Capítulo 2 "Pepe Botellas"


— ¿Ba-rry?— veo como en la cara del chico se figura un gesto de "Puedo explicártelo, no te descontroles"— Necesito hablar contigo— digo tratando que mi voz no flaquee mientras me dirijo hacia él, al agarrarlo de su muñeca siento un leve escalofrío, Lo jalo y empiezo a correr en mi destino al pasillo menos habitado del instituto.

— ¡Oye Ellie, puedo explicarlo!— se excusa el chico mientras lo arrastro por los pasillos. Yo decidí ignorarlo.

Mi respiración entrecortada se hace más fuerte en cuanto pienso en esto, mi furia cada vez se dispersa más rápido por mi cuerpo.

Lo estrello contra la pared del pasillo "embrujado".

— ¿¡Que haces aquí!?— Le grito agarrando el cuello de su camisa, tratando de disimular mi quebrada voz, lo cual no consigo del todo bien— ¡Eres un imbécil!

—Ellie, tranquilízate— me dice suavemente.

— ¿¡Cómo puedo estar calmada!? ¿¡Cómo puedes seguirme hablando tan dulce como si nada hubiera pasado!? ¡No lo entiendo!— digo mientras accidentalmente una lagrima se escapa de mi ojo derecho. Él acerca su mano para limpiarla pero yo se la aparto bruscamente mientras a continuación le golpeo en la cara— ¿¡Quién te crees!? — el me sigue mirando con una cálida sonrisa, en la punta de ella un hilo de sangre comienza a caer. Lo miro, atónita por lo que he hecho y me separo de él, cayendo de rodillas en la mitad de este oscurecido pasillo.

— ¿Ya te desahogaste?— me pregunta mientras se pone de cuclillas enfrente de mí.

—Tu... estas muerto— digo tratando de convencerme— Y-yo, sin q-querer lo hice— otra inevitable lágrima recorre mi mejilla, la cual me limpio rápidamente para que no lo note— solo es una alucinación, me estoy volviendo loca, eso debe ser.

—Ni yo mismo se por qué estoy aquí—bromea amargamente— Esa noche, pude salvarme por los pelos, caí, me golpeé pero pude salvarme. Creo que me aventaste algo fuerte— bromea nuevamente el chico castaño, de ojos verdes algo enchinados gracias a su sonrisa.

— ¿Por qué no directamente usabas esas cosas de ilusión y venias a verme? Es estúpido, mi cabeza anda demasiado mal...— me levanto, tratando de respirar profundo y comienzo a irme, convenciéndome de que él está muerto, de que es solo mi imaginación. Hubo un silencio, confirmando que mi ilusión ya se había marchado.

—No puedo forzarme tanto, sigo herido— me quedo atónita y paro, mi cabeza sigue hablando— Teníamos que esperar este primer día.

No puedo evitarlo, me doy vuelta y allí está él, con sus brazos tendidos, mostrando las vendas que le recubren los dos brazos, ese chico que me salvó el culo mil veces.

Sin dudarlo, corro con todas mis fuerzas. A cada paso voy quebrándome, a cada paso recuerdo su tacto, a cada paso rompo la débil cascara que cree para protegerme, terminando esto lanzándome en sus brazos, liberándome en ellos, dejando salir una llovizna de mis ojos.

—Gracias— me susurra, sintiendo su respiración en mi cabeza. Yo solo me desahogo en sus brazos, mientras que cada lagrima que desprendo de mi cuerpo, el me abraza más fuerte.

**

Cuando estuve lista, empezamos a encaminarnos hacia los casilleros de Emma, una chica de poca estatura, cabello con ondas, esponjado y dorado, ojos color miel y mejillas regordetas, con brackets, sociable con los chicos gracias a la ternura que irradia, aunque te esfuerces no puedes odiarla.

En el camino me sentí algo avergonzada ya que llore como cachorro, y lo abracé fuerte por lo que le debe doler todo el cuerpo. Levanto la cabeza y lo miro, él sonríe como si nada, sigue siendo él al parecer.

A lo lejos veo a Hanna, una chica blanquísima como la nieve y con lo que resalta sus ojeras, por lo que muchas veces creen que está enferma, de altura promedio, cabello negro y liso hasta la cadera, de ojos celestes nariz un poco alargada, es pervertida y algo terca, pero muy buena amiga; Kevin, un chico algo pequeño para su edad, ojos cafés un poquitín rasgados, tez algo bronceada, de cabello castaño oscuro un poco largo y despeinado, si buscas en un diccionario la definición de niño problema, saldrá una foto de él, se puede decir que es el payaso del grupo; Diego: demasiado alto, de piel morena, cabello negro bien cortado, con facciones creería que perfectas, muchas chicas están atrás de él, aunque no saben que es demasiado serio e indiferente y por ultimo a la ternura en personificación, Emma. Ellos conversan alegremente. Yo me acerco, algo nerviosa, al lado de Toma, me sorprende demasiado el poder volver a verle, quien sigue sonriendo sin ninguna preocupación.

