"El calor no se puede separar del fuego, ni la belleza de lo eterno, por mucho que lo intentes, es una química constante que nunca se destruye, solo se transforma"

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YoonGi continuaba mirando perplejo al chico, mientras colocaba distraídamente el dichoso paño húmedo en su pierna, el hombre no creía que todo este tiempo el causante de su martirio era el invasor y si antes era consciente de su tacto, ante la posibilidad de que lo que pensaba fuera cierto, sentía literalmente hormiguear su piel. Si fuera así por lo menos ahora comprendería parte del descontrol de su alfa.

Sobrellevado por su descubrimiento se acercó sutilmente para confirmar su teoría, inhaló lento y no hizo falta más para saber que la esencia a chocolate intenso, venia de cada poro del muchacho en frente suyo. YoonGi apenas procesaba la información, cuando el chico levantó la cabeza y sus miradas conectaron.

Hoseok estaba muy aplicado en hacer las cosas lo más profesional que se pudiera, pero el aroma del alfa que tenía en paños menores sentado en el sofá se lo complicaba, tocar su piel le producía cosquillas. Pero mientras él se sentía algo afectado, el tipo no reaccionaba de la misma forma y eso no dejaba de ser algo decepcionante para alguien como él.

Tampoco era que le inquietara en demasía, pero si el hombre al menos mostrara algo de interés, podía considerar incluso pasar un buen rato juntos, en compensación por la quemadura y para limar asperezas, su omega a juzgar por sus reacciones no parecía estar en desacuerdo y dudaba que su aroma no fuera la suficientemente expresivo.

Pero con tanto chocolate en el área derramado por cualquier lado, tenía pocas posibilidades de llamar su atención, si a eso le sumamos su fría personalidad y el hecho de que tenía pareja y quizás un lazo, se reducían a cero, aunque lo último nunca había sido impedimento para Hoseok, no cuando se trataba de sexo, total él no quería un alfa para él, sin embargo no le hubiera molestado, divertirse un poco.

El castaño hizo un puchero inconsciente mientras terminaba de mojar el pañuelo, cuando sintió el aroma del alfa casi tan cerca como cuando lo tenía acorralado contra la encimera, levantó la cabeza y su lobo se encendió en su pecho al encontrar los ojos obscuros del alfa sobre los suyos. El hombre lo miraba con un gesto extraño entre asustado y confundido, sin dejar de parecerle atractivo, el omega se encontró encerrado en sus pequeños ojos.

—Eres... tú...eres tú el que huele a chocolate—no era una pregunta, YoonGi para ese momento ya estaba muy seguro de ello, pero necesitaba que el muchacho lo dijera

Hoseok pasó de la sorpresa a la vanidad en pocos segundos

—No chocolate, Min YoonGi —aclaró coqueto y complacido— Cacao...el chocolate es procesado, el cacao es natural...como yo—

—Eres un omega... —el alfa no correspondió en ningún momento a los gestos del chico, pero lo miró por tercera vez de arriba abajo, sin sospechar lo mucho que agradaba a Hoseok cuando lo hacía— claro...por eso no pude distinguirte, toda la maldita habitación huele a chocolate—

—No me culpes por eso—negó el castaño con un mohín para luego apoyarse en el sofá acercándose más al rostro del hombre— si hubieras enfocado bien tus sentidos habrías sabido que lo mío no es solo el cacao—

El omega había susurrado aquello último, mirándolo de una forma intensa y YoonGi creyó sentir un corrientazo en la columna vertebral que lo agitó y lo obligó a apartarse del muchacho para llevar el torso contra el brazo del mueble. El alfa tragó en seco— cierto, había miel también— lo distinguió por que ambos aromas parecían querer metérsele bajo la piel, avivando el calor que sentía. El chico le estaba abiertamente— ¿coqueteando? —sus feromonas no mentían.

