Capitulo 27
Hola, hola, hola atodos los presentes!!!! sí, para mí, ahora mismo, os acabo desoltar el mega rollo de comentario que os acabo de dejar en elcapitulo anterior, porque apenas a pasado un minuto desde que lo heescrito, pero para vosotros habrá pasado unos cuantos días hastaque haya podido subir este capitulo.
Me encanta escribir denoche. Creo que es cuando más inspirada me encuentro. Además, estanoche anterior he dormido bastante, cosa rara en mí, ya que me suelodespertar muchísimo y dar muchísimas vueltas en la cama, así que,tras tomarme un buen vaso de leche fría con Colacao, que me hacargado aún más las pilas, vengo a vosotros con este capitulo deWanda y Visión. Si Steve y Tony son la pareja principal de estahistoria, ellos son los secundarios y ya era hora de que volvieran atener su momento protagónico.
Os dejo con el capi yhablamos después. Bye!!!
CAPITULO 27
.................
Mientras todos se dirigían hacía sus propios cuarto, Wanda buscó aVisión, sabiendo que, a pesar de que a todo el mundo le habíaparecido bien su sugerencia de mandar a Visión al interior delrefugio subterráneo de Ezekiel para liberal al ministro Ross, habíahablado de ello sin consultarlo con Visión, como si este no tuvieravoz ni voto ni pudiera decir algo al respecto.
No quería que este creyera que hablaba por él sin importarle lo quepensara solo por lo que había ocurrido entre ellos en la TorreStark, así que dió con él cuando este se dirigía hacía labiblioteca del complejo.
-¿No vas a dormir un poco?- le preguntó cuando dió con él, viendocomo este se giraba hacía ella en el acto.
-Quería consultar los libros que hablar sobre refugios de eseestilo. Nunca he estado en uno no sabría si podría defenderme bienen uno si tengo que sacar al ministro de allí.
Wanda lo contempló con atención, pero, a pesar de que este noparecía hallarse molesto por encontrarse en mitad de una misión sinhabérselo propuesto siquiera, ella bajó la vista hacía el suelo.
-Siento si te ha molestado que les haya dicho a todos que te enviarána tí. Estaban tratando de elaborar un plan para sacar a Ross de eselugar y tú me has venido a la mente y no he podido mantenermecallada. Ni siquiera lo pensé.
-¿Crees que estoy molesto contigo porque has propuesto eso?- lepreguntó este, dando unos pasos hasta colocarse frente a ella.
-Podría ser. Yo estaría molesta con alguien si me propone para unamisión sin consultarme- comentó Wanda, aún mirando hacía elsuelo.
Visión se vio en la obligación de tomar su barbilla entre los dedospara que alzara la cabeza hacía él y que lo mirara a los ojos.
-Si yo hubiera podido pensar tan rápido como tú, lo habríapropuesto yo mismo. No hiciste nada malo al hablar.
-Entonces....¿por qué tengo la sensación de que sí he hecho algomalo?- le preguntó Wanda a su vez.
-Porque aún eres demasiado insegura. Tienes motivos para ser así,pero no cuando se trate de algo entre nosotros. No tienes que medirtus palabras cuando hables conmigo por temor a lo que digas.
Esta se mordisqueó el labio, notando como sus mejillas sesonrojaban, sin poder mover la cabeza del lugar, ya que Visiónparecía negarse a soltarla, haciendo que su corazón latiera másdeprisa sin que pudiera evitarlo.
Visión contempló aquel cambio en ella, vio como se sonrojaba eintentaba mirar hacía otro lado, incluso cuando él aún tenía subarbilla entre los dedos, dirigiendo su vista hacía un lugar de sucuello, viendo como el pulso de Wanda se había acelerado.
Recordaba una escena similar en uno de los libros que había leídomientras se informaba sobre el amor, se inclinó hacía ella mientrasaún mantenía inmóvil su cabeza, y besó aquel punto, notando elpulso de esta contra sus labios.
Wanda pegó un brinco cuando sintió aquel beso, dejando escapar unpequeño gritito de sorpresa y, avergonzada, retrocedió rápidamente.
-¡¿Qué estás haciendo?!- exclamó.
Las habitaciones no se encontraban cerca de la biblioteca, así quenadie tendría que oírles allí.
-Vi como se había acelerado tu pulso y recordé la escena de unlibro.
-Bueno.....que mi pulso se acelere es solo cosa mía. No vuelvas ahacer eso tan de improviso.
