"...Llego la hora de enfrentar mi vida...darle la espalda al destino...es el momento de mi gran decisión..."

Momentos antes...

Diamante conducía el vehículo de regreso a la ciudad, junto a Serena quien dormía en su hombro en el asiento del copiloto, no le incomodaba en lo mas mínimo la cabeza en esa zona a él, ya que sonreía de vez en cuando al recordar los momentos que había vivido con ella, sin embargo, la conversación con su madre, le dio vueltas en la cabeza-bebes...-suspiro casi inaudible-no seria mala idea...-sonrió, pero tenían razón aun eran muy jóvenes ni si quiera habían terminado la secundaria, se estaciono cerca de la casa de la rubia, intento despertarla, pero le fue inútil, dando le un pequeño beso en sus labios haciendo que Serena abriera los ojos sumándose una sonrisa en su rostro

-perdón, me dormí...

-el viaje era duro, lo entiendo...-contesto acariciando su mejilla-nos veremos mañana ¿verdad?

-si..., después de ir con tu madre a la cita con la doctora ¿esta bien?

-de acuerdo-le dio un casto beso en su mejilla, para luego abrir la puerta del vehículo y marcharse en dirección a su casa, sin antes despedirse con un gesto suave con la mano mientras desaparecía de su vista

Mientras tanto, Mina se ponía de pie luego del desahogo desgarrador de la princesa, aun no podía creer lo que escuchaba de los labios de su majestad, simplemente no entendía como Endymion se atreviera hacer algo así, mas aun a Serena quien era la mujer que tanto amaba, la reina también se levanto del suelo secándose de las lagrimas de los ojos

-tengo que regresar al siglo XX, majestad...

-lo se, ya es hora que te vayas...-suspiro tomando sus manos-por favor, no dejes sola a Serena

-lo prometí, majestad, jamás la dejare sola, apoyare la decisión que tome...-sonrió entregándole confianza a la reina, viendo como esta le sonreía esperanzada a que su misma persona pueda ser feliz

-gracias...-su imagen se desvaneció frente a sus ojos regresándola sorprendentemente a su habitación, dejándose caer de rodillas al suelo, rompiendo en un llanto descomunal

-Mina...¿Qué sucede? ¿Por qué estas así?

-Artemis..., -dijo al mirarlo- no, no sucede nada...

A la mañana siguiente, Serena se extraño un poco al no encontrar un rastro de Luna por alguna parte, tomo su collar jugando con el hasta llegar al baño, donde se dio cuenta de una extraña marca rojiza en su cuello, se enojo con una sonrisa en su rostro, disponiéndose a asearse, cambiándose de ropa a su uniforme escolar, saliendo de casa con el fin de comenzar una nueva jornada, camino por las calles sintiéndose algo diferente, se miro en el reflejo de una de las vitrinas, el brillo en su mirada le indicaba que había pasado a una nueva etapa en su vida, una que la definía entre la delgada línea de niña a mujer, no esperaba nada mas, en su mente divagaba, practicando internamente como terminar con Darien de la mejor forma posible ¿Cómo de lo tomaran las chicas? ¿me apoyaran? ¿o tal vez?...

-Serena!!!!-miro hacia el frente dejando caer su mandíbula la cual era arrastrada por la gravedad, era Darien con un enorme peluche de felpa en sus manos corriendo hacia ella

-Darien...-suspiro sorprendida, no sabia si salir corriendo o hundirse en el pavimento, mientras que él le extendía el enorme oso hacia sus manos

-es para ti..., lamento lo que había dijo tantas cosas horribles, estaba preocupado por ti...-se disculpo sinceramente

-descuida...-contesto cuando sorpresivamente se dio cuenta que estaba siendo abrazada por él

-lamento en desconfiar de ti, se que tu me amas...

-Darien, yo..., tenemos que hablar de algo importante-se alejo de el moreno sutilmente bajando la mirada-de verdad es importante...-termino de decir mas seriamente

-dime, ¿Qué es lo que tienes que decirme?

-Darien...-suspiro tomando valor-nosotros...-siendo interrumpida por el sonido de la campana de la escuela

-tienes que entrar antes que sea tarde-le sugirió el moreno-nos vemos...-se adelanto en un movimiento rápido besando sus labios abriendo sus ojos enormemente –ten un buen día

-pero...

-adiós!-se despidió sin mas, tocando con la yema de sus dedos sus labios con sorpresa

-¿Por qué?... ¿por qué ahora...?

