Mark cree que Yuta está sobrepasando los límites. Está más demostrativo, lo abraza más, le habla más, solo está con él, solo va a él. Yuta ha cruzado la línea.

Mark carraspea, se pone frente a todos sus compañeros, fue un día especial, cada uno hizo cartas para cada compañero, todo de manera anónima. Sigamos que Yuta no era demasiado "anónimo"

— Para mi amado Mark. Te amo y te amo más. Te amo hasta el punto en que decir 'te amo' suena ligero. No puedo vivir sin ti. La razón por la que respiro eres tú. Gracias por tu trabajo en Dream y 127 de: la persona que más te ama".

Todos soltaron chillidos contagiados sobre el "humor" el amor de Yuta. Todos ellos creen diferentes cosas.

Por ejemplo, Taeyong: Taeyong, cree que Yuta creció, él cree que maduró, para el líder de su equipo Yuta fue un pequeño que al no querer estar solo logró encariñarse fácilmente con sus demás compañeros, y ahora con Mark. Porque Mark es todo lo bueno de Yuta, es lindo, tierno, inteligente, capaz, tan talentoso. Taeyong, está casi seguro que Yuta es una mejor persona gracias a Mark.

Que tal Jaehyun, Jeong imaginaba a punto ciego que Yuta realmente amaba a Mark, que él desea intentar algo con el canadiense, que ignora la diferencia de edad, que simplemente está enamorado, tanto como él lo estaba de Johnny.

Donghyuk tiene un punto de vista completamente diferente. Un día Mark dice estar enamorado de Yuta, dice que es difícil porque Yuta no parece amar realmente, para Donghyuk Yuta y Mark hablan demasiado sin saber. Para Donghyuk Yuta puede decir mil y un veces que ama a Mark que es todo, su razón "para respirar" podría decir cualquier cosa, y no iba a creerle, no con todo lo que ha escuchado de Mark.
Para Donghyuk Mark, su mejor amigo es un idiota que no tiene la mayor idea de que quiere y solamente está acostumbrado a obedecer dar todo de sí siempre.

O que tal para Jaemin y Chenle que cada vez que Mark cancela sus salidas por razones estúpidas. Ambos empiezan a creer que cada vez es más raro, lo conocen, empiezan a ver su comportamiento, es raro, Mark no es el mismo de antes, quizá creció quizá está atrapado en un lugar sin salida.

O él mismo Sicheng, es dos mil veinte y dos, están todos reunidos, Sicheng vuelve a ser ese gran amigo de Yuta. Solo amigos, frente a cámaras o detrás de ellas, Sicheng y Yuta son unidos nuevamente, se abrazan, hablan de cosas. Tantas cosas como Yuta diciéndole al chino que empieza a sentir cosas reales por el canadiense.

Unos creen que Yuta realmente está enamorado de Mark.

Unos creen que Mark está correspondiendo de igual manera a ese enamoramiento de Yuta.

Otros creen que van demasiado lejos.

Pero la verdad es que, aunque Yuta, ha gritado que ama a Mark, que es su razón de respirar, el motivo por el cual se levanta día a día, su motor, su todo en la vida. Yuta, sigue siendo el mismo. ¿Mentiras, miedo? Podría ser que está mintiendo, que todo es llamar la atención, ser un espectáculo. Podría ser que tenga miedo, que fue demasiado hijo de puta y es difícil redimirse a este punto de la historia.

Mark, está en una situación similar. Donghyuk tiene razón, no tiene una jodida idea de que es el amor, si realmente está enamorado de Yuta, si es real que solo quiere complacerlo porque así como todos dicen, Mark es solo la máquina de trabajo, solo está empeñado en dar todo y mucho más de él.

Es confuso, para todos.

— Son muy cursis, basta con eso. — Jungwoo cubre sus ojos con una gran sonrisa, está gritando con emoción.

