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Quiero más.

Es demasiado esta situación, estamos teniendo una serie de besos diferentes, húmedos, con lengua, lento, piquitos, con mordidas y en su mayoría muy intensos y descontrolados.

—Me gusta estar entre tus piernas, puedo sentir lo caliente que se encuentra contra mi clara erección. —Susurra con una ronquera que me desestabiliza la cabeza y alborota las hormonas— Pero no lo haremos hoy. —Sus manos se ubican en mis rodillas y las deslizan lentamente sobre mis muslos.

—¿Por qué no?

—Novia mía, no somos santos y nos hemos tocado, pero te seré directo, no creí que fueramos a tener relaciones en un momento en el que me confiesas que me amas y donde no me encuentro preparado. —se separa de mi tacto, casi reprocho por su alejamiento, pero me abstengo cuando relame sus labios y lleva sus manos a los botones sueltos de mi vestido donde se ve mi brasier, comienza a abotonarlos.

—Estoy lista.

—Necesitamos protección, cuyo no tengo y se consigue en una farmacia, tengo unos que dieron en clase de educación sexual, pero ya caducaron y no voy a exponerte a un posible embarazo.  —Me gusta la manera en la que termina de colocar los botones con su nerviosismo y deseo, él me desea.

—Eres muy responsable. —Le digo, aunque sus manos aún se mantenían en el último botón, deslizó sus dedos sobre las cimas de mis pechos, me gusta que lo haga, me gusta que Goku me toque.

—Pero puedo hacerte gozar de otras maneras, ¿lo sabes verdad? —Ante su mirada intensa y voz lo supe, miré la puerta, sé que tiene seguro, estamos solos.

—No tengo una bonitas bragas. —Besa mi oreja haciendome suspirar— Deben estar húmedas...

—Interesante... Muy interesante, dime más. —Me acomodo entre las almohadas mientras sus besos van desde mi cuello y baja mucho mas.

—No bajes... Está muy caliente. —Suspende la falda de mi vestido, sigo diciendo incoherencias, pero lo cierto es que no puedo pensar con claridad cuando deja un beso sobre mi intimidad encima de mis bragas.

—Estás muy mojada, novia mía. —Sopla, se me escapa un gemido y cubro mi boca, su padre y hermano están en casa.

Exhalo y la vista se me nubla cuando me quita las bragas y no pierde tiempo en devorarme con su boca, silencio mis gemidos lo más que puedo, su lengua me enloquece con cada caricia, chupa y llega a un punto muy sensible mio que me hace arquear la espalda, una mano esta en mi cadera sujetándome y la otra en mi pierna que es subida al instante sobre su hombro, no puedo negar que  me excito demasiado con el pensamiento de verlo desnudo, sobre mí, dándome mucho de él al punto de hacerme delirar más de lo que ya me tiene.

No puedo, quiero más, y semigrito cuando su lengua entra en mí, es mágico y delicioso, estoy por llegar a mi límite, se percata y se aleja, eso me alarma, pero luego lo veo bajarse el pantalón aunque no veo cuando lo hace con su bóxer porque sus labios se posan sobre los míos y gimo al sentir su miembro acariciando mi intimidad, amenazando con entrar, lo quiero, pero solo se menea sobre mí excitándome más y para aumentar baja una mano hasta mi vagina y juega con mi entrada en caricias con sus dedos.

Abrazo fuerte su espalda, beso de manera torpe sus labios y se me escapa muchas veces su nombre cuando me vengo entre sus dedos, lo veo a los ojos, estos momentos son pocos, pero muy intensos.

—No quería venirme sobre tu vestidi, lo siento. —murmura entre una agitación que no es única.

Me rio con nerviosismo percatándome del caliente líquido sobre una parte de vestido, muy bien, eso no lo esperaba.

Cuando logramos calmarnos, limpiarnos y cambiarnos, salimos de su habitación, según él a hacer unas compras, y ya sé a que se refiere.

Pero en la sala no contábamos que estuviera su madre, otras personas y su hermano, que claramente no saben ocultar que escucharon todo.

Al parecer no fui nada silenciosa.

—Milk y yo estamos saliendo a realizar algunas cosas, luego vuelvo. —Prácticamente huímos.

Goku hace algunos comentarios que me hacen sonrojar y avergonzar, pero conversamos y no es incómodo hablarnos sobre qué nos gustó y qué quisiéramos practicar en nuestra sexualidad, una que aún no hemos hecho completo.

Al llegar a una farmacia, de inmediato la voz se me va cuando estamos en la sección de preservativos.

—Novia mía, ¿quieres utilizar condones femeninos?.

—Me voy más al masculino. —Apenas le respondo, él esta muy calmado y parece divertirse ante esta compra.

—Usaré los condones masculino, hecho, ahora aquí llega y quiero que tú lo escojas. —arrugo el ceño.

—A qué te refieres.

—Mira, hay que elegir el tamaño del condón, así que... Tú lo conoces, eliges el tamaño. —Me da un empujoncito, este loco lo esta disfrutando.

—No creo que sea mediano... —Me escucho decir, Goku le sonríe a unos chicos que están eligiendo preservativos los cuales me escucharon y dijeron.

—Goloza. —Me enseñan el pulgar.

Desconcertada tomo mi decisión y agarro uno, él se acerca y susurra sobre mi oído haciéndome suspirar cuando me muerde el lóbulo.

—Ahora novia mía, no creas que nos llevaremos solo uno, hay que llevar un paquete, pero mira las variedades que hay, debemos experimentar con algunos... Mira, este dice que alumbra en la oscuridad. —Leo el paquete de preservativos que él sostiene y enarco una ceja— Veras mi pene en la oscuridad.

—Oh cállate, eres un sin vergüenza.

—Uno al que le rezas de rodillas y no plegarias novia mía. —lo empujo mientras se ríe, pero admito que también me rio y por un instante recuerdo lo que dijo, algo que no estuvo nada mal.

—Esos se rompen con facilidad, yo te recomiendo estos. —Aparece una persona, Goku le hace pregunta, me incluye y aunque es algo raro escuchar consejos de otra persona nos arriesgamos.

Al final comprar preservativos no es tan malo. Lo malo es encontrar a tu padre entrar a la farmacia cuando tu novio esta guardando la caja de preservativos en la bolsa de papel.

Mierda.

....

JAJAJAJAJAJ NO MAMES, K MALA SUERTE CON MILK, neta no se lo deseo a nadie pero me da risa xd.
Este capítulo contiene más palabras que todas así que espero sus comentarios :3.

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