Se dirigió a la sala de clases, donde fue un día tan normal como los demás, aunque, trataba de ocultar lo mas posible aquella marca roja con la ayuda de su cabello a pesar de la el ambiente caluroso del ambiente

-Serena ¿estas bien?-pregunto Molly

-si ¿Por qué?

-no lo se, te ves igual, pero distinta...

-soy la misma Molly-sonrió, fue una batalla para ella tratar de ocultar lo que había pasado con Diamante los días anteriores, desde las clases de gimnasia hasta el simple hecho de refrescarse por el clima caluroso, regresando a su casa para cambiarse ropa con el fin de juntarse con la madre de Diamante para su cita, distraídamente sintió que chocaba con una muralla encontrándose con Andrew

-hola Serena

-Hola Andrew ¿Cómo estas?

-yo muy bien, te extraño en los videos juegos, hace tiempo que no vas junto con Mina

-es verdad, después iré contigo y le diré a Mina que me acompañe ¿de acuerdo?

-me parece muy bien...-contesto, cuando una brisa paso a través de ellos, haciendo mover un poco el cabello de la joven en una suave danza en el aire, notando él aquella ligera marca en su cuello, solo limito a sonreír internamente desviando la mirada de manera divertida

-bueno, me tengo que ir, nos vemos luego, adiós!- se encamino hacia su casa, encontrándose con su madre quien se iba de salida ha realizar algunas compras, subiendo por las escaleras hasta su cuarto donde se dirigió a su armario para elegir la ropa adecuada a la primera visita con la doctora sintiéndose un tanto nerviosa, cuando un fuerte portazo la hizo sobresaltar, volteando al instante encontrándose frente a frente con Diamante quien cerro con seguro la puerta

-Diamante ¿Qué haces aquí? nos pueden ver...y...-fue interrumpida de inmediato al sentirse acorralada contra la pared, mientras las manos de el peli plateado recorrían la mayor parte de su cuerpo y sus labios eran atrapados una y otra vez con besos ardientes por parte de Diamante

"...-no dejare que ese imbécil te vuelva a tocar, te recordare a quien le perteneces, Serena..."

II

"...Cual riesgo...vale la pena...cuando estoy a tu lado...me siento plena...y lejos de ti...todo se derrumba..."

Pov Mina

Me quite las lagrimas de mi rostro, no puedo llorar, no es el momento solo actuar, le prometí a la reina que respetaría y apoyaría la decisión de Serena, pero ¿Qué dirán las demás chicas? Debo decirle, antes que a ella, creo que buscaremos la mejor solución para esto, solo espero que comprendan la situación

-Artemis, ¿puedes llamar a Luna por favor?

-si claro, pero...¿para que?

-tenemos que decirle algo importante-confeso-también le pediré a Rei si nos podemos reunir en su templo, y reunir a las demás

-de seguro Luna le dirá a Serena

-no!-casi le grite

-¿Qué?

-ella no debe enterarse de esto, creo que lo mejor es que no sepa por ahora –le dije casi suplicante

-¿de que estás hablando?-pregunto aun mas confundido

-solo ayúdame a llamar a las demás ¿si?

-esta bien, Mina, a todos menos a Serena

-muchas gracias Artemis...-brinco por la ventana para alejarse de mi vista, perdiéndose entre las calles, de seguro ira por Luna, por suerte, ya es de mañana hay que empezar un nuevo día, pero no los hará daño faltar un día de clases ¿o si?, no paso mucho tiempo para escuchar a las chicas llamándome desde el tele comunicador

-¿Qué paso?-pregunto Rei preocupada-¿un enemigo?

-no Rei, es algo mas importante-confesé-se trata de Serena

-¿ella está bien?

-si, pero ella no sabe que nos reuniremos...

-esta bien, nos reuniremos-colgó la llamada, no puedo evitar sentirme un tanto nerviosa por la situación, al fin y al cabo todas podemos pensar de manera igual o muy diferente, pero sencillamente esto definirá el futuro, nuestro futuro, todo depende de Serena, pero no permitiré que se sacrifique nuestra felicidad, ella no se lo merece...

Para que pareciera algo mas casual me vestí con el uniforme escolar, por si llegase a encontrarme con Serena, caminando hacia el templo, subí por las escaleras y ya se encontraban todas reunidas, mire a Luna quien me miraba confundida, mas aun cuando había requerido no tener la presencia de Serena

-y bien Mina ¿Qué sucedió?-pregunto Rei impaciente, puedo notar la preocupación en su mirada, mas aun con el sueño que me confeso la vez anterior, sin duda es una situación complicada

-si Mina dinos-siguió Amy mas calmada- ¿Por qué no esta Serena?