Yuta titubea, mira a cada uno de los presentes, todo el grupo está reunido, no solo los nueve, Sicheng, Jaemin, Chenle, están todos ahí, todos los que tienen diferentes opiniones sobre el comportamiento Yuta hacia Mark y viceversa. Todos ven con atención en diferentes puntos de vista. Lo único que no impide a Yuta de colgarse sobre los brazos de Mark es que la cámara los graba. La cámara es su mejor aliada, nadie del staff lo juzga, y a los fans les gusta. Entonces lo hace, se abraza hacia Mark y el menor le corresponde, así es, no dudó siquiera un segundo que Mark fuera a corresponder a su abrazo.

El otro punto de esta historia es que Mark puede ser el mejor desquite de Yuta con sus compañeros de NCT 127, ellos están consiente, ellos los han visto llegar hasta ese punto.

La cuestión es otra, no solo están sus siete compañeros de equipo, están todos, está NCT DREAM y WAYV, ellos no tienen la menor idea de que sucedió antes con Yuta cuando pasó con Hansol. Para ellos así como con los otros, o Yuta está loco por Mark, está enamorado o es un psicópata que solo desea estar con él como un loco posesivo.

— Ven Mark, quiero joderte está noche.

Mark rasca sus cabellos, no es la mejor ocasión, están en un gran hotel que no solamente todo el grupo, sino muchos otros artistas más. — Yuta, nos pueden escuchar.

— Es tu culpa que seas tan ruidoso. Tengo una idea, pondré algo en la televisión para clamuflajear tus gemidos.

— No es seguro. — Mark despeina sus cabellos, así como cualquier día, está atrapado gracias a las órdenes del mayor. — Es una mala idea en realidad.

— Deja de hacer el cuento demasiado largo. — El mayor rueda los ojos. Yuta camina hacia puerta activando el seguro, se encarga de dejar una sola luz prendida, está oscuro, pero pueden verse, lo suficiente para poder pasar un buen momento. — Anda amor, quítate la ropa. — Yuta se acerca con peligrosidad, Mark tiene una simple playera sin mangas, es fácil tener acceso a su cuello, puede besarlo a su antojo cuidando no hacer marcas que serían fácilmente vistas. Mark gime despacio, trata de no hacer tengo ruido, siempre cuidando ser silencioso. — Cuando vayamos a Japón, te daré lo que te prometí, te llevaré a un lugar donde puedas gritar a gusto. Espera el momento, te pondré como una perra, te voy a dar tantas veces que te dará miedo la pólvora. Podrás gritar con gusto, te pondré en todas y cada una de las posiciones, marcaré partes de tu cuerpo que solo yo pueda ver. Será la mejor de nuestras noches. Seremos felices, en ese momento será nuestro mejor momento.

Es extraño como su cuerpo corresponde por completo a las palabras de Yuta, hace años Mark nunca había tenido un encuentro sexual, Yuta lo fue todo para él. Yuta era su maestro, solo se sentía capaz de corresponder a Yuta porque él ha sido el primer y único encuentro "amoroso"

Gemía ante el tacto, las palabras, ante Yuta. Mark era el perfecto desquite de Yuta, porque era el más puro que había conseguido.

Mark sabía que solo Yuta era dueño de su cuerpo. — ¿Te gustaría, no es así?

— Sí. — El menor asiente, estira mucho más su cuello para sentir los besos de Yuta en él.

— Quítate la ropa.

El menor busca el inicio de su playera para empezar a cumplir con las órdenes de su dueño. En ese momento se escucha el leve golpeo de la puerta.

Yuta le cubre sus labios, ambos sonríen disfrutando de la dosis que crea la euforia de ser descubiertos.

— Shh, tú puedes con esto.

— Mark. — Es Jaemin quien habla desde afuera de la habitación. — ¿Nos acompañas? Iremos a tomar y comer un poco de carne.

Yuta comienza a besarle el cuello, y peligrosamente su diestra entra en sus shorts, Mark ya está erecto, empieza a acariciarlo con lentitud, sabe que su pequeño se estimula más rápido con toques lentos, Mark es su desquite que obedece ante sus toques.

El menor aprieta los labios, teme que si intente hablar se delate en gritos y gemidos. — ¿Mark, ya estás dormido?

— Contesta. — El mayor se agacha sobre la entre pierna del menor, junto con ese movimiento baja los shorts revelando esa gruesa erección.