Cuando estamos considerablemente cerca, uno a uno nos voltean a ver: Hanna y Emma me miran a mí, luego a Toma y por ultimo entre sí con una cara de picardía, mientras que los rasgos de Kevin y Diego son ilegibles.

—H-hola— saludo algo bajo cuando ya estamos allí— él es... ¡Un amigo de la infancia.

— ¡Ah, claro! Un "amigo"— dice Emma levantando y bajando sus cejas de forma rápida y seguida. Suspiro de forma brusca y Kevin comienza a carcajearse.

— ¿Cómo se llama tu "amigo?— pregunta el muerto de risa colocando comillas a la palabra "amigo" con su dedo índice y corazón.

—Es To-...— el casi nombrado me interrumpe. Como siempre, salvando mis metidas de pata.

—Me llamo Barry, ella está a cargo de mi para integrarme con los compañeros, espero llevarme bien con ustedes— sonríe, alguien que no lo conociera diría que esa sonrisa es cálida y amigable, pero es la que siempre pone para defenderse, no les tiene tanta confianza.

Una vez que todos se presentaron, comenzamos a hablar.

—Mira quien está aquí— la voz de una zorra a mi espalda me sobresalta— te lo llevaste y él estaba platicando conmigo— se victimiza.

—Perdone "reina"— Toma sobre-actúa su voz y hace una reverencia, a lo que Taylor lo mira estupefacta— pero yo solo platicaba con usted para ver qué tan hipócrita y ridícula puede ser, me he sorprendido por los altos niveles sin detectar ningún golpe severo en su cráneo.

Hanna, Kevin, y Emma comienzan un coro de carcajadas al ver el rostro de indignación de Taylor, mientras que Diego solo esboza una sonrisa, que para nosotros es reírse hasta que te explote el estómago.

—Ah pues yo... yo solo estaba jugando contigo— trata de buscar algún movimiento de defensa para su dignidad.

—Si eso te hace feliz... admiro tu capacidad tan fuerte de atraer hombres— le respondo irónica mostrándole mis dientes con una sonrisa.

—Ya vas a ver, Ellie, te haré de la vida un infierno— me amenaza, esta tan roja que podría prenderse fuego en cualquier momento.

—Si tus insultos y zancadillas conforman gran parte de tu plan, no creo que sea muy efectivo— le respondo, después de todo no he cambiado tanto. Ella da media vuelta mientras aparta su cabello del hombro y se va modelando, pero estoy segura de que sus cejas exageradamente delineadas están tan juntas como si fuera un puente de un ojo a otro, demostrando su frustración.

—Bueno, volviendo al tema— cuando Taylor y sus zombis desaparecen de nuestras vistas, Emma retoma nuestra antigua conversación sonriéndonos pícaramente— ¿De dónde vienes?

—De Epsonin— responde algo seco.

— ¡Como Diego!— exclama sorprendida.

— Entonces Ellie también es de Epsonin— interviene dudoso Kevin

—Sí, si— trato de esquivar el tema.

—Y... ¿Cómo se conocieron?— pregunta percatándose de mi tono pesado como un elefante y así queriendo profundizar el asunto.

—En una tienda— digo por acto de reflejo.

—En el colegio— toma responde al mismo tiempo que yo. Nos volteamos a ver algo inseguros. Todos nos observan confundidos.

—Lo que quiere decir es que él ya me conocía de vista en la institución, pero yo lo conocí en una tienda— eso es en parte verdad, claro, omitiendo la parte de infectados, cosas ilegales y demás, nada grave ¿No?

— ¿Y cómo era...?— Kevin se interrumpe para apreciar con desagrado a algo detrás de mí— ¿Qué mierda quieres?

—Oye cálmate, sabes que si me tratas así puedes terminar mal, yo solo quiero hablar con Ellie...— me doy vuelta al escucha esa tonalidad y, por ende, Toma hace lo mismo.

Ahogo una risotada al ver como los rasgos de superioridad de Zack se transforman en miedo al ver la cara de mi acompañante.

— ¿Qué mierda hace este retrasado aquí?— pregunta Toma de forma brusca y enojada— ¿Acaso "Pepe Botellas" va a tu escuela?

— Te ves bien...

—También se controlar mis poderes, quítate— trato de empujarlo pero no de lastimarlo, mientras la peste del alcohol inunda mi nariz, esto es el colmo.

Se acerca y me besa. Yo incendio mi mano y le golpeo en su mejilla con la palma. El grita de dolor mientras protege parte de su cara con las manos.

Cuando alguien lo golpea por atrás. Lo deja en el suelo, agonizando. El extraño se dirige a Zack, se para con las piernas abiertas arriba de él y le agarra el cuello de la camisa, haciendo que sus hombros se levanten. Con la otra mano libre la llena de rayos eléctricos.