-es verdad, de seguro debe estar por toda la escuela buscándonos-dijo Lita con una pequeña sonrisa

-no vendrá, solo tengo hablar con ustedes de algo importante y ...-suspire-tiene que ver con Serena

-¿¿¿Qué???

-¿esta en peligro?

-¿ya sabes quién es el enemigo?

-¿quiere a Serena?-todas comenzaron a preguntarme a la vez, que no podían entender o identificar a alguna de sus voces

-no se quien es el enemigo, solo que, le pedí a Luna que me ayudara a ir al siglo XXX

-¿¿¿Qué????? ¿¿¿¿Por qué????!!!!

-¿acaso no han notado que Serena esta un poco diferente?-les cuestione, mirándose entre si para guardar silencio, sin duda lo han notado tan claro como yo- el enemigo, el sueño de Rei y los desmayos de Serena, han sido demasiado en muy poco tiempo, y mas aun lo que nos dijo Setsuna, sentí que era mi deber si el futuro en el cual estábamos luchando valía la pena –confesé al fin

-¿y que averiguaste Mina?-se adelanto en preguntar Amy

-bueno, me encontré con la neo reina Serena en primer lugar

-Mina te dije que no tenias que intervenir en nada!-me regaño Luna alterada

-no es lo que crees Luna, ella me esperaba

-¿Cómo?-yo asentí

-ella quería que le enviara un mensaje a Serena y a nosotras...

-¿un mensaje?-pregunto Rei confundida-¿Qué clase de mensaje?

-que no cometa el mismo error que ella...-respire profundo para continuar-su majestad tuvo una hija antes de Rini-sus rostros jamás los olvidare, se miraban entre sí perdidas, creo que fue la misma expresión la cual miro a su majestad en el siglo XXX, nadie podía creer que Serena en un futuro tuviera una hija "incógnita" antes de Rini

-¿y...que paso con esa niña?-se aventuro a preguntar Amy-¿acaso la pequeña...no quiero imaginarlo...? ¿por culpa de un enemigo?-termino de decir con incertidumbre

-no..., ella renuncio a ser madre

-¿acaso ella aborto al bebe?-Rei se puso de pie en shock-imposible, Serena jamás haría eso, lo se

-no Rei, ella no hizo nada contra el bebe, pero..., renuncio a ella para continuar con el futuro junto con Darien

-¿la dio en adopción?-pregunto Lita sin poder creerlo-si es asi...eso quiere decir que la niña no es de...

-tienes razón, la bebe no es hija de Darien-termine de decir en medio de un enorme shock en el grupo , apenas podían articular alguna palabra, no lo podían creer, y se a la perfección que clase de preguntas se están asiendo en sus mentes

-entonces ¿Quién es el padre del bebe?

-¿es Andrew? –su solo nombre me hizo caer al suelo

-no..., es...Diamante..., el príncipe Diamante

-¿¿¿Qué????!!!!!!

-¿Cómo es eso? Es imposible!-grito Rei alterada-¿Cómo puede ser eso posible, él es nuestro enemigo!

-Rei cálmate!-le regaño Lita

-es verdad lo que dice Rei, él quiso acabar con nosotros! Es ridículo!

-¿acaso nunca te preguntaste el "por qué"?-le pregunte directamente-¿Por qué odiaba el siglo XXX y quería acabar con el siglo XX? ¿o el simple hecho que llamaba a Rini "conejo"?-todas silenciaron

-tienes razón, nunca supimos la verdadera razón por que nos ataco y siempre quiso a Serena si apenas la conocía

-la verdad, Diamante la conocía hace tiempo...desde que eran jóvenes, cuando ella quedo embarazada de él y...luego...

-ya basta!-dijo Rei impaciente interrumpiéndome –voy a hablar con Serena ahora mismo!

-Rei!-parecía enfurecida, creo que podía dejar pasar todo a su paso –Rei, detente, escucha...-tratando de detenerla

-no Mina, ya has hablado suficiente, ¿Qué pasara con el futuro? ¿con Rini? ¿con Darien? ¿con nosotras?

