"...Sigue mis pasos...yo los trazare para ti...toma mi mano y te guiare incluso en la misma oscuridad...te llevare a la luz que creíste no ver jamás...y serás feliz por toda la eternidad..."

-¿Cómo que no esta contigo?-pregunto Mina alterada al teléfono-creí que estaba contigo, o al menos saber donde se encuentra

-Mina ¿Qué sucede?-pregunto Rei frunciendo el ceño en señal de preocupación

-no esta con Darien-sentenció

-¿Qué?!-dijeron todas

-esta problemas, tenemos que buscarla-sugirió Amy

-si, te espero en la tienda de video juegos-Mina seguía en el teléfono, mientras que las demás se preparaban para salir en la búsqueda de su princesa, colgando la llamada

-Darien dijo que habían quedado en reunirse al parque, pero él no llego a tiempo, y cuando llego, solo vio el tele comunicador en el suelo, y como estaba lloviendo creyendo que había regresado a su casa –la chica rubia les explico la excusa que le había entregado el guardián de la Tierra

-es extraño...-suspiro Amy

-¿a que te refieres?

-digo, ¿no creen que después de salvar a Tokio de cristal, ellos han estado mas distante de lo normal?-pregunto la peli azul removiendo algunas situaciones en las mentes de las demás guardianas entre los futuros gobernantes de el planeta Tierra-al menos lo he sentido

-no lo creo-respondió en defensa-ellos están destinados a están juntos, incluso la existencia de Rini depende de ellos

-a lo que me refiero, ¿no creen que Darien esta muy seguro de el futuro?-cuestiono

-pues claro-contesto la morena rápidamente-Serena siempre ha estado enamorada de Darien

-si, por lo mismo, creo que...

-hay Amy no exageres-interrumpió Luna-Darien quiere mucho a Serena, le deja una rosa todos los días a su casa

-¿enserio?!!!-la gatita asintió

-pero ¿no habían dejado un tiempo para ambos? Para que Serena subiera sus calificaciones-cuestiono Mina algo pensativa

-puede ser-indago Lita-que romántico que Darien haga esas cosas...

-vaya, entonces no tengo que preocuparme-siguió Amy

-por supuesto que no, Darien quiere mucho a Serena y ella lo quiere también, solo que ahora debemos buscarla y encontrarla lo antes posible-dijo Luna mientras avanzaba

-si!!!-dijeron todas

Por otra parte, Diamante llevaba en una bandeja cosas deliciosas a la joven que se encontraba sobre la cama, depositándola sobre la mesita de noche al costado de ella

-bien princesa, debes comer y luego tomar la medicina, no quiero que decaigas...-le sugirió el peli plateado

-se ve delicioso-decía alucinada-pero...-quería ponerse de pie-estoy causando muchos problemas, será mejor irme, todos deben estar preocupados por mi...-cuando un par de manos fuertes tomaron sus hombros obligándola a sentarse nuevamente sobre el lecho nupcial

-te quedas aquí!-le advirtió duramente

-¿Diamante?...-dijo tartamudeando ante el cambio repentino del joven

-lo siento...-la soltó suavemente-solo que..., debes descansar...

-pero...-le cubrió sus labios con dos de sus dedos delicadamente

-mi princesa nunca sabe decir otra palabra-le sonrió- estuve muy preocupado por ti toda la noche, es lo mínimo que tienes que hacer es quedarte aquí, solo un par de horas, me encargare de todo lo demás ¿de acuerdo?-ella asintió-ahora debes desayunar y luego tus medicinas

-lo siento...por causarte problemas –se disculpo apenada

-no te preocupes-giro dándole la espalda-lo importante es que estas bien, ahora disfruta tu desayuno-volteo para sonreírle correspondiendo de inmediato

-gracias...-bajo la mirada al objeto que debiera estar aferrado a su muñeca, extrañándose al no tenerlo consigo-Diamante!

-dime...-se detuvo en el lumbral de la puerta para salir -¿Qué sucede?

-tenia un comunicador en mi muñeca ¿no lo has visto?-le pregunto con inocencia

-no, para nada-le mintió-¿y como era?-fingiendo

-era de color rosa, parecido a un reloj, me ayudaba a comunicarme con mis amigas

-lo siento, cuando te traje no vi nada

-no te preocupes, de seguro se me cayo en el camino...-respondió amable, en tanto él se retiraba de la habitación, Serena por su parte tomaba el desayuno que le había dejado, no dejaba de preocuparse de la preocupación que estaba causando en los demás, sobre todo en sus amigas, poniéndose de pie tomando una bata cercana acercándose a la puerta cuando esta fue abierta repentinamente

-¿Señora?

-querida ¿Qué haces levantada?-le pregunto, invitándola a la cama de nuevo

-solo quería un teléfono, no quiero preocupar a mis padres porque no llegue a casa anoche a dormir-le explico mientras se sentaba-y aun no lo he agradecido lo mucho que me ha ayudado, de verdad muchas gracias

-oh! Querida, no hay de que, Diamante estaba muy preocupado por ti-aquel ultimo comentario la hizo toser casi escandalosamente la taza de té que bebía en ese instante –cuido de ti toda la noche

-si...-respondió bajando la mirada-me lo confeso..., Diamante es una buena persona, tiene un buen hijo señora

-si lo se...-suspiro-él ha esperado mucho tiempo para ser feliz...

-¿eh?