El guardaespaldas ahora comprendía porque su lobo estaba inquieto, el omega estaba usando toda su artillería en contra suya desde hace rato, suponía que en el afán de defenderse, y él ni cuenta se había dado. Todo este tiempo pensó que súbitamente había desarrollado una extraña hipersensibilidad a la esencia de chocolate, de todas formas, ya no era necesario que lo hiciera, pero el sinvergüenza chico continuaba.

El alfa arrugó el ceño —¿cómo este niño podía hacer algo así? Él había escuchado su conversación con Jackson, él sabía que tenía un lazo— aunque el omega no podía estar seguro de lo último y YoonGi no pretendía sacarlo de su error, no tenía porque, sería como reconocer que estaba tentado y no era así —definitivamente no— Así que el alfa aclaró su voz para hablar, liberándose según él, de la sensación de ansiedad que le producía el muchacho.

—Creo que... yo puedo seguir haciendo esto solo— le dijo formalmente apartando la mano del omega de su muslo, siendo cuidadoso para no tener mayor contacto—gracias Jung—

El castaño sabía que estaba siendo descarado al coquetearle y desubicado además, después de todo lo que pasó entre ellos hace menos de veinte minutos, pero era inevitable para su omega, había algo en ese alfa que le gustaba, no sabía si era su actitud fría y desinteresada, porque a Hoseok le encantaban los retos y que tuviera pareja lo hacía mejor, no había riesgos de emociones, o quizás era que realmente tenía un fetiche con los alfas bajos. En cualquier caso, no perdía nada con intentar, ahora que por fin, el guardaespaldas pareció notarlo, debía aprovechar la situación y ver si no todo fue malo al dejar Paris con Tae. No espero volver a verlo levantar esa barrera de indiferencia, alejándolo cortésmente de su tacto y dándole un golpe a su ego cuando abrió la boca otra vez.

—Y.... ¿podrías darme un poco de aire? ...tu olor me ha estado asfixiando desde hace bastante tiempo sin saber—

El omega se levantó rápidamente, con el ceño fruncido y la mandíbula apretada sintiendo su lobo gruñir por la ofensa— nadie en su puta vida había insultado su esencia—menos alguien con quien había sido amable después de que quisiera matarlo. —Debería dejarlo aquí para que se le escosa la piel por pendejo— pero no, Hoseok no le daría el gusto a ese alfa insignificante, porque según su apreciación comparado con sus conquistas lo era, de que lo viera salir humillado con el rabo entre las piernas y a pesar de lo irritado que se sentía, dibujó la mejor de sus sonrisas.

—Perfecto....hazlo tu—dijo caminando hacia el sofá de una persona, donde el hombre había tirado su pantalón desde que llegó. Sin quitarle los ojos de encima al Peliplata, se retiró su bolso cómodamente, se sentó cruzando sus piernas y apoyó su rostro en su mano que había colocado sobre el brazo del mueble—y mientras ¿qué te parece si conversamos Min Yoongi? —

El alfa observó cada uno de los movimientos del chico y aunque su esencia había disminuido, sus gestos siguieron alterando a su lobo, más aún porque conservaba esa mirada divertida sobre él. Le estaba urgiendo que el omega se fuera, necesitaba que se fuera.

—No es necesario que te quedes, ya entendí el proceso ...yo creo que puedo hacerlo solo—

—No lo dudo, cualquiera puede poner un paño frío sobre una quemadura— respondió Hoseok encogiéndose de hombros— pero no cualquiera sabe si funcionó, o si por el contrario necesitas un hospital—

Eso último, el castaño lo había dicho como si hablara del clima y YoonGi volvió a tragar en seco, no sabía si por el cambio de actitud del omega, que ya no le coqueteaba directamente, pero que seguía siendo incómodo o por la mención del hospital.