-no seas egoísta!-la regañe-¿Cómo se te ocurre pensar en ti misma ahora? La neo reina Serena esta sufriendo hasta el dia de hoy por lo que sucedió con su hija ¿te parece poco? Nosotras somos felices a costa de su felicidad

-digas lo que me digas, hablare con ella para evitar que haga una tontería...-me aparto del paso, para seguir en su camino, todas nos unimos en su búsqueda, espero que encontremos a Serena o al menos poder detener a Rei

Fin pov Mina

Mientras tanto, Darien se encontraba en la biblioteca de su universidad, tomaba algunos textos y luego escribía notas en sus cuadernos completamente concentrado, al momento en que llega Andrew a su lado

-¿Qué tal?

-hola Andrew, ¿Cómo estas?

-bien, veo que estas estudiando-miro los textos

-esto es una biblioteca Andrew...-respondió con algo de resignación, mientras ocultaba una rosa roja sobre la mesa algo avergonzado

-veo que se reconciliaron...-le sonrió pícaramente –no creí que con Serena ya estabas dando pasos grandes, Darien, pero ten en cuenta que ella aun es una estudiante de secundaria, asegúrate de cuidarte, ¿no quieres enfrentar a sus padre por un bebe, no?

-¿de que estas hablando?-le pregunto totalmente confundido

-por favor no te hagas, lo vi con mis propios ojos, esta bien que la ames y todo, pero no le dejes marcas...

-¿marcas? ¿Qué marca?-esta vez vio que de verdad el moreno no entendía a lo que se refería, retractándose de lo que había dicho, guardando silencio-dime Andrew ¿Qué marca?-le exigió

-pues...una marca que vi en el cuello de Serena..., de verdad creí que se las había hecho tu...

-es imposible, ella es mi novia, ella...-dejo los textos aun lado para ir en su búsqueda-es imposible...pero...debo comprobarlo con mis propios ojos...

-espera Darien!

Mientras tanto, Serena se encontraba acorralada contra la pared, mientras que Diamante, la levanto de los muslos sin dejarle escapatoria alguna, besando ferozmente sus labios, bajando hasta su cuello, e tanto sus manos viajaban alrededor de todo su cuerpo, ella se sentía asustada, aun así sentía la pasión envolviéndola por completo, sin embargo, aquella sensación embriagante le asustaba, jamás lo había visto así, incluso llego asustándola queriéndose apartar de él, mas no lo lograba

-Diam...-decía con dificultad –detente...

-no...-le contesto, en un movimiento brusco rompió su blusa, revelando su ropa interior-no dejare que nadie te toque, tu eres mía, mía...-se adelanto en besar sus pechos con adicción, asustándola aun mas, incluso comenzaba a doler, derramando lagrimas de sus ojos

-Diamante me duele...-le suplico, deteniéndolo en solo un instante, mirándola con ojos bien abiertos, su rostro suplicante cubierto de lagrimas

-lo siento...-la soltó dejándola en el suelo, retrocediendo un par de pasos mientras ella se cubría su desnudez-perdóname...-cayendo de rodillas frente a ella-soy un imbécil...

-Diamante...-se acerco hacia él, acercando una mano hacia él, siendo apartada por el propio Diamante

-no te me acerques, todos tienen la razón de mi, soy un maldito demonio –respondió con la mirada oculta en sus flequillos-¿a quien engaño?

-a mi no me engañas Diamante...-se agacho quedando a su altura-yo se que eres bueno, lo se...

-eres muy ingenua mi ángel, casi te tomo por la fuerza y me justificas, yo no tengo salvación, tengo que alejarme de ti así no te hare daño –se puso de pie para marcharse

-espera Diamante!- Bajo por las escaleras para alcanzarlo, abrazándolo desde su espalda para evitar su escape-por favor...hablemos de esto-le dijo a la mitad de la calle, a pesar de sus prendas rasgadas no le importaba

-¿tu no entiendes verdad? Estas abrazando a un moustro...

-pero...

-Serena!-escucho la voz de Rei detrás de ella, al voltear se dio cuenta que estaban sus amigas viendo la escena perplejas

-chicas...

-tu escolta real llego-dijo irónicamente- es lo mejor que te mantengas alejada de mi Serena

-Diamante...

-adiós, Serena...-lentamente se fue zafando de ella para luego alejarse rápidamente aunque con dificultad, dejándola caer al suelo aferrándose así misma

-no! Diamante!

-perdóname..., mi princesa...-suspiro derramando una lagrima en su mejilla, empuñando sus manos llenas de ira contenida-te amo...