-Pensaba que estábamos saliendo- comentó Visión, dando unos pasoshacía ella, rompiendo la distancia que había marcado Wanda.
-Sí....ya lo sé, pero....eso no implica que tengas que hacer esascosas- comentó ella, sujetándose el cuello con una mano, como siaún pudiera sentir sus labios sobre su piel.
Sentía el rostro a punto de estallar y parecía que el aire delpasillo se había esfumado mientras veía como Visión avanzaba hacíaella.
-He leído que las parejas hacen cosas como esas, aunque no entiendoel sentido biológico de ello. Lo hacen sin buscar descendencia. Solopor el placer de hacerlo.
-¿De qué estás hablando?- preguntó Wanda, comenzando a fruncir elceño.
Se había perdido en aquella conversación. Desde que la habíabesado en el cuello, su mente no terminaba de arrancar.
-Sexo, creo que lo llaman. Tanto en las películas como en loslibros, lo hacen cientos de veces solo porque se quieren. Hablan deello como....la representación final del amor cuando están enpareja.
Wanda abrió ampliamente los ojos cuando entendió de lo que leestaba hablando, notando que, si creía que su rostro no podía estarmás sonrojado, se equivocaba por completo.
-¡No pienso hacer nada de eso!- exclamó, señalando a Visión conun dedo para que dejara de caminar hacía ella.
Este se detuvo en el acto.
-Entonces....¿no todas las parejas hacen eso? Creo que el señorStark y el señor Rogers han llegado a hacerlo ya.
-No....no quiero que me hables de lo que hacen otros- le pidióWanda, notando que aquella conversación era demasiado para ella.Nunca había hablado de esos temas con nadie y era demasiadovergonzoso empezar ahora justamente con Visión.-Las.....las parejashacen esas cosas. Pero solo cuando están preparadas.
-Y tú no estás preparada- asintió Visión, comprendiendo.
-Desde luego que no. Apenas he podido lograr aclarar missentimientos.
-Te daré tiempo- aseguró este.
-¡No digas eso!- exclamó ella, cerrando los ojos con vergüenza.
-¿Por qué?
-Porque, si dices eso, parece que vas a estar esperando a que yo cedacon el tiempo. No voy a poder mirarte a la cara si haces eso.
-¿El sexo es algo tan complicado?- preguntó.
-¡No digas esa palabra tampoco!
-¿Y cómo lo llamo?
-De ningún modo. Esas cosas no se hablan. Salen de manera natural.
-Natural- repitió Visión, tratando de entender la nuevainformación.
Luego, volvió la vista hacía Wanda, que se sujetaba las mejillas,de un encantador color escarlata, viendo como parecía incapaz delevantar la mirada del suelo.
-¿Te acompaño a tu habitación?- le preguntó.-Tú sí quenecesitas dormir.
Esta alzó la vista hacía él, pero acabó asintiendo cuandocomprendió lo que había dicho.
Visión se colocó a su lado y, en silencio, tendió una mano hacíaella.
Wanda, aún tratando de recuperarse de la conversación que habíanestado manteniendo, observó aquella mano, mirando la expresiónsiempre serena de Visión y, finalmente, se aferró a aquella manoque le tendía, caminando con calma hacía su habitación.
Los pasillos estaban desiertos a aquellas horas y no se oía nadaprocedente de las habitaciones cercanas. Solo llegaron a oír vocesprocedentes del cuarto de Clint.
Pero era muy posible que este se hubiera puesto en contacto con sufamilia para tranquilizarlos.
Cuando llegaron al cuarto de esta, ambos se quedaron quietos ante lapuerta cerrada durante unos instantes, pero Visión no tardó ensacarlos a ambos de aquel estado de mutismo en el que se habíansumido.
-Buenas noches, Wanda- le indicó este, volviéndose hacía ella paradedicarle una sonrisa y comenzar a alejarse por el pasillo, de caminode nuevo hacía la biblioteca.
Sin embargo, la mano de ella de nuevo sobre la suya hizo que este sedetuviera y se volviera hacía Wanda.
Esta, avergonzada, contempló aquellas manos como si una de ellas nofuera la suya, pero alzó la vista hacía Visión.
-¿Podrías.....quedarte a dormir conmigo está noche? No hacer nadararo. Solo dormir- le pidió.
-¿Temes lo que podría pasar mañana?- le preguntó este.
-¿Tú no?
-Tengo plena confianza en nuestros compañeros.