—¿Crees que necesite un hospital? — preguntó el hombre en voz baja mirando su pierna

—No lo sé, eso depende—

—Depen.. —

—Cámbialo — Hoseok interrumpió lo que suponía sería su siguiente pregunta y vio que el hombre lo miraba con gesto de confusión—el paño...cámbialo, dijiste que podías hacerlo solo y si tus sentidos funcionan bien, deben decirte que perdió su frialdad—aclaró en tono cortante señalando con indiferencia la pierna del alfa

YoonGi parpadeó y luego observó al muchacho con incomodidad, de alguna manera su lobo se había removido irritado por las palabras y los gestos del chico. Para su mala suerte, también se dio cuenta de que el enfermero tenía razón, había dejado de sentir el tacto frío del paño sobre su pierna y sin poder replicar, tuvo que hacer lo que se le indicó. Sacudió su cabeza— que le importaba la actitud extraña del omega—cuando terminó lo encaró firme nuevamente.

—¿De qué depende que vaya o no al hospital? —

—De que lo sepas hacer... o no— soltó Hoseok mordiéndose los labios con una mirada insinuante

El chico había dicho aquello en un tono tan suave que sonó demasiado sexy a oídos del alfa, no ayudaba la forma en la que lo miraba y el azote de su esencia, de pronto se sintió nervioso y se obligó a no mostrar su ansiedad, pero probablemente no lo logró

—El cambio de paño...querido—volvió a decir el omega riendo y la mirada de YoonGi se endureció, entrecerrando sus ojos.

—Te estas divirtiendo con esto ¿cierto? —

—No en realidad...más bien es aburrido— Hoseok bostezó y se estiró en el sofá —tú eres aburrido ...eras más divertido cuando me empotrabas contra la encimera—

El alfa se sintió descolocado y luego avergonzado por las palabras del chico, pero entendió el punto —Solo quiere provocarme— El omega en cambio le sonrió coqueto otra vez y desvió su rostro en dirección contraria, enfocándola por accidente en algo que llamó su atención bajo el mueble del play station.

—¿En serio? Raro, porque tus lágrimas no parecían de diversión, Jung—

Hoseok lo escuchó, aún con su mirada puesta en otra dirección, sabía que el alfa buscaba la manera de disminuir la tensión, pero no se lo iba dejar tan fácil, habían encontrado una nueva forma de estresarlo.

—No lo eran...realmente me asusté...—el castaño se levantó y caminó por la salita de estar hasta agacharse para tomar lo que llamó su atención—con tu arma— el castaño sostenía ahora la pistola de YoonGi de la culata con su dedo índice y pulgar, viendo como la respiración del hombre pareció detenerse y empezó a acariciarla de forma surgente —pero tengo que reconocer que la experiencia fue como decir... ¿estimulante?... si sabes a lo que me refiero... —

El omega hablaba lentamente conservando ese tono insinuante y humedeciendo sus labios, mientras fijaba su mirada quemante en el alfa, y aunque los ojos del hombre seguían fríos siguiendo cada movimiento suyo hasta que dejó sin prisas, la pistola en la mesita ratona, Hoseok podía percibir su agitación.

— Sentir tu arma...—continuó el castaño mantenido la sonrisa ladina—¡quiero decir... un arma! —

El alfa había observado con terror como el chico tomaba la pistola y parecía disfrutar de su ansiedad. Cuando al fin la dejó sobre el mueble, YoonGi sintió su lobo relajarse, pero siguió mirándolo intensamente, molesto por lo que acababa de hacer el muchacho e incómodo por lo que estaba dando a entender con cada palabra—tan descarado— lo vio rodear el sofá donde hasta hace poco estaba sentado, apoyándose en él para encararlo con esa sonrisa de diversión que lo irritaba y lo sofocaba casi tanto como su esencia, pero no le permitiría que siguiera afectándolo, necesitaba cortar de raíz esa tensión que el castaño se empeñaba en generar.

