ojos de más y siente sus mejillas teñirse de rosa, ¿cómo ese alfa puede ser tan directo? Frunce un poco el ceño.
—Y-yo...
—D-discúlpeme si lo ofendí, no fue mi intención. Pero mis padres siempre dicen que los tratos deben beneficiar a ambas partes o si no es estafa.
—No me ofendes, simplemente eres muy directo. Y no, no me estoy auto estafando, ambos obtenemos algo bueno de esto. Solo debes estar disponible para mi cuando quiera, ir a citas y que nos vea los paparazis, ser cariñoso conmigo en público y deberás conocer a mi madre. —explica rápidamente— ¿Estás de acuerdo?
—Está bien.
ACLARACIÓN: Jimin es dominante por eso lo tres olores, en vez de dos, como Yoongi.
vi un buen recibimiento en la historia y
eso me inspiro un poquito mas para escribir este ^o^.
espero lo hayan disfrutado.
también gracias a lxs que se ha pasado por
mis demás historias y seguido, lo agradezco de corazón.
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