-Pero eso no garantiza nada.
-Sabes que, pasara lo que pasara, te protegería- le indicó este,colocándose frente a ella.
Ese sentimiento era una constante para él, como una luz que nunca seapagaba en su interior, un faro que podía seguir sin temor aequivocarse. Aunque, también era posible que Rhodes hubiera salidoherido por ese mismo sentimiento.
-Tú tienes que encargarte de Ross- le recordó.
-Pero volvería enseguida.
-No- le indicó Wanda, mirándole a los ojos.-Tienes que asegurartede que el ministro llegue a un lugar seguro sin un rasguño. Aunqueel señor Stark haya conseguido que él y el Capitán estén a cargode nosotros, si llegara a pasarle algo al ministro en nuestras manos,es muy posible que volviéramos a lo de antes. Tienes que cumplircompletamente con esa misión, Visión.
Esta la contempló con atención, observando aún las manos de ambosentrelazadas.
-¿Decías algo de dormir?- le preguntó.
Wanda pestañeó por el cambio de tema, pero acabó riéndosemientras se volvía hacía la puerta.
-Gracias- le susurró mientras abría la puerta y ambos entraban enel cuarto.
En ausencia de Wanda, había estado en aquel cuarto cientos de veces,admirando sus cosas o acariciando su cama, tratando de recordar supresencia en el lugar.
Ahora, sin embargo, ambos estaban allí. Ya no tenía que vivir derecuerdos.
-Voy a cambiarme- le indicó esta, volviéndose hacía el, soltandosu mano.
Visión solo pudo asentir mientras veía como esta tomaba un camisóny se metía al baño.
El señor Stark se había encargado de que todo permaneciera como suscompañeros lo habían dejado antes de marcharse para que, a suvuelta, nadie sintiera que algo había ocurrido.
Visión se alegraba de ese detalle.
La sensación de tenerlos a todos allí de nuevo, juntos volviendo aser un equipo, era algo muy agradable. Era como si todos se hubieranquitado un peso de encima, ya que, después de todo, ¿qué era delgrupo de los Vengadores si no había ningún vengador en el grupo?
Aunque aún desconocían el paradero de Thor o lo que estuvieraocurriendo en Asgard para no tener ninguna noticia de él.
Algo parecido ocurría también con el doctor Bruce Banner. Visiónhabía tenido poco trato con el buen doctor porque prácticamente sehabía ido un día después de que él naciera. Pero conocía susestudios y como había afectado a Natasha su marcha.
-Ya estoy- le dijo Wanda, saliendo del baño y sacándole a él desus reflexiones.
Volviéndose hacía ella, la vio con una camiseta de tirantes rojizay unos pantalones que apenas le llegaban a medio muslo, dejandobastante carne al aire.
-¿Vamos a dormir?- le preguntó esta, sintiéndose algo o incomodapor la mirada fija de este.
-Sí, claro. Es solo que....nunca te he visto de ese modo.
-Afortunadamente, nunca entraste a mi cuarto mientras estaba dormida-comentó ella, dedicándole una sonrisa.
Pero Visión se volvió hacía la cama, sintiéndose algo nervioso.
-¿Cómo vamos a dormir?
-Así- comentó Wanda, haciendo las sábanas a un lado, metiéndoseen la cama y dando unos golpecitos en el lado libre que había juntoa ella, aún algo sonrojada.
A regañadientes, Visión le dio la vuelta a la cama y se sentó enel otro lado, finalmente tumbándose a su lado.
Al mismo tiempo, Wanda se recostó junto a él mientras los tapaba aambos con la sábana, apoyando la cabeza en el pecho de este,mientras Visión no sabía si debía permanecer totalmente quieto odebía de hacer algo a su vez.
-Cuando estábamos en casa, Pietro y yo dormíamos de este modocuando eramos pequeños. Siempre nos colábamos uno en la cama delotro- susurró Wanda, haciendo que Visión bajara la cabeza hacíaella.
-Siempre habéis estado muy unidos.
-Nacimos casi al mismo tiempo. Hemos estado juntos siempre, inclusocuando experimentaron con nosotros. Pietro siempre ha tratado de serel hermano mayor protector y.....lo echo de menos- comentó ella,abrazándose a Visión.
-No entiendo muy bien la muerte- comentó este.-Me desconciertantodas esas religiones que afirman que solo su fe es la verdaderacuando coinciden en un Dios y en el hecho de que el bien llevará ala paz y el mal a una eternidad de tormentos. Pero considero que,como seres de energía, nada desaparece de manera definitiva. Solomuta y cambia.