Lascivo, así es Yuta. Es demasiado verlo ahí agachado con la boca a la altura de su pene. La insistencia en la puerta continúa, Jaemin sigue golpeando la puerta, en ese momento, Yuta le da una primera lamida, y su celular vibra.

Mark está recibiendo una llamada de Jaemin, y no puede siquiera pensar en ser capaz de poder responder, está demasiado excitado, ver y sentir a Yuta dándole un oral es mucho para su cabeza.

— Amor, hazlo pronto, ¿O esperas que le diga yo mismo?

— Perdón... — Habla entrecortado, es difícil, el ritmo es más rápido está al borde del abismo con el mayor chupando su pene. — Jaemin, estaba en el baño... Yo... Voy a dormir ahora. Estoy agotado.

— ¿Mark Lee, agotado? — Puede escuchar la característica risa de Jaemin. — Yaa, de acuerdo bebé, duerme y sueña conmigo.

Hasta Yuta ríe escuchando a Jaemin aun así sigue concentrado en darle el placer a Mark. — Espero que pronto lo digas que soy el único que puede llamarte bebé, y el único con el que puedas soñar.

Mark ya no está consiente deja caer su cabeza disfrutando la felación. Todo su placer está descrita en unas simples letras: Yuta.

— No aguanto.

— Es el primer round... Bebé. Te haré venirte en mi boca y luego sobre su estómago.

Es increíble como Yuta continúa, lo está dejando al borde del abismo, disfruta de Yuta, olvida por completo todos sus sentidos, todas sus preocupaciones, olvida que lleva años sin saber que realmente siente por el nipón, si realmente es sano lo que están haciendo, si algún día, Yuta le dirá a qué realmente está jugando cada vez que se pone romántico, posesivo, celoso, cualquier cosa. Mark olvida por completo todo y solo disfruta esa increíble mamada.

Mark se corre, es tan lujurioso como el rostro de Yuta se cubre con su esperma y lame lo que alcanza con su lengua. — Oye amor, sabes de maravilla. Espérame en la cama, iré por nuestros utensilios.

Mark ya está completamente cegado como para negarse, su juicio está nublado, demasiado para pensar en otra cosa que no sea saciar su deseo, quita toda su ropa y se acomoda sobre la suave cama doblando sus rodillas abriéndolas un poco para darle el acceso necesario a su mayor.

Yuta regresa desnuda, solo ha limpiado superficialmente su rostro, aún se ven restos del esperma, carga un condón y un lubricante pequeño, tan pequeño como para llevarlo en su chaqueta y no mostrarlo una sola vez.
— Pon una almohada sobre tus caderas, tendré mejor acceso.

No contesta, no asiente, solo lo hace con una gran sonrisa. Yuta ya tiene puesto el preservativo y sus dedos ya los está cubriendo con lubricante, gatea hasta Mark igual sintiendo el mismo deseo de saciar su interés propio. Con tranquilidad mete dos dedos en un solo movimiento, Mark se cubre los labios para no gemir, ambos saben que en cualquier momento alguien más puede llegar.

— Tu culo está tan desesperado de mí que chupa mis dedos, amor. Quieres ser jodido, mi pequeño ángel se ha vuelto un pervertido.

Un tercer dedo entra, ahora Yuta lo jode con los tres dígitos disfrutando del tacto pero sin poder disfrutar, sin poder gritar con gozo. Mark no recuerda desde cuándo empezó a disfrutar ser follado por Yuta, ser su desquite para cualquiera de sus deseos. Solo sabe que le gusta serlo.

— Hazlo ya.

— Como órdenes.
Yuta lubrica su pene con una pequeña sonrisa, le complace que Mark sea suyo y que cumpla con sus deseos. — Voy a entrar, cuida tu tono.

El mayor lo besa en el mismo momento que se adentra sobre sus paredes anales, aprieta los ojos disfrutando del deseo, porque duele, pero Mark disfruta ser follado por Yuta. Han pasado años en los cuales Mark se ha encargado de ser el perfecto desquite de Yuta.