—Claro... seguro por eso me vaciaste el chocolate encima— soltó con ironía

—No fue el motivo— respondió Hoseok encogiéndose de hombros—pero definitivamente hubiera encontrado mejores formas de quitarlo por ti Min—el castaño mordió sus labios otra vez en un gesto cargado de malicia

—Hijo de p...Eres un desvergonzado—soltó el alfa quien estaba ahora completamente seguro de que el chico estaba jugando con él, haciéndolo sentir incómodo intencionalmente con su aroma y sus palabras, entonces— ¿quizás nunca le coqueteo realmente? ¿todo era un juego? —

—Aquí soy un desvergonzado, en Francia soy divertido—

Y algo hizo click en el Peliplata —cierto que el chico era amigo del francés Taehyung quizás, pueda averiguar algo más, y salir de su lado de la cancha—

—¿Así que también eres francés? al igual que tu amigo—vio al chico asentir— ¿eres su enfermero? — preguntó YoonGi solo para introducir el tema y el castaño estuvo a punto de responder, pero se contuvo cambiando el gesto hasta hace poco juguetón y desviando su mirada, incluso pareció —¿nervioso? —vio como el omega siguió caminando por la habitación sin mirarlo y se apoyaba ahora del futbolito para lanzarle otra sus inquietas miradas.

—Yo soy... lo que Tae quiera que sea para él—

El alfa arrugó el ceño

—¿A qué te refieres? —

—A eso precisamente, lo que Tae necesite eso seré yo—

—¿Y eso quiere decir? —

—Enfermero, amigo, consejero...y muchas, muchas cosas más—sonrió— en otras palabras, lo que su cuerpo y su mente necesiten— le dijo mordiéndose uno de sus dedos índices.

—¿Qué? —YoonGi se sorprendió primero pero luego sintió a su alfa removerse incómodo otra vez, pero por— ¿irritación? — El tal Taehyung según su investigación era un omega...— ¿Está insinuando lo que creo? No...esta tiene que ser otra de sus bromitas, este chico no parece ser de ese gusto, no puede ser...sino su alfa no estaría tan...tan alterado—

—Él... —carraspeo— ¿Él no es un omega? — se suponía que tenía que sonar como afirmación, pero no salió así

—¿Y qué si lo es? ...incluso es más entretenido— soltó caminando hacia el alfa — tan... diferente—

El alfa involuntariamente volvía a tragar en seco tensando su mandíbula, mientras lo veía acercarse— ¿era posible que su lobo hubiera sido terriblemente engañado? y lo hubiera casi arrastrado al límite de la tolerancia por ¿nada? — una carcajada lo hizo apretar el puño que tenía libre sobre su regazo—Maldita sea—

—¡Dios que risa! — jadeó el chico casi sin aire mientras se contraía sujetándose el abdomen, incluso un par de lágrimas se empezaron a asomar en sus pequeños ojos —¡No puedo contigo! —

—Eres un pésimo bromista—soltó el hombre molesto

—S-si hubieras...si hubieras visto tu rostro no...no pensarías lo mismo—el chico a penas y podía contestar, pero tomó aire y su risa se volvió moderada, hasta dar paso a su habitual sonrisa

—En vez de enfermero debiste ser payaso—

—Hubiera sido igual ...uno muy lindo y sexy—

—A todo le tienes respuesta ¿no? Todo es un chiste para ti—

—Si, me encanta hacer reír y reír a costa de los demás—

—Pues yo no le veo lo gracioso—

—Yo sí, burlarme de ti es tan... divertido — se acercó hasta quedar a un par de pasos del guardaespaldas—¿en serio pensaste q.. —

El alfa lo miraba serio y Hoseok se complacía con sus gestos, se inclinó sobre él hasta llevar su rostro muy cerca del hombre, quien pareció contener la respiración irritando más al omega.

