Capitulo 20
Tome la decisión de irme de la fiesta, no necesito mas hipocresía, necesito salir sin que nadie me vea, busco la bolsa en donde se encuentra la peluca y las demás cosas (necesito olvidarme de todo), agarro la bolsa y me encamino hacia el baño, Edward quiso quedarse mas tiempo, se lo agradezco ya que asi estaré informada de lo que sucede.
Salgo del baño y me miro en el espejo, me luce el color de la peluca, busco entre mi ropa algo que se vea acorde a como tengo que ser cuando estoy como ella, quiero salir y no ser reconocida asi puedo andar sin que las cámaras estén sobre mi.
Decido salir de la habitación y me encamino a ver si encuentro un bar al cual solía ir cuando estaba joven, con algunas compañeras de curso, tengo uno que otro recuerdo allí pero no me pondré a pensar en eso, salgo del cuarto y toco los botones del ascensor, las puertas se abren y para bendición mía no se encuentra absolutamente nadie, estaré sola por unos segundos, las puertas se cierran y comienza a descender, las puertas se abren nuevamente y veo demasiados paparazzi en la entrada, ninguno me pone atención ya que en teoría no me esperan a mí, camino rápidamente y levanto la mano a un taxi, al entrar respiro profundo ya que nadie me reconoció, eso me da mas confianza, le doy la dirección al conductor y me dispongo a mirar las calles.
-Ya llegamos señorita
-Gracias muy amable, por favor quédese con el cambio -sin esperar respuesta salgo del coche y veo que mi lugar favorito no ha cambiado nada, sigue igual a como lo recuerdo, no es muy grande, me encantaba el olor a comida casera junto a madera, puede parecer que una persona como yo no entraría a un lugar como este, pero yo no soy como las personas de mi clase, dentro hay varias mesas, en la parte trasera tiene el más maravilloso mirador que mis ojos pueden ver, en Costa Rica hay unos demasiado bellos, pero este para mi es el mejor de New York, entro y decido buscar una mesa afuera.
Todo es sumamente tranquilo, por eso amo este lugar, me siento en una silla y miro el maravilloso paisaje y subo mi mirada para ver la noche tan maravillosa que Dios me regala, después de una fiesta algo movida lo que mas quería era ver algo asi de grandioso, en compañía de mi soledad.
-Creo que nos volvemos a encontrar -sigo mirando al cielo (¿Será que estoy soñando?) cierro mis ojos tratando de pensar que escuché mal y esa no es la voz de..... -Si te incomodo me puedo ir, lo ultimo que deseo es molestar.
-No molestas, perdona es que tuve una noche algo ajetreada -cambio mi voz, abro mis ojos con pesar y dirijo mi mirada hacia Sebastián (menuda suerte tienes Ariadna)
-¿Vienes sola? -pienso en una manera de irme sin ser demasiado obvia, pero no encuentro alguna.
-Si vengo sola.
-¿Te importaría si te hago compañía? -bueno ahora si es cierto que voy de mal en peor, cuando será que tendré algo de suerte, asiento con mi cabeza, es lo mejor que puedo hacer ya que tengo una leve pregunta en mi cabeza.
-¿Que hace un hombre como tu en un lugar como este? -sonríe de manera triste y en su mirada veo tantas cosas que provocan sentimientos en mi ya que estoy viendo al padre de mis hijos derrotado.
-Este lugar me hace bien, estaba en una fiesta de compromiso, mas bien de mi compromiso, pero no lo hice -las palabras se quedan atoradas en mi garganta (¿No se comprometió con la serpiente esa?)
-Se puede saber el por qué no, no quiero parecer inoportuna pero parece que necesitas hablar -necesito saber cosas de ellos, algo dentro de mi me dice que necesito saber sus puntos débiles para poder acabar con ellos.
-Sabes, si me parece, necesito hacerlo solo te pido que no me juzgues -levanto una ceja desearía decirle mil cosas pero dejaré que me diga lo que le pasa, sea como sea es el padre de esas dos personitas que mas amo en toda mi vida, la cual me recuerda a él en demasiadas cosas -Hace tres años la mujer de mi vida me abandonó por ser un completo infeliz, sabes no la culpo no merezco a una mujer asi, por eso ahorita estoy pagando todo el daño que le hice -siento un nudo en la garganta al escucharlo (¿Cómo alguien que daña, puede arrepentirse después? ¿Es que no pueden pensar antes de hacer las cosas?) lo miro de una manera convincente no quiero que crea que no le creo -Ella se fue sin dejarme darle la explicación de como sucedieron las cosas, solo me condeno a mi sin saber que yo también fui una pieza mas para llegar algo en concreto -lo miro sin comprender a que se refiere.
-Bueno si me cuentas mejor que sucedió, que fue lo que le hiciste para que ella actuara de esa manera, de que piezas hablas, puedes confiar en mi -no se si creer lo que me esta diciendo (Pero ¿Qué ganaría mintiéndole a una desconocida?) De todas formas sé la verdad, no me podrá mentir, no tan fácilmente.
-En otra ocasión te lo diré, es mejor dejar ese tema por el momento no quiero recordar, solo te diré que hoy cuando la vi, todos mis sentimientos salieron y con mas fuerzas que antes, hoy cuando la vi me di cuenta de que aunque me case no seré feliz porque Samanta jamás será Ariadna, al menos en mi corazón.
El nudo en mi garganta se hace mas fuerte y siento como comienzan arder mis ojos, me dan ganas de golpearlo hasta que pierda la conciencia por infeliz, pero no quiero dejar a mis hijos sin su desgraciado padre, sé que en algún momento tendré que decirle sobre la existencia de nuestras hermosas creaciones, pero ¿Cómo? No los quiero compartir con alguien como él.
-Sabes es la segunda vez que nos vemos, la otra noche te fuiste demasiado rápido no te pude preguntar el nombre -abro mis ojos, me lleva, el nombre (piensa Ari, piensa pero rápido) en eso su celular comienza a sonar y se levanta a contestar.
-Buenas noches señorita, aquí le dejare el menú para que lo vea y me diga que desea ordenar -asiento y miro por donde Sebastián habla bastante enojado es como si quisiera tirar el celular lejos.
-No hace falta que mire el menú solo quiero una copa de vino por favor
-¿Alguno en especial? - (¿Como le digo que se largue de una manera agradable?) Niego con la cabeza y al parecer entiende porque se va dejándome sola, agudizo mi oído para tratar de escuchar la conversación.
-Joder Samanta deja de usar tu enfermedad para hacerme sentir mal - (¿Que la bruja esta enferma?) pongo mi mano sobre la mesa, para asi poder recostar mi cabeza en ella, puede que me funcione asi escucho mejor, no puedo escuchar lo que le dice la arpía -NO METAS A ARIADNA EN ESTO -abro mi boca al ver como reacciona, supongo que ahora es mi culpa que el miedoso no le diera el anillo delante de todos, no puedo evitar que una sonrisa de orgullo se instale en mi boca, ya sé por donde puedo comenzar a dañarlos, ese cuento de la enfermedad es mas falso que sus uñas, pelo, glúteos y pechos entre otras cosas, pero ya se cual es su punto débil y me alegra demasiado saber que soy yo.
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Holaaaaaaa!!!! Aquí está otro capítulo más.....🎉🎊🎉🎊 Gracias por dejarme sus comentarios y votar los adoro 😭😭 acuérdense de seguir haciéndolo cada que subo capítulos ☝☝ nos leemos pronto 💕☝
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