Se besan correspondiendo al otro, el movimiento de Yuta es rápido, tanto que vuelve loco al canadiense. — Pide por más.

— Más, jodeme más.

A la mañana siguiente ha sido rodeados de cámaras en vivo. Hay una cosa que ronda por ahí.
"Al parecer Mark sufrió de una lección, nuevamente el sobre esfuerzo le ganó y se aprecia en su forma dispareja de caminar"

— ¿En qué momento te lastimaste Mark?

— Kict it, tal vez, da muchas patadas. — Suelta con una ligera burla Ten, los demás captan el chiste y ríen un poco sin llegar a ser ofensivos. — ¿Estás bien?

— No es la gran cosa. — Mark se adelanta en decir. Realmente no creyó que se miraba tan mal. Se había dejado ser follado en cada rincón del cuarto, realmente estaba destrozado, el desgaste de físico y esa noche terminaron bastante con él.

Pero todo mundo sabe que Mark Lee no se lesiona, no lo suficiente como para fallarle a su empresa, su grupo o sus fans.

— Estoy bien, sigamos en el ensayo.

— ¡Maaark! — Yuta llega gritando corriendo y saltando a los brazos del menor, todos pueden verlo, unos disfrutan el cariño que le tiene al menor. — ¿Sabías que creen que estás lesionado? No crees que fuiste demasiado lejos, disfrutaste mucho de mí anoche, yo también estoy agotado. — Susurra sobre su oído, solo Mark lo escucha y finge no hacerlo mientras solamente corresponde al abrazo. — Te amo. ¡Listo chicos hay que practicar, Japón nos espera en la siguiente ronda!

— Entonces... — Quizá sea pasada de la media noche, están nuevamente todos reunidos, está vez Yuta y Mark no negaron la salida, puesto que habían terminado con éxito un concierto entero hace apenas unas horas, podrían ser los dos un par de lascivos, pero estaban jodidamente cansados y hambreados. Chenle está ebrio, él y varios más, aquí solo les salva quien tenga mejor tolerancia, todos han tomado con libertad, pues supongamos que tienen un día de descanso en lo que llegan a Japón. El chino apunta a Mark y Jeno quien se ve medio cuerdo bajo la señalante mano del menor. — Déjame. — Le reclama a Jeno. — ¿Qué realmente tienen ustedes dos? Es imposible pasarlo desapercibido, los fans, el staff, ustedes Taeyong y los demás, vamos Yuta, Mark, digan que... Son.

Mark, vuelve a ser el mismo asustadizo, ese que no piensa en el increíble sexo que le da Yuta y las buenas mamadas que proporciona esa fina lengua. Mark no es ese mismo, es aquel pequeño que teme saber que realmente quiere Yuta, que realmente pasará. Mark quiere que Yuta le diga a todos que lo ama, que realmente está enamorado, quiere escucharlo, necesita saber que no hay una cámara de por medio que haga a Yuta hablar mierdas sin sentido.

Mark solo se alza de hombros y mira a Yuta, aun así cree que esa acción fue demasiado, está esperando con ansias escuchar de su propia boca lo que contestará el mayor.

Los demás... También están a la espera de la respuesta del nipón.

— ¿Qué somos?

— Así es. — Donghyuk mete cizaña, con seriedad ve al nipón en la espera de su respuesta. Pero no solo una vaga respuesta, todos ahí saben la amistad que tienen Donghyuk y Mark. El menor le está haciendo saber que probablemente sabe demasiado gracias a Mark. — ¿Qué son Mark y tú?

— No tienes que contestar si realmente no quieres. — Kun es la siguiente voz, el líder del equipo chino, se oye tranquilo, también con copas de más, pero aún manteniendo la calma es el mismo Kun quien todos conocen que habla y transmite tranquilidad. — Si ustedes aún no definen que son, no pueden simplemente decir cosas vagas solo por presión. Somos un equipo, los apoyamos en lo que sea que estén. Cuando estén listos, sean libres de saber si quieren o no compartirlo.

Yuta gracias a las palabras de Kun sabía que tendría que estar mejor, pero no, se sintió más atorado, puesto que el chino tenía razón en algo. No tenían nada definido. Para Mark gracias a sus propias palabras de Yuta, era su simple desquite.