— No querido... yo soy un omega, me gustan los alfas—le susurró—los verdaderos alfas...no como tu—se miraron fijamente unos segundos y de un momento a otro el omega aprovechó para arrodillarse entre las piernas del hombre— ¡Se acabó el tiempo, basta de conversaciones ridículas! —

—¡EH! ¡¿QUE HACES?! —

YoonGi se alteró y quiso levantarse, pero el castaño se lo impidió sostenido sus rodillas, sentía que entre el dulce aroma del chico, su actitud cambiante y su mirada intensa, que aun en medio de su molestia seguía siendo inquietantemente sexy, iba terminar haciendo una estupidez.

—¡¿Qué mierda crees que hago Min?! ¡Ni de chiste te la voy a chupar! —

El guardaespaldas parpadeó —no eran las palabras que necesitaba escuchar—

—N-no... quise deci.. —

— Verifico que tu auto-tratamiento haya servido de algo— le dijo Hoseok con el ceño fruncido mirando directamente al alfa.

El castaño estaba harto del hombre, su omega se sentía tan humillado en su pecho —no pretendo quedarme un minuto más contigo...O ¿tu si quieres hacerlo? — y cambio su gesto por una sonrisa ladina, sabía cuál era la respuesta y lo comprobó cuando un "no" duro y firme salió de los labios del hombre, pero primero muerto antes de que el alfa creyera que eso le importaba— entonces déjame trabajar, es lo último que haré por el tipo que intentó matarme —soltó agrio.

De repente aquellas palabras sacudieron al alfa, mirando al bonito omega enojado, entendió que se sentía ofendido, por eso su extraña conducta y tenía motivos. Él nunca se disculpó por haberle apuntado con su arma, amenazarlo de muerte y haberlo estampado contra la encimera, peor aún, sin razones de peso, pero suponía que ya era tarde, la actitud del castaño lo demostraba. Tampoco lo haría, él necesitaba que todo terminase y ponerse los pantalones para poder pensar con claridad, y si para eso, tenía que soportar una vez más el intoxicante aroma del omega y sus manos tocándolo, lo haría—¡carajo no soy un maldito cachorro! —

—¡Bien...que sea rápido! —dijo desviando el rostro, tratando que al menos dos de sus sentidos no estuvieran sobre el castaño

YoonGi sintió como las suaves manos de la omega se movían por su pierna, trataba de pensar en ranas o algo para distraerse, hasta que un dolor punzante muy cerca de la ingle lo ayudó.

—Si hizo una ampollita y se rompió—la voz del muchacho salió suave y sin atisbo de molestia, lo que hizo que el alfa luchara por no volver a poner su atención en él — ¿te duele cierto? —no contestó, prefería a su lobo distraído en el dolor

Al examinar el área, Hoseok observó una pequeña ampolla que se había formado y roto, por lo que había algo de piel expuesta y no pudo evitar sentir real preocupación. Si bien el tipo había sido un asno con él y su belleza, él estaba bien, en cambio el alfa tenía una quemadura. El castaño era enfermero se suponía que cuidaba de las personas, no que las lastimaba. Levantó la mirada y vio al hombre con los ojos cerrados y el ceño fruncido en señal de dolor, y su lobo se sintió afligido en su pecho.

—Lo siento en verdad—

Eso fue todo lo que necesitó el alfa, para ceder a la voz apagada del niño, abrió sus ojos para mirarlo y aunque sentía que no podía confiar en su criterio cuando se trataba del castaño, veía sinceridad en su mirada—No pasa nada...no duele tanto— lo vio asentir manteniendo por unos segundos un adorable gesto pensativo.

—¿Tienes pasta de diente? — preguntó el muchacho emocionado de pronto, la pregunta descolocó a YoonGi

—¿Eh? ... ¿Sí? —

—¿Dónde? —

—En...en un cajón de la encimera... ¿Para qué quieres pasta de diente? —

Hoseok se paró rápidamente sin responderle, buscó lo que necesitaba y en cuestión de segundos estaba otra vez entre las piernas de YoonGi, quien extrañado, observó como colocaba delicadamente algo de pasta sobre su herida, y cuando iba preguntar para que servía eso, el chico como leyendo sus pensamientos habló.

