CAPÍTULO 17: SECRETOS


"La vida no tiene secretos, solo verdades que yacen bajo la superficie y que nunca quisimos ver. El talento del mentiroso es aprovecharse de eso"


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Jin había abandonado rápidamente el despacho donde realizaba una teleconferencia, en cuanto sintió la esencia de hermano pequeño en casa. Su mayor deseo era volver a abrazar a su maknae luego aquella ultima discusión y dos meses de ausencia. Pero al escuchar el tono irónico de su saludo y ver esa sonrisa forzada, supuso que las cosas no habían mejorado. Su hermano seguía resentido y eso dolía, sobre todo por el motivo.

Es bueno verte en casa Yeonnie—

— ¿Qué puedo decir? El compromiso de hyung es un motivo, para el que no hay excusas que valgan—dijo frío y Jin contuvo una risa en el pecho

—Vaya... y yo pensaba que ver a tu familia después de dos meses, era mejor motivo para eso—

—Jinnie — susurró Jisoo

—No me mal interpretes hyung... me alegra verlos, pero no es como si hubiera tenido muchas opciones —soltó encogiéndose de hombros

—Por tu tono supongo entonces, que no era lo querías—

—¿Honestamente? hubiera preferido hacerlo voluntariamente y no presionado para ser testigo de este show—

—¡Yeonnie! —regañó Suni

—Entonces te doy la razón, semejante estupidez no justifica tu regreso, menos aun si no eran tus deseos —

—Jin—advirtió en tono firme el padre

—¿Mis deseos? —rió con sorna— ¿Eso con que se come hyung? Que yo sepa eso nunca han importado, menos si el mayor de los Kim se compromete, hay que abandonarlo todo sin importar que—

—Pues si yo hubiera sabido lo poco que querías regresar, te aseguro que lo hubiera evitado. No es mi intensión, que te sientas forzado a nada por mi causa—

—Seamos honestos hyung, aunque lo hubieras intentado, nada hubiera cambiado. Si se trata de ti todo lo demás debe pasar a segundo plano ... siempre ha sido así—

—Chicos por favor—pidió Jisoo, notando que aquel comentario había logrado incomodar a Jin

—Quizás tengas razón—respondió tranquilo— pero si esperas que me sienta culpable por eso Yeonnie, te equivocas. En todo caso si querías quedarte, solo tenías que hacerlo, ya no eres un niño y eres un alfa. No intentes poner excusas —

—¡Basta!—la voz firme e irritada del padre se escuchó aquella estancia—No es posible que sigan con esto después de dos meses —el hombre se contenía mirando a sus dos hijos alternadamente—este debe ser un momento feliz, nuestra familia se ha reunido otra vez—

— ¿Feliz para quién? Si con la cara de emoción del novio, tengo para arrepentirme de haber regresado—

Jin terminó de irritarse por la actitud hostil y constante de menor

—¿Cuál es tu maldito problema YeonJun? —preguntó —...hasta cuando vas a seguir con ese ridículo resentimiento por esa...—

—¡SILENCIO!... ¡¿es que mi palabra no es suficiente para que terminen con este asunto?!—

Soltó el alfa ahora con evidente agitación y llevándose una mano al pecho. Jisoo se acercó preocupada y Suni hiso lo mismo apretando con fuerza su delantal, para luego salir disparada hacia la cocina.

Después del rompimiento de su lazo, producto de la muerte de su esposa, Kim Joon Woo experimentó un deterioro progresivo de su salud. Para todos los médicos era un milagro que el hombre estuviera vivo, 11 años después de aquel accidente y en su mayoría todos coincidían en que se debía a la necesidad del alfa, por ver a sus hijos realizados antes de partir.