Pero centremos las cosas. Así como Mark, Yuta ya no sabe que es lo que realmente siente.
— Justo lo que digo. — Se atreve a hablar, aunque esté consiente de sus sentimientos o algo así, Yuta trata de no ver fijamente a Mark. — Cada que digo que amo a Mark es real. Mark es la persona que cambió mi vida, es mi todo en este mundo. Pero bueno, tienen razón, no tenemos nada definido.

Sí, todos guardaron silencio, Sicheng sonrió escondido en su bebida, pero aún así, todos se quedaron sin palabras.

No sabría explicar quién fue más estúpido, si Mark por guardar un poco de esperanzas a Yuta, si creer que por haber escuchado a eso su corazón le diría que siente por el japonés y este empezaría a ser más detallista. O Yuta, quien fue una completa bola de mentiras y continúo siendo el mismo.

Habían llegado a Japón, su país, si tierra, sus reglas, tenían unos momentos libres, era simple, concierto, grabaciones y ensayos. Con una cámara en la mano y un micrófono fácil de quitar, Yuta se llevó a Mark.

Comieron y fueron a un parque de diversiones, solo ellos dos, le enseñaba cultura, palabras, le compraba gorritos y cosas lindas, Mark sentía su corazón volcar de alegría, todo parecía flores, rosas y colores pasteles en su momento.

Tomados de la mano.

Yuta hacia lo que él le pedía, si quería una paleta, se la compraba para ambos, si quería tomarse una foto el tipo de disfrazado de spiderman Yuta tomaba cientos hasta creer que tenía la toma perfecta. Era de esos pocos momentos en los que Mark, sentía que Yuta, era suyo, que era la persona correcta que había llegado a su vida.

Fue en ese momento que sus dos partes querían ser una sola, quería poder tomar entre sus brazos y darle besos por todo su rostro. Quería poder colgarse sobre sus hombros, quería que lo besara por largos minutos hasta quedarse sin aire.

Quería ser suyo.
Quería disfrutar de ese momento en el que ambos parecen estar enamorados.

— Yuta. — El japonés voltea, el aire corre con prisa, sus cabellos rubios cubren sus ojos, aun así puede verlo con una gran sonrisa. Solo hace un leve "mh? Que le indica que lo está escuchando. — Creo que te amo.

El mayor amplia su sonrisa, ese brillo en sus ojos regresa, esa acciones que solo él puede distinguir aparecen, Yuta no tarda en responder a la vez que pellizca levemente la punta de su nariz. — Yo también.

Mark ha conocido el infierno, el cielo y el paraíso en esa vida. Ser el desquite de Yuta lo volvía loco, ser todo para Yuta era su mayor objetivo. No sabía darle otro sentido a su vida, se abrumaba de pensar en que pasaría con el nipón, pero no había de otra. Mark era inocente y menor, no podía ordenar sus pensamientos, no hasta tenerlos completamente claros.

Yuta era igual, era un idiota que al perder su vida, tomó la de otros, necesitaba tener un ancla que lo obligará a ser mejor persona, su error es que no era mejor persona, quizá si mejor maquina de trabajo, como persona era una mierda y cuando se dio cuenta de la mierda que podría ser, tenía miedo de intentar ser mejor persona.

Al final de todo, Mark se enamoró de Yuta, como una buena persona o como una mierda de persona, Mark se enamoró de cada etapa de Yuta.

Y bueno, realmente no es difícil enamorarse de alguien como Mark, Yuta había caído profundamente por el canadiense.

Simplemente tenían que ser mejores para ellos mismos.

En menos de una hora, Yuta cumple con su promesa, chocan con el propio suelo, ni siquiera se preocupan por cerrar la puerta con el seguro, están devorándose, amor, deseo o pasión y quién sabe que tanto más estén sintiendo justo en ese momento. Mark se desespera por quitarle las prendas a Yuta, ni siquiera ha terminado con su playera cuando ya está con prisa quitándole los pantalones.