—Esto te ayudará a mantener fría la herida hasta que coloques algún ungüento cicatrizante, incluso te aliviará la molestia— el omega continuaba hablando mientras colocaba la crema dental— ¿te sientes mejor? —vio como el hombre asentía lentamente— eso lo hizo sentirse satisfecho y pese a todo lo que había pasado entre ellos, sonrió genuinamente para el alfa, volviendo luego a poner atención en la herida.

Hoseok no era mala persona, ni un infeliz, había aprendido desde muy joven a defenderse en las calles de Paris, pero prefería usar otras herramientas, odiaba la violencia y el dolor, mucho menos estaba cómodo con causarlo. Entonces sin saber por qué, recuerdos de su madre consolándolo en sus caídas, acariciando sus heridas asaltaron su mente y lo empujaron a cerrar los ojos para soplar su aliento sobre la piel expuesta y la crema dental con la intención de hacerlo más fresco para él alfa, pudo sentirlo tensarse bajo su toque y aunque era seguro que no era por el motivo que normalmente esperaría, al menos no lo apartó.

El alfa volvió a sentir ese familiar corrientazo en la columna vertebral, que no lo dejó reaccionar correctamente, desatando un escalofrío que recorrió todo su cuerpo. Su vista se clavó en el muchacho sin que él se percatara, sintiendo que su boca se secaba y su respiración se aceleraba — ¡Mierda! —era justo lo que no quería, ser demasiando consciente del atractivo omega entre sus piernas, pero ya era tarde. YoonGi se mordía los labios fascinado con el toque suave del chico, con ese hermoso perfil y esos llamativos labios rojos, con esa bonita piel sin ninguna marca en su cuello tentándolo, y ese embriagante aroma que lo atraía como la miel.

El omega estaba descontrolando a su lobo sin ser consciente, mientras depositaba ese dulce aliento en su piel expuesta y provocaba que su ardor en la ingle se encendiera, pero por razones muy distintas a la quemadura, extendiéndolo por cada poro de su piel, el estímulo se sentía placentero y mordicantemente caliente. YoonGi sabía que estaba lejos de su celo, pero este chico y sus poderosas feromonas eran algo de temer.

Si hubiera sido el mismo YoonGi de hace más de cinco años antes de conocer a Jackson, le hubiera valido un carajo— demostrarle que era un alfa de verdad y cerrarle esa hermosa boca de buena forma— y su lobo en su pecho le rogaba que lo hiciera, olvidando su razón y su lazo, pero él no debía permitírselo. El guardaespaldas tensaba los dientes y empuñaba sus manos contra los cojines del mueble para evitarlo, pero definitivamente no podía hacer nada para controlar la sangre que se acumulaba dolorosamente en la parte baja de su cuerpo y lo que tanto temía sucedió —¡maldita sea! —él lo sabía, el chico había conseguido ponerlo muy duro y si su propio aroma no lo delataba, el calor que emanaba de su cuerpo o su alterado lobo seguro lo harían, por lo que a estas alturas dudaba que el omega no se hubiera dado cuenta. Era tan vergonzoso y caliente al mismo tiempo.

Cuando el castaño sintió un dramático cambio en el aroma de hombre que lo sacudió, y un calor abrazador que estimuló totalmente a su lobo, haciéndolo gemir en su pecho, abrió por fin los ojos con sorpresa, pero entonces a penas y había alcanzado a levantar la cabeza cuando la puerta de cristal era empujada abruptamente por la secretaria de Kim, apagando inmediatamente la atmósfera cálida que se había generado, descolocándolo y sacándolo abruptamente de su euforia.