Ambos hijos callaron por fin, pues no era su deseo comprometer más la salud de su padre. Sujeto de su hija, el mayor le dirigió una dura mirada a su maknae

—YeonJun... aunque tu molestia fuera justificada, eso no implica que olvides el respeto que le debes a tu hermano mayor o ¿es que también vas a olvidar tu respeto hacia mí? —

YeonJun frunció el ceño y bajó la cabeza

—No padre, no lo olvido—

—Tu hermano esta enmendado su error y eso debe ser suficiente para ti —el muchacho apretó la mandíbula—sin embargo, no olvides que aunque repruebo las acciones de SeokJin, soy consciente de las faltas de aquella chica... y de esa misma forma tú también debes hacerlo— giró el rostro hacia su primogénito—basta de reproches y culpas SeokJin, mañana te comprometes y esa es una realidad que no puedes cambiar. Asúmelo con responsabilidad, no olvides que eres el ejemplo de tus hermanos— Jin asintió con gesto serio

Finalmente respirando agotado, el mayor se sentó en el sofá a sus espaldas y tomó un vaso de agua que Suni en medio de la reprimenda, fue rápidamente a buscar. Con su hija aun lado y la mirada fija en la mesita ratona, tomó unos segundos para volver a hablar

—Se que he sido un padre deficiente para los tres—empezó volviendo el rostro hacia su única hija mujer y acariciando sus mejillas— traté de hacer mi mejor esfuerzo, pero fallé terriblemente y estoy muy anuente de mis errores... su madre seguramente estaría muy decepcionada de mi—

—Papá...—soltó Jisoo compungida

—Sus abuelas maternas vendrán esta noche... y no quiero preocuparlas evidenciando mis equivocaciones, en ausencia de su amada hija. Sé que no solucionaran sus diferencias solo porque yo se los pida, pero al menos hoy y mañana, tratemos de funcionar como una familia normal... háganlo por su difunta madre—

El mayor se levantó auxiliado por su hija encaminando hacia la escalera, se detuvo a un contado del menor y masajeo su hombro con una sonrisa apagada.

—A pesar de lo que pienses, yo en verdad estoy feliz de que hayas regresado Yeonnie—

Ambos hermanos observaron la figura de su padre subiendo las escaleras, ahora siendo escoltado también por Suni, hacia sus habitaciones. Fue entonces cuando el menor puedo notar la presencia de YoonGi en una esquina del living, recostado de la pared, con los brazos cruzados observándolo todo.

—¿Qué fue lo que sucedió contigo Yeonnie? — La voz de Jin hizo que el menor enfocara sus ojos en él nuevamente —¿Dónde quedó aquel cachorro que correteaba tras de mí siempre? ¿En qué momento dejé de ser tu ídolo, para convertirme en tu enemigo? —

El muchacho lo escuchó y con una sonrisa triste desvió su mirada

—Es extraño que lo preguntes después de tanto tiempo hyung, porque parece que no solo mamá e Irene murieron en aquel accidente, pero tú nunca lo notaste—

YeonJun volteó caminando hacia el chofer, para tomar su maleta y subir con calma las escaleras, bajo la atenta de su hermano. Al hacerlo, Jin desvió su vista hacia la figura de NamJoon en la segunda planta, inclinado sobre el barandal. Se miraron fijamente con Jin apenas conteniéndose, pero pronto el menor de los dos encaminó hacia su habitación.

Jin revolvía su cabello con incomodidad y respiraba profundo. Su cabeza y sus emociones eran un caos, pues no solo era el estrés de su inminente compromiso o la intolerable presencia del infeliz NamJoon después de la reunión con su padre, ahora también debía lidiar con el resentimiento de su hermano pequeño. Se sentía rebasado

—Dime que encontraste algo para detener ese maldito compromiso —soltó directo a YoonGi caminando hacia él

—Ojalá pudiera decirte que sí— respondió el chofer meneando la cabeza en negación y vio como el mayor cerraba los ojos con su lobo bastante alterado— Lo que tengo, que puede ser útil a la larga, pero en este momento no creo que haga nada por pararlo —

—¡Mierda! —

—¿Qué sucede?... ¿Por qué te veo más abatido que cuando me fuí y no creo que sea solo por YeonJun? —

Jin trató de serenarse y mirándolo sonrió a medias, al notar el evidente cansancio de su guardaespaldas, pues estaba más pálido que nunca. Creyó innecesario abrumarlo después de semejante viaje.

