México fue el primero en despertar, notó que su hermana estaba acurrucada con él, miró a su al rededor, todos habían caído dormidos después de la canción, una sonrisa leve se formó en sus labios, escucho un ruido en la cocina, se le hizo algo raro, las 12 ciudades estaban dormidos aún, no le dio muchas vueltas y pensó que eran los latinos o algún otro amigo cercano que se coló a su casa como "Juan por su casa", se levantó de la sala con sumo cuidado, procurando no despertar a nadie, camino a la cocina pensando en hacer unos chilaquiles para su familia, escucho unas palabras en... ¿Maya?... Y en... ¿¡Nahuatl!?, abrió la puerta de la cocina encontrándose a su madre, Imperio Azteca y su tío, Imperio Maya

—¡Por un demonio lo que faltaba!—El mexicano cruzó los brazos, Maya tal vez podría ser calmado, pero su madre era un problema, además que, si ellos volvieron, quien sabe quiénes más saldrán de la tumba
—¡Tenochtitlan! Mi niño—La mujer abrazo al mexicano, quien correspondió, a pesar de saber que sería difícil todo esto, estaba feliz, su adorada madre había vuelto
—¡¡Papá!!—Las ciudades mayas se abalanzaron a su padre, quien los abrazo
—¡mamá!—Las ciudades aztecas fueron a abrazar a la Azteca, quien estaba feliz de ver a sus hijos nuevamente

El mexicano se separó del abrazo familiar y buscó su celular, debía notificar a ONU de lo que había pasado

Sonrió levemente, a todos les agradaba ONU, era muy comprensivo y cariñoso, además de que si veía un comportamiento raro o preocupante en un país, lo enviaba a descansar o a una revisión psicológica con OMS, se preocupaba mucho por ellos y hacia muy bien su trabajo, tanto así, que a las juntas nuevas nadie llegaba tarde, nadie faltaba solo porque si, y también las peleas se habían reducido, seguían estando ahí, pero eran menos comunes, los países por fin comenzaban a arreglarse hablando... Al menos ellos, que los humanos en el poder les hicieran caso era una cosa totalmente distinta, pero poco a poco se avanza.

Corto, pero se vienen cosas grandes 👀