Tanto Hoseok como YoonGi voltearon en dirección a la puerta donde la chica los miraba con ojos desorbitados y se llevaba amabas manos a la boca. No había que ser adivino para suponer lo mal que se veía todo desde la perspectiva de la beta, aunque no haya pasado nada— ¿Por qué no pudiste tardarte un poco más? — pensaba el castaño distraídamente, cuando sin esperarlo, era empujado sin cuidado por el alfa hasta quedar de culo sobre la alfombra. mientras éste se levantaba rápida y torpemente, el chico frunció el ceño y estuvo a punto de protestar, cuando empezaron los gritos.

—¡!JENNIE¡¡ ¡NO ES LO QUE PARECE! —

—¡¿QUE NO ES LO QUE PARECE?¡ ¡TU...TU...MALDITO INFELIZ! —la beta tenía desfigurado el rostro mientras señalaba al alfa— ¡¿COMO PUEDES HACERLE ALGO ASI A JACKSON?! —

Hoseok que hasta ese momento no comprendía porque tanto alboroto, por fin lo entendió. La chica conocía a la pareja del alfa—Jackson— por eso el pobre parecía estar en colapso mientras la beta lo acusaba— si supiera no alcanzaron a divertirse— se levantó dignamente, mirando con gesto indiferente la situación y observó al hombre dar unos pasos en dirección a la chica.

—Déjame explicarte Jennie—

—¡!NO TE ME ACERQUES PERVERTIDO¡¡ — volvió a gritar la beta volteándose ofuscada

YoonGi fue consciente de a lo que se refería la secretaria, mientras veías sus propias fachas, pero continuó

— Escu—

—¡Yo solo vine a decirte que el señor Kim te espera en su oficina! — interrumpió ella apretando los puños en el umbral de la puerta y mirando de soslayo hacia atrás agregó— y su invitado, también espera a tu ¡AMIGUITO! — terminó la beta azotando la puerta de cristal que de puro milagro resistió.

—¡!No..No¡¡...!!Jennie.....Jennie¡¡ —volvió a gritar el desesperado alfa

Pero ya era tarde la azabache había salido disparada, Hoseok supuso que el "amiguito" se refería a él, lo que quería decir que la reunión de Tae ya había concluido. Escuchó como el peliplata soltaba un sonoro —¡mierda! —y exhalaba con fuerza, mientras caminaba aun cojeando a hasta recoger sus pantalones tirados en el respaldo del sofá. A todo esto, el omega se arreglaba su propio atuendo distraídamente, viendo al hombre forcejear con la prenda haciendo gestos de dolor y rabia en el proceso.

—No deberías ponerte eso sin quitarte ese boxer ...solo conseguirás lastimarte mas—

—Mejor cállate ¿sí?... esto es todo culpa tuya—

—Supongo que eso es un Gracias en tu idioma—

—y ¿qué esperas que te agradezca? ¿la quemadura que tengo el muslo? —

—Ohh y ahí vamos otra vez...—dijo entornando los ojos— tengo que recordarte como empezó todo este caos, no me culpes solo a mí—

YoonGi terminó de vestirse para sostenerle una mirada de rabia contenida al castaño, su aroma decía que no estaba para bromas.

—A ver si entiendes ...niño—el alfa resopló— ¡Esa mujer se fue pensando cualquier cosa lejos de la realidad! ¡todo por tu causa!... ¡este es mi trabajo! y ella es... —

—¿Seguro que lejos de la realidad? — interrumpió el castaño sonriéndole mientras caminaba hacia él y el alfa tomaba distancia hacia la puerta —porque eso no decía lo que yo vi y sentí antes de que ella entrara—

El guardaespaldas abrió los ojos como platos, y su ritmo cardíaco se disparó— ¡mierda!... sabía que se daría cuenta—YoonGi se sentía tan molesto y avergonzado de sus actitudes y reacciones, era como si volviera a ser un pequeño alfa puberto, lo peor de todo era que el omega parecía estar disfrutándolo.