—Las cosas empeoraron YoonGi... pero mejor hablamos de eso mañana en la oficina, mis abuelas están a punto de llegar...—

—¿Cómo que empeoraron? —interrumpió el menor con el ceño fruncido—¿Qué pasó? —

El guardaespaldas lo miraba fijamente y Jin negó

—Mañana hablamos Min, las cosas no van a mejorar si lo hablamos ahora, cuando solo necesitas descansar —Jin colocó su mano en el hombro ajeno, girándo al chico para caminar con él hacia la salida, mientras el menor lo miraba con una ceja alzada —porque amigo tengo que decirte que te ves pésimo—

Y YoonGi decidió no insistir, no solo porque era cierto que se sentía agotado de París, sino por la obvia necesidad del mayor por desviar el tema.

—Debe ser porque el bastardo de mi jefe, me mandó a París en un viaje de 48 horas y no he dormido una mierda—comentó dramático y Jin rió

—Definitivamente es un bastardo... con razón Jackson lo odia—Ambos rieron, mientras llegaban a la salida—descansa amigo y gracias por todo lo que haces siempre por mi—

—¿Que gracias? cuando esto acabe, si logramos sacar tu trasero de este lio... tendrás que pagarme un viaje de tres semanas a París, con mi omega —

— Si logramos eso, soy capaz de darte vacaciones—respondió bromista

—Eres un infeliz abusivo—lo insultó con falsa indignación—nos vemos mañana, pero dile a Samuel que te lleve... esta noche planeo compensar a Jackson—advirtió finalmente moviendo sus cejas con una sonrisa de lado, que el mayor correspondió negando.

—Sin detalles por favor—

La risa de su guardaespaldas fue lo último que escuchó antes de cerrar la puerta y llenar sus pulmones en agotamiento. Su panorama se había vuelto tan obscuro y aun en medio de las peores situaciones, sus amigos siempre le sacaban una sonrisa

—Sigo sin entender cómo es que estas aquí el día de tu compromiso... sobre todo porque tienes a tus bellas abuelas en la casa—

—Te recuerdo que también son tus abuelas—respondió Jin con dureza y sin dedicarle una sola mirada a su primo. Su ánimo estaba pésimo.

Si ya todo pintaba mal, la llegada de sus abuelas no mejoró la situación. Los interrogatorios como: ¿porque un compromiso tan acelerado? ¿cuánto tiempo habían salido? ¿quién era su prometido? Entre otros, fueron la tónica de toda la maldita cena y no lo dejaron ingerir un solo bocado en paz. Si a eso le agregamos, su padre respondiendo incómodo lo que podía, Jisoo sumergida en su mundo, YeonJun apático y NamJoon con su asquerosa amabilidad, habían logrado convertir aquella reunión familiar en todo, menos algo agradable. Al final se retiró a sus habitaciones, exhausto y más molesto que nunca.

—Son tías abuelas es distinto—aclaró, pero al no tener respuesta de su primo continúo—con razón YeonJun te odia, siempre le dejas el paquete —Jin resopló, pero no desvió la vista de su laptop—Yo también te odiaría si me dejaras a mis abuelas todo el puto día...—vió como su primo apretaba un lápiz en su mano con mucha fuerza—y la pobre Jisoo... —

—¡¿Quieres callarte de una jodida vez Jimin?!—interrumpió ya harto del monologo del otro—no puedo ni escuchar mis pensamientos contigo hablando sin parar —

—¡La puta madre al fin reaccionas!... me costó media hora —

—Eres un imbécil—

—No, el imbécil eres tú que esta que se lo lleva la mierda, pero pareces un maldito tempano de hielo — el mayor lo miró exhalando con fuerza y Jimin continuó en el mismo tono—Jin sal de aquí, pégale a algo, folla con alguien, pero haz algo—se miraron un momento y el menor adoptó un tono más conciliador—hermano, tu aroma tiene al borde del pánico a la mitad del personal, incluso Jennie que conoce tu carácter, está al borde de las lágrimas... tampoco hablas conmigo...y Jin conmigo no tienes que disimular—

El mayor escuchó todo y cerró los ojos con frustración

—¡Maldita sea! —gruñó levantándose del escritorio, para luego rodearlo y caminar hacia la ventana

