Mi cabeza está en otro lado, no puedo aterrizar y centrarme en mis amigos, solo estoy tan perdida, miro a mi al rededor, Agatha, Shanik y Lily ya habían llegado, hablan y hablan, pero ni si quiera puedo escucharlas, hay un punto en el que todo parece querer aplastarme, quiero solamente desaparecer.

No sé en qué minuto pidieron la comida, ya que empezó a llegar, perdí la noción del tiempo desde que me senté, Nick aunque no quisiera es la piedra en mi camino, llega a tal punto del que no puedo ser feliz si no está para recordarme toda la mierda que cargo encima, todo empezó bien, todo iba bien, pero si él me perseguía a todos lados, no lo iba a estar.

—Morgan. —me mueven haciendo que reaccione, Nox me mira fijamente y trago en seco.

—¿Qué?

—¿Te preguntamos que si querías hamburguesa?

—No tengo mucho apetito.

—¿Estás segura? —miro a Shanik y asiento. —Bien, más para mi.

—No seas tragona, mitad y mitad. —se queja, Shawn y ella niega.

—¿Te sientes bien? —miro a Ashton y ni siquiera quiera le contesto.

¿Qué pensaría de mí si se entera de todo?

Nick acaba de sembrar una gran duda en mi cabeza y no será fácil de quitarla.

—¿Morgan?

Alzo la cabeza y parece que todo mundo quiere arruinarme el día, ahí está ella, mirándome con confusión.

No, no, no, no.

Mierda, ella nunca viene a estos lugares. Me busca con la mirada hasta que da con ella, veo molestia en sus ojos, Nox y Olivia se percatan y aprietan mis brazos.

—Vaya Morgan, pensé que te vería en casa y no aquí.

Trago en seco y bajo la mirada.

—Venimos a acompañarlos señora Hans, después no íbamos a ir. —se excusa Olivia

—¿En serio? Es que Nick me dijo otra cosa.

Cierro los ojos con fuerza, claro que tuvo que haber sido él. Mamá siempre le cree a ese idiota.

—Mamá...

—Pero tranquila, los dejo comer, recuerda no salirte tanto de la dieta. —me sonríe y se da la vuelta para salir del lugar.

—¿Qué mierda?

Escucho que pregunta, Olivia, pero lo único que hago es levantarme y salir corriendo detrás de ella.

—¡Mamá!

Se gira y me sonríe.

—¿Qué pasa?

—¿Qué fue eso?

—Morgan, no pasa nada que comas algo fuera de la dieta, ahora ve adentro y come, no llegues muy tarde a casa.

Me da un beso en la frente y se da la vuelta para ir a su auto.

—Me sorprende que no te haya sacado del cabello.

—Déjame en paz, Nick.

—Solo digo que es muy extraño, esa no es Regina Hans.

Y por mucho que me costará admitir, Nick tenía razón, esa no es una actitud mi madre.

Entro al lugar un poco más relajada y aunque tengo la mirada de Nox, Olivia y Ashton en mi, intento no verme nerviosa.

—¿Qué te dijo?

—Que podía comer... —susurro. —Aunque eso no me tranquilizó.

—Bueno, solo está de buen humor.

Unos minutos después llega la demás comida, y de vez en cuando entro a la plática, más bien nos centramos en escuchar a Lily exponer a Luca, y a Shanik contar los secretos de Shawn cuando era niño.

—Nosotras tenemos una propuesta. —aprovecho que se quedaron en silencio y ahora todos me miran. —Estábamos pensando ir a la casa del lago este fin de semana, están invitadas.

Shanik y Lily aceptaron de inmediato, Agatha por otro lado no emitió ningún sonido.

—¿Qué tenemos que llevar?

—Pues pensábamos ir de compras después de aquí.

—Bien, entonces allá vemos todo. —aunque la emoción en ese par era palpable, la cara de Agatha no decía lo mismo.

Miro a Ashton, que también se percató de eso.