— Y eso te causa gracia... ¿supongo? ...pero esa chica es la mejor amiga de mi pareja—dijo frio y señalo la puerta— y no pienso tener problemas con él, por causa de un omega loco con desorden hormonal—El alfa se giró hacia la puerta para retirarse sin esperar respuesta

Hoseok tensó la mandíbula, pero lo disimuló dibujando nuevamente su hermosa sonrisa—Desorden Hormonal...sí, claro—

—¿No crees que se te olvida algo? — el castaño sostenía la corbata que el alfa había tirado en medio de todo el caos.

YoonGi volteó y vio la prenda en las manos del chico— maldita sea— lo último que le faltaba era que incluso tuviera problemas con SeokJin por comportamiento inapropiado, que no tardaría en saber por Jennie y sin corbata quedaría rápidamente en evidencia— ¿Evidencia? ¿de qué? — El guardaespaldas sacudió esos pensamientos moviendo su cabeza y avanzando hacia el chico— nada, allí no había pasado nada—y retiró bruscamente la corbata de manos del castaño.

—Desaparece— le dijo antes de finalmente salir del salón.

Hoseok se quedó mirando la puerta por donde el hombre muy enojado había salido, no podía negar que sentía su orgullo herido, jamás en su vida desde que se presentó como omega, un alfa lo había humillado tanto, pero sería hipócrita no reconocer que pocas veces había insistido tanto en llamar la atención de un alfa, supuso que había descubierto un nuevo fetiche con las armas o simplemente la negatividad del alfa le atraía, sin poder evitarlo sonrío —Nunca aprendes Hoseok—

Mientras recogía su bolso del sofá, pensó que su estancia en Seúl, después de todo sería más entretenida de los que creía, no solo el primo Jimin que reunía todo lo que a Hoseok le gustaba en un alfa, incluso sus mismas aspiraciones en una relación —Sexo y diversión— también había encontrado un nuevo reto bastante tentador, aunque a juzgar por lo que había visto entre sus piernas, a pesar de lo que el alfa dijera, no había tanto desafío como creía, suspiró aliviado —Menos mal, sacar una cita con Allard después de acompañar a Tae en su locura no sería nada fácil—

—Tae —

—Ofrecerse como carne de cañon, ha sido la idea más estúpida que se le ha ocurrido—Hoseok mentiría si dijera que al ver la forma en la que el guardaespaldas reaccionó culpándolo de venir a nombre del viejo SunYoon, no sintió temor, pero no por él sino por Tae, era evidente entonces que Kim SeokJin estaba muy consciente de quien era su enemigo, y no pretendía quedarse de brazos cruzados.

La experiencia del omega en ese salón de juegos le había enseñado, que si el padrastro de Tae tiene a NamJoon como su herramienta, SeokJin además de su primo y mejor amigo, cuenta con alguien que no aparecía en su investigación, alguien con la suficiente sangre fría para —eliminar a quien crea peligroso— Min YoonGi era sin duda una pieza en este pull que ninguno de los dos esperaba, y el punto era —¿qué tan favorable podía ser eso para Tae? — Hoseok estaba aterrado por la salud y la seguridad de Tae, pero veía muy difícil hacerlo cambiar de idea, por lo tanto, solo tenía una forma de protegerlo— conociendo más al enemigo o a sus aliados— esa era una tarea que el castaño podía hacer y tenía la leve sospecha que incluso podría disfrutarlo.

Terminó de arreglarse mientras miraba su reflejo en el cristal de los anaqueles y se dispuso a salir, echando una última mirada al salón de juegos que parecía un campo de batalla, sonrió y salió del lugar —Si, Seúl será divertido— 

 Capitulo 8 tensión y mas tensión, no se dedicar pero esta pareja se la dedico a @BTS_Myangels, que le encanta... voy a tratar de ir mas rápido y pero no prometo mucho🥺

Les dejo el lobito del YoonGo, esta fiero ¿cierto? Sigo pidiendo excusas por lo errores y agradezco mil a mis Chummys que leen esta historia😘