—Eso está mejor—

—Estoy en mi límite y YoonGi que no llega... ¿qué mierda se ha creído? —

—Deja que el hombre folle, estas arruinando su lazo—Jin volteó a mirarlo con extrañeza—no me mires así, no es que a mí me importe, pero a él sí—

Como hablando del diablo el guardaespaldas tocó la puerta y fue le mismo Jimin el que atendió para abrirle

—Buenos d...—

—¿Como te atreves a dejar a tu jefe esperando, por follar con tu omega? —soltó a la primera el pelirosa mirando con el ceño fruncido a YoonGi

El chofer le respondió con una mirada fría, mientras se adentraba en la oficina con las manos en los bolsillos y veía a Jin entornar los ojos.

—Voy a pasar por alto tu intromisión en mi vida íntima, solo porque ese ni siquiera fue el motivo por el que llegue tarde—terminó diciendo el guardaespaldas tirándose desganado en uno de los sillones de un puesto de la salita de estar.

Los primos se acercaron sentándose también en la salita, Jin frente al recién llegado y Jimin en sofá de tres puestos, sin disimular el interés por la situación del guardaespaldas. Incluso Jin, que no estaba de ánimos, siempre encontraba entretenido escuchar sus dramas con su reactivo omega. Y YoonGi no tuvo más que satisfacer el morbo de sus jefes.

—Me dejó durmiendo en el sofá... y pues allí no escuché la alarma—el chofer se inclinó mirando a la nada, apoyó un codo sobre una de sus rodillas e hizo un mohín con sus labios— ni siquiera aceptó los chocolates—Los otros dos contenían apenas las ganas de reírse mirándose entre ellos, y YoonGi por fin enfocó su vista en ellos—adelante pueden reírse, par de idiotas—

Las carcajadas inundaron la habitación y el aludido solo pudo suspirar con cansancio ¿que más le tocaba? Sabía que tendría que iniciar de cero nuevamente, para reconquistar a Jackson.

—Y todavía tienes el descaro de sermonearnos a Jin y a mí por no querer un lazo—comentó Jimin riendo con burla y YoonGi torció el gesto

—Espero que algún día, me toque a mí burlarme de ustedes—

—Si se trata de mí, olvídalo—aclaró Jimin sobrado.

E inevitablemente el comentario concentró las miradas en Jin, acallando las carcajadas inmediatamente y llevando los pensamientos de los tres al mismo punto, el compromiso.

—Te agradezco por hacerme reír, aunque sea a costa tuya amigo, pero es hora de pasar a temas más serios—advirtió Jin y sus acompañantes asintieron

— ¿Vas a decirme que hizo SunYoon esta vez? o más bien ¿que pide? porque sé que tiene que ver con él—soltó YoonGi de repente y Jin sonrió por su perspicacia

—No se te escapa nada Yoon, pero prefiero que hablemos de tu investigación primero, me interesa más—

—Como quieras Jin—dijo encogiéndose de hombros y haciendo una pausa para mirarlo— pero te repito que lo que voy a contarte, no podrá detener tu compromiso...—

—Sin pre-ámbulos Min...que ya soy un niño grande—

— Ok... Para empezar, verificar la versión del rubio aquí en Corea fue muy difícil, SunYoon controla muy bien sus movimientos. Lo único que logré encontrar, fue que la mano del tipo ayudó a convertir una pequeña clínica privada sin nada de relevancia hace 22 años, en uno de los centros médico más importante del País hoy en día. Les hablo del Centro Médico Doum—

—¿SunYoon metió su mano en Doum? —preguntó asombrado Jimin, pues el centro era uno de los más renombrados hospitales privados de Seúl

—Al parecer aportó una enorme suma de dinero, para que un tal Dr Harry Wong ocupara su dirección médica y casualmente el tipo era obstetra. Lastimosamente se retiró hace más de 10 años y murió recientemente. Y en el nosocomio, no existe ninguna documentación de nacimientos previos al cambio de clínica a hospital. Por ende, aquí en Seúl no había nada.

