El dolor que sentía en aquellos momentos era indescriptible, mis lágrimas no paraban de salir y me sentía como un completo estúpido. Estaba tan absorto en mis pensamientos que no me di cuenta cuánto tiempo había transcurrido desde que Jimin me había dejado, hasta que sentí como mi celular comenzó a vibrar, fue entonces cuando lo saqué de uno de mis bolsillos de mi pantalón y vi en la pantalla el nombre de Tae Hyung.

   Realmente no me sentía con el valor de hablar, sentía que en cuanto me preguntara cómo me encotraba o qué  había sucedido, mi voz se cortaría y las lágrimas regresarían a mi, sin embargo sabía que tenía que tomar la llamada así que antes de hacerlo respire lo más profundo que pude y traté de calmarme.

   Contesté.

    —¡JungKook! ¿Dónde estás? Hace ya más de una hora que te fuiste, cuando vi a Jimin regresar al restaurante pensé que vendrías con él pero no fue así — calló por un momento— Dime, ¿te encuentras bien?

   Me quedé en silencio por unos segundos.

   —JungKook...

   —Hyung, yo... —Sentí como mis labios comenzaron a temblar.— Esto duele demasiado. Yo... no sé qué debería hacer.

   — Jungkook... soy un pésimo amigo, no sé qué decirte en este momento.— soltó, su voz sonaba triste.— Realmente esperaba que al llamarte me dirías que las cosas se habían arreglado; pero ahora al escucharte... creo que todo fue un desastre.— soltó un suspiro.— ¿Dónde te encuentras?

   —En un pequeño callejón no muy alejado del recinto.

   —¿Quieres que vaya?

   —No, de verdad prefiero estar sólo en estos momentos. Perdón.

   —Idiota, no necesitas disculparte, lo comprendo. Si me necesitas no dudes en buscarme.

   —Gracias Hyung. —dije. —¿Los chicos no han sospechado algo?

   —Tranquilo, ya inventé un par de excusas de las cuáles se creyeron totalmente, así que por ese lado no te preocupes.

   —De nuevo estoy en deuda contigo —sonreí.

   —Está bien, alguno de estos días cobraré esos favores —rió. —Bien, voy a colgar, regresare con los demás.

   —Claro, sólo dame unos minutos más y estaré ahí.

   —No tienes que forzarte, si no estás listo no lo hagas, inventare alguna excusa, no quiero que te lastimes más.

   —Agradezco que te preocupes por mi Hyung sin embargo tengo que comenzar a enfrentar esto para poder seguir adelante.

    Escuché como suspiro para entonces después colgar.

   Gracias a esa llamada me sentía un poco mejor, me puse de pie, limpié mis lágrimas y esperé unos momentos a que el color rojizo de mi rostro sobretodo en mis ojos disminuyera o desapareciera por completo. Cuando me asegure de que todo estaba listo decidí encaminarme hacia el restaurante, mientras lo hacia trataba de que mi mente se mantuviera al margen y no mostrar ningún signo que me delatara sobre lo sucedido con Jimin.

   Me adentre al recinto y respire profundamente antes de llegar con los chicos, a pesar de lo que le había dicho a Tae Hyung, la verdad es que era todo lo contrario, quería huir de ahí y refugiarme en mi habitación.

   Suspire profundamente y llegué donde se encontraban los chicos, ellos bromeaban, bebían y comían. Ninguno de ellos tenían idea de lo que había sucedido fuera de aquí. Desafortunadamente mi vista se dirigió al causante de todo mi dolor que sentía en esos momentos: Jimin.

   Sentí como mi pecho se oprimido de tal manera que dolía demasiado. Él se percató de mi mirada y volteó hacia mi dirección sorprendido y nervioso a la vez por lo que rápidamente apartó su mirada y continuo con lo que estaba haciendo hace unos momentos.

   Ignore lo mejor que pude aquello y el dolor en mi pecho, regresé a mi asiento que hace rato se había quedado en el olvido y simplemente traté de actuar lo más normal que pude. Mi inexistencia ante los ojos de Jimin.

   Así fue durante todo el tiempo que estuvimos ahí, celebrando.

   Había olvidado mencionarlo pero ese día era el cumpleaños de Jimin.

Desperté en mi habitación, un tanto desconcertado, mi cabeza dolía un poco así que me llevé las manos al rostro y solté un suspiro.

   Fue entonces cuando recordé todo lo sucedido.

Anoche, después del acontecimiento con Jimin y el haberme quedado en aquel callejón durante algunos minutos tratando de tranquilizarme, decidí regresar al restaurante, después de mi gran actuación para ocultar el suceso de nosotros, hubo un momento en el cual cada miembro felicitó a Jimin y le dio un abrazo... Fue lo peor que pudo haber sucedido.
   Cuando mi turno llegó, mi felicitación fue muy breve ya que quería terminar lo más rápido posible aquello sin embargo al momento en que iba a abrazarlo porque los chicos estaban jodiendo con ello hubo algo catastrófico.

   Él, me rechazó, una vez más.

   Escuchar de sus boca las palabras "no quiero un abrazo de él" creo que fue un dolor que no tiene explicación.
   Después de esas palabras aguante lo mejor que pude para no llorar y salir de ahí. Los chicos se sorprendieron pero él ya tenía planeado qué diría para que no sospechaban nada y tuvo éxito. Tae Hyung se acercó a mi y apretó mi hombro para darme apoyo.
   Una vez que regresamos al departamento, no dude ni un segundo y vine lo más rápido que pude a mi habitación, cerré con llave y me tire en mi cama sintiendo como las lágrimas volvían a apoderarse de mis ojos e inundar mi corazón. Dolía. Sentía como sí me estuviera rompiendo en miles de pedacitos. Y así estuve hasta que en algún punto me quedé profundamente dormido.

   ¡Hola!
He aquí el nuevo capítulo, siendo sincera creo que estoy haciendo demasiado sentimental a Jungkook, no sé qué opinan ustedes. Sin embargo lo estoy haciendo de esta manera porque es la única forma en que puedo imaginarlo afrontando este tipo de situaciones, sabemos que un amor no correspondido es demasiado doloroso y Jungkook es sentimental si o si. A pesar de su apariencia y de como se muestra arriba del escenario, realmente es un bebé jajaj.
Bueno, espero que les guste el capítulo y espero que me lo hagan saber en los comentarios.

ME DISCULPO SI ENCUENTRAN FALTRAS DE ORTOGRAFÍA O INCOHERENCIA EN EL CAPÍTULO.