— ¡Puedes hacer eso con cualquier zorra tuya pero si vuelves a tocarle un solo pelo a ella, juro que te matare de la forma más lenta y dolorosa posible!— Toma le amenaza, Zack asiente rápidamente con la cabeza y se va corriendo.

—Esto...— Zack empieza a trabarse, muerto de miedo, diviso como mis amigos se sorprenden al verlo tan indefenso, como si de un cachorrito abandonado se tratase— solo necesito unos minutos con Ellie...

—Cualquier cosa de la que quieras hablar puedes platicarlo conmigo— Toma le sonríe de lado con los ojos de un asesino, Zack cada vez se ve más intimidado.

—Deja, te pones así por unos insultos— trato de tranquilizar a Toma.

— ¡¿Solo un insulto?!— imita muy mal mi voz Toma, a lo que yo frunzo en ceño.

— ¿¡Puedes dejar de bromear con eso!?— Le reprocho tratando de sonar enojada, pero ni un segundo pasa que empiezo a reírme—Ustedes— señalo a los espectadores que observan con cierta diversión al estado de Zack— se quedan aquí y le preguntan a Barry sobre la vez que un camello casi lo deja pelado y yo hablaré con Zack unos minutos.

— ¿¡Que me quede qué!?— ya me he alejado dejando a Toma con la avalancha de preguntas de mis compañeros. Lo siento, ya te devolveré el favor, además, tú te lo buscaste.

**

Cuando llegamos al pasillo "embrujado", lo suelto de la muñeca, ya que lo llevaba arrastrando como un niño asustado por ir al doctor. Doy media vuelta para darle mi atención.

—Bien ¿de que querías hablarme?

—Te acuerdas de esa noche en la que yo te encontré, ya sabes, sin...— empieza algo nervioso.

—Deja de poner esas palabrerías, si alguien te escuchara pensaría que me viste de puta con mil hombres— le interrumpo.

—Q-quería di-disculparme por lo que te h-hice, estaba borracho y no medí las consecuencias—tartamudea mientras se rasca la nuca avergonzado, facilitando su lamento mirando al suelo— Me siento muy arrepentido...

—No digas mentiras— Toma se coloca detrás de él y le susurra al oído la anterior oración, haciendo que Zack se sobresalte. El asustado se da media vuelta y, sin despegar su mirada de los rasgos seguros de sí de Toma, camina lentamente hacia atrás hasta quedar a mi lado, como si él fuera una bestia que al mínimo movimiento lo atacara— ¿Quién puede arrepentirse de sus besos?

—Cállate si todavía quieres ser padre— le amenazo y él me sonríe.

— Oh no, no quiero decepcionarte cuando quieras tener un hijo— me guiña el ojo, a lo que yo le respondo mostrándole mi dedo corazón.

— ¿Solo eso querías decir-?— me dirijo hacia Zack y me siento estúpida al no notar que ya se había ido. Toma me lo refriega riéndose.

—Tonta, ya debe ser la hora para ir al salón ¿Vamos?— me invita y, sin ninguna alternativa, acepto caminando hacia él mientras suspiro pesadamente.

**

Las clases han pasado rápido ya que, como siempre a principio de un nuevo año escolar, los profesores estuvieron toda la hora presentándose y explicando su forma de evaluar.

Toma está a mi lado y nos dirigimos hacia la salida, el momento perfecto para explicarle todo.

—Los chicos estarán muy felices al ver que te he encontrado— me dice sin mirarme y sonriendo.

—Escucha...— suspiro preparándome para lo que viene— No voy a volver...

— ¿Por qué no?

—Quiero... quiero dejar todo esto que paso en los últimos meses en el pasado, volver a mi vida normal y seguir distintos caminos... Por favor, necesito que les digas que no me encontraste, será mejor para todos...

—Demasiado tarde— me interrumpe una voz familiar.

PERDON PERDON PERDON PERDON POR NO SUBIR, aunque ahora saben que Toma está vivo ewer

No tengo excusa así que como recompensa pueden preguntarme cosas, y yo aquí les diré las muertes que planeaba hacer en elected pero al final lo las ejecute porque me dio pena xc:

Eliot: eliot se suicidaba después de ver a su hermana muerta.

Haydee: ella no resistiría y moriría en los brazos de Kenta.

Toma: lo planee desde el principio del libro que el "muriera y luego sobreviviera, pero después de escribir el ultimo cap de elected me replantee la idea de verdaderamente matarlo, pero como que se me iba a complicar la cosa así que nop! 

Josh: en realidad Josh no moría pero si seria drogadicto, pero como que ñeee...

Bueno creo que eso es todo...

espero que se cuiden y me perdonen y que no me hayan anotado en su death note T-T CHAO CHAO :D :D

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top