—Entonces... fue por eso que me pediste el viaje a París—no era una pregunta, pero el menor asintió

—Necesitaba investigar a los supuestos abuelos franceses del chico, que dijo se lo habían llevado—el guardaespaldas se inclinó hacia el frente—Es cierto que los suegros de SunYoon vivián en Francia, pero extrañamente siempre mantuvieron bajo perfil a pesar de haber tenido mucho dinero, y a su muerte uno seguido del otro, obviamente por el lazo que los unía, no tenían nada. Solo una vieja casona a casi dos horas de Paris heredada a su hija, en otras palabras, la omega de SunYoon. Pero que hace cuatro años la vendió... —

—Entonces allí tampoco había nada—soltó Jimin desanimado

—Mas o menos...porque el comprador y actual dueño de la casa es un tal Vante. ¿Les suena el nombre? — preguntó YoonGi con una sonrisa de lado y Jin se ubicó en el personaje

—El artista— confirmó. Jimin iba cuestionar hasta que también recordó el nombre. Sin embargo, el mayor volvió a intervenir —Reconozco que es recurrente Yoon pero, ¿Que de raro tendría que la omega de SunYoon venda su casa a un artista? Más, si este es tan afamado como dicen—

—Es cierto... hasta yo he oído hablar mucho de él y no soy muy asiduo al arte—

—Mejor dicho, no sabes una mierda de arte Jimin, solo vas a una galería cuando quieres follarte a alguien—comentó Jin sincero y el menor frunció el ceño

—¿Y qué me dices de ti? solo regalas un puto cuadro, cuando buscas compensar que no quieres nada con ellas—

—¿Podemos volver al punto? les recuerdo que por esto, estoy durmiendo en el sillón de mi casa—reclamó serio el guardaespaldas y cuando captó la atención de los otros dos continúo—para mí las coincidencias no existen, lo sabes bien. Así que me dedique a investigar al tal Vante, que obviamente es un seudónimo. Resulta que el artista es el mayor misterio de la cuidad de París. Nadie lo ha visto, ni se sabe cómo es y ha rehusado todas las entrevistas que le han querido hacer, desde hace cuatro años que se dio a conocer. Incluso fui a su galería y aunque creo que es fotógrafo, no había una sola imagen de él ni por accidente. Llegué a pensar que mi visita a ese lugar había sido en vano, que hasta que investigué el hospital.

—¿Cuál Hospital? —preguntó Jimin

—El Hospital que también es beneficiario de la fundación del muchacho— comentó Jin

—Así es —respondió satisfecho YoonGi de que el mayor estuviera concentrado—Supuse que siendo el Malades justamente un hospital de niños, podría haber sido el lugar donde el chico había recibido el tratamiento cuando se lo llevaron a Francia y por eso era beneficiario de su fundación. Pero cuando ingresé a su sistema, no encontré registros de ningún Kim Taehyung que se haya atendido en el lugar —

—Entonces el chico mintió— soltó Jin con voz fría

—O ese no era el hospital—contradijo Jimin

—Ninguna de las dos, pues Kim Taehyung nunca se atendió allí, pero Kim JungKook sí—YoonGi sonrió de lado y los primos volvieron a mirarse—Parece que un chico con el mismo nombre de tu prometido, tuvo múltiples hospitalizaciones en ese lugar, la última hasta hace 7 años. No hay registros de ellas, los expedientes están sellados, así que no tengo pruebas de que sea el mismo, pero estoy casi seguro que lo es—

—En verdad es poco probable que justo dos Kim JungKook tengan algo que ver con una misma familia —

—Pero YoonGi, tu mismo dijiste que no encontraste registros de viajes antes hecho por el muchacho, no puede ser él— argumentó Jimin

—Solo puedo suponer que SunYoon nunca dejó que el niño, o su madre usaran líneas aéreas comerciales, siempre fueron vuelos privados, por eso no hay bitácoras oficiales—

—Debe existir una forma de verificarlo—

—Y yo la busqué, intentando rastrear el origen del dinero que pagaba esas hospitalizaciones, pero no resultó. Los fondos provienen de una cuenta bloqueada en todos los sistemas, en otras palabras, imposible de rastrear—

—¿Una cuenta fantasma? — preguntó Jin y vio a YoonGi negar en duda

—No sé si es fantasma, porque está legalmente protegida, pero definitivamente no hay forma de rastrear ese dinero—

