"...A veces...las cosas son tan obvias frente a nuestros ojos...que a veces somos ciegos de nuestra propia verdad..."

Ambos jóvenes se miraron entre si, aun así Diamante no pudo evitar mirar a su madre con un rostro de poco amigos ¿Qué pretende? Se pregunto internamente

-mamá ¿Por qué le mentiste a Serena?-le pregunto, captando toda la atención de la rubia

-ya te lo dije, solo quería que cenara con nosotros, siempre se va tan deprisa que ni si quiera me da tiempo de darle un bocadillo-se excuso segura haciendo que Serena se sintiera incomoda ante la situación

-perdón, será mejor que me vaya si estoy incomodando...-se iba a retirar rápidamente bajando las escaleras cuando es sostenida de la mano por Diamante deteniéndola abruptamente -¿eh?

-no te vayas por favor-le pidió –lamento actuar así frente a ti, lo siento-se disculpo

-¿de verdad?

-recuerda, eres una persona importante visita en mi casa-la jalo suavemente hacia adentro, haciendo que ella accediera en silencio, ingresando nuevamente hacia la casa-luces hermosa...-se adelanto a decir, haciéndola ruborizar, aumentando su timidez

-gracias Diam...

-hola Serena!-saludo Zafiro con entusiasmo

-Zafiro, recuerda tus modales-le regaño su madre-es una invitada

-disculpe, señorita Tsukino-reitero el niño

-descuida Zafiro, puedes llamarme por mi nombre-contesto la rubia, pasando al comedor

-¿de verdad?

-claro, somos amigos ¿no?

-si!-asintió-¿y cuando serás la novia de mi hermano para que seas mi cuñada?

-ZAFIRO!-grito el peli plateado-no digas tonterías, ya te lo dije, ella tiene novio –le regaño-perdona a mi hermano

-descuida...-desvió la mirada aun mas enrojecida, mientras que Diamante cortésmente, le invitaba a sentarse en la silla, para ajustarla luego de que ella accediera, ubicándose a su lado

-bueno querida, además de compartir esta cena con mi familia quería hablar contigo de algo importante-confeso la elegante mujer, mientras que las sirvientas servían la entrada-la verdad es que necesito tu ayuda

-¿mi ayuda?-pregunto confusa, haciendo que Diamante mirara a su madre fijamente

-así es querida, hare un evento de beneficencia en la próxima quincena, es para reunir recursos al hospital de niños de la ciudad, mediante una obra musical

-eso es fantástico ¿pero que es una obra musical?

-bueno, es cantar, bailar y actuar...

-es muy genial, pero ¿en que puedo ayudar?

-quiero que participes en la obra

-¿Qué?-se atoro con el refresco que estaba bebiendo en ese instante

-Diamante también participara...-confeso la mujer

-¿yo?! jamás...-dijo cruzándose de brazos

-eres mi hijo, tienes que hacer lo que te digo o no habrá mesada para ti

-¿Qué?!

-te dominaron hermanito-bufo Zafiro

-la obra es "el fantasma de la opera", puedes invitar a tus amigas al evento, entre mas personas asistan mejor recaudación tendrá el hospital

-Serena no tienes porque...

-acepto!-dijo firmemente

-¿Qué?-se quedo boquiabierta

-es un evento para los niños de un hospital, ¿Por qué he de rechazarlo Diamante?-le miro a los ojos

-eres un ángel...-pensó él mirándola con dulzura-si tu dices que vas a ir al evento, yo iré también...

-de obligación lo harás igual-se volvió a burlar su hermano menor

-basta Zafiro!- todos comenzaron a reír trascurriendo la cena sin complicaciones, volviendo un momento muy ameno entre la familia Black, una vez terminada la cena, las sirvientas se dispusieron a retirar todo lo de la mesa, Rubí se retiro a su oficina personal para hablar con los organizadores del evento que los protagonistas de la obra estaban confirmados y Zafiro regreso a su habitación a hacer sus deberes estudiantiles, por otra parte, Diamante le ofreció a Serena un recorrido por la casa, ya que en otras ocasiones solo había visto la sala y el jardín de estudio del peli plateado

-tu casa no deja de sorprenderme, es realmente hermosa, por dentro y por fuera...-decía alucinada admirando cada rincón de la morada

-disculpa porque mi madre te involucro en eso del evento-se disculpo nuevamente –mi mamá no deja de hacer estupideces...