Yuta le ayuda con la playera, y también busca desnudar a Mark, es más complicado, Mark lleva una chaqueta, pero está tan desesperado de ellos mismos que no importa cuántas prendas hay estorbando, cada una desapareciendo hasta quedar completamente desnudos. Mark es quien se agacha a la medida de la entrepierna de Yuta, sigue siendo su desquite, su mejor desquite después de todo, se agacha y toma su gruesa erección lamiendo de una primera estocada hasta meterlo por completo en su boca. El mayor gime dejando su cabeza caer, Mark está en otro punto, está dándole el placer que siempre pide que haga, que le dicta como hacerlo, ahora sí ángel es un traga pollas perfecto.

— Si sigues así, no voy a aguantar.

Entonces Mark sonríe deteniendo su veloz movimiento, con un simple empujó deja a Yuta sobre la cama. Ama esa sonrisa de Mark, es tan precioso, tan único, tan suyo que está volviéndolo loco.

Mark se sube sobre él y empieza con un recorrido de besos desde la punta de su pene subiendo con prisa y con ansia.

Besa su abdomen, lame las partes donde su tatuaje se sitúa, pasa a su pecho y con sus manos acaricia los antiguos lugares que ya ha besado. — Mark, dios, no pares mi amor. Eres el mejor de todos.

Yuta tira más de su cuello cuando los besos de Mark llegan a ahí, el canadiense besa y muerde los lugares, aun así está tratando de ser cuidadoso, pero su deseo es tan grande que le excita imaginar ese cuerpo cubierto de sus marcas.

— Eres un delirio.

Mark posiciona su trasero sobre la erección del mayor, los roles son algo diferentes, es Yuta quien grita y gime disfrutando poder hacerlo sin medir su tono y sobre comprendiendo lo que Mark tenía que sufrir al obligarlo callar cada que cogían en su dormitorio.

Sus labios se encuentran, húmedos e hinchados por Mark, se besan por momentos largos, se acomodaban mucho mejor quedando Mark sobre el regazo de Yuta disfrutando follarse la boca entre ellos mismo. Sus cuerpos están húmedos y sedientos del deseo. Se tocan, se acarician, se besan y nunca se sueltan. El canadiense logra llevar un ritmo donde su pelvis y la de Yuta chocan en cada movimiento de sus caderas, sus manos están sobre los rubios cabellos del nipón y los azules propios tapando parte de sus ojos.

— Estoy jodidamente confundido. — Habla Mark sobre los labios Yuta, el mayor baja sus besos a su cuello, está empezando a tener el control de nuevo, comienza lento como sabe que a Mark le gusta, como sabe que lo hará perder la cordura.

— ¿De qué hablas?

— ¿Me amas o solo amas que sea tu desquite?, o como tú lo llamaste: el remplazo de Sicheng.

— Eres el remplazo que superó por mil veces a Sicheng. — Contesta tranquilo, puede sentir que la tensión sube un poco y deja un beso sobre sus labios. — No quería alejarte, si te decía mis sentimientos, si aceptaba que te amo, te ibas a asustar de mí y no sabría si estarías conmigo por decisión o aún por creer que soy un hijo de puta y haría un escándalo.

Mark ríe aunque su risa se corta teniendo que ver a Yuta cara a cara para poder comprender y aceptar lo que acaba de escuchar. — ¿Hablas en serio? ¿Realmente me amas?

— Tanto que no sé desde cuando. — Titubea en hablar, están desnudos a punto de follar y aun así se dedica en abrazar a Mark y dejarle vagos besos. — Creí que tenerte de esta manera sería más fácil que confesar mis sentimientos hacía a ti. Después de todo, si soy un desgraciado estúpido hijo de puta.

El menor traga saliva, no ha despegado sus ojos de los de Yuta, sería idiota o no, pero cree que esa mirada suya del japonés es sincera. Quizá eso era lo que Mark necesitaba, para saber que realmente sentía por Yuta. Quizá Mark necesitaba que Yuta, su gran amor, le digiera cara a cara que si lo amaba para dejar de asustar a su corazón y hacerle negar y esconder esos sentimientos reprimidos.

Mark se sentía aliviado, esa era la cura para su pobre corazón reprimido.