—Sin embargo, tu estas seguro de que es él—Jin vió al chofer asentir—Piensas que el francés patrocina ese hospital por su hermano... y de cierta forma eso justificaría porque está obsesionado por protegerlo—

—Aun así, no tiene sentido ¿Porque SunYoon pondría tanto empeño en cubrir el rastro del gasto de su propio hijo? —

—¿Por qué te extraña Jimin? Conoces a SunYoon. Lo más probable es que no quisiera que lo vincularan a la enfermedad de su hijo, solo por estatus—

Esa respuesta de Jin tuvo mucha lógica para el menor, sabiendo como trataba al chico—Jodido animal—Jimin cada vez se sentía más irritado por aquel alfa y ahora menos que nunca se arrepentía de su loca jugada.

—Además, en esto hay demasiado misterio por algo que no debería ser sospechoso—agregó el chofer— Porque no es solo que el alfa haya utilizado una cuenta fantasma para cubrir la enfermedad de su hijo, es que esa misma cuenta haya pagado también los gastos de otro paciente hospitalizado de forma permanente en ese lugar—

—¿Qué dices? ... — preguntó nuevamente Jin frunciendo el ceño

—Verán...ese hospital maneja algo llamado Home Care, es como servir de casa para el paciente, ya sea porque su familia lo quiere o por condición médica—

—Espera, déjame ver si entiendo ¿Estás diciendo que quién pagaba la cuenta del supuesto hijo de Kim, pagaba la de alguien más que vivía allí? —Jimin abrió mucho los ojos— ¿Cuántos tiempo? —

—Según mis cálculos, cerca de 10 años— los dos primos apenas y parpadeaban—y eso mis amigos, es mucho dinero—

—Entonces definitivamente no es el mismo chico. SunYoon es un maldito egoísta, jamás gastaría su dinero de esa forma, en alguien que no sea él mismo —

—Puede ser Jimin—admitió YoonGi— a menos que sea alguien importante para él y por eso investigué al segundo beneficiario de esa cuenta, resultando ser aún más sospechoso—

—Explícate Min—pidió Jin queriendo llegar al fondo del asunto.

—De este paciente (x) tampoco había información disponible, ni siquiera un nombre y su condición solo la manejada un tal Dr Phillippe Allard, un médico genetista muy galardonado. Los últimos pagos en su beneficio datan de hace 6 años, curiosamente un año después de que Kim JungKook dejara de frecuentar el hospital —

—Eso aun no dice nada Yoon—replicó Jimin

—Lo sé, así que siguiendo mi instinto, fui al mismo hospital, suponiendo que al haber sido ambos pacientes constantes en el lugar, mucha gente los conocería y podría darme información. Me equivoqué, pues extrañamente apenas los nombraba, todos sufrían de sordera o amnesia —dijo el guardaespaldas malicioso— Así que solo me dediqué a recorrer el lugar, notando en cada pasillo, un cuadro del tal Vante y las pocas personas que quisieron hablar, me dijeron que eran donaciones filantrópicas del artista—

—Demasiado bondadoso, pero sobre todo demasiado recurrente—comentó el mayor y YoonGi sonrió por ello

—Y por eso continué mi recorrido, llegando a una sala destinada a recuerdos de pacientes y personal del hospital, encontrándome con un retrato de un médico que llamó mi atención, pues la dedicatoria decía Dr. Allard. Estaba pintado por un paciente, obviamente un niño, pero era impresionantemente bueno y me parecía extrañamente familiar. Mirando con más cuidado entendí por qué. La marca de agua menos sofisticada y bastante disipada por el tiempo, decía...—

—Déjame adivinar... "Vante" — completó Jin

—Exacto—

—Esperen un momento... ¿Vante es el paciente (x)? — preguntó Jimin parpadeando—¿SunYoon le pagó esa hospitalización a un artista? —

—Supongo que en ese entonces no se hacía llamar Vante ¿verdad Yoon? —

Jin y YoonGi se miraban con intensidad y el menor volvió a mostrar su típica sonrisa de lado. Jimin en cambio los miraba confundido al inicio, pero pronto entendió el trasfondo de aquella pregunta.

