2.- Hospital.

Me levanté de la cama y me fui al espejo que había en el otro cuarto. No sabía que había un espejo en el mio, así que me había ido a la otra.

Me quede observando detenidamente todos mis rasgos, mi cara, mis hermosas pecas, el cabello alborotado... Todo.

¿Por qué Midoriya Izuku?...

¿En verdad morí?...

¿Acaso estoy como en un estado de coma y esto es un sueño?...

¿Qué haré a partir de hoy?...

Las preguntas surgían y surgían, ya no sabía siquiera que hacer, mi mente recordaba cada faceta de mi antes, cabello alborotado con mucho freeze, piel morena clara, muchos lunares, cabello castaño y ojos del mismo color, medía 1.75... Espera, ¿Acaso la vida me adora?, ¿Se apiadaron de mi por parecer hombre que me hicieron uno?, Por que obviamente, nada de mis rasgos anteriores tenía de común con Izuku, hasta para hacer el cosplay tuve que maquillarme a montones...

Bueno, ligeramente a montones.

-¡¡AHH!!, ¡¿Y si por estar vestido de él reencarne en Deku?!-grite asustada tocando mis mejillas– ¡¿Qué haré si por mi personalidad arruino el anime?!.

-¡¿Podrías callarte de una vez?!- se abrió la cortina de al lado, pensaba que no había nadie pero... Estaba equivocada.

-¡¡Aahhh!!- me Asusté- ¡El viejito de Ansatsu Kyoushitsu!- grité por inercia. Cada que lo recuerdo... Muero.

-¡¿De qué demonios estás hablando?!

-¡¡T-Tu fuiste atropellado por un adolescente no es cierto?!, ¡¡Ibas en tu bici y cayó encima de ti!!.

See... Por un momento creí que ese viejo estaba igual aquí... Ahh~ que vergüenza, pero me hubiese gustado conocer a Karma y Nagisa... ¡Volverlos pareja!. Pero tenía que ser así, estaba años muuucho después, donde existen los Quirk.

-¡Callate niña malcriada!

-¿Niña...?- pregunté extrañada- Soy un niño...- contesté recordando en qué cuerpo estaba.

-¡Maldita mocosa!, ¡Sal de aquí!- me comenzó a aventar la almohada y las cosas que tenia a sus costados como una caja, las flores... El florero de vidrio... Que por cierto, me cayó en la cabeza por tener muy malos reflejos.

Después de ver como la sangre caía a través de mi frente, por segunda vez, los doctores llegaron con gran sorpresa.
Me cargaron y me llevaron nuevamente a mi habitación, donde me pusieron anestesia y me cocieron la herida.

-Debes cuidar tu salud, apenas llegaste por resbalar y caer en una piedra y ahora vas con el paciente más temperamental- me regañó el doctor- que por cierto, te... Va a dejar una cicatriz- dijo colocando ya las vendas pero con una mirada preocupada.

¿Acaso era demasiado tener una simple cicatriz? En mi vida anterior, tenía a montones y era normal... Que raro.

Mi madre... Inko estaba llorando incesablemente. El verla no pude evitar sonreír, en mi antigua vida nunca había recibido el cálido abrazo, el beso, hasta la misma preocupación de una madre... Agradezco haber muerto. O... ¿Revivido?, no, eso no se adapta a la situación, sería... ¿Reencarnado?.

Un poco después de que me dieran de alta, como mi madre estaba trabajando, no sabía que Inko trabajaba... Bueno, da igual.
Ese mismo día pude ver a alguien con una venda sobre el ojo con cabello rojo y blanco.

-¿Todoroki?- me exalté y corrí o... medio corrí ya que una enfermera siempre estaba atenta de lo que hacía y me evitaba correr a mi gusto, seguía con la venda en mi cabeza pero se veía claramente que ya estaba mejor.

Todoroki me vio, así que fue aquí cuando su madre le adornó el rostro ehh...

-¡Hola!- Sonreí ampliamente, estaba tratando de guardar mis impulsos y gritar con toda mi energía de que ¡conocí de chiquito a mi hermoso husbando favorito!

