La búsqueda de Ayam se intensificó, se buscaba por toda la ciudad, este constantemente cambiaba su posición para que no lo descubrieran, pero eso no impedía que el miedo a ser descubierto estuviera ahí, Interpol no dejaba de intentar encontrar al intruso

—¿Cuántas zonas faltan por inspeccionar?—Preguntó Interpol molesto de no poder encontrarlo
—Solo una—Respondió uno de los policías, Interpol chasqueo la lengua

Llegaron a la zona que faltaba por inspeccionar, entraban a callejones y calles pequeñas, buscando a Ayam, hasta que lo encontraron, parecía estar débil, probablemente no había comido nada en un buen tiempo, antes de que Ayam pudiese reaccionar fue sometido en el piso por 5 policías, Interpol le inyectó un tranquilizante y los policías seguían arriba de él mientras el tranquilizante hacia efecto, una vez cayó dormido lo subieron a una camioneta y lo llevaron a las instalaciones de la ONU.

Llegaron unos minutos después, Ayam fue encerrado en una celda de contención y todas las armas que había robado se le fueron arrebatadas, un tiempo después Ayam despertó, miró a su alrededor y al no reconocer el lugar se abrazo a sí mismo con temor, ONU entró acompañado de Interpol casi al momento, llevaba una charola de comida

—Sé que puedes tener miedo, ¡esta bien! No te lastimare, solo te traigo comida... Te ves débil—ONU camino hacía Ayam pero paró al ver que este le tenía miedo, por lo que sólo le dejó la comida y se alejó—Antes de que me vaya ¿Podría saber tu nombre?
—Solo tengo un tonto apodo... O eso creo...—Ayam miró hacia abajo
—¿Cuál es?—Preguntó ONU con una sonrisa amable
—Ayam—Respondió simple, ONU salió del cuarto

Ayam miró con desconfianza la comida, él sólo había comido frutas que recolectaba literalmente de los árboles... Nunca vio algo parecido a aquella comida, era pasta italiana, por lo cual nunca la había visto, miró al cristal que estaba enfrente, algo le decía que lo podían ver pero él a ellos no... Se acercó con cautela a la comida, como si esta estuviese envenenada... Comenzó a comer y le gustó la comida, terminó su comida y volvió a la cama que había ahí, para volver a hacerse bolita, quería saber que ocurría.

1 DAY LEFT

Ayam estaba en un tipo de arresto, Interpol lo llevó a otra sala, donde solo había una mesa y dos sillas, lo hicieron sentarse en una de las sillas para después esposarlo a la mesa

—Te haré unas preguntas, respondelas con sinceridad—Pidió, o más bien, ordenó Interpol—¿Por qué robaste la bóveda?
—Te lo dije aquel día, tengo que cumplir mi misión—Ayam ladeo su cabeza, haciéndose el inocente, jugaría un poco con el policía, este suspiro pesadamente
—¿Qué país te envió?—El policía iba a completar su pequeño cuestionario, aún si le daban respuestas tontas
—¡Ninguno! Mi misión es desde hace casi 500 años... O incluso más—Ayam sonrió de manera burlona
—Ugh ¿te importa responder bien? Sabemos perfectamente que no eres tan inocente—Interpol masajeo el puente de su nariz con molestia, este chico era un problema
—¿Uh? ¿Por qué no lo soy?—Ayam aprovecharía que tenía la apariencia de Maya para actuar como Maya lo haría en una situación así... Hacerse el tierno y llorar hasta que pueda escapar
—Te pareces mucho a Maya—Interpol en ese momento recordó todo lo que Inca había comentado—El símbolo en tu cara, ¿Cómo pasó?—Esa pregunta era una fibra sensible para Ayam, por lo que su actuación se vio rota al tocar ese tema, su mirada cambió a una triste
—Prefiero no hablar de eso—Desvío su mirada con un rostro triste
—Eso es todo por ahora—Interpol se levantó y se llevo a Ayam a donde estaba anteriormente

Ayam estaba en su cuarto aburrido, quería irse de ahí pero estaba siendo vigilado todo el tiempo, se acostó en la cama y soltó un jadeo de sorpresa

—¡La cosa está es muy cómoda!—Ayam comenzó a removerse en la cama, del poco tiempo que estuvo físicamente nunca había dormido en una cama, así que parecía un niño descubriendo algo nuevo

Se removía en la cama tal cual niño, tenía dos almohadas así que dejó una en su cabeza y la otra la abrazó, esa posición se le hizo muy cómoda, las almohadas (por alguna extraña razón de ONU) olían a vainilla y a Ayam le gustó ese olor, unos minutos después cayó dormido

—Si él está en observación significa que podemos realizar mañana la junta sin preocuparnos, ¿cierto?—ONU miró a Interpol directamente
—Si, yo me quedaré aquí a vigilarlo, puedes dar tu junta—Explicó Interpol

Ya lo tenían ahí, pero... ¿Realmente todo saldrá bien ahora? ¿O Ayam tiene un as bajo la manga?