—No puede ser—

—Yo tampoco estaba seguro, pero empecé a unir cabos cuando recordé que el tal Jung Hoseok supuestamente era...—hizo una pausa sin querer y luego aclaró su voz— era enfermero.

YoonGi no podía evitar la incomodidad que le generaba solo nombrar a aquel conflictivo omega. Sin embargo, los otros dos no lo habían conocido como él, sobre todo Jin...

—¿Jung Hoseok? —

—El acompañante del rubio —respondió serio

—¡Ohh! ¡el omega del aroma sexy! — soltó Jimin tronando sus dedos sin notar como YoonGi apretaba la mandíbula—oye ¿y tú como sabias su nombre? —

El Guardaespaldas pasó de la irritación a la turbación por la pregunta y todas las miradas recayeron en él, sintiendo súbitamente su rostro arder.

—L-lo investigué—

—Es que dijiste "recordé", como si lo hubieras sabido antes—

—Seeh Yoon, sonó como si lo conocieras—secundó Jin a su primo—y no por mí, porque yo n...—

—¡¿Podemos volver al punto?! —soltó ofuscado y los otros dos se miraron extrañados, entonces carraspeó nuevamente y retomó— resulta que sí es enfermero y tampoco nadie habla de él, ni hay datos suyos, pero parece que realizó su práctica en ese hospital cuando estudió y luego solo trabajó un año. Renunció casualmente hace 6 años—

— Me estas jodiendo, ¿el tipo es su enfermero? —peguntó pasmado Jimin viendo al guardaespaldas asentir

YoonGi estaba seguro de eso. Aquel omega sabia ocultar muy bien sus emociones, pero el chofer recordaba claramente la leve ansiedad del muchacho, cuando le había hecho la misma pregunta.

—Pero para asegurarme, fui a la casa de Kim Taehuyng en Le Marrias y aunque obviamente no podía entrar, por sus vecinos supe que Jung no va regularmente a esa casa—

—No entiendo... enton —

—No va regularmente...porque él vive allí— interrumpió YoonGi al menor usando nuevamente su tono frío y eso no pasó desapercibido para los otros dos—según los vecinos, la casa fue vendida hace 15 años, pero estuvo deshabitada hasta hace 6, cuando Kim Taehyung y Jung Hoseok se mudaron. investigando en el departamento de urbanización, encontré copias de la compra- venta de esa casa, con referencias de la cuenta que desembolsó el capital... ¿adivinan cuál es la cuenta? —ninguno de los otros dos contestó, pero la respuesta estaba clara — así es, la misma que pagó las hospitalizaciones del paciente (x) y Kim JungKook —

—Hijo de la...—

—En otras palabras Jin: Vante, el gran artista, ese paciente que estuvo 10 años en un hospital y Kim Taehyung, son la misma persona. No tengo ni una sola prueba concreta, pero estoy seguro de ello  y si realmente es el bastardo de la omega de SunYoon, tu rubio tiene más motivos para odiarlo de los que te dijo—

Jin se levantó de su lugar, dándoles las espalda, para mirar hacia el ventanal. Procesando toda aquella información, mientras Jimin hacia los mismo aun sentando en estupor. El chofer volvió a hablar siguiendo al mayor

—El chico no solo estuvo a punto de morir por culpa de ese alfa, pasó casi toda su vida en un hospital alejado del mundo, obligado a vivir en el anonimato y aun hoy lo hace, a pesar de ser un gran artista. Pero lo más sorprendente de todo, es que SunYoon lo haya seguido manteniendo todos estos años través de esa fundación. La pregunta es ¿Por qué? — Jin giró para encararlo—Después de todo lo que hizo el alfa para supuestamente desparecerlo, porque siguen unidos. Encontrar lo que los une, puede ser la llave para destruirlo, empezando por esa cuenta—

—Dijiste que no se podía rastrear—

— Sabes que no hay nada que yo no pueda conseguir, pero para eso necesito tiempo—

—¿Cuánto?