-¿Eso es un intento de consolarme?- le preguntó Wanda.
Creía haber entendido sus palabras, pero cuando Visión hablaba deaquel modo, la desconcertaba.
-Creo que sí- le dijo este a su vez.
-Tienes que buscar mejores frases de consuelo.
-No estoy acostumbrado a hacerlo.
-Claro. Solo tienes un año de vida.
-Sí. De ser humano, aún estaría tratando de controlar mi esfíntery peleándome con mis primeros dientes.
Aquello hizo reír a Wanda.
Esta no pudo evitar imaginarse a un Visión bebé, con sus pañalesblancos y esa inteligencia que poseía.
-Seguro que hubieras sido un bebé adorable.
-No lo sé. Ni siquiera estoy muy seguro de poder tener hijos.
Eso hizo que Wanda alzara la cabeza hacía él.
-¿Puedes tener hijos?- le preguntó.
-No estoy muy seguro. Ultron pretendía crear una forma lo máshumana posible. Sé que puedo llorar, así que debería ser capaz decumplir otras funciones humanas normales.
Aquello hizo a Wanda pensar.
-Antes siempre quise tener hijos- comentó ella finalmente.-Antes deesto- dijo, dejando que parte de sus poderes salieran, iluminando elcuarto con aquella luz rojiza.-Me imaginaba con muchos niños, mispadres felices con sus nietos y a mi hermano jugando con sussobrinos. Pero, después de los experimentos, nunca volví a pensaren ello. No sabría que podría salir de mi cuando me cambiaron deeste modo.
-No hay nada malo en ti- afirmó Visión, acariciando su cabello.
-Tú nunca verías algo raro en mí, ¿verdad?- le preguntó esta,alzando de nuevo la vista hacía él.
-Es difícil ver algo malo cuando no lo hay.
Wanda sonrió, sabiendo que le iba a dar una respuesta como esa.
Apoyándose en él, se inclinó hacía Visión y acabó besandole,más para agradecer sus palabras, siempre amables, que porque buscaraen contacto algo más intimo.
Sin embargo, cuando este posó la mano sobre su rostro, Wanda serecostó sobre su pecho y, aún a pesar de no saber muy bien quéestaba haciendo, trató de profundizar más el beso, notando comoVisión no ponía ninguna clase de impedimento.
A parte de los besos que ya habían compartido, Wanda no tenía niidea sobre qué más hacer, así que, apoyando las manos sobre elpecho de este, siguió con aquellas pasadas que la hacían temblardébilmente, como si una parte de ella le indicara que había algomás a partir de allí, pero no supiera como llegar.
Cuando notó como Visión introducía una mano entre sus cabelloshasta sujetar su nuca con delicadeza, se sintió más tranquila,sabiendo que al menos él sabía algo más lo que estaba haciendo.
Notó el aliento de este contra ella cuando se separaron un momentopara tomar aire, pero, antes de que ninguno de los dos volviera ahablar, Visión atrajo el rostro de Wanda de nuevo hacía él,besándola de nuevo, notando como ella, poco a poco, perdía larigidez inicial de su cuerpo y se recostaba cómodamente sobre él.
Con la otra mano que tenía libre, la posó en su cintura y mientrasaún amoldaba sus labios a los suyos, introdujo la mano debajo de laropa, sintiendo la piel cálida y suave que había debajo, notandocomo ella volvía a temblar por el contacto.
Wanda hizo la cabeza hacía atrás, como si quisiera decir algo,pero, con la otra mano aún en su nuca, Visión volvió a acercarla aél, retomando sus labios, notando como ella olvidaba lo que fuera adecir mientras trataba de traspasar la barrera de sus labios.
Había leído sobre ello, pero los datos y la práctica eran cosascompletamente diferentes, así que, aún sin saber bien lo que estabahaciendo, acarició los labios de esta con la lengua, un leve toque,notando como Wanda los separaba para soltar un gemido sorprendido, noesperando un permiso formal, entrando en ella y buscando su propialengua.
Las manos de ella se aferraron a sus ropas en dos apretados puñosante las primeras tentativas, pero, poco a poco se fue relajando yacabó reaccionando a sus acciones, tratando de contestar a suexploración, reaccionar a lo que le hacía.
