POV JIMIN

Desde aquel incidente en el salón de prácticas, todo había cambiado. Se cruzó aquella línea la cual creí jamás se rompería... y es que nunca pasó por mi cabeza el hecho de que algo como aquello podría suceder. Jamás creí posible que Jung Kook se enamoraría de mí y terminaría confesandose, mucho menos imaginé que se atrevería a besarme sin importarle las consecuencias de ello. Ya no había vuelta atrás. 

   Me dejé caer en mi cama, llevando mi vista hacia el techo. Mi mente era un desastre últimamente, no podía evitar  pensar en todo lo sucedido y más en la actitud que estaba tomando hacia Jung Kook. El remordimiento de mi actitud y palabras que dije el día de mi cumpleaños no me dejaban tranquilo. El ver su rostro cada que le evitaba o rechazaba... Dolía, realmente me dolía, más sin embargo era algo que debía hacer aunque una gran parte de mí se opusiera.  

   Solté un gran suspiro y me giré, quedando de lado en dirección a la ventana.

   Los demás no saben sobre la situación tan delicada en la que nos encontramos Jung Kook y yo, y no quiero que lo sepan. No deseo que las cosas se compliquen aún más, es por eso que le sugerí que olvidasemos todo desde el primer momento en que se cruzó la línea, desafortunadamente él no quiso hacerlo y sólo hizo que todo resultara más complicado. 

   Y es que... mentiría si dijera que no siento nada por él, en verdad lo haría; pero... ¿cómo quiere que le corresponda, sabiendo nuestra posición de Idols y sobre todo en la sociedad en que nos encontramos? No es para nada fácil, es todo lo contario. El odio y discriminación que recibiriamos sería inimaginable, sobretodo por parte de nuestra gente la cual aún es demasiado conservadora ante ese tipo de temas, y además... ¿qué pensarían nuestros padres sobre ello? Es algo que me aterra, todo lo que menos quiero es decepcionarles. Han dado tanto por mi y apoyado para que esté donde estoy ahora mismo, arriba de los escenarios donde siempre había soñado. 

   Y siendo sincero, tiendo a ser alguien muy sensible a lo que los demás dicen sobre mí. Se puede notar bastante con mi pérdida de peso en este tiempo. Siempre trato de estar al pendiente sobre lo que se dice de mi en las redes sociales, y ver que comentaban sobre mi rostro, el cual se veía gordo por mis cachetes, me hizo sentirme bastante mal, haciendo que quisiese bajar de peso lo más pronto posible, por lo cual comencé a dejar de comer... obteniendo el resultado que se puede ver ahora en nuestro último Comeback. Sabía que estaba mal, mi salud se vería afectada pero no podía  evitar también sentirme bien al respecto, al ver los resultados y ver mi rostro cómo había cambiado y mi imagen, más aún al ver como todos hablaban sobre mi y lo bien que me veía... aunque no faltaron ciertas Army's, las cuales se dan cuenta de todo, twitteando sobre su preocupación de mi bajo peso a como me veía la última vez. Por esa parte también me hacia sentirme bastante mal.

   En fin, se podía ver claramente que todo era un desastre conmigo. 

   Tallé mis ojos y alboroté mi cabello para tratar de dejar de pensar en todo lo que me tenía hecho un caos. Lo bueno es que me encontraba solo en la habitación, dándome aquello un poco de tranquilidad y espacio. Compartía habitación con J-Hope, él al parecer estaba tonteando por ahí con los demás, así que no sabía cuándo vendría.

   Tomé mi móvil para revisar si tenía algún mensaje o algo, tampoco tenía ánimos para vagar por Internet así que si no veía nada en mi bandeja, dejaría mi celular y trataría de dormirme o hacer alguna otra cosa para distraerme. Comencé a revisarlo y vi que en el grupo en el cual estamos todos habían enviado algunos, diciendo que si ibamos por algo de comida o que si queriamos hacer algo juntos. Me quedé unos segundos viendo la pantalla, pensando en qué debería responder o si sólo debería de ignorar. 

   Inmediatamente recibí un nuevo mensaje, pero en otra conversación. 

   Era Tae Hyung. 

   Abrí el mensaje, pensando en qué podría ser lo que quería. Posiblemente tratando de convencerme de que saliese de la habitación. Para mi sorpresa fue algo diferente. 

   "Vi que ya viste los mensajes pero... lo siento Jiminnie, pero ya nos fuimos. Creímos que estabas dormido y no queriamos molestarte, aunque tranquilo. Te traeremos algo de comer. Cuida la casa" 

"sticker enviado"

   Hice un ligero puchero al leer aquello, aunque no tenía grandes ánimos de salir si tenía un poco de hambre. Al haber terminado las promociones, no había porqué preocuparse tanto por saltarme las comidas. Dejé mi celular a un costado de mí para levantarme de la cama y estirarme un poco, bostezando. Iría a buscar algo a la cocina, si es que había... 

   Me dirigí a la puerta y salí de la habitación, olvidando mi celular en la cama. Lo que no sabía es que justo cuando salí, un nuevo mensaje me llegó, uno bastante importante. 

    Llegué a la cocina, abriendo el refrigerador buscando algo que pudiese comer. Al final lo único que pude encontrar fueron ingredientes para prepararme un sandwich. Preparé dos y cuando los tuve listos me senté en la mesa para comenzar a devorarlos. Me sentía muy tranquilo con el departamento así de solo, iba a aprovechar para relajarme aún más. Cuando terminé los sandwich, me levanté y puse el plato en el fregador para inmediatamente lavarlo. 

   Regresé a mi habitación para tomar algunas cosas, iba a darme una ducha. Me dirigí al baño, listo para relajar mi cuerpo en el agua caliente. Había vuelto a olvidar mi móvil, de igual manera iba a primero dejar mis cosas en el baño y después iría por él para poner algo de música. Me encontraba ya frente a la puerta, tomé la perilla de esta y cuando estaba por abrirla, sentí cómo alguien del otro lado lo hizo para después sentir como mi cuerpo era jalado hacia adentro. Sentí mi rostro chocar con algo, o mejor dicho alguien. Este alguien se encontraba sin camisa, ya que mis manos también habían impactado en su pecho. Traté de pensar en todas las opciones de quién se había quedado aquí, podría ser Suga Hyung, él prefiere quedarse en su habitación o el estudio trabajando en nueva música; pero... sabía que no era él. El pecho con el que había chocado era uno muy musculoso y firme, además las manos de ese alguien me estaban sujetando por los hombros, evitando que hubiese caido directo al piso por el impacto. Eran unas manos grandes y fuertes, unas que conozco muy bien... 

   Tragué seco. Los nervios comenzaron a apoderarse de mi. 

   Mierda.

   Elevé mi vista y me despegué de aquel cuerpo. Confirmando mi sospecha y a lo que temía. 

   —¿E... estás bien? —su voz resonó en la habitación, rompiendo el silencio que había. 

   Quien se encontraba frente a mí, no era más ni menos que Jung Kook. Aquel niño que me tenía hecho un completo desastre. 

Hola, je. 

Aquí les dejo el nuevo capítulo. Es cortito, pero espero que el próximo pueda hacerlo más largo (Ｔ▽Ｔ)

Me disculpo si encuentran faltas de ortografía o incoherencia.

Nos leemos en el siguiente.

Por cierto... Feliz Navidad y Año Nuevo atrasado(*'ω｀*)

Mucho éxito en todo y mucha salud. Que cumplan todas sus metas, les tqm♥(ˆ⌣ˆԅ)