— No pido que me entiendas, yo tampoco me entiendo, de hecho si no me hubieras preguntado, solo te hubiera follado nuevamente y te trataría de la misma forma en la que te he tratado todos estos años.

— ¿Y qué sentías al tratarme así?

— Una mierda y un estúpido, uno muy miedoso y cobarde. Creo que nunca lo intente, ni siquiera hice por querer ser más blando contigo. Ahora dime Mark, ¿Qué sientes tú por mí?

Mark sintió todo su deseo esfumarse, quiso que siguiera ahí, quiso poder besar tanto a Yuta para que se le olvidará por completo aquella pregunta. — ¿No lo recuerdas? Creo que te amo.

— ¿No estás seguro por qué soy un maldito hijo de perra o porque aún no soy suficiente para ti?

— Porque si antes aceptaba mis sentimientos hacia ti, eso sería obligarme a esconder esos sentimientos, a seguir tratando de ser tú mejor y perfecto desquite, solo para complacerte.

— Entonces... — Yuta relame sus labios, los dos pueden haber dicho sentir amor por el otro, pero sigue siendo difícil dar un paso más seguro para sano para una relación en ambos. — ¿Qué te gustaría? Que te conquiste como una persona más normal o pedirte que seas mi pareja.

— Quiero, que sigas abrazándome frente a todos, que digas que me amas y siempre estar a mi lado, que yo pueda sonreír sabiendo que todas tus palabras y acciones son reales. Quiero que cuando estemos solos, sepas que soy tuyo y tú eres mío, que me ames tanto que para mí sea fácil de entender tu tipo de amar.

— Te amo. — Vuelve a decir Yuta, es sincero, ambos lo saben, la cuestión es que... Puede ser difícil, una bonita pareja que no inició de la mejor manera, una que si no funciona tienen miedo, porque significa que no importa, tendrán que seguir trabajando juntos, seguir abrazándose. En su peor caso, fingir.

— Creo que también te amo.

A los siguientes día las cámaras inundan sus rostros, todos ellos sonríen sobre a la cámara. Yuta mira a Mark con una sonrisa. Se ve espectacular, radiante, hermoso.

— Yuta, Mark, estén juntos. — El staff indica, es una leve seña porque hay demasiada gente para escuchar y ver. Es "disimulado" el menor hace una pequeña sonrisa oculta sobre sus labios, no desea estar cerca de Yuta, le picarían las manos ansiosas de tomar las de Yuta.

Mark no se mueve, en cambio Yuta si lo hace. — ¡Eso es, sonrían todos juntos!

— ¿Se dan cuenta? Cada vez ustedes están más unidos y a la gente le encanta. — Susurra uno de ellos, Jaehyun quien aún mantiene una sonrisa y aun así puede hablar. Es todo un actor.

— Es cierto. — Johnny intenta hacer lo mismo. — Hasta el propio staff los quiere juntos.

— Shh, solo disfruten el momento. Yo disfruto mostrar mi amor por Mark. No tengo problema.

Yuta y Mark ahora pueden hacer algo que nunca imaginaron. Bueno, besarse frente a sus amigos, darse reales muestra de amor y afecto, llamarse de apodos lindos. Para unos era una aberración, para otros era lindo.

— Me dan náuseas. — Ten comenta, nuevamente es humor, no está siendo grosero solo le pone un poco de comedia a la situación.

— Me gusta como se siente. — Yuta asiente dejando un beso sobre la nariz de Mark. — No saben lo mucho que esperaba por esto. — Y deja otro beso ahora en sus labios.

Kun y Hendery fingen arcadas.
Jaehyun y Johnny ríen de ellos, pero sus manos están tomadas.
Donghyuk ve todo con seriedad.
Sicheng está feliz.

Unas horas después, Yuta está acostado sobre un gran sofá, sus manos sobre su pecho echas puño, está con la respiración tranquila y creé que es irónica su situación.

— ¿Qué pasó? — Escucha la pregunta.

Yuta suspira antes de hablar. — Dijo que cree que me ama.