La mano que había estado bajo su camiseta y que había permanecidoen su cintura comenzó a subir por su piel, recreándose en aqueltacto suave, como si estuviera acariciando terciopelo cálido. Sinembargo, cuando llegó a la altura del pecho de esta, solo rozando elinicio, Wanda saltó de nuevo y se hizo hacía atrás, con las manossobre el pecho de Visión y observándolo con cierto deje de pánicomientras él permanecía sereno.
-¿Ocurre algo?- le preguntó.
-Se suponía que íbamos a dormir- le dijo Wanda, más parecido comosi se lo recordara a sí misma que como se lo estuviera diciendo aVisión.
-Sí. Esa era la idea.
-Pues eso vamos a hacer- comentó esta, tumbándose de nuevo a sulado, ocultando el rostro en el pecho de este.
¿Qué había estado a punto de hacer? Lo había invitado a su cuartoporque no había querido dormir sola aquella noche. No cuando seavecinaba un enfrentamiento directo contra Ezekiel y sus DaliasNegras. Sin embargo, a pesar de haberle dicho a Visión de que ellano estaba preparada para hacer algo más intimo con él, ¿qué habíaestado a punto de hacer?
-¿Te he molestado en algo?- le preguntó este.
-En absoluto.
-Te dije que te daría tu tiempo y lo haré- le aseguró.
-No hablemos más de eso, por favor.
Ya estaba bastante avergonzada ella por sí misma para que Visiónquisiera hablar del tema.
-Entonces será mejor que duermas. El señor Lang no tardará envenir.
-Cierto. Vamos a hacer eso.
Y, acomodándose contra él, cerró los ojos y trató de dormirse.
Visión, por su parte, trató de entender lo que había estado apunto de pasar en aquel cuarto.
Había leído y visto mucho, pero, a la hora de la verdad, mientrasbesaba a Wanda, se había olvidado de todo eso y solo se habíaperdido en el momento, tratando de estar aún más cerca de ella.
¿Aquello era la necesidad del otro que había leído en algunoslibros?
Bajando la vista hacía ella, vio como Wanda parecía hundirse en elsueño por momentos y, tratando de contemplar mejor su rostrodormido, hizo sus cabellos hacía atrás, tratando de no despertarla.
Descansar de aquel modo, con ella abrazada a su cuerpo de aquel modo,se podía convertir rápidamente en una agradable costumbre a la quese podía hacer adicto con facilidad.
Findel capitulo 27
Enun principio, confesaré, que mi intención era hacer que Wanda yVisión avanzaran un paso más en su relación con este capitulo,pero, tras consultar con amigas por whatsapp, recordándome que enlos comic's estaban casados, pensé que podría hacerlo, que podríaescribir la escena sin ningún problema, que lo único que tenía quehacer es que no fuera demasiado apasionada, como hago con Tony ySteve, que fuera algo calmado y romántico teniendo en cuenta laspersonalidades de los personajes.
Perome ha sido imposible. Al menos, en estos momentos, no puedo hacer quealgo como eso ocurra entre ellos. Me viene una y otra vez un videodonde Wanda y Chris Evans están en un programa de televisión dondeambos tenían que bailar las canciones que le pusieran y Chris, queno tenía ni chispa de vergüenza, hacía lo que hacía falta parahacer reír a la gente, pero la pobre chica estaba que se moría devergüenza. Hasta se tapó la cara cuando Chris se pegó a ella parabailar, pareciendo que quería que la sacaran de allí a la de ya.
Esome venía una y otra vez a la cabeza y mi mente a acabado diciéndome''¡No! ¡No lo hagas! ¡Aun no están preparados para hacer algocomo eso!'', así que he tenido que cortarlo. La verdad, norecuerdo como se llamaba el video. Pero si buscáis en youtube elvideo Chris Evans bailando os tiene que salir seguro.
Enfin. Incluso con el corte que he tenido que hacer, espero que elcapitulo os haya gustado y decidme si he hecho bien en cortar suescena o no. A lo mejor solo es impresión mía. A lo mejor veo a laactriz tan vergonzosa que, inconscientemente, lo uno con su personajey me hace hacer estas cosas. Ayudadme con esto, por favor. Vuestraopinión siempre es importante para mí.
Sindaros más la tabarra en este capitulo, me pongo inmediatamente conel siguiente, que ya tengo escrito las primeras paginas en milibreta, y os deseo, como siempre, que os mantengáis sanos y nosseguimos leyendo. Bye!!!.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top