-no es nada cariño...-sacudió sus manos rápidamente-olvida lo que dije, llame a tus padres para tranquilizarlos, espero que algún día pueda conocerlos personalmente, les dije que te encontrabas en mi casa, y que me habías ayudado porque me había sentido muy enferma

-¿les mintió a mis padres?-pregunto con una enorme gota en su cabeza

-en teoría, invertí la realidad...lo importante es que tu estas bien querida

-muchas gracias señora-luego de algunas horas, Serena ya podía levantarse con normalidad, la medicina estaba funcionando de maravilla, Rubí le regalo un vestido color azulado con detalles negros, ya que la ropa que había llegado se encontraba totalmente estropeada por la lluvia a pesar de que se encontraba limpia y lista para utilizarse, arreglando su cabello como suele hacerlo, caminando hacia la sala de estudios de Diamante mirando a través del cristal las afueras del hermoso jardín que adornaba la propiedad

-es muy hermosa...-suspiro Diamante mientras la admiraba hipnotizado desde la puerta sin que ella se diera cuenta, caminando hacia ella inconscientemente "...me pertenece..." "...serás mía cueste lo que cueste..." se detuvo al escuchar aquellos pensamientos en su cabeza, aferrando su mano derecha a su cabeza

-Diamante!- dijo alarmada corriendo hacia su dirección-¿estas bien?

-si...solo es un dolor de cabeza...-la miro directamente a los ojos, recargando su cabeza sobre su hombro, haciéndola sonrojar, su corazón se aceleraba de manera incontrolable-dijiste muchas cosas interesantes anoche...-le susurro

-¿Qué?

-¿Qué es eso de tu destino? ¿acaso sabes lo que sucederá en el futuro?-la interrogo separándose de ella

-pues yo...-dudosa intento apartarse de él rápidamente, sin embargo, la detuvo tomándole la muñeca

-dime...

-no se de lo que hablas

-se tu secreto, no se lo he dicho a nadie ¿Qué mas pruebas quieres para confiar en mi?-le contesto duramente sin soltarla-¿acaso nos conocemos desde antes? ¿o seré alguien quien te haga daño? Responde!

-déjame...-se zafo del agarre dirigiéndose a la puerta, cerrándola Diamante ante sus narices acorralándola en un rincón –Diamante déjame salir...

-¿Por qué no me contestas? ¿acaso mi futuro esta escrito?

-no tiene caso que te lo diga...-respondió con voz débil mientras las lagrimas golpeaban sus ojos con fuerza intentando salir, no quería decirle la verdad, de lo que seria su futuro, ya que tal como ella podría ser inevitable

-¿Por qué?...-llego sus agiles dedos hacia los pómulos de la joven -¿Por qué no puedo ver lagrimas en tus ojos?...-le pregunto mientras le acariciaba la mejilla-tantas preguntas...sin que me digas ni una sola palabra...

-Diamante yo...esto es difícil para mi...

-¿Qué es lo difícil? ¿terminar con un hombre que solo te deja cuando le surge "algo mas importante"?

-no lo entiendes...

-por supuesto que no lo entiendo!, es algo tan simple que tienes que hacer y no lo haces

-él solo quiere ser una gran medico-le defendió –es su sueño...

-¿y donde estas tu en ese sueño?

-yo..., tengo que velar por el bienestar del universo...

-eso no fue lo que te pregunte ¿Por qué evades mis preguntas?

-porque nunca lo entenderías...-giro la cerradura de la puerta, cuando fue detenida, por la mano de Diamante-no huyas de mi, no me hagas sentir como un imbécil-le ordeno-¿Quién eres?

-¿Qué dices?

-¿Quién eres? Dime!

-soy sailor...

-no! ¿Quién eres?

-la princesa...

-ya basta! dime ¿Quién eres? ¿Quién es la mujer que esta frente a mi?

-Serena...-tartamudeo-Serena Tsukino...-contesto siendo jalada ferozmente hacia el pecho de Diamante quien la contuvo en un fuerte abrazo, haciéndola romper en llanto

-solo quiero ser una chica normal! Con problema normales, yo no pedí nada de esto! No quiero! No quiero!

-déjame ayudarte-la aprisiono mas fuerte contra su cuerpo-al menos por este día, olvida quien eres, desapareceremos 24 horas del mundo

-¿Qué?

-solo confía en mí...

En el parque numero 10...

-aquí encontré el tele comunicador...-Darien señalo el lugar donde lo había encontrado, a la vez lo sostenía en su mano fuertemente-me siento como un idiota, me confié demasiado, ahora no se donde esta...

-Darien ¿amas a Serena?-le pregunto la guardiana personal de la princesa de la luna llena

-¿Por qué lo preguntas?

-por esta situación-respondió seriamente

-¿me estas culpando?

-si-contesto abiertamente- si no la hubieras dejado sola en el parque nada de esto hubiera pasado, por eso te pregunto ¿la amas?

-por supuesto que si, la amo, amo a Serena, vamos a tener un futuro esplendoroso, nuestros destinos están escritos, incluso tendremos una hija...

-¿solo por eso?-pregunto perpleja, siendo interrumpidos por el sonido del móvil de la rubia –diga...¿Qué? enseguida voy para allá...

-¿Qué sucedió?

-Amy me dice que no esta en ningún hospital o estación de policía, nos reuniéremos en el templo para idear un plan para buscarla

-de acuerdo, voycontigo