Sicheng alza la ceja, está siendo de terapeuta o algo así, sip, la persona que antes fue su "desquite" era su mejor amigo en esta situación, el único que por alguna razón no lo juzgaba, por ni una sola de sus acciones. Sicheng no comprendía a Yuta, pero si lo ayudaba, era su amigo.

— ¿Y eso que? — Sicheng lo mira fijamente. — Es un creo, un cincuenta - cincuenta. Debes de ganarte a Mark mucho más de lo que ya lo tienes. Tú lo amas, él está a punto de decirte que te ama. Yo veo un gran futuro por delante.

— Sicheng... Digamos que... Nunca fui un estúpido que "amenazó" en dejar el grupo porque no podía aguantar estar sin ti y a la vez verte cada día. Tener que soportar las grabaciones, los encuentros, ensayos y en esos momentos en que los fans piden que nos vean juntos. Digamos que simplemente hubiéramos terminado. ¿Qué crees que hubiera pasado?

— ¿Tienes miedo de que no funcione? — Sicheng pregunta.

— Contesta.

— Hubiera sido incómodo, supongo. Te hice creer demasiado que sentía algo por ti, pero solo no quería que cayeras, no de nuevo, estabas demasiado roto cuando él se fue.

— Demonios, Sicheng, sabía que sonaba con un terrible hijo de perra, pero no tanto, fue demasiado, fui demasiado al parecer.

Sicheng asiente. — Lo entiendes, sigue así. Yuta, creo que tienes que seguir así, te ves muy feliz sabiendo que puedes demostrar tu afecto hacia Mark frente a todos nosotros, Mark también se ve feliz con eso, te juro Yuta, estoy seguro de que Mark siente mucho más que un creo, simplemente tienes que darle esa gran seguridad.

— ¿Eso crees? — Yuta se levanta, tiene una media sonrisa.

— Estoy seguro. Muy seguro, Yuta.

— Amo a Mark, Sicheng. Y bueno, estoy aquí contigo aprovecho para pedirte perdón sobre todo lo que te hice, por obligarte a estar conmigo, eres el mejor amigo que pude tener, estoy feliz de que ahorita aún sobre todo lo que pasó, estoy feliz de poder contar contigo. Gracias por aconsejarme y lo que sea, eres el mejor.

— Te amo, Yuta. — Sicheng dice y se apresura a hablar. — Como amigo claro.

— Idiota. Lo sé. También te amo.

Al otro lado.

Donghyuk, Chenle y Jaemin miraban a Mark.

Donghyuk y Chenle serios, sin creer que su amigo estaba en ese término, más Donghyuk que el chino. Jaemin sonreía felicitando a su amigo.

— Miren par de idiotas. — Jaemin se posa frente a sus dos amigos, está seguro, él confía en Yuta y en Mark. — Si Mark está enamorado de Yuta y él de Mark, está bien, somos hombres estúpidos y encerrados en este mundo, no tenemos muchas salidas, está bien, ellos parecen quererse, pueden con ellos mismos. ¡Que viva el amor! Felicidades, Mark, tienes mi apoyo amigo.

— ¡Dijo creé! Ni siquiera está seguro de que siente por Yuta, ya se los he dicho. — Donghyuk habla. — ¡Ustedes no saben lo que Yuta hizo, con Hansol, con Sicheng, los utilizó, hizo lo mismo que Mark! A Mark, le dio como ese raro síndrome del Estocolmo, se enamoró del sujeto que lo atrapó.

— Creo que sí lo quiere y puedes estar con él... Simplemente hazlo cuando estés por completo seguro. Eres nuestro líder Mark, no voy a cuestionarte.

— ¿Saben qué? Gracias Jaemin por felicitarme. Y gracias Chenle y bueno, Donghyuk eres mi amigo, pero no soy un estúpido, creo que puedo tomar mis propias decisiones, estoy seguro de lo que siento, si dije un "creo" es porque quizá tengan razón: no estoy listo. Porque amo a Yuta, pero no estoy listo para que esto sea realmente serio. Eso es todo.

Quiero recalcar que me gusta mucho el yumark, de hecho, ellos son mis papis
Quizá tenga una o dos partes más.