—El suficiente para usar todos mis recursos, buenos y no tan buenos—

—Pero Jin no tiene más tiempo Yoon, él tiene que marcar al chico hoy—intervino Jimin de pie a espaldas de YoonGi, llamando su atención

—¿Qué? —

—Lo que escuchas YoonGi, hoy no será una simple cena de compromiso. SunYoon quiere que marque al chico y lo reclame como mío, delante de ambas familias—explicó Jin

—Eso es una locura—soltó YoonGi sonriendo incrédulo, pero pronto su gesto serio apareció— pero tú lo estas contemplando, así que hay algo más... suéltalo—

—NamJoon notarió una demanda por disolución de matrimonio en contra de Jisoo—respondió Jimin— en otras palabras, está pidiendo la anulación de su matrimonio, no un divorcio—

—Yo no entiendo de cosas legales, explícate—

YoonGi sacudía su cabeza y fruncía el ceño en frustración, solo entendiendo que el cuello de Jisoo corría más peligro y Jimin suspiró caminando hacia el escritorio de Jin recostándose de él.

—En el divorcio al haber estado unidos, el fallo ordena un tiempo para romper el lazo y que las partes busquen otras parejas—explicó Jimin tomando un pequeño péndulo del escritorio— en la anulación no, porque se entiende que nunca hubo unión real y el fallo no otorga ningún tiempo. El rompimiento del lazo puede ser en el momento en que alguna de las partes quiera, sin reclamo alguno—

—Y eso deja a Jisoo a merced de NamJoon—agregó el mayor, mientras YoonGi se dejaba caer en el sillón más cercano, sin poder creérselo

—Pero eso no será inmediato, las cosas con jueces demoran—

—No cuando es disolución, solo se necesitan las pruebas que lo demuestren y NamJoon las tiene. En una semana probablemente se daría el fallo, si uso todas mis mañas, máximo dos —soltó Jimin

—¡No se puede ser tan desgraciado en la vida! —soltó YoonGi azotando su puño contra la mesita ratona, pero nuevamente volvió el rostro hacia Jin — y no solo es por Jisoo Jin, es por ese chico. La marca es algo íntimo entre dos personas que se unen, y lo que él te pide es una salvajada, tú no puedes marcar a ese niño así—

—No hay mucho que pueda hacer Yoon, si no lo hago Jisoo pagará —

—Entonces llévatelo, hazlo como debe ser—

—¿No conoces a SunYoon acaso? Sabe que si me da solo una oportunidad, la voy aprovechar. Jamás aceptará, él prefiere tener su pie en mi cuello para evitar sorpresas—

Los pensamientos de Jimin se perdieron en ese último dialogo y YoonGi razonó frustrado, que el mayor estaba en lo cierto

—Que no le importe lastimar más a Jisoo no me extraña, pero le haga una cosa así a su propio hijo es inaudito. Ningún omega merece ser reclamado de esa forma— dijo YoonGi negando con voz apagada, sin notar como Jimin apretaba los puños. Porque después de conocer mejor al niño, no veía justo que sufriera de esa forma.

—Hoy me convertiré en el peor alfa del mundo, pero te juro que aunque marque al niño, su padre pagará—

—¿Qué quieres decir? —preguntó el pelirosa saliendo de sus propios pensamientos

—¿Dónde está el francés ahora YoonGi? —

—En el Lotte, están hospedados allí desde que llegaron el lunes, mis hombres no han abandonado el lugar—

—Dices que necesitas tiempo para rastrear la cuenta, pero si el principal afectado colabora ¿crees que sea menos? —

—Supongo que sí—

—¿Que estás pensando Jin? —volvió a preguntar su primo

—A partir de hoy tendré nuevo cuñado, creo va siendo hora de que volvamos a vernos—


Holaaaa Chummys, siento mucho mi ausencia pero han sido jornadas duras y mas estrés del que generalmente lidio😭😭😭... y estas historia en particular me demanda mas.

Hoy será doble actualización también, para compensarlos medianamente por que sé que han esperado demasiado y agradeceré  si a pesar de todo la siguen leyendo 😥😥😥

Llegamos a  un punto inflexivo de la historia y partir de aquí todo será en cadena, espero estar a a la altura... disculpen mis faltas ortográficas y mi ausencia, pero entenderán que como escritora novata no quiero darles algo feo... por lo menos quiero que sea interesante. Continuamos...


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