-H-Hola... - contestó tímido.

-¿Cómo te llamas?- pregunté aunque ya supiera la respuesta.

-Todoroki Shouto...- ¡En verdad de chico da mucha ternura! ¡Casate conmigo! No, espera ¡no! ¡Recuerda la ONU!.

Pero... Si aquí tengo la misma edad... Supongo que no importa.

¡No!, ¡No!, ¡Calmate!.

-¿Y tú?- me miró con aquellos ojos heterocromaticamente irresistibles, no sé siquiera si existe esa palabra ¡Pero que más da!, ¡Es hermoso este niño!.

-¡Mi-Midoriya Izuku!- contesté con nerviosismo- Y... Em...¿Qué haces aquí?- pregunté con aquella radiante sonrisa que siempre me enamoró.

Jaja, que irónico, sonrío de la manera en la que me enamoraron.

-Aquí...- tocó el ojo vendado- Mi madre tiró agua hirviendo en mi rostro por culpa de la mitad fuego que me dio mi padre- la soltó. Un dolor en mi pecho al recordar el poco pasado que le pusieron, me hizo querer llorar pero no lo hice.

-¡Todo estará bien! - Sonreí a pesar de estar dolida- ¡Tu sólo vive por tu propósito!- Exacto, ya no pongas esa cara...-Sé feliz- Por favor- ¡Aceptate como eres! -y no pongas esa expresión nuevamente... Sonreí.

El me vio sorprendido, poco después de que dijera eso, Inko llegó por mi y nos vio juntos.

-¿Es tu amigo, Izuku?- preguntó sonriendo con su tono amable.
Lo volteé a ver y el sólo miró el suelo así que con una cálida sonrisa contesté.

-Si, somos amigos- le tomé su mano- Mi amigo Shou-chan- Sonreí ampliamente mientras decía ese apodo inventado.

Era extraño el que creyera hablar español pero hablaba japonés... Demasiado extraño, diría yo. Lo volteé a ver, él me mostró su hermosa sonrisa y asintió repetidas veces, lo cual me hizo querer tomar sus mejillas y apachurrarlo mil veces.

"Recuerda T/N T/A, eres Midoriya Izuku en este momento, tranquilizate"

"Autocontrol".

Poco después llegó su hermana Fuyumi, la cual apenas unos años mas grande que el y ya se encargaba de su cuidado... Que casa tan disfuncional. Bueno, está aún mejor que mi antigua familia pero... ¡Es un anime!, ¡No debería existir algo así!, bueno si pero... No para TodorokiBb, el es hermoso.

Inko y Fuyumi se quedaron hablando mientras yo hablaba sobre Oru Maito con Todoroki.

Ver sus energías y su radiante sonrisa me hacia sonreír ampliamente, por un momento... No quise regresar a mi antiguo mundo, ya no quería hacerlo nunca. Quería disfrutar el que estuviera en lugar de Izuku y pudiera conocer a todos, ¡Contando a TinTin!.

Pero nunca creí que esa se convertiría en una opción...

Nos despedimos y cada quien se fue a su casa, era divertido haber hablado con él.

Muy muy divertido...

Desde ese día, he estado más atenta a donde camino, ya no me dejan tanto tiempo con Kacchan y rara la vez que nos vemos. 

¿Acaso siempre fue así en el pasado de Izuku?

Trataba de actuar bien... Bueno, no tan bien ya que siempre admiré a Oru Maito, pero debes en cuando salían de mi boca palabras de mujer, algo que en verdad desconcertaba a Inko, vaya que era muy difícil fingir ser el hermoso brócoli.

Ahora, me había enterado que Kacchan tenía el Quirk de Explosión, si, ese Quirk con el que me daño, bueno no, pero si daño a Izuku.

En verdad comenzaría la guerra cuando me dijeran lo de mi Quirk.

Pero cuando salí a jugar con Kacchan un día antes... Volví a cambiar el pasado de Izuku y terminó en una catástrofe.

¿Es que acaso no puedo hacer nada bien...?

Ni siquiera comer , vaya que caí bajo...

†★†

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top