-ayudar a otras personas no es una estupidez-volteo para mirarlo con seriedad

-no quise decir eso, yo...-silencio al ver como Serena le extendía un pequeño obsequio frente a sus ojos

-es para ti...

-¿para mi?-lo tomo entre sus manos-¿puedo abrirlo?-pregunto

-claro, espero que te guste...-le contesto mientras él lo abría, encontrándose con una pequeña cajita terciopelada, confuso, abrió el contenido de esta, abriendo sus ojos enormemente, tomándolo mirándola directamente -¿no te gusto?-pregunto ella con preocupación, siendo abrazada rápidamente por él

-claro que si..., gracias Serena...

-Diamante...-por un instante entre sus brazos, recordó el sueño que había tenido en su casa, separándose lentamente de él mas ruborizada de lo normal-es un pendiente del eclipse lunar

-pero se divide en dos-dijo él- usa uno por mi...

-¿Qué? yo no...

-si lo harás, porque ahora es mi regalo, quiero que te quedes con la mitad de el-removió su cabello rubio hacia un lado acomodando el pendiente de la luna negra en su cuello, mientras que él se dejo la luna creciente, ambos lados del eclipse en personas muy diferentes como dueños de esta

-gracias Diamante...

Por otra parte, las chicas estaban reunidas en el Crow, nadie quería decir nada al respecto, pero su mayor preocupación en ese momento era la joven de cabello dorado quien no estaba con ellas, aun así no se quedaron con los brazos cruzados

-hola chicas ¿Dónde esta Serena? ¿no esta con ustedes?-Darien había llegado al lugar, citado por las guardianas

-no, te mentimos, en realidad, queremos hablar contigo

-¿contigo?-pregunto extrañado tomando asiento

-¿Por qué estas tan distante con Serena?-pregunto Mina sin filtro alguno

-mi relación con Serena no deberían importarle

-claro que si-se adelanto Rei-Serena ha estado actuando muy extraño estos días

-¿Qué?

-además la sombra del enemigo nos asecha, es como si quisiera que Serena este lejos de nosotras

-¿y si quiere el cristal de plata? –indago el moreno

-es difícil de saber, hasta Luna y Artemis no han logrado nada a pesar de que están investigando sin descanso la situación

-¿amas a Serena?

-claro que la amo, solo es que no ha tenido mucho tiempo para estar con ella y...

-eso lo hemos notado-indago Mina-pero Serena esta en peligro y esta algo distante, no se lo que esta sucediendo con ella

-si, hasta ha subido las calificaciones-dijo Lita

-¿Qué?

-si, hoy saco 10-siguió Amy

-no me ha dicho nada al respecto

-deberías hablar con ella, se que Tokio de cristal es una realidad, pero también a pesar de todo deben fortalecer su relación-sugirió Mina como un consejo

-esta bien...lo hare...

-recuerda que Serena es joven como nosotras...-dijo Rei

-¿a qué te refieres?-frunció el ceño

-sospecho que Serena se esta enamorándose de otra persona

-¿¿¿Qué???!!!-todas las demás se pusieron de pie

-ya saben, la hemos visto comprando cosas, arreglándose mas de la cuenta, desapareciendo por días ¿no creen que eso es sospechoso?

-por favor Rei-se adelanto Mina con una carcajada-ella si ama a Darien de eso no hay duda...

-si pero...

-está bien-dijo seriamente el moreno- tendré mas tiempo para Serena-se puso de pie con rostro de pocos amigos marchándose del lugar

-eso fue demasiado Rei-le regaño Amy

-solo dije la verdad, para que abra los ojos y no pierda a Serena

-creo que tienes razón, pero darle celos no creo que sea la mejor solución...-dijo Mina posando la mano sobre su barbilla

-solo espero que Darien se de cuenta antes que sea demasiado tarde...

Mientras tanto, Serena regresaba a su casa con una sonrisa en su rostro, por una extraña razón tocaba una y otra vez el pendiente que le había obsequiado a Diamante dándole él la mitad, lo escondió antes de llegar a su casa, sin embargo se prometió así misma que no se lo sacaría bajo ninguna circunstancia a pesar de que la joya representaba la luna oscura, hasta que se paralizo al ver el auto rojo estacionado frente a su casa

-¿Darien?-pregunto con sorpresa al verlo al moreno con una ramo de rosas rojas en sus manos

-hola Serena...