—Oye, copia pirata. —Agatha mira a su hermano y se levanta del asiento. —Ahorita venimos.

Todos asienten y siento como alguien me pega en la pierna, Nox me señala a Olivia que está frente a Shawn hablando.

—¿Siempre es así?

—¿Agatha?

—Si, parece que la idea de ir a la casa del lago no le convenció. —menciona, James.

—No es que no le interese, pero se está acostumbrado a esta vida.

—Lo dices como si viniera de otro planeta.

—Bueno...

—Pero espera, ¿por qué tanto interés en ella?

—No es interés, me pareció extraño.

Sonrío y miro a James que está a mi lado.

James Connor es de los chicos más guapos de la preparatoria, es de tez blanca, con muchas pecas en el rostro, el cabello lo tiene un poco largo y de color negro azabache, tiene un piercing en la nariz, sus ojos son color azul verdoso, es muy alto y el fútbol es su vida, así como todos los que están en esta mesa.

—No me mires así, Morgan.

—Solo estoy apreciando tu belleza.

—Gracias, pero a menos que te quieras acostar conmigo tomaré tu cumplido. —suelto una risa y golpeo su hombro. —Es broma, las castañas no son mi tipo.

Luca, Theo, Dylan y Shawn sueltan una carcajada inmensa.

—Si y a mí no me gusta follar. —dice, Dylan y James rueda los ojos.

—Las personas castañas le dan pesadillas.

—Son una mierda. —señala a cada uno de sus amigos

—¿Por qué dicen eso? —pregunta, Nox con curiosidad.

Solo espero que a Nox se le haya ido su crush por James, y que en serio esté preparada para escuchar lo que tengan que decir.

—Su ex era castaña, y le puso el cuerno, así que James las evita a toda costa, le recuerdan a ella. —menciona Theo.

—¿Es una herida que no sana, ok?

Se vuelven a atacar de la risa y Lily y Shanik sonríen divertidas, mientras que Olivia y yo solo podemos ver cómo Nox intenta que su sonrisa divertida no caiga.

—Bien, volvimos. —la voz de Ashton me sobresalta y se sienta a mi lado.

—Esta bien, iré a la casa del lago, pero si veo algún insecto me largaré de ahí.

—¡ESO! —gritan todos y me carcajeo.

El fin de semana que nos espera será divertido y no tengo pruebas, pero tampoco dudas.

Una vez que terminamos de comer en el restaurante, salimos y nos pusimos de acuerdo a cuál súper mercado ir, una vez dentro del auto de Ashton, recargo mi cabeza en la ventana. El ambiente se siente diferente, hasta extraño en algún punto del camino, nadie dice nada, es como si estuviésemos consumidos por nuestros pensamientos.

—¿Qué tiene, Agatha? —pregunto, para romper el hielo que hay entre nosotros.

—Solo se siente extraña.

—¿Y qué pasa con nosotros?

—¿A qué te refieres?

—Estas muy callado desde que estábamos en el restaurante.

—Solo estaba pensando, nada importante.

—Parece que todo cambió, Ashton.

—No es así.

—¿Es por nuestros padres?

—No...Bueno si.

—También he pensado en eso, si te soy sincera.

—Tal vez es una señal.

—Una muy mala. —murmuro.

—Tal vez es mejor así, ¿no?

Y aunque me hubiese gustado no entender esa frase, si lo hice.

—¿Quieres que tu padre sea feliz?

—¿Y tú? ¿Quieres que tu madre sea feliz?

Mi respuesta era un definitivo no, pero de mi boca salió...

—Si.

Ashton me mira unos segundos y asiente.

—No sé si soy mal hijo al no querer la felicidad de mi padre, pero tengo que aceptarlo.

Lo miro una vez más, es como si en serio estuviésemos aceptando que ellos sí podían estar juntos sin nosotros hacer el intento de separarlos para nosotros empezar algo.

Una vez que llegamos al supermercado, bajamos del auto, me voy con Nox y con Olivia, parece que todos los ánimos de todos los que estamos presentes decayeron.

—Bien, entremos y veamos que compraremos.

Ellos entran primero y detengo a Nox y a Olivia.

—El plan conquistar a Ashton no se hará.

—Parece que todo está en nuestra contra hoy. —murmura, Nox.

—Tu quisiste saber. —dice, Olivia y Nox suspira.

—Siendo sincera, no pensé que James tuviera una ex.

—Siempre dicen que detrás de un mujeriego hay un corazón roto.

—Pues que mierda.

—Saben que, no quiero entrar. —murmuro.

—Pues ya somos dos, inventemos algo y nos vamos a casa.

—Yo entro y les digo. —menciona, Oliv.

Nox como toda chica que resuelve llama a su mamá, y dijo que si vendrá por nosotras.

—Sabes, creí que me afectaría más lo de James.

—Nox, es comprensible, llevas casi un año con tu crush hacía él.

—Y sabes que es lo peor, que desde la fiesta en casa de Shawn quiero seguir creyéndolo.

—¿Por qué?

—Porque en toda la fiesta no solté a Luca, no he tenido esa conversación con él, pero estamos hablando que hay fotos y videos de esa noche.

—Estaban ebrios.

—Exacto, Morgan, estaba ebria y no tengo porque sentir cosas por él.

—Mierda...

—Si, mierda.

Olivia sale y dice que ninguno tuvo problema, así que solo esperaríamos a que la madre de Nox viniera por nosotras.

—Hay algo que quiero contarles.

Ambas me miran y asienten.

—Sabes que puedes confiar.

—Solo que esto no tiene que ver con mis sentimientos hacia Ashton.

—Okey...

—Tengo un trastorno alimenticio, pero eso no es sorpresa para ninguna de nosotras.

—Tarde o temprano ibas a tenerlo, ya nos dábamos una idea. —menciona, Nox y asiento.

—Lo segundo es que no solo me hicieron análisis de sangre ayer, me hicieron radiografías, y análisis físicos. —rasco mi nuca y suspiro. —Tuve un hematoma cerebral hace 7 años, me operaron y tuve amnesia, bueno, sigo teniéndola porque aún no recupero mis recuerdos al 100%.

No hay manera de describir las caras que tienen Nox y Olivia, por una parte muestran enojo y la otra parte muestran sorpresa.

—¿Te dijeron porque?

—Accidente automovilístico.

—¿Y en realidad fue eso?

—Eso decía mi expediente.

Nox me mira y sonríe.

—Quieres que investiguemos sobre el tema, Mor, somos las personas correctas. —sonríe y Olivia rueda los ojos.

—Tu madre está tan... —Olivia se queda callada y le doy una sonrisa de boca cerrada.

—¿Loca?

—Si, es que, me causa enojo todo lo que tienes que pasar, no veo el día en que seas mayor de edad y te vayas de su casa y no dependas económicamente de ella.

—Regina depende de Morgan, más bien, como entrenadora no gana ni la mitad que Morgan gana en el Elite. —menciona, Nox. —¿Por qué no le quitas el dinero?

—¿Al menos te da algo?

—Si, pero no puedo solo quitárselo, tiene que seguir pagando la casa.

El auto de la madre de Nox se pone frente a nosotras, Olivia abre la puerta y antes de subir y que Nox se fuera al asiento de copiloto, les pido que no digan nada, ni hagan comentarios sobre eso.

—Somos una tumba. —menciona, Olivia. —Aunque no nos guste.

Le sonrío y asiento, sé que les enoja que me deje tratar así, pero también después se ponen en mi lugar y me entienden.

Una vez que la madre de Nox puso el auto en marcha, me dediqué a mirar mi celular, entré a Instagram y sonrío cuando veo una foto de Ashton con su hermana, parece que acaban de tomarla, ya que Ashton pone de descripción que la extrañaba a más no poder.

Y aquí es donde quiero tener hermanos y compartir cosas con ellos.

Media hora después estoy bajando del auto y agradeciéndole a la madre de Nox por traerme y una vez que estoy dentro de mi casa parece que estoy viviendo en un mundo paralelo, mi madre, Regina Hans, no me espera sentada en las escaleras, decido buscarla en toda la casa y la encuentro en el patio trasero.

—Hola.

—Ven conmigo, vamos a hacer yoga, es extremadamente relajante. —menciona.

—Okey.

Entro a la casa y subo a mi habitación, pero me quedo ahí de pie, porque cuando quise dejar mi mochila no la traía. Saco mi celular y le mando un mensaje a Ashton diciéndole que si mañana puede llevar mi mochila.

—Debo dejar de ser tan distraída. —murmuro y empiezo a quitarme el uniforme.

Me cambio por algo cómodo y bajo las escaleras, voy a la cocina y tomo una manzana, mientras estoy comiendo entro a mi celular a ver si Ashton respondió, pero me entretuve con un artículo de nuestro equipo, hay una foto que subieron donde salgo sonriendo, pero me veo y no soy yo, la peluca rubia y las lentillas azules solo son la creación de mi madre y mi gusto por encajar con las demás personas.

Me muevo y por error hago que se caigan varias cosas de la mesa, entre ellas un frasco de pastillas, no tienen nombre, así que no le tomo mucha importancia y sigo recogiendo.

—¿Qué haces?

—Por error tiré esto.

—Déjalo ahí y ven al patio trasero, ya después irás al sótano a los aparatos. —me sonríe un poco. —No se me olvida que comiste cosas que no debes.

—Solo...

—No me des explicaciones, yo te di permiso, así que las consecuencias solo es hacer más ejercicio.

Empezaba a preocuparme severamente.

Minutos después la sigo hasta el patio trasero y decidí seguirla en todos los ejercicios que pone, gracias a mi flexibilidad no me se dificultó ninguno y era tan relajante, pero una vez en el sótano, empezó el verdadero ejercicio...

🏈📣

Son las 5 a.m y me desperté por el dolor insoportable en mis músculos, lloré casi toda la noche por dolor, tengo moretones en las piernas y brazos, estoy adolorida, mi cabeza quiere explotar y si no fuera mucho mi hambre aumenta cada vez más, parece que mi mundo paralelo duró muy poco, porque mi madre se volvió a poner como siempre y el ejercicio era el triple.

Me desmayé una vez haciendo abdominales, por el esfuerzo. Amaba a mi madre, pero en ocasiones la odiaba por hacerme esto, para matar el tiempo, voy por mi uniforme limpio y lo dejo en el baño, miro mi celular y tenía un mensaje de Ashton, no lo leí, ya que supuse que era lo dejo la mochila.

Tomo una ducha con agua fría y me tardo más de lo planeado, entre hacerme masajes, lavar bien mi cabello, y hacerme mensa un rato, salgo después de 20 minutos, me coloco el uniforme y dedico media hora en arreglarme el cabello y maquillarme.

Salgo después mi habitación y bajo, mamá ya estaba despierta haciendo las malteadas, tomo mi vaso y me lo tomo sin parar. Me asqueaba tomar el de apio con piña, pero aún así tengo que hacerlo. No me habla y solo sale de la casa, la sigo y subo al auto. La indiferencia de mi madre no me afecta, sino que me ponía de nervios, ella era una persona muy estricta y si estaba callada era por algo.

Bajo del auto y con dificultad comienzo a caminar, necesitaba encontrar a Olivia y a Nox, pero lo que más quiero, es comida. Voy a la cafetería y no hay ningún alumno, ya que es temprano, tomo una manzana, fresas, un plátano, agua y unas galletas.

—Veo que no soy la única que llega temprano. —me sobresalto y veo a Agatha hacerse una coleta despeinada. —¿Qué haces a las 6:30 am aquí?

—Mi madre es la entrenadora. —bostezo y me encojo de hombros. — ¿Y tú?

—Veré a mi padre, ayer no quise verlo, hoy ya tengo ganas de socializar, pero Ashton dijo que llegaba temprano siempre y bueno, pues aquí me tienes.

Saco mi celular y veo un mensaje de Nox.

Nos vemos en la cafetería a las 7:30 am

Mierda, estaré un poco de tiempo aquí.

—Está jodido el horario.

—Y eso que necesito acostumbrarme al horario de aquí.

—Me imagino lo pesado que puede ser.

—Si, todo el día me siento cansada.

Vamos a una mesa y nos sentamos, empiezo a comer las galletas mientras la escucho contarme un poco de su vida, yo por mi parte también le respondo cuando me pregunta cosas sobre mi, la plática es muy tranquila, de hecho, me siento cómoda hablando con ella, verla me pareció ser esas chicas que son insoportables, pero no lo es.

—Sabes, me caes bien, en serio, tienes una vibra muy linda.

—¿En serio?

—Si, entiendo porque traes a mi hermano comiendo de tu mano.

Abro la boca con sorpresa.

—Ashton te...

—No hace falta que me cuente de ti, sus acciones o cómo te mira, dice muchas cosas.

—Creo que eres la única que ve eso.

—Que tenga a Amelí como garrapata no es impedimento.

Me río y niego.

—No es eso.

—No eres la segunda, Morgan, créeme, se lo que se siente ser la segunda opción y te digo que para el idiota de mi hermano no lo eres.

—Pero a ojo público lo soy.

—¿Y vivirás de lo que diga la gente? —me quedo callada y se encoge de hombros. —Cuando te deja de importar lo que dice la gente de ti, eres feliz, mientras que los escuches, serás infeliz toda tu vida.

Me quedo analizando sus palabras, tal vez tiene razón, pero ella no sabe que mi madre y su padre están en una aventura y eso nos detiene a Ashton y a mí, y bueno, tengo que admitir que todo lo que dijo también me detiene.

—Lo tomaré como consejo.

—Solo voy a pedirte algo.

—Soy toda oídos.

—No le rompas el corazón.

—¿Por qué me pides eso?

—Porque volví por una razón, y es mantener a Ashton cuerda y que no sufra. —frunce el ceño y se ríe. —Bueno son dos.

—Tranquila, es más probable que él rompa mi corazón.

Se encoge de hombros y me roba una galleta, me guiña el ojo y me pongo seria.

—¿Qué?

—No hagas eso. —pido y ella ladea la cabeza con confusión.

—¿Te incomode al guiñar?

—No es incomodidad, es que eres igualito a él que literal parece que acabo de olvidar que eres Agatha.

Se carcajea y se levanta de su lugar.

—Bien ya no... —se queda callada mirando detrás de mi hombro, giro mi cabeza y me encuentro a Liam.

—¿Liam? ¿Qué haces aquí?

—Yo... —miro a Agatha que la actitud que tenía conmigo cambió drásticamente. —Agatha.

—Morgan, fue un gusto hablar contigo, pero debo irme ya.

Se levanta y cuando pasa a un lado de Liam, este la detiene.

—¿A qué volviste?

—Tu sabes muy bien a qué. —la respuesta fue seca y se soltó bruscamente de él y se va.

Frunzo mi ceño y me levanto, Liam se acerca y me saluda con un beso en la mejilla, se sienta a mi lado y sonríe como si no hubiera pasado nada.

—¿Qué fue eso?

—Nada.

—¿También tienes historia con ella?

—Por lo mismo que con Ashton.

Asiento no muy convencida.

—¿Qué haces aquí?

—Vi tu mensaje en la noche, sobre que tu madre no era tu madre.

—Ah, eso, pues ya volvió a ser la misma de siempre.

—En serio, ¿que karma estarás pagando?

—No tengo ni idea. —menciono y meto una fresa a mi boca. —Pero ya quiero que acabe.

—Veras que pronto, ahora lo importante. ¿Ya comiste algo?

—Si, fresas y galletas. —señalo la mesa.

—Eso no es comida, cariño.

—Pero al menos traigo alimento en mi estómago, Liam.

Se queda pensativo y entrecierra sus ojos hacia mi

—¿Qué fue lo que en realidad pasó?

—¿De qué?

—De tu madre siendo buena y después volviendo a ser el monstruo de siempre.

—No te hago el cuento largo, alguien le dijo a mi madre donde estaba, llegó se comportó bien, diciendo que podía comer y cuando llegué a casa hicimos yoga, para después matarme haciendo ejercicio en el sótano. —jadeo cuando me toca una pierna y me mira mal. —¡Son por los ejercicios!

—Son moretones por los aparatos.

—Si, pero...

—Si te vuelve a pasar algo así, avísame y te saco de tu casa ya sean las 4:00 am.

—Gracias, Liam, lo tomaré en cuenta.

Lo abrazo y beso su mejilla.

—Ahora vete, que todavía tienes que ir a tu preparatoria.

—Nos vemos, cariño.

Asiento y me separo de él.

Recargo mi cabeza en la mesa y suspiro, necesito descansar bien...

Abro los ojos cuando siento la presencia de alguien frente a mi, alzo mi cabeza y veo a Ashton con mi mochila en mano, sonrío un poco y le agradezco cuando la deja en la mesa, se sienta frente a mí y sonríe un poco.

—Agatha me dijo que estabas aquí, ya que no contestaste mi mensaje.

—Lo siento, llegó Liam y...

—¿Agatha vio a Liam?

—Si, fue muy raro.

Escucho que susurra un "mierda" pero aunque quiero preguntar, evito verme tan metida en su vida.

—Prosigue.

—Me entretuve hablando con Liam, solo eso.

El tema de Liam es algo que a Ashton no termina de caerle, y lo entiendo, la rivalidad de hace años y con el percance que tuvo su padre con la madre de Liam es algo hasta un punto traumático.

—¿Por qué no entraste ayer al supermercado?

—Se terminó mi batería social y solo quería llegar a casa. —confieso.

—Pensé mucho en lo de nuestros padres.

Y aunque yo quisiera negarme, no puedo, es un tema que tengo presente en mi cabeza.

—Yo solo sé que quiero ser feliz. —murmuro, contradiciéndome a lo que le dije ayer en el auto.

—¿Y que te hace feliz?

Tu...

—Conocerte, aunque haya una piedra en el camino.

—Voy a trabajar para que esa piedra se vaya, lo prometo.

Le regalo una sonrisa pequeña y vuelvo a mirar mi celular para ver si hay un mensaje de Nox, cuando volteo Ashton no está enfrente si no a mi lado. Doy un respingo  haciendo que pierda el equilibrio, pero él es más rápido y me sostiene de la cintura para no caer.

Estamos cerca, muy cerca.

Mi respiración es pausada, me pierdo en sus ojos color gris, noto como baja su mirada a mis labios y no puedo evitar morderlos. La atracción entre nosotros era algo imposible de evitar. Sin ningún aviso, pega sus labios a los míos. Cierro los ojos por inercia y poco a poco empiezo a seguirle el beso. Pongo mis manos en su cuello acercándolo a mi, que por un momento se me olvidó que estábamos en la cafetería de la preparatoria.

No me importo estar en la preparatoria, no me importo si Amy entra, ni nadie más, solo él. Estaba besando a Ashton y se sentía tan bien hacerlo...

Notita:

Holiiis

¿Qué les pareció el capítulo?

A partir de aquí se verán los cambios en la historia, recuerden que todo lo hago para el bien del libro, en serio me está encantando los cambios, igual, no perderemos el hilo sobre lo que trata, pero los cambios son buenos y en serio a Desde que llegaste le hacía falta.